¡Comienza la caza!

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—¡Así que son ustedes! —gritó Xiang Kunlun con frialdad.

La expresión de Li Daochen y los otros ocho maestros de secta se oscureció.

Había ocho personas de pie sobre el techo.

Estas ocho personas simplemente estaban allí paradas en silencio, pero desprendían una potente presión.

Obviamente, estas ocho personas no eran gente ordinaria, sino verdaderos expertos.

—Hermano Xiang, ¿quiénes son estos ocho tipos? —preguntó Bujie con curiosidad.

—Estos ocho tipos son los expertos más fuertes de los ocho países en la región sureste. ¡Son todos verdaderos expertos del Reino del Dios Marcial! —dijo Xiang Kunlun con voz profunda.

Ellos eran el Maestro Zen de Canaán, el Rey Antiguo Dorado, el Dios de la Cabeza de Elefante, el Dios de Sabotaje, el Hijo de Dios, el Apóstol de Dios, el Monarca Oscuro Brahma y el Rey de los Espíritus Malignos.