Trevor iba a morir esta noche y ¡todo es mi culpa! ¡Mierda, no esperaba que fuera tan pronto! Dicen que el diablo trabaja rápido, ¡pero Rissa y Christine trabajan más rápido! Seguramente debió haber habido una manera de que Rissa detuviera al Príncipe Jaafar de tomar medidas tan drásticas, pero ella eligió mirar hacia otro lado, tal como me había instruido que hiciera. Mi plan inicial era obtener una audiencia con el Príncipe Jaafar, discutirlo con él para tratar de disminuir el castigo de Trevor porque sentía que matarlo era un poco excesivo en este momento.
¡Parece que mi plan fracasó! Trevor iba a morir esta noche y solo hay una forma en que puedo ayudarlo. Necesitaba ayuda, por eso reuní a mis amigos en una habitación. Les expliqué lo que estaba sucediendo durante los últimos dos días y todo lo que Rissa y yo planeamos. Cuando terminé, mis amigos me miraron con sorpresa.
—¡Vaya, esto es un buen té! —dijo Freya mientras levantaba su taza.
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