MI TRISTEZA ES ENORME.

Estoy muy triste, he dejado muchas veces solo a PIOPI, le dejo comida para que no le haga falta nada,pero mi hijo PIOPI tiene un gran defecto porque sé que mi gallo es muy protector y vigila la casa mejor que un perro, cuando no estamos la Lolito me ha contado como se sube al techo, a vigilar que nadie toque los aguacates de nuestro árbol de aguacate 🥑 que esta en la parte de la calle, hay un borracho que siempre viene a robarlos y mi PIOPI se lanza desde el techo y se le tira encima y comienza a picotearlo como loco hasta que este señor se va y entonces mi PIOPI regresa de nuevo a su lugar en el techo.

Pero esta vez dijo mi mamá que para que no se saliera de la casa, que le cortaramos las alas porque se lo podían robar, y bueno así lo hicimos pero mi PIOPI, se las ingenio para subir al techo y cuando vio a este borracho robando los aguacates, se lanzó contra él y lo atacó como siempre, solo que a diferencia de otras veces no pudo escapar de este señor porque no pudo volar de nuevo hacia el techo porque tenía cortadas sus alas y entonces este señor se robo a mi hijo PIOPI y lo fue a vender y esta persona que lo compró no tuvo compasión de mi hijo PIOPI, al ver ese hermoso pollo bien saludable, con gran tamaño y unas grandes piernas, porque estaba bien gordito, porque yo lo tengo bien alimentado, aunque sabían que era mi gallo 🐓 consentido, porque todo mundo lo ve en mi hombro y ve lo inseparables que somos, nada de eso le importo a esta persona egoísta que solo pensaba en comerse algo que no les pertenecía y que para ella no era más que un gallo que sabría delicioso en un caldo, para mi era mi hijo, mi amigo, mi compañero y sobre todo un regalo de mis dos mejores amigos, como pudieron ser tan crueles, tan malvados, como se ve que sus padres no les enseñaron a respetar y no tomar lo que no les pertenece y todavía tuvieron el descaro de mentirme y engañarme cuando les pregunte si habían visto a mi hijo PIOPI, pasé todo un día buscando a mi PIOPI, mis hermanos me ayudaron, fui casa por casa preguntando a todos mis vecinos y conocidos si alguien había visto a mi hijo PIOPI y todos decían que no, algunos que tenían pollos, gallos y gallinas me permitieron entrar a sus casas para que verificará por mi misma que no estaba y que si estaba me lo podía llevar, estas personas eran decentes y sinceras, pero la señora Catalina, mejor conocida como doña Cata, me mintió al decir que no sabía nada de mi PIOPI y que jamás lo había visto y que no sabía nada, me engaño no fue capaz de aceptar su culpa y de decirme "si yo lo compre y me lo comí", me di cuenta después, porque este señor borracho se dio el lujo de contar en la cantina como PIOPI luchó con él por ser libre pero debido a que sus alas se las habían cortado no pudo escapar y que lo metió en un saco y lo vendió y se dio el lujo de obtener un muy buen dinero 💰, a cambio de mi PIOPI y que también vendió los aguacates 🥑, que se robó el muy sinvergüenza, ese hombre no tiene disculpas por todo el mal que me hizo es un asesino junto con la doña Cata, tengo que hablarles y saludarlos porque mi mamá me ha enseñado a respetar a mis mayores, por respeto a mi mamá soy obediente pero la verdad esos desgraciados no se merecen mi saludo, jamás voy a olvidar el daño que me hicieron y de como terminaron con la vida de un gallo inocente que no hacía nada malo y que su gran pecado y error fue creer que era un perro guardián y creer que podía proteger la casa de las manos de estas personas desalmadas..

Mi amado PIOPI te prometo que jamás voy a olvidar tu cariño, tu compañía y los recuerdos que vivi y tengo junto a ti, fueron los mejores de mi vida, y puedo decir sin duda alguna que fuiste el mejor gallo del mundo, me arrepiento de no haberte podido proteger pero se que no fue mi culpa, porque yo no fui quien te robó y terminó con tu hermosa y joven vida, gracias por enseñarme lo bonito que es tener alguien que te acompañe en las buenas y las malas siempre seras mi PIOPI, prometo sobrevivir y superar este dolor que me a causado tu pérdida.

No se que le diré a Nestor y Jaime, no se como contarles me da vergüenza aceptar que no pude proteger a mi PIOPI, aparte que no dejaré de llorar, he pasado todos los días llorando, nadie dice nada porque saben cuanto esto me afecta, mi tristeza es enorme.

Mañana veré a Nestor, Jaime y Selene en la escuela, se que ellos me darán ánimos y me ayudarán a sobrellevar este gran dolor y tristeza que inunda mi pequeño corazón.