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Soy un ser inferior con la habilidad de seducir mujeres

Fui invocado como un héroe junto con 9 chicas, en un mundo gobernado por mujeres y los hombres son tratados como inferiores. Como no recibí ningún poder divino, me trataron como un perdedor y trataron de aprovecharse de mí. Escapé y ahora debo sobrevivir en un mundo salvaje y peligroso... Pero gracias a un vagabundo, podré sobrevivir. Estudiaré en una escuela de magia y me convertiré en el mejor aventurero del mundo. Y usaré mi poder para conseguir compañeras poderosas. ¿En qué consiste mi poder? Básicamente, puedo seducir a las mujeres fácilmente.

Hector_Angel · Fantasía
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256 Chs

CAPÍTULO 190- Rechazo.

CAPÍTULO 190- Rechazo.

(Tiempo atrás.)

—Esto... Ah... Oye... Lo siento, no puedo corresponder a tus sentimientos.

—¡Y-ya te dije que no me molestaría ser tu segunda esposa, Crisfa! ¡Te amo!

—No... Lo siento, pero amo a Nirfa con todo mi corazón, no tendré una segunda esposa. Lo siento.

Crisfa era uno de los Dioses menos populares entre las mujeres porque los Dioses lo consideraban un Dios grosero e irrespetuoso con el Dios supremo.

Pero aquellas raras mujeres que se enamoraban de él, siempre eran rechazadas por Crisfa, pues él odiaba el harem y nunca lo tuvo.

—Ah...

Crisfa apareció al lado de su esposa, que estaba acostada en el suelo, leyendo un libro.

—¿Qué haces en el suelo, linda?

—Leyendo. El suelo está frío, me gusta.

—Tiene sentido.

Crisfa se acostó en el suelo y puso su cabeza en el estómago de Nirfa.

—Déjame adivinar. Ella te dijo que te amaba. ¿Estoy en lo correcto?

—Fufu. No se puede evitar amar a alguien tan lindo como yo. Dejando las bromas a un lado, sí, me pidió que la haga mi segunda esposa. Obviamente la rechacé. ¡Mi amor es solo para ti, linda! Los verdaderos hombres aman a una sola mujer. ¡Abajo el harem!

Nirfa sonrió y le acarició la cabeza a Crisfa.

—¿Realmente no quieres tener otra esposa?

—Nop. Tú eres más de lo que merezco. Mucho más. Si tengo mucho, ¿por qué querría más? Te prometo que nunca tendré ojos para otra mujer, linda. ¡Nunca de los nunca!

—¡Kei vendrá a mi casa a comer!

—¡No, a la mía!

—¡A la mía!

—¡Ahhh! ¡Siento que mis brazos se están saliendo de su lugar!

Las prometidas de Kei se estaban peleando por él, jalando al pobre Kei de sus adoloridos brazos.

Literalmente Kei siente como si una aplanadora estuviera aplastando sus brazos con cada jalón.

—¡C-chicas, ¿p-por qué no comemos en mi casa y asunto solucionado? No tenemos tantos cocineros, pero los pocos que hay cocinan muy bien.

Inmediatamente ellas olvidaron su odio y lo abrazaron.

—¡Aceptamos!

Crisfa y Kei. Misma alma, diferente pensamiento y personalidad.

(Pov- Nirkat.)

Jackot, no sé si te diste cuenta o no, ¡pero llevas hablando más de 3 horas sin parar! ¡Ya me tienes harta! ¡Te he soportado solo porque nos ayudaste en el pasado, pero ya me cansé de escucharte!

Tsk. El peligro ya pasó, podemos regresar a casa.

Mejor nos vamos ya, no soporto el maldito dolor de cabeza.

—Oye, Jackot, debo irme, debo regresar a casa.

—Oh, es cierto. ¿En dónde vives ahora? Para visitarte.

—No, no puedes visitarme. Soy la esclava de Kei Molfer, el hijo de Sei Molfer. Mantente alejado si no quieres terminar muerto.

Literalmente hablando. Todos los que se acercan a la familia Molfer están en peligro.

—¿E-el hijo de Sei Molfer...? ¿Su esclava?

—Sí. Adiós.

Intenté alejarme, pero este idiota me tomó de la mano. Qué asco.

—¿Qué haces?

—Escapa... ¡Ve por tu hermana y escapemos juntos!

—No, gracias. Y tampoco es necesario que escape. Kei Molfer nos permite irnos cuando queramos. No nos vamos porque nos da comida y un techo.

—Entonces ven conmigo. Te daré trabajo en la florería de mi padre. Puedo convencer a mi padre de dejarte dormir en el negocio.

—... Oye, hace años que no nos vemos. ¿Por qué eres tan amable con nosotras?

—Yo... Yo... Ah... Lo diré... Me enamoré de ti.

... ¡Hahahahahaha! ¡N-no te rías, Nirkat! ¡Hahahaha! Es la confesión más aburrida que he escuchado... Bueno, es la primera que recibo, pero es tan aburrida que me da risa.

—Lo siento, no puedo corresponder a tus sentimientos. Bla, bla, bla. Adiós.

—¡E-espera! ¿N-no tengo ni siquiera una pequeña oportunidad? A-al menos podemos comenzar como amigos.

—No. Adiós.

Me di la vuelta y comencé a caminar.

—Acaso... ¿Acaso estás enamorada de otro hombre?

Me detuve.

... ¿Enamorada...? No... No lo estoy. No estoy enamorada de nadie.

Aunque Kei me parece lindo...

—¡Uwaaaah! ¡N-no lo estoy, no lo estoy! ¡Sal de mi mente, idiota!

¡Mierda! ¡Estar con esas mujeres ya comenzó a afectarme psicológicamente!

Sí, acepto que Kei es lindo, ¡pero no estoy enamorada de ese mujeriego idiota, lo odio!

—Tsk. Adiós.

Necesito comer.

Llegué con mi hermana y Mia, que están cocinando la carne del oso.

Huele delicioso, necesito comer para que mi cerebro vuelva a la normalidad.

—¿Ya nos vamos a ir?

—Cuando terminemos de comer.

Me senté en el suelo.

Ah... Mierda.

No sé por qué me puse tan nerviosa... Maldita sea, me duele la cabeza.

(Pov- Zei.)

El mes llamado marzo ya comenzó. En este mundo, en esta época del año, hace calor.

Charlein nos invitó a mi novia y a mí a la playa.

La playa de este mundo está... ¿Cómo puedo decirlo? Muy llena.

En mi mundo casi nunca hay personas en la playa porque hay muchos monstruos marinos jodiendo la existencia.

Es agradable estar en una playa segura... Bueno, supongo que es segura. Pero mientras yo esté aquí, nadie estará en peligro.

—Es linda.

La arena en mis pies se siente relajante.

—Bueno, iré a nadar.

Me interesa conocer el fondo marítimo. Quiero confirmar si es cierto eso de que las Sirenas no existen aquí.

Me quité la camisa y la dejé en el suelo.

—Ataque sorpresa: ¡Ataque de abrazos!

¿Eh?

Dianka saltó sobre mí y comenzó a abrazarme.

Y no solo me está abrazando, me está tocando demasiado el pecho y el abdomen. ¿Debería sentirme acosado? Bueno, es mi novia, así que esto está bien.

—Estás demasiado cariñosa hoy, Dianka.

—Fufu. Solo estoy marcando mi territorio para que ninguna chica coquetee contigo.

Es cierto, a diferencia de mi mundo original, en este mundo soy popular con las mujeres. ¿Por qué? No lo sé, supongo que las mujeres de este mundo tienen mal gusto.

—Dejen de coquetear frente a mí.- Dijo Reim.

—Bueno, iré a nadar.

—¡Te acompaño!

Me metí al agua... Mmm... Sí... Un poco más... Listo, ya nos alejamos de la orilla.

—Vaya... El agua se siente bien...

Sentí un escalofrío... Este presentimiento...

—Zei.

Sí, lo sé, Fetoca.

—Dianka, diles a las chicas que fui a comprar comida. Ella está aquí.

—S-sí. Ten cuidado.

Salí del agua y me alejé corriendo.

Baños. Baños... Encontré los baños.

Entré al baño de hombres. Perfecto, no hay nadie.

Me puse el traje que uso como el héroe Fetoca y desaparecí de ese lugar. Aparecí en el cielo... Bien. ¿En dónde estás?

—¡Mamá!

Una niña gritó llorando. Un monstruo de arena salió del suelo e intentó atacarla.

Aterricé frente a ella y la protegí con mi propio cuerpo.

La abracé y me alejé corriendo.

La dejé con su madre y regresé a pelear con ese monstruo.

Un gigante de arena. Un monstruo bastante débil, pero tiene ventaja por estar en la playa, o eso cree.

—Magia de agua: Lanzas de agua.

Lanzas hechas de agua comenzaron a salir del mar y comenzaron a impactar sobre el cuerpo del monstruo. El agua es la debilidad de la arena. Estoy seguro de que ese monstruo es débil con el agua.

... ¿Se está haciendo más grande?

Saltó hacia mí y lo esquivé.

Él cayó al agua. ¿Qué intenta hacer?

Las personas están huyendo del lugar. Fetoca, sal de mi cuerpo y usa mi identidad. Rápido.

Fetoca salió de mi cuerpo.

Tendré que pelear con el 50% de mi poder total.

... Algo me tomó del cuerpo.

Volteé hacia atrás... Un gigante... Un gigante de agua.

—¿Cuántos elementos puedes controlar?

Tentáculos de agua me tomaron del cuerpo y me sumergieron en el mar.

Magia de hielo: Congelación.

Congelé toda el agua a mi alrededor y lo destruí con mis puños.

Salí del mar y comencé a lanzar esferas de fuego, evaporando el agua.

¿Eh? ¿Ya? El poder mágico desapareció. Esperaba una pelea más larga.

—Esto es decepcionante.

Observé a las chicas y a Fetoca usando mi identidad escapando de la playa.

—Supongo que tendré que esperar un poco más.

Los ataques de Shadow Girl siguen aumentando, pero ella no aparece, envía criaturas mágicas por mí. ¿Qué trata de hacer exactamente? Sus movimientos son raros, incluso para mí.

(Pov- Drei.)

He estado fuera de casa por un año completo. He terminado 38 de las 100 pruebas que el maestro me dio. Fue difícil, lo admito, pero el ritmo que estoy llevando es bueno. El nivel de dificultad aumenta con cada prueba, pero lo estoy haciendo bastante bien para alguien sin magia como yo.

—Oye, Linmek, ¿no quieres usar una almohada normal?

—¡Me gusta tu panza, Drei! ¡Es muy cómoda!

Linmek está acostada en el suelo y puso su cabeza en mi abdomen. La he cuidado como si fuera mi propia hija, pero ella sigue siendo un misterio para mí. Ella es fuerte, literalmente. Puede partir troncos a la mitad con solo sus manos. No sé qué tipo de vida ha tenido porque evito preguntarle, pero no me importa. Sé que ella es una buena persona, y prueba de eso es que ella me ayuda a cocinar y a lavar.

Extraño a Cristhela y a mi familia, pero si quiero tener la oportunidad de derrotar al Rey Demonio, debo terminar las pruebas.

Cerré los ojos, para descansar también.

Estamos en un lugar seguro, en una pequeña cueva. Estaremos a salvo, ya cerramos la única entrada con rocas. Podemos descansar todo lo que queramos, y eso es lo que necesito, un buen descanso.

Mi cuerpo está bastante adolorido y exhausto por todo el esfuerzo que he hecho últimamente, y eso es bueno, el dolor me hará más fuerte.

Le acaricié la cabeza a Linmek.

—Buenas noches, Linmek.

Linmek bostezó y se subió arriba de mí.

—Buenas noches.

... Vaya, esto es nuevo. Ella parece un adorable gato durmiendo sobre su amo. No me quejo, me siento como un padre.

La abracé y cerré los ojos.

Gracias a ella, no me he vuelto loco. La soledad puede provocar mucho daño en la mente de las personas.

(Pov- Kei.)

H-hoy es 14 de noviembre... M-me refiero a 14 de Grekso.

Y-y-y... Y-y Terkiana está... ¡Ahhhh! ¡No quiero ver, pero también quiero ver!

Detrás de esta puerta, Terkiana está teniendo a nuestro bebé... ¡Ahhhhhh! ¡Me estoy volviendo loco!

¡¿Y si nace enfermo?! ¡¿Y si nace muerto?! ¡¿Estará bien?! ¡¿No se sentirá decepcionado por tener como padre a un hombre con harem?! ¡Ahhhhhh! ¡¿Y si es un reencarnado como yo y él o ella es el verdadero protagonista?! ¡Tantos pensamientos invaden mi mente, y duele!

D-debo tranquilizarme y entrar.

¡Ahhhhhh! ¡¿Y si mi energía mágica afecta negativamente a mi bebé?! ¡¿Y si mi presencia lo asusta?! ¡¿Qué hago?!

No sé qué hacer. ¿Entro o no?

¡A la mierda, entraré! ¡Es un momento especial, debo estar con Terkiana!

Abrí la puerta y miré a las chicas alrededor de Terkiana.

Me acerqué a ellas para mirar... ¡¿Eso es una cabeza saliendo de...?!

Intenté no vomitar ni desmayarme.

¡Has visto cosas peores en la vida, Kei, debes ser fuerte!

Me tapé los ojos y solo miro un poco.

—Un poco más, Terkiana. Solo un poco más.- Dijo Drin.

Tenemos suerte de que Drin sepa hacer esto. Y es la primera vez que veo a una mujer teniendo un bebé... Bueno, la segunda, la primera fue mi madre. Fue asqueroso salir de ese lugar cuando yo era un bebé, pero al menos descubrí lo que sienten los bebés al nacer.

Terkiana no se está quejando. Bueno, me sorprendería que se quejara del dolor, considerando que todos los días sufrimos.

Pero ella no ha estado entrenando nada, pero sigue sin quejarse. Genial...

E-está saliendo.

¡La cabeza salió!

—¡Ya casi, Terkiana, nya!

¡Y ya casi me desmayo yo!

El llanto del bebé nos informa que ya salió por completo.

Ah... Ah... ¡¡Ahhhhhhhh!! ¡No sé cómo reaccionar!

—¡¿Es niño o niña?! ¡¿O los dos?! ¡¿Ninguno?!

—Tranquilo, cariño. Mira, es una adorable niña.

T-tengo una hija...

Me acerqué a Drin y miré a mi hija... Cabello rubio, ojos azules... Una pequeña Terkiana.

—Ah... Ah... T-tan... Tan... ¡Tan adorable!

Le acaricié la mejilla y el bebé dejó de llorar.

Mi corazón... Ah... ¿Estoy llorando? Las lágrimas no dejan de salir. Logré cumplir uno de mis sueños, tener una familia... Tengo una hija... Una adorable hija Elfa.

Ella me tomó del dedo y comenzó a apretarlo con su pequeña mano.

¡Tan adorable...! ¿Eh?

—¡¿Cariño?!

Literalmente, mi propia hija me destruyó el dedo y lo está usando como chupón.

—No, Nadia, eso está mal. ¡Demasiado mal!

Le quité mi dedo... Me arrancó el dedo... Wow.

—¿Los bebés Elfos son tan fuertes?

Mi dedo se regeneró y guardé mi dedo en mi bolsillo.

Nadia comenzó a llorar porque le quité mi dedo.

—C-creo que tiene hambre.

No quiero que se vuelva adicta a la sangre humana.

Drin le entregó el bebé a Terkiana. Qué linda escena. ¡Desearía tener una cámara para tomar una fotografía...! Espera, ¡tenemos algo mejor!

—¡Drin, dibuja eso, por favor!

—¡Sí, cariño!

Terkiana comenzó a amamantar a nuestra hija.

Una hija... ¡No sé nada sobre eso! ¡¿Qué haré?! ¿Es la misma criar a un niño y a una niña? ¡Uwaaaah! ¡No lo sé!

—¡Es tan linda, abuela!- Dijo Nerka.

—Es como una mini Terkiana. Son idénticas.- Dijo Nirfei.

—Es cierto, es idéntica a Terkiana.- Dijo Terniak.

—Me siento un poco decepcionada, pensé que se parecería un poco a Kei.- Dijo Rose.

—Igual yo, pero eso no le quita lo adorable.- Dijo Drin.

—Pero su fuerza no es nada normal. Desearía ver su estatus.- Dijo Mia.

—Debemos esperar a Luna, nya.- Dijo Eris.

—Los bebés Elfos son lindos.- Dijo Ram.

—Entonces... ¿Se llamará Nadia, Terkiana?- Dijo Mio.

—Sí. Nadia Molfer.

Ah, es cierto, ella tiene sangre Molfer... ¡¿Y si se vuelve una Sei Molfer y por eso me arrancó el dedo?!

N-no, es una bebé, es imposible que tenga esos sentimientos.

—¿P-puedo cargarla?

—Por supuesto.

Ah, es la primera vez que cargaré a mi hija.

¡Debo hacerlo bien!

Terkiana me dio a nuestra hija y la cargué con mis brazos. ¡¿La estoy cargando bien?! ¡S-sí, creo que sí!

—H-hola, mi nombre es Kei Molfer, y reencarné en este mundo. Yo tenía mis recuerdos de mi vida pasada incluso cuando nací. ¿Eres un reencarnado? Intenta hablar si es así.

—¿Cariño? ¿Piensas que tu hija es una reencarnación con recuerdos? Creo que las reencarnaciones solo se dan en situaciones especiales.

Mi hija no trató de hablar y simplemente está chupando su dedo.

—Solo quería confirmarlo.

Le acaricié la mejilla. Tan suave... Tan indefensa. ¡Debo protegerla de los peligros!

—No te preocupes, hija, tu padre podrá ser un idiota, irresponsable, feo, estúpido, y un largo etcétera, pero será un buen padre para ti.

Ella levantó su pequeña mano.

Qué linda. ¿Trata de acariciarme la mejilla?

Bajé más mi cabeza para que me acaricie la... ¡Uwaaaah! ¡Salí volando!

Choqué con la pared y la destruí.

—¡Uwaaaah! ¡La atrapé, cariño...! ¡¿Cariño?!

—¡¿Mi propia hija me dio una cachetada?! ¡Creo que me odia! ¡¿Qué hice mal?!

—C-creo que simplemente no puede controlar su fuerza, cariño.

—S-sí, e-es cierto.

... ¿E-está creando una esfera de fuego?

¡¿Y me está apuntando?!

¡Uwaaaah! ¡Me lanzó la esfera de fuego!

La esquivé y destruyó el resto de la pared.

Ella comenzó a reír con mi sufrimiento. ¡Definitivamente me odia!

—¡Hahahaha! Debo admitir que es adorable.

El Dios supremo apareció flotando al lado de Drin y comenzó a acariciar a mi hija.

—No te preocupes, Kei, tu hija no tiene los recuerdos de una vida pasada. Que intente matarte fue una simple coincidencia. Ella no puede controlar su poder mágico y lo expulsa inconscientemente.

—¡Pero a mí me tomó mucho tiempo y esfuerzo aprender a usar mi poder mágico!

—Entonces tu hija es un prodigio.

¿Un prodigio? ¡Sí! ¡Ella puede tomar mi lugar si yo muero!

¡La entrenaré para que sea la protagonista cuando yo, el protagonista actual, muera...! ¿Eh?

M-me distraje.

—¡Kei!

Una esfera de fuego atravesó mi estómago y explotó. Ah, tengo un agujero en el estómago.

Mi hija se está riendo de mí... Ah, la perdonaré solo porque es adorable.

Mi estómago se regeneró y me acerqué a mi hija.

—Te gusta el sufrimiento ajeno, ¿eh? Realmente tienes sangre Molfer, pequeña.

Le acaricié la cabeza y sonreí.

—Bienvenida a la familia, hija... Ah.

—¡Cariño, m-mejor aléjate de ella por un tiempo! Creo que le gusta hacerte sufrir.

Mi hija me lanzó una esfera de fuego a la cara. Afortunadamente logré esquivarla a tiempo.

—Kei, creo que le agradas.- Dijo Terkiana sonriendo.

Ah... Sí... Le agrado.

—Tienes suerte de que seas adorable. Aunque te guste hacerme sufrir, te prometo que siempre te protegeré, aunque me cueste la vida, te lo prometo. Nadie te hará daño. Nadie.

Cris estornudó mientras estaba cenando con alguien muy, pero muy peligroso.

—¿Así que atacarás a Kei Molfer en 5 meses?

—Sí.

Zero, el comandante de los demonios más fuerte, sonrió al escuchar eso.

—Perfecto.