Dulce momento

Parte 1 - Desayuno 

Yo seguía dormido, pero Emi ya se había levantado. 

Si se ve tan dulce cuando duerme 

Ella agarro su sostén y me lo puso como si fuera un gorro, luego tomo una foto, intentado no hacer ruido mientras dormía. 

-Ya quiero ver la reacción de él cuando se despierte... 

Akari había conseguido mandar a volar el sostén de mi cabeza. 

-Discúlpame por un momento me había olvidado de ti... 

La hermana de Hikaru es un peligro... 

-Bien cuídalo por mi mientras voy hacer de comer... ¿tú puedes comer?... no sé porque pregunto si no puedes responderme, tendremos que hacer algo con eso, por si acaso preparare más. 

-Sigo sintiendo que no me los merezco, pero si me ausencia podría hacerle más daño... ¿Qué tengo que hacer?, estaba segura de lo que quería hacer, pero las palabras de Emi me hacen dudar... supongo que tendré que empezar en hacerme más fuerte, hasta que se me ocurra otra cosa, podría intentar en esforzarme en escribir, así al menos me comunicaría con Emi. 

-Buenos días Akari, tienes mejor semblante, eso es bueno. 

Tenía miedo de al despertar que no estuviera aquí. 

-Te despertaste... buenos días Hikaru, ¿Cómo estas, te duele mucho? 

-Me senté en la cama lentamente. 

-Duele un poco, pero mucho mejor de lo que estaba antes... tuve que haberte hecho caso desde el principio, fui testarudo, no quería preocupar a nadie, y mi estupidez provoco todo lo contrario, no incluso te hice daño, Akari, tu ayer me ibas a pedir que terminemos, pero por fortuna nos interrumpió Emi, quiero que sepas algo, yo quiero seguir contigo, sin importar lo que nos enfrentemos, pero, aunque me termines yo seguiré ayudándote. 

Akari se estaba conteniendo para no llorar. 

-Que se supone que deba decirte... no quiero separarme de ti, pero por mi culpa mira como terminaste, no puedo permitir que te maten. 

-Entonces protégeme como yo lo hago contigo, antes de que digas que no puedes hacerlo, escúchame, no necesitas un cuerpo para hacerlo, anímame cuando veas que no puedo continuar, escúchame cuando no pueda más con la frustración, aconséjame cuando no sepa que hacer, o este cometiendo una estupidez como lo hice al aguantar el dolor, Akari si no fuera por tu esfuerzo, aun estaría en mi pieza con el dolor que estaba sufriendo, te las arreglaste para protegerme al igual que yo me las arregle para derrotar a Colmillos para que no te hiciera daño, recorramos este sendero espinoso juntos cariño mío. 

Le tendí mi mano a Akari. 

-Tonto, idiota, imbécil, como crees que puedo dejarte después de que me digas esas palabras... 

-No sabía que podías decir cosas tan hermosas Hikaru, mi hermanito ha crecido muy bien, se convirtió todo en un hombre- Emi dijo mientras lloraba a mares. 

Emi había entrado a su pieza con una bandeja llena de comida. 

Estaba enormemente avergonzado, cuando empecé a salir con Akari, no me molestaba decirle cosas cursis, porque quería decírselas, pero que me escuchara otra persona decirlas me ponían la cara roja, sobretodo si la que escuchaba era Emi. 

-Olvida lo que dije Emi, tú no escuchaste nada... maldición. 

Akari finalmente reía a carcajadas. 

Emi se sentó en la cama con la bandeja frente a mí. 

-Les prepare el desayuno... aunque no se si Akari puede comer. 

-Emi en que pensabas...¿Qué?, Akari te agradece el gesto, pero ella no puede comer, también dice que cocinas muy bien... Akari no me hagas decir eso... Ella dice que siempre disfrutaba tu comida, cuando comíamos juntos, tus comidas nos hicieron más cercanos dice... también lo creo, por cierto. 

-Acaso son la pareja repartidora de diabetes o que, si me lo dicen así, me obligaran a cocinarles más... tendremos que hacer algo para que tú muchacha pruebe mi comida nuevamente, Hikaru. 

-Estoy de acuerdo con eso... Emi gracias, solo gracias por todo. 

Emi esta ruboriza, pero actuaba como si nada. 

-Menos gracias y más remedios, tómatelos, y come, tendremos que comer mucho. 

-Estuvimos compartiendo los 3 un buen rato, el día paso volando, pero mañana tenía que acudir a clases, o al menos eso pensé, al día siguiente ni siquiera pude pisar sin sentir un dolor horrendo en las costillas, así que esta ves atendí a las palabras de Akari y Emi, además tenía permiso para faltar toda la semana, pero me sentía mal por Akari, cada día que pasa es un día más que ella sigue atrapada en esa forma. 

Hikaru, me voy a trabajar, si sucede algo urgente no dudes en llamarme, Akari cuídalo por mí, si intenta algo estúpido tírale algo por la cabeza. 

-No hare nada lo prometo. 

Emi se acercó a mi gateando por la cama y me beso en la frente. 

-Eso espero Hikaru, hazle más caso a tu novia. 

-Lo dices como si nunca le hiciera caso a nadie. 

-Sera porque no lo haces, me da la impresión que le das más problemas Akari que a mí, cuídense me voy, si quieres ve televisión todo el día. 

Parte 2 – Moda 

Pasaron 3 días más sin que pudiera caminar, si no fuera por Akari realmente estaría muy aburrido, pero al menos estos días han servido para poder limar las ásperas que sufrimos con Akari, de hecho, ya que ella no duerme me conto que espera a que me quedara dormido para luego poder practicar para poder sostener objetos sin que se les caiga de las manos, dice que no ha tenido mucho avance, pero que seguirá intentándolo. 

También en estos días tuve que pedirle disculpas a Asuna, por lo visto a Emi se le olvido decirme que Asuna estaba preocupado por mí, cuando revise mi celular tenía 248 mensajes no leídos de ella en Linapp, básicamente casi todos los mensajes eran preguntando por mí y porque la ignoraba, así que me tomo bastante tiempo explicarle todo. 

-Hikaru, ¿quiero cumplir nuestra promesa? 

-¿Nuestra promesa? 

-Acaso ya lo olvidaste, lo de hablar de nuestros gustos, yo he pensado en hablar de eso casi todos los días. 

-No por supuesto que no lo olvide. 

Realmente con lo que sucedió pues claro que lo había olvidado, pero mejor que Akari no lo sepa. 

-Entonces, me gusta la ropa estilo... realmente no sé qué estilo es, pero es el mismo que le gusta Asuna, encuentro demasiado genial como se viste, es como si pudieras sacar la vestimenta de un videojuego que mescla lo urbano con la ciencia ficción... no se si logras entender a lo que me refiero. 

-Tal vez no del todo, pero creo que si entiendo, aunque me dan un poquito de celos saber que tu gusto por cierta vestimenta proviene por Asuna, 

-No te preocupes por eso, no te voy a mentir la quiero mucho fue mi primera amiga, siempre estaba con chicos y no era muy hablador antes que digamos, un día ella se acercó a mi hablando sobre fantasmas, congeniamos con eso, pero ten algo en claro solo tengo ojos para ti. 

-Lo sé, pero tomare mi derecho de novia celosa en esta ocasión. 

-Está bien, pero no te pases mucho con eso. 

Ambos reímos, a veces nos quedábamos en silencio apreciándonos el uno al otro, a veces queríamos ir más allá, pero por obvias razones no podíamos. 

-¿Akari que te gusta a ti?, aparte de los gatitos y perros. 

-Mmm me gustan un poco los animes sobretodo los de misterio y dramas románticos, aparte de eso... ¿bueno esta eso también? 

-¿Qué cosa? 

-Me da algo de vergüenza, pero quería ser modelo, de hecho, suelo comprar revistas de moda, o mejor podía, me gustaba mucho la revista Sky Pasarel, hay una modelo que admiro mucho que trabaja para ellos, aunque la deje de comprar hace más de un año. 

-Tengo un par de preguntas Akari, porque quería ser, y no quiero ser, y ¿por qué dejaste de comprar la revista si te gustaba tanto? 

Akari se sintió insegura con mi pregunta, al parecer había tocado algo sensible. 

-Me sería fácil decirte que es porque soy un fantasma, pero la verdad abandone esa idea después de mi apuesta. 

-Esa perra de Akimoto solo hace daño a la gente que los rodea, mira que haberte hecho lo que te hizo simplemente por sentirse opacado por ti, enserio odio a esa imbécil. 

-Ahí está el Hikaru del que me empecé a enamorar. 

Le sonríe dulcemente a esa mujer de pelo anaranjado que me tenía embobado. 

-Akari olvida esa maldita apuesta, cuando encontremos la solución a nuestro problema, no sigas respetando esa maldita apuesta, quiero que me lo ¿prometas? 

-No sé si es conveniente enfrentarme a Akimoto, créeme ella puede hacer cosas terribles. 

-Akari no creo que te pueda hacer algo más terrible de lo que te hizo... quien sea que te haya matado, y sumémosle que no crea que sea más fuerte que el supuesto vampiro que nos enfrentamos, así que, si ella quiere acercarte a ti tendrá que pasar por mí, así que promete que volverás hacer tú, ósea no quise decirlo de esa forma, si no que te vestirás como tu desees y te olvidaras de la apuesta. 

-No lo había pensado de esa forma, pero ¿En serio puedo ser la de antes? 

-Por supuesto. 

Los lentes de Akari desaparecieron en un instante. 

-Akari tus lentes ya no están. 

-Es verdad, ya no veo los marcos. 

-Siempre me has gustado con esos feos lentes, pero sin duda eres más hermosa sin ellos. 

No sé porque desaparecieron los lentes de Akari, pero si ella se permite recuperarse de lo que le hizo Akimoto, no me importa como cambie en el exterior. 

Dame un momento Akari, quiero pedirle un pastel a Emi para cuando vuelva. 

-No abuses tampoco de tú situación. 

Me reí nerviosamente. 

Hikaru: ¿Emi puedes comprar la revista de Sky Pasarel de este mes? 

Emi: No me digas que pretendes cambiarme por esa otra, hermano infiel. 

Hikaru: no es eso tonta, a Akari le gusta esa revista, quería ver si puedes hacerme el favor. 

Emi: de todas las revistas de moda que podían haberle gustado a tu novia tenía que gustarle precisamente esa, no quiero, me rehusó. 

Hikaru: ella quiere ser modelo y la modelo que admira trabaja para esa revista, te lo suplico, hazme este favor y hare lo que pidas. 

Emi: está bien la comprare, solo espero que la modelo que admira no sea esa mujer... no te arrepientas de lo que prometes, lo cobrare. 

Hikaru: si, lo se 😛 

-Akari veamos algún anime que te guste juntos. 

-Si me encantaría.