webnovel

Capítulo 1 - Solos, los dos. (Mini-Prólogo)

• ────── ✾ ────── •

6 de noviembre del año 2022 : Día del Lanzamiento.

• ────── ✾ ────── •

Recuerdo que aquél día...

el cielo se tornó color sangre...

...

- ¡Jugadores! ¡Quiero darles la bienvenida al mundo de Sword Art Online! Muchos quizás se hayan dado cuenta de que el Botón de Desconexión no aparece en sus menues... déjenme decirles que esto no es ningún tipo de desperfecto... todo esto es parte del mundo de Sword Art Online...

[...]

Ese sujeto...

sin rostro ni expresión visible...

pero de presencia imponente...

Jamás podría olvidarlo...

[...]

- Es importante que recuerden lo siguiente: si sus puntos de vida llegan a cero, el Nervegear destruirá sus cerebros de manera inmediata. La única forma de salir... es venciendo al Jefe Final que aguarda en el centésimo piso.

[...]

100 pisos...

Aquella era la totalidad de niveles que poseía el juego...

Era imposible...

No había forma...

Ninguno había logrado llegar tan lejos durante la Beta...

[...]

- Así concluye el tutorial y lanzamiento oficial de Sword Art Online, jugadores les deseo... buena suerte...

La aterradora figura desapareció, empañando el firmamento con los colores del ocaso.

Las reacciones fueron inminentes.

El pánico cubrió el anfiteatro.

- ¡¡No me jodas!! ¡¡No puedo quedarme aquí!! - se oyó gritar a un jugador furioso.

- ¡¡Yo tengo una cita en 1 hora!!

- Y yo debo dar un examen...

Si...

Todos los allí presentes tenían una vida fuera del juego.

Y eso me incluía a mí...

Apreté mis puños con fuerza...

Hacer algo como esto era, simplemente, un...

- ¿Hmm?

Mi cuerpo se tensó violentamente, al sentir un leve tirón en mis ropas.

- Hiro...

Al voltear, me topé con el lastimero rostro de la que había sido mi única amiga y compañera durante la fase de prueba.

- ¿Koharu?

- ¿Lo que dijo es verdad? ¿Estamos *sniff* atrapados aquí? ¿Ya no podremos salir?

La expresión en su cara lo decía todo.

El temor y la angustia se habían apoderado de ella.

De todos, al parecer... - pensé, viendo gente corriendo y gritando de un lado a otro

Éramos esclavos...

Ratas de Laboratorio...

Participantes en una especie de... extraño y retorcido experimento...

Muchos caerían presa del miedo...

Pero yo no me dejaría intimidar por las meras palabras de un lunático.

- Ven - le dije, sujetando su mano con fuerza y buscando alejarme de aquella bulliciosa plaza.

Caminamos hasta un callejón iluminado del pueblo, y allí, a los pies de una fuente, la hice sentar.

Necesitábamos recobrar algo de nuestra, más que rasgada, calma, si no queríamos terminar como las demás personas.

- Lo siento... creo que entré en pánico allá - dijo ella, ahora respirando con normalidad.

- Está bien, tenías todo el derecho de alterarte por lo ocurrido. No es tu culpa.

- Gracias - respondió, más animada.

Mis palabras, al parecer, habían logrado apaciguar sus temores.

- Awww, ¿no es algo conmovedor?

La súbita presencia de una voz me hizo voltear bruscamente. Al hacerlo, divisé la figura de una muchacha de cabello rubio y, lo que parecían ser, bigotes dibujados en sus mejillas.

- ¡Yoh! Soy Argo, no pude evitar oír su pequeña conversación. Allá fuera es un caos, ¿no creen?

Instintivamente, mi cuerpo se puso frente al de Koharu.

- Tranquilízate, chico. No muerdo... no mucho al menos. - rio la desconocida. Sólo quiero charlar.

Antes de que pudiese responderle, mi compañera tomó la palabra.

- Ah... anno... ¿Qué pasará con nosotros? ¿Sabe si alguien vendrá a rescatarnos?

- Naa, no lo creo - contestó la joven de gabardina, sin pensárselo demasiado. Si hubiese sido un evento organizado o un fallo, ya lo hubiesen solucionado.

Su expresión se tornó seria por breves segundos.

- Esto va en serio.

Aquello fue un disparo directo a la esperanza.

A la esperanza de que algo o alguien, lo que fuese, nos librase de lo que, en un futuro no muy lejano, se convertiría en el mas cruel de los infiernos.

- Así que... ¿Qué harán, tórtolos? Como yo lo veo sólo tienen dos opciones: esperar una ayuda que jamás va a llegar o...

Su sonrisa se agrandó.

- Tomar al toro por los cuernos y luchar como se que algunos van a hacerlo.

Mis ojos se posaron en el avatar de mi compañera.

La incertidumbre en su rostro era casi palpable.

Más era obvio que ambos, por dentro, nos estábamos haciendo la misma pregunta:

¿Era pelear por nuestras vidas... la única forma de resolver aquel problema?

• ────── ✾ ────── •

5 de noviembre del año 2024 – Pueblo de los Inicios

• ────── ✾ ────── •

- Koharu... Koharu...

- Mmmm...

- Despierta, tienes que ir a trabajar - dije en un tono calmado, pero a la vez autoritario.

Mi compañera no tenía buenos hábitos de sueño.

Le gustaba dormir demasiado por las mañanas.

- *Uwaaaa* Ohaio (Buenos Días) Hiro.

- Ohaio...

- ¿Qué hora es, Hiro?

Debía estar muy adormilada, si no podía ver la hora en su menú.

- Mmm... 7:45 am.

- ¿Eeeehh? ¡Por qué no me avisaste! ¡¡Llegaré tarde!!

Koharu saltó de la cama, olvidándose por completo de que había estado durmiendo con su lencería sirviéndole como pijama.

- ¡¡Kyaaa, no mires!!

- Pues no salgas tan de repente, ¡baka! - respondí, girándome para no verla. Además, ¿por qué estas tan alterada? Es sólo otra quest más.

- ¡No! Es una misión continuamente activa, debo presentarme a trabajar todos los días a las 8 en punto. Sin excepciones.

- No sabía que requería tanto esfuerzo... la paga no es la gran cosa... ¿tiene algún tipo de recompensa secreta? - pregunté intrigado.

- Algo así - agregó Koharu nerviosa. Debo ser nombrada empleada del mes para conseguirla.

- Naruhodo... (Ya entiendo)

- Bien, ¡ya puedes voltear!

Imagen--------------------->

- Uh... luce...

¿Por qué me estoy poniendo nervioso?

- ¿Si?

- Luce...

- ¿Ajá?

¡No tienes que acercarte tanto!

- Bien... creo.

La sonrisa de mi compañera, se apagó, dando pie a un puchero.

- ¡Mo! ¿Eso es todo?

¿Y ahora por qué se enoja?

- Va de acuerdo con tu estilo... Muy profesional... Seguro que atraerás clientes...

Me puse a lanzarle "cumplidos" como si estuviese leyendo una lista de compras.

Con cada "halago", el rostro de Koharu se oscurecía y su ojo saltaba, hasta que al finalizar, simplemente bajó la cabeza.

- *Huff* *Huff*

...

- Pff....

..

Ambos reímos.

Ya era casi una costumbre. No podíamos enojarnos el uno con el otro.

- Bueno, voy saliendo, Hiro, cuídate y no hagas nada peligroso, ¿okay?

- De acuerdo- respondí, divertido.

Acto seguido, ella dejó la habitación.

A veces siento que me trata como si fuera su espo...

Nope.

Extendiendo una mano detuve mi tren de pensamiento.

No te metas allí.

No es que no quisiese casarme con ella... digo, Koharu es atractiva...

Pero, el matrimonio implica demasiado compromiso... es una estrecha relación entre dos individuos...

Aunque podría ser beneficioso... digo es el doble de espacio...

No, ni se diga, definitivamente no haré eso.

Luego de una larga deliberación (conmigo mismo), exhalé un suspiro y preparé mi equipo.

- Creo que saldré a cazar...

• ────── ✾ ────── •

- Mañana se cumplirán 2 años desde aquél día– dije para nadie en particular.

El día del lanzamiento, más de 2000 de los 10000 jugadores involucrados, habían perdidos su vidas, ya sea por suicidio o intento de desconexión.

El mero hecho de estar aquí, enfrentándome a monstruos NPC, es el testimonio de que, mi pariente más cercano... mi tío, había optado por no intentar remover mi casco.

Doy las gracias por eso.

- ¡Hya!

*SLASH*

*Skreeetch*

Monstruo destruido

EXP obtenida---------- 872 pts.

- Los enemigos de este piso ya casi no valen la pena - murmuré.

Me pregunto... ¿Cómo les estará yendo a los del frente?

Era algo que siempre rondaba mi mente, más se había acallado, éstos últimos meses.

Cuando todo esto empezó, había hecho la promesa de que, daría todo, para completar el juego y llevar a Koharu al mundo exterior.

Pero...

En algún momento...

Algo cambió.

Koharu comenzó a reír con más frecuencia.

Poco a poco, aquel intenso miedo, y desesperación, se iba esfumando.

Faltaba a prácticas, prefería hacer misiones secundarias de exploración, antes que de habilidades.

Y fue así que, vino la pregunta...

Hiro... ¿por qué no disfrutar del tiempo que pasamos aquí?

Nuestro día a día, no era monótono pero si bastante estresante.

Al ser jugadores solitarios, que habían formado parte del Beta Testing, no confiábamos mucho en otros gremios o grupos.

No nos arriesgaríamos a un linchamiento, no después de los acontecimientos ocurridos con el Jefe del Piso 1.

No.

Sólo nos teníamos el uno al otro.

Fue después de aquella interrogante que...

Sentí como si un gran peso era levantado de mis hombros.

Había estado poniéndonos bajo una presión muy grande.

Intentando subir nuestros niveles rápido...

Consiguiendo buenas armas...

Éramos una balsa intentando navegar en aguas turbulentas.

Tarde o temprano hubiésemos acabado desmoronándonos por el esfuerzo y la agitación.

Aquel día... en que tuve que elegir entre Koharu y el pelotón que se alejaba en búsqueda del próximo jefe de piso... jamás voy a olvidarlo.

En ese momento, mi misión cambió de "completar el juego" a "jugarlo", si es que es el término apropiado.

Nos convertimos en los primeros, al menos de entre los Beta Testers, rezagados, por propia voluntad, de todo Aincrad.

El piso 10 había sido el límite durante las fases de prueba.

Y, ahora, en la versión final, también se había convertido en el nuestro.

No fuimos las únicas personas en optar por no tomar partido.

Muchos jugadores novatos o de un nivel no tan avanzado, comenzaron a poblar cada vez más los pisos más altos.

Incluso, un orfanato llegó a abrirse en el Pueblo de los Inicios, durante las primeras semanas.

Todo se había vuelto muy surrealista, bueno... al menos más de lo que ya era.

Sólo se que... en aquel momento, en que vi el rostro de felicidad de mi compañera, al darse cuenta que, la había elegido por sobre la posibilidad de libertad, supe que había tomado la decisión correcta.

Mientras mi deseo de querer ayudar en la delantera, no ha desaparecido por completo.

Siento que... este estilo de vida es pacífico.

Quizás... ¿fue este el objetivo inicial de Kayaba Akihiko, al idear Sword Art Online?

¿Un mundo de ensueño, en vez de una prisión de bonitos pixeles?

Que tal sí...

*Beep *Beep* Beep*

La pantalla de mensaje entrante parpadeó.

Pulsé el botón y leí la nota.

Una suave risa se escapó de entre mis labios.

- Creo que hoy regresaré temprano. Siento que Koharu tendrá mucho que contar.

Ella había sido nombrada empleada del mes.