CAPÍTULO 59- Rechazo.
(Pov- Kei del pasado.)
Snif, snif. ¿Hueles eso, Cris? Respira profundamente y siente el olor del mar bailando en tu nariz. ¡Como me encanta este olor!
La playa, uno de mis lugares favoritos. Y no solo es uno de mis favoritos porque me relaja escuchar las olas del mar, ¡sino porque también es el lugar perfecto para ver a las chicas en traje de baño! Jeje. Mientras evite el contacto directo y mire discretamente, podré disfrutar de esta hermosa vista. ¡Y para eso traje mi arma secreta! ¡Ta-da! ¡Lentes de sol más oscuros que mi alma! No me culpen por mirón, señoritas, soy un adolescente sano con las hormonas calientes, y soy feo, dudo bastante que alguna chica se enamore de mí y, por ende, no tendré sexo en muuuuuuuuuuuuuuuucho tiempo, por lo que debo conformarme con ver. No es como que quisiera tener sexo, sinceramente no me gustó lo que sentí la única vez que me he masturbado, pero de que me gusta ver a las mujeres en traje de baño, ¡me encanta!
Mirar, una acción que las mujeres consideran asquerosa, pero es inevitable. Mirar y no tocar.
Ah, la playa. Un lugar perfecto para un pervertido como yo... Vaya, vaya.
Esos hombres están coqueteando con esas chicas y... Se están yendo juntos...
Me acaricio el abdomen y los brazos... Tengo un mejor cuerpo que ellos, pero la belleza de los rostros sigue siendo muy importante para las mujeres. Ay, que injusticia. ¡¿Por qué me hiciste feo, Dios?!
Y además de feo, ¡tímido! Ni siquiera soy como esos feos extrovertidos que se consiguen novia gracias a su carisma. ¡¿Por qué soy como soy?!
Ah, ni siquiera me atrevo a decirle a una chica que salga conmigo a una cita, ¡o al menos invitarla a hacer la tarea juntos! ¡Tartamudeo al hablar con cualquier chica! ¡Soy una vergüenza!
Pero... ¿hay alguna chica que me guste como para preocuparme tanto por mi personalidad aburrida y plana? Mmm... Pues me gustaba una chica, Darnia, pero no lo llamaría amor... Sí, estaba enamorado, pero... Realmente no sentía amor verdadero. Creo que simplemente me atraía y ya.
Al mismo tiempo, me gustaban otras dos chicas, pero no tanto como Darnia... Ah, soy una mierda de persona. Sé que solamente me debe gustar una chica, pero no podía evitarlo. Eso sí, si algún día salgo con alguna chica, nunca la engañaría. Después de todo, si consigo novia, sería un milagro, ¡y no desperdiciaré ese milagro por caliente!
¡Muerte al NTR! Excepto el NTR con venganza, esos sí son buenos y muy satisfactorios.
—Uffffff. Que calor tan agradable. Gracias por invitarme, Cris.
Tu invitación llegó en el mejor momento, el aburrimiento me estaba matando.
La arena entre los dedos de mis pies, los niños jugando con la arena, los padres barrigones descansando, las mujeres enseñando piel, los hombres intentando coquetear. Sí, se nota que es verano.
—Venir a la playa solo sería demasiado aburrido, así que pensé: ¿por qué no me traigo a mi buen amigo Kei para que me haga compañía? Oh, que buen amigo soy, ¿no? ¡Hahahahahaha!
—Que humilde de tu parte, "carnal".
—"¿Carnal"? ¿Es amigo en español o me estás insultando de una manera elegante, señor refinado?
—Es amigo, no te enojes, "guapa". ¡Vamos, preparemos todo! ¡En marcha!
Le di una fuerte nalgada. Ah, la amistad entre hombres... ¡Uwaaaah! ¡Mis futuros hijos!
—¡"Hijo de tu pu..."! Tsk. No insultaré a tu madre. ¡¿Pero qué mierda te pasa?!
—Ojo por ojo. Nalga por nalga.- Dijo este idiota, guiñando un ojo y sonriendo.
¡Eso no te funcionará otra vez, cara linda!
—¡Pero no fue nalga por nalga, fue nalga por pene!
¡Ay, ese manotazo en la entrepierna me quitó años de vida!
—Ups, los siento, me confundí. ¡Hahahahahaha!
Respira, Kei, no vale la pena pelear. Además, ¡se nos adelantó! Se está protegiendo la entrepierna. Fufu. Algún día bajarás la guardia, y cuando eso pase, te arrepentirás por despertar mi furia.
—Vaya, vaya. Como sea. Mejor finjamos que nada de esto pasó. ¿Nos sentamos?
—Te sigo.
Sí, sí, me sigues. Pronto bajarás la guardia.
Snif, snif. Ah, el olor del mar me relaja... Y ver a las chicas me levanta el ánimo... Y levanta otra cosa también. Jeje.
Tranquilo, amiguito, tranquilo.
Soy tímido, pero también pervertido. ¿Qué clase de combinación es esa? ¡Hubiera preferido ser carismático y pervertido, o tímido y lindo! ¡¿Qué clase de abominación soy?!
—Oye, Kei, ¿realmente eres virgen?
…
…
...
—...
Cris, estaba disfrutando la hermosa vista, ¡pero ahora mi timidez se activó al 100%!
—¡¿Q-qué dices?! ¡No preguntes cosas raras de la nada!
—Solo quiero escuchar tu respuesta. Si me respondes, yo también la respondo.
… Ay... ¿Tanto te gusta humillarme?
Bueno... Cris es mi mejor amigo, supongo que no se va a burlar. ¡Tal vez intentará ayudarme a conseguir novia!
—Pues... Ya sabes... Cris, nunca he tenido novia... Sí, sigo virgen. Y si lo preguntas, no, no me masturbo. El placer del sexo no me interesa realmente. Te mentiría si te dijera que no quiero hacerlo. Sí, quiero perder la virginidad, pero con una chica que me ame.
—Con un "sí, soy virgen", era suficiente.
—Es para que me tengas lástima y me presentes a una amiga tuya. Y si tu madre se divorcia, pues... ¡N-no, espera, espera, es broma...! ¡Uwaaaah! ¡Detente, por favor! ¡Me rindo, me rindo!
—Estamos a mano... ¡Uwaaaah!
—A-ahora sí estamos a mano.
Mis sensibles pezones fueron pellizcados y doblados, pero los "huevos" de Cris recibieron la visita de mi rodilla. Sabía que bajarías la guardia pronto.
—E-empate, empate.
—Empate.
—Bueno... Ejem... Regresando al tema principal. Ejem, ejem. Interesante respuesta. Yo también soy virgen.
...
...
...
Espera... ¡¿Qué?!
Me estás diciendo que Cris, el chico más popular y guapo que he conocido en mi vida, ¡¿es virgen?! ¡Que injusticia! ¡¿Por qué nací feo?! ¡Cambiemos de cuerpo, yo lo aprovecharía mejor!
—¿Qué? ¿Sorprendido?
—¡Eso fue inesperado! ¡Cris, eres popular y guapo! ¡¿Por qué…?! No, espera... Iba a decir algo estúpido.
El hecho de que él sea guapo y popular, no significa que se la pasa enamorando a cualquier chica, para tener sexo y después terminar con ella para conseguirse a otra. Eso lo convertiría en una basura de persona.
El hecho de que siga virgen y no le conozca ninguna novia, significa que está esperando a la indicada. La belleza no corrompió su corazón.
—Cris, como que ahora te respeto más que antes.
—Estás exagerando.
—Vaya, vaya. Somos un par de vírgenes y sin novias... Al menos estamos juntos para compartir nuestra miseria.- Dije, bromeando.
—¿Ya diste tu primer beso?
—Como te gusta humillarme.
—Vamos, hay confianza. No le diré a nadie.
—Pues… Mi prima es la única chica que me ha dado un beso en la boca.
—¿T-tu prima?
¡N-no me mires con asco! ¡No es lo que piensas, lo juro!
—¡Sin lengua! ¡Fue sin lengua! Ella intentaba besarme en la mejilla y me moví porque tropezó y me empujó. Fue un accidente.
—Y-ya veo. Ya estaba a punto de llamar a la policía... Yo tampoco he besado a nadie, aunque admito que me da curiosidad saber qué se siente.
—Yo también, bro. Yo también.
Ambos suspiramos. Vaya vida patética la que tenemos.
En mi caso no tengo opción, soy feo, pero admiro esa parte de ti, pues estás esperando a la indicada y no desperdicias tu primer beso con una chica random que solo le importa tu apariencia y popularidad... Aunque admito que, si yo tuviera tu apariencia, besaría a cualquier chica que quisiera besarme. ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué soy un chico tan fácil...?! Ah, sí, porque mis opciones son casi inexistentes y aprovecharé cualquiera que tenga.
Sí, soy un chico fácil... ¡Ahhhhhhhh! ¡Se supone que estamos aquí para divertirnos, no para humillarnos!
—¡No venimos a deprimirnos! ¡Vamos a divertirnos!
Me paro de manos y hago una flexión.
—Me siento con energía de sobra.
Me levanto y sonrío.
—¡Vamos, ayúdame a enterrarte en la arena!
—¡Vamos...! ¿Eh? ¡¿Y por qué a mí?!
—Yo entrepierna y pezones. Tú solo entrepierna. No creo que sea empate.
—Que rencoroso.
•
•
—Ya, ya, saca todo.
¡Que asco! ¡Saca todo, Kei, saca todo! ¡Casi me ahogo!
Ay, mi desayuno. ¡Lo siento por desperdiciar tu comida, tía! ¡Puaj!
—Te dije que no abrieras la boca bajo el agua.
¡No es mi culpa que mi pie haya pisado una roca puntiaguda! ¡El dolor me hizo gritar bajo el agua!
M-maldita sea, tragué demasiada agua. Que asco. Las personas se orinan en el mar... Y cagan... Y leí en internet que cada ballena libera 20 litros de semen al reproducirse, por lo que nadamos en... agua con semen... ¡Puaj! ¡Ya no quiero seguir vomitando!
... Ah... Ya... Ya es todo. ¿Cómo lo sé? ¡Porque me muero de hambre, ya no tengo nada en el estómago!
—Cris, si muero, te dejo mis libros. A Nia le dejaré mi habitación. Y a mi tía le dejaré toda mi fortuna.
—¿Fortuna?
—Empecé a ahorrar hace dos semanas. No es mucho, pero es mi pequeña fortuna.
—No te hagas el gracioso. Vamos a comer.
—¡Sí, sí, vamos!
¡Comeré hasta reventar!
•
•
Cris y yo nos sentamos juntos en la arena y sacamos nuestra comida de nuestras mochilas.
Ven con papi.
—¿Realmente debemos esperar después de comer? ¿No era un mito?
—No lo sé. Supongo que es cierto.
Que flojera, no esperaré... ¿Eh? M-mi timidez se está activando. ¿Por qué? ¡Esas dos chicas se están acercando a nosotros! ¡Noooooo! ¡Vienen a coquetear con Cris y me sentiré incómodo! ¡Quería comer tranquilo sin que mis inseguridades me estén jodiendo la existencia!
Dos chicas se acercaron a nosotros... Oh, son las chicas de primer año. Ellas están en nuestro club.
Las chicas del club me tratan bien porque me respetan como nadador, así que ya me siento tranquilo. Solo vienen a saludar.
Ejem. Hola. Hola. Hola, chicas. ¿Cómo debería saludarlas? Siempre las saludo con un "buenos días". Supongo que eso servirá.
—Hola, capitán.- Dijeron ambas.
... Sí, me ignoraron. Ni siquiera me saludaron por educación... Supongo que en la escuela solo me tratan bien por ser el vicecapitán.
Ah, quisiera ser popular también.
—Nos preguntábamos si...
Mi teléfono comenzó a sonar. ¡Mi salvación de esta situación incómoda!
—L-lo siento.
Saqué mi teléfono de la mochila y contesté.
—Hola, Nia.
—¡Hermano, olvidaste que tenías que ayudarme a estudiar!
S-se oye enojada.
—¿Eh? ¿No era mañana?
—¡No, era hoy! ¡Me lo prometiste!
Ay, ya me siento peor. ¡No romperé una promesa! ¡Mis padres no criaron a un mentiroso!
—Bueno, llevo en la playa 4 horas, ya me divertí lo suficiente.- Dije, mirando a Cris.
Él asintió.
—Llegaré pronto.
—¡Gracias!
Colgué y guardé el teléfono.
—Lo siento, Cris, debo irme. Ayudaré a Nia a estudiar. Gracias por invitarme.
—Te acompaño.
—No te preocupes, puedo regresar solo. Aparte, seguramente las chicas estaban pensando en invitarte a salir o algo parecido. Diviértete. Nos vemos.
Tomé mi mochila y me fui.
... Solo me tratan bien en el club por mi estatus, no por respeto... En serio, ¿por qué soy como soy? Ojalá fuera carismático.
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Kei se fue y Cris suspiró aliviado, aunque por fuera parecía decepcionado.
—Bueno, supongo que el plan falló.
—¡¿Por qué soy tan cobarde?!
—¡No me atreví a hablarle!
Cris se levantó del suelo.
—No le dijeron "hola". Chicas, si realmente quieren enamorar a Kei, deben ser más amables con él. Kei es fácil de conquistar. Demasiado fácil a mi parecer.
—¡Es que es demasiado lindo! Es lindo y amable. ¡Es tan genial!
—¡Sí! Cuando estoy cerca de él, mi corazón se acelera tanto que no sé qué decir.
—Sí, lo comprendo... Me pasa lo mismo.- Dijo Cris, sonriendo.
El plan para conseguirle novia a Kei falló.
Derrota y victoria para Cris.
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(Pov- Kei.)
Ah... Okey... Solo respira, Kei. Lo estás haciendo bien, sigue así. No vale la pena seguir pensando en eso, la vida debe seguir. Solo, por favor, no caigas ahora. Sigue adelante, no permitas que el dolor te destruya el progreso. Sigue adelante... Solo sigue.
—Tantos meses de espera, para esto. Espero que valga la pena la espera.- Dijo Nerka.
—Me comprometí con dos niñas para poder adelantar este plan. Valdrá la pena... Eso espero.
—Es difícil de creer que dos Elfas oscuras lleguen a ser poderosas, pero no perdamos la esperanza.- Dijo Terkiana, acariciándonos la cabeza.
—Sí, tienes razón, abuela. Digo, después de todo, si Kei logró domesticar a una demonio, no es difícil creer que también podrá lograr esto.
—Yo... Ay... Mejor no opino al respecto.
Nerka, Terkiana y yo, estábamos parados frente a la entrada de una enorme tienda de esclavos. Aquí se entregan a los esclavos.
Detrás de esa puerta, están ellas, las Elfas oscuras que tanto esperé. Volver poderosas a chicas consideradas inferiores y débiles. Algo muy típico en las historias de fantasía de mi mundo. Por favor, Dios supremo, que mi intuición sea correcta.
—La primera impresión es la más importante. No sean groseras. Nerka, ellas son iguales a nosotros. No quiero ningún comentario ofensivo ni discriminatorio. Terkiana… Bueno, tú eres amable, confío en ti.
—¡Oye, yo también soy una chica amable y pura!
Nerka hizo un puchero y cruzó los brazos.
¿Amable y pura? Según mis investigaciones, eres la más racista del grupo, o al menos lo eras en el pasado. No sé cuánto hayas cambiado desde entonces.
—¿Pura? ¿Estás segura de eso, Nerka?- Dijo Terkiana, sonriendo.
Nerka se sonrojó y bajó la mirada, apenada.
—¡N-no digas cosas tan vergonzosas, abuela!
M-mierda, siento mi rostro caliente y mi ritmo cardíaco está aumentando. ¿Timidez? No. ¿Entonces? Porque recordé cómo ella perdió su pureza. ¡Ella me violó!
—M-mejor entremos.
S-sí, no vale la pena recordar eso.
Entramos a la tienda. Vaya, vaya. La tienda, pues... Es normal. No hay nada extraordinario que resaltar. Los esclavos se encuentran en el sótano, por lo que en el piso principal solo hay objetos de tortura.
Me dirijo al empleado, que me recibe con una sonrisa. Estuvo a punto de hablar, pero hablé yo primero.
—Mi nombre es Crisfa. Vengo a recoger a las esclavas que compré.
—Sí, lo estaba esperando. Por favor, espere un minuto.
El empleado se fue y me senté en el suelo.
La madera del suelo está frío. Se siente agradable.
Miré las cosas a mi alrededor. Tantos objetos de tortura, tanto física como sexuales.
Las personas compran esclavos para liberar el estrés, o simplemente porque disfrutan del sufrimiento de los demás.
Me dan lástima algunos, pues hay casos como el de las Elfas Oscuras, que fueron inculpadas de un crimen que no cometieron, pero la mayoría sí merecen el destino que tienen. Si matas a un inocente, mereces ser castigado... No sé cómo sentirme al respecto.
Me puse a pensar en los esclavos para tener un momento reflexivo, pero realmente no lo hago por ellos, lo hago... por mí...
No, Kei, no... ¡No sigas haciendo esto!
—Vaya, vaya... Ah... Recuerden, lo que haré es necesario. Si me insultan, no digan nada, por favor. Todo es necesario para el desarrollo de nuestra amistad.
—Sí, está bien.
El empleado regresó. Las esclavas están detrás de él, siendo jaladas del cuello por las cadenas.
La tímida está llorando, temblando de miedo, mientras que su hermana solo gruñe y nos mira con tanto odio, que hasta siento calor en mi cuerpo. Mi sangre Molfer me exige que la golpeé para que aprenda a respetarme, pero mi voluntad Edna me frena.
—Aquí están, señor.
Me levanté del suelo y me entregó unas hojas con información.
—La información de las esclavas. Sus habilidades, su vida, etcétera. ¿Está listo para el contrato mágico?
—Listo.
Me negaría a hacerlo, pero es obligatorio hacerlo. Soy un Molfer, mi familia está acostumbrada a romper las leyes, pero esta es una ley que no podemos romper. Los esclavos ya tienen una marca en sus almas, este contrato solo me transfiere la propiedad. Si no lo hacemos, ellas no dejarán de ser esclavas de los dueños de este lugar. Y tampoco se puede eliminar la esclavitud. Siempre tendrán esas marcas en sus almas.
Saqué del [Almacenamiento mágico] una navaja y me hice dos pequeñas heridas en mis pulgares.
—La magia del contrato está lista. Puedes iniciar.
—Está bien.
Coloqué mis pulgares en sus frentes.
Terniak está muy asustada y llora demasiado. Escuchar su llanto me hace sentir culpable, pero el destino que les daré es el mejor, considerando sus casi nulas opciones.
Nirkat me está devorando con esa expresión de furia. Si no la hubieran obligado a hacer esto sin quejarse ni molestar, me habría intentado atacar. Vaya, vaya, su mirada da demasiado miedo... ¡Es perfecta!
Ambas son perfectas. Una llorona y otra que se niega a tenerme miedo.
—Listo, terminó.
—¿Eh? ¿Y sus marcas de esclavos? No aparecieron.
—Están en sus traseros. ¿Quiere verificarlas?
Esto... Ay... Actúa como Crisfa, Kei. Actúa como Crisfa.
No quiero que piensen que... Bueno, en este mundo, los hombres no son pervertidos, pero no quiero que se sientan humilladas.
No veré sus traseros.
—Nah, así está bien, no tengo tiempo. Vámonos.
Salimos de la tienda y las esclavas nos siguieron.
Bueno, hagamos la prueba. Si son inteligentes, me elegirán, pero si prefieren mantener sus orgullos, son idiotas y no valdrán la pena.
—Bien, esta es la Capital, supongo que la conocen. Fue un placer conocerlas, señoritas. Pueden irse.
—¿Q-qué?- Dijo Terniak, confundida.
—Vayan y disfruten de la libertad.
—¡¿Qué clase de broma es esta?!- Dijo Nirkat, furiosa.
—Escuchen. Las compré porque necesito su ayuda, pero no soy un hijo de perra. No soy un loco desquiciado. No me aprovecharé de ustedes solo porque las compré. Escuchen, si se van, pueden empezar una nueva vida, pero si roban, no tendrán la oportunidad de ser otra vez esclavas criminales. Las matarán si roban de nuevo. Pero si vienen conmigo, les garantizo comida, una casa, amigas y salud. También les daré dinero, para que compren lo que quieran. ¿Aceptan venir conmigo o se irán?
—Tsk. ¿Crees que somos estúpidas?
—¿E-estás hablando en serio? ¿R-realmente podemos irnos?
¿Ves? Deberías tener más fe como tu hermana.
—Claro. Pero consideren lo que les dije. Conmigo tendrán un hogar y comida. Si se van, las personas se aprovecharán de ustedes... Supongo que ya saben a lo que me refiero.
Ambas bajaron la mirada.
Es muy probable que vuelvan a culparlas de algo que no hicieron y terminarán muertas. Ellas saben más que yo que eso es muy posible que pase si se van, y tampoco pueden sobrevivir solas en algún lugar oculto como lo hacían Nem y Mio, pues ellas son muy débiles, incluso los Slimes podrían matarlas.
Su única opción segura es seguirme. Se arriesgan a que solo esté jugando con ellas, pero es la mejor opción que tienen... Entre comillas.
Si se van, tendrán mi protección y les conseguiré un empleo seguro. Contarán con la protección Molfer. Pero no les diré eso porque quiero que vengan conmigo. Arriesgaré sus vidas, pero es por un bien mayor. Espero que, cuando se enteren de lo que hice, sepan comprenderme.
—Yo...
Nirkat endureció su mirada.
—Nosotras nos va...
—¡Hermana!
Terniak tomó de la mano a Nirkat.
—Hermana, él no parece malo. Esas Elfas tampoco nos han mirado con asco. Parecen personas buenas.
Ella no se atreve a decirle que no a su hermana, puedo verlo en sus ojos. Tres posibles futuros en su mente. Se van y mueren, vienen conmigo y mueren porque las engañé, dándoles falsas esperanzas, o vienen conmigo y viven felices, porque resulté ser alguien bueno.
Lamentablemente, si vienen conmigo, habrá un cuarto destino: vivirán, tendrán comida, amigas, un hogar, pero sufrirán mucho por el entrenamiento que les daré. Es por el bien del mundo, y de ustedes, las Elfas oscuras. Todos seremos igual de importantes y poderosos si ganamos. Nadie será mejor que nadie.
—Hermana… Yo... Está bien... Iremos contigo.
—Haz tomado la mejor decisión de tu vida.
Le extiendo mi mano derecha y sonrío.
—Será un placer trabajar contigo.
...
...
...
Ignoró mi mano.
Oye, oye, ¿qué pasa?
—No me toques, inferior.
… ¿Es en serio? Ouch. Eso dolió. Habíamos empezado bien.
¿En serio? ¿Incluso una Elfa Oscura se burla de mí por ser hombre? Incluso entre los considerados inferiores hay clases sociales.
—¡No te burles de...!
Terkiana le tapó la boca a Nerka. Sabía que haría eso. Gracias por la ayuda, Terkiana.
Y gracias por insultarme, Nirkat. ¿Por qué? Porque quiero tener más amigas, no novias.
—¿Inferior? Vaya, vaya... Dime, ¿te enamorarías de alguien como yo? ¿De un inferior?
—¡Puaj!- Dijo, sacando la lengua.
Escupió al suelo.
—¡Que asco! ¡Prefiero morir!
¿Lesbiana o por qué tanto odio? Como sea, me beneficia.
—Ya veo... Fufu.
Sonreí y me acerqué a ella.
—Promete que nunca te enamorarás de mí. Nunca me pedirás salir conmigo. Nunca me besarás. Nunca tendrás relaciones conmigo… Nuestra relación será solamente de amigos. ¿Lo prometes?
—Claro que lo prometo. Será un placer prometerlo. Es más, ordename obedecer esa promesa.
—Nah, no será necesario. Además, no eres mi esclava, no te daré órdenes. ¡Bien, que no se te olvide! Vámonos.
¡Sí! ¡Esto es perfecto! ¡Conseguí nuevas compañeras sin necesidad de enamorarlas! ¡Gracias por ser una chica mala, Nirkat!