Promoción de la novela “Héroes por suerte”.

(Promoción de la novela "Héroes por suerte". Si no les interesa, no lo lean. Y si les interesa, gracias. :,3)

Héroes por suerte.

CAPÍTULO 1

En el espacio existe un planeta donde habitan unos seres que se dedican a exterminar planetas de una manera algo peculiar. Esos seres son llamados: "Trailens". Su siguiente objetivo es la tierra.

-En un lugar en el espacio, en la nave de selección traliana.-

Dos Trailens están reunidos. Son como pulpos, tienen 8 tentáculos, un único ojo negro enorme, una gran boca y tienen un agujero en la cabeza.

—¿Cuánto tiempo falta para llegar?- Dice uno de ellos con una voz tenebrosa. Usa un cinturón rojo y está devorando un brazo verde.

—Menos de un fels, jefe.- Dice uno de ellos con una voz menos tenebrosa y algo aguda. Usa un cinturón verde.

El jefe Trailen deja el brazo alien en un plato y responde con una larga sonrisa.

—Perfecto.

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-En el planeta tierra, 5 horas antes de la llegada de los Trailens.-

Suena el timbre de salida y suspiro. Otro día de clases terminó. Ya puedo relajarme y descansar.

—Bien.

Me levanto de mi mesa y tomo mi mochila roja.

—Por fin se terminó la clase, ya es hora de salida.- Digo sonriendo.

Mi nombre es Ángel, tengo 16 años y no tengo nada de especial. Lo único que me diferencia de mis compañeros de clase es que soy obeso y feo... Es todo. No soy inteligente, pero tampoco soy un idiota. Soy promedio... Aunque no tengo mucha autoestima y me cuesta trabajo comunicarme con los demás. Tengo el cabello negro y corto. El uniforme que uso consiste en una camisa blanca y un pantalón negro. Vivo en la ciudad llamada "Kerkia" en el país "Mesaik". Vivo en el año 2119, donde la delincuencia es peor que nunca. Después de que la sobrepoblación aumentó, también aumentó la pobreza porque los empleos también disminuyeron. Sin empleos, las personas tuvieron que recurrir al robo. Después de la tercera guerra mundial, el mundo cambió demasiado. Los crímenes se volvieron aún más comunes y violentos.

—Ya quiero llegar a casa y dormir.- Pienso cansado.

Estoy dispuesto a irme, pero escucho la voz de una de mis compañeras, Ana. Ana es una chica muy hermosa, tiene el cabello negro y largo, usa una falda corta negra y una blusa blanca.

—¡Recuerden, compañeros, la fiesta es a las 3 de la tarde, en mi casa, no lo olviden!

Ana lo dice en voz alta y yo no sé de lo que habla. Tengo que admitir que me da un poco de curiosidad.

—¿Fiesta?- Pregunto confundido y González me toca el hombro derecho. González es mi único y mejor amigo. Usa lentes negros, es moreno y tiene el cabello negro.

—Su fiesta de cumpleaños. ¿No te invitó a ti? Nos invitó a cada uno por mensaje. ¿No te envió mensaje?

González saca su teléfono celular y me enseña el mensaje.

—Supongo que se le olvidó...

No soy muy bueno comunicándome con los demás, pero realmente quiero ir a esa fiesta.

—L-le preguntaré.- Digo nervioso.

Me dirijo a Ana nervioso.

—H-hola, me preguntaba si me invitaste a mí también, ya que invitaste a todos, jeje.

—No, a ti no te invité.- Dice mientras me observa con asco.

Estoy muy confundido, porque ella había invitado a todos. ¿Por qué no a mí?

—¿P-por qué?

—Me das asco, mírate, estás gordo y feo.

Cuando dijo eso empezó a reír... Me siento mal... Muy mal.

—Bromeas, ¿verdad? ¿Solo por mi aspecto? Eso se me hace ridículo.

—No me importa, es mi fiesta, yo invito a quien yo quiera.

Sigue riéndose y me alejo de ella mirando el suelo.

—Está bien...

Me voy mientras escucho las burlas y risas de mis compañeros. Se están burlando de mí.

González camina al lado de mí.

—No dejes que las burlas te afecten.

Supongo que ya estoy acostumbrado.

—Lo sé... Lo sé...

—Y si te hace sentir mejor, yo no iré a su fiesta.

—No te preocupes por mí, tú ve, estoy seguro que será divertido.

—No pasa nada, aparte, no me gusta convivir con personas como ella.

—Eres un buen amigo.

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-30 minutos antes de la llegada de los Trailens.-

Estoy acostado en mi cama. Estoy muy deprimido. Las burlas realmente me afectan demasiado.

—Todos están divirtiéndose y yo estoy en mi cama acostado.

Me pongo pensativo y triste... Debo distraerme... No quiero tener pensamientos suicidas... No otra vez.

—Bueno, creo que caminaré un rato para distraerme.

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-En el espacio-

—Jefe, ya casi llegamos.

—Contacta a nuestro contacto en el planeta tierra.

—Claro.

Presiona varios botones y logra contactar al Trailen que se encuentra en la tierra.

—Oye, ¿me escuchas? ¿Ya tienes la información suficiente del planeta?

—Claro, espere por favor, estoy comiendo.- Lo dice mientras termina de comerse a un bebé humano. Detrás de él hay varias personas muertas.

Termina y se limpia la boca.

—En este planeta, los seres que protegen a otros son llamados: "héroes". Aquí todos son como un bebé simbilance, débiles y frágiles, fáciles de matar.

—¿Héroes...? Suena raro. Bueno, ¿cómo se divide el planeta?

— Aquí se reparten en algo como los franxz, pero aquí se les llama países y hay 269 países. Pero hay algo diferente, en este planeta hay diferentes idiomas, así que creo que en este planeta nos tenemos que asegurar de que los habitantes que escojamos sean del mismo franxz o país.

—Ya comprendo, está bien, que empiece la fase 1: La selección. ¿Conseguiste algo o dibujaste cómo están repartidos los franxz en este mundo? Y también de una vez manda la información de los idiomas, supongo que también tienes la información de sus idiomas, ¿verdad?

—Sí, jefe, ahora mismo le estoy enviando la imagen, los datos de los idiomas y toda la información que reuní del planeta.

Una imagen que muestra un mapa del planeta aparece en una de las pantallas de la nave y el jefe Trailen se pone a observar la imagen. Hay 3 enormes continentes solamente.

—Decidido, me gusta la forma de este franxz. Los 15 habitantes a los que les daremos los poderes serán repartidos aquí.- Dice sonriendo.

Señala el país "Mesaik" con su tentáculo.

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-Minutos después, en la tierra.-

Estoy caminando cerca de un río que está muy contaminado. Vivo en un pequeño pueblo, un poco lejos de la ciudad.

Los humanos se volvieron más malvados después de la tercera guerra mundial. La contaminación incrementó también.

—Qué aburrido estoy, mejor me voy a la casa.

Escucho el llanto de un perro.

—Espera, eso se oye mal.

Sigo el sonido.

—Es por aquí...

Doy vuelta en una esquina y veo a dos chicos pateando a un perro negro, y al parecer, están borrachos.

Malditos hijos de perra.

—¡Oigan, idiotas, dejen de patear al perro, malditos!- Grito enojado.

Uno de ellos empieza a reír.

—¿Por qué, gordito? ¿Tú lo vas a defender? Uy, que miedo tengo.- Lo dice mientras sigue riendo.

—Oye, la ballena tiene razón, no debemos patear a este pobre perro, mejor hay que patearlo a él.

Los dos se empiezan a reír. Siento un mal presentimiento... Mejor me voy.

—E-es mejor que me vaya...

Empiezo a correr lo más rápido que puedo.

—Sigue a la ballena sin prisa, no creo que aguante mucho corriendo.- Dice uno de ellos con una gran sonrisa.

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-En el espacio-

—Listo para la repartición de poderes.

—Está bien, muestra la imagen de nuevo.

Una imagen del mapa de "Mesaik" aparece y el jefe observa la imagen.

—Según la información, los humanos jóvenes son los que más se interesan por los héroes. Así que elige solo a jóvenes.

El asistente Trailen presiona algunos botones.

—¡Listo!

—¡Dispara!

El asistente Trailen presiona un botón y unos robots que parecen drones salen de la nave.

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-En la tierra-

Los dos me están golpeando en el suelo.

—¿Te gustan mis patadas, gordito?

—Creo que le gustarían unos golpes más en la cara, ¿verdad, ballena?

Empiezo a reírme y les contesto.

—Golpean como niñas de 3 años.- Lo digo con sangre en el rostro.

—Vaya, lo golpeamos tan fuerte que se volvió loco.

Empieza a reír y uno de ellos se queda viendo algo en el cielo.

—Mira en el cielo, es una especie de dron, pero es un poco raro ¿no lo crees?

El otro lo observa y empieza a sentir mucho miedo. Se pone pálido.

—Eso no es un dron, mira, sacó algo y empezó a brillar.

Se asustan ambos y el robot dispara una especie de rayo color rosa.

—¡Nos disparó un rayo!

Me toman rápidamente y se cubren del rayo conmigo.

—¡¿Eh?!

El rayo me da y rodea mi cuerpo por completo. Mi cuerpo comienza a brillar con un tono rosa.

Mis ojos se vuelven de color rosa y unos rayos blancos salen de mi cuerpo por unos segundos.

Pasan tres segundos y vuelvo a la normalidad. Cierro los ojos y me desmayo.

—¡Mierda, mira como dejó a la ballena ese rayo!

—¡Se fue el dron o lo que haya sido eso!

—¡Creo que se murió!

—¡Vámonos, nos echarán la culpa a nosotros!

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-4 horas después-

Me despierto confundido. Estoy acostado bajo un árbol.

—Mierda, me dejaron hecho mierda esos tipos. ¿Qué hora es?

Saco mi teléfono y miro la hora en mi teléfono. Es muy tarde.

—¡Mierda!

Me levanto y me sacudo.

—¡Son las 9 de la noche, espero que no me regañen!

°

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Después de unos minutos, llego a mi casa sin hacer ruido.

—Supongo que todas están dormidas... Bueno, mañana prefiero que me regañen, me voy a dormir.

Entro a mi habitación, me acuesto en mi cama y empiezo a cantar.

Es una buena manera de distraerse.

—🎶Acostado estoy... Y golpeado estoy... Me duele el solo respirar. 🎶

Me empiezo a reír de mi sufrimiento y me pongo a pensar en ese rayo que me dio.

—¿Qué sería ese rayo?

Miro que mi gato se acerca a mí.

—Hola, Michito.

Le doy unas palmadas suaves en la cabeza y le sonrío.

Amo a los animales.

—Descansa.

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-En la mañana siguiente.-

Me despierto y miro a mi gato despierto. Qué lindo.

—Hola, Michito, ¿cómo amaneciste?

Le doy una palmada "suave" en la cabeza, pero la cabeza de mi gato azota en el suelo y se muere. La cabeza de mi gato es destrozada... ¡¿Que mierda?! ¡¿Su cabeza explotó?!

—¡¡¿Eh?!!- Grito asustado.

Me levanto asustado de mi cama.

—¿Q-qué hice? ¡¿Qué hice?!- Digo nervioso.

Veo mis manos y veo que no son las mismas manos gordas que tenía.

—¡¿Qué hi...?! ¿Eh?- Digo nervioso y confundido.

Mis manos se ven muy diferentes. Mis brazos son muy diferentes, son delgados y fuertes.

—¿Qué pasa?

Me volteo a ver al espejo que tengo en mi habitación y me asusto.

—¿P-pero qué mierda?

Me miro de nuevo y me confundo. Esto es demasiado raro... Muy raro.

—¿Soy yo? Pero... ¿Por qué estoy delgado y... musculoso?