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Rey No Muerto (Español)

Considerado un simple busca pleitos, Oliver ha decidido cambiar su vida para bien. Ahora en su último año de preparatoria desea ser un "Buen chico" para lograr acercarse a la chica cual quiere. Pero un día con sus compañeros y profesora de clases, se encuentran con algo extraño y todo fue oscuridad. Al despertar se encuentra en un lugar oscuro. Al poco tiempo se da cuenta que no tiene piel, órganos, ¡¡NADA!! Sólo huesos. Pues ahora Oliver a reencarnado como un No Muerto dando comienzo a sus aventuras en este extraño mundo de magia, espadas y caballeros. Un viaje que lo llevara a conocer los misterios de este nuevo mundo, y tomando un papel central donde él y sus amigos jugaran con el destino del mundo. Aclaraciones: 1. La imagen utilizada en el fondo de la portada no me pertenece, es propiedad de su respectivo creador o creadores. Su uso sólo fue con fines ilustrativos. 2. Está prohibido copiar, transcribir o alterar el contenido de la novela sin permiso escrito del autor (Chito-sensei/MatParkman17). 3. Está permitida la lectura de la novela y compartirla por redes sociales o algún otro medio de comunicación, siempre y cuando dejen los créditos correspondientes.

MatParkman17 · Fantasía
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14 Chs

Epílogo

Habíamos salidos de la Capital. Nos alejábamos en lo que era un carruaje común, que cualquier comerciante o aventurero podría usar para transportarse entre ciudades.

Somos siete personas en este viaje. Deliz, Rina, Aragor, Héctor que había conseguido el carruaje y Rebbeca. Mientras que Marco se encontraba en la parte del pescante tirando de los caballos, por último, estaba yo.

Yo al ser una noble y Aragor prácticamente el príncipe de Prizma, debemos pasar desapercibidos si no queremos problemas.

Así que ambos estamos vestidos con ropa que cual aventurero podría llevar. Y lo mismo para todos.

—Aun no entiendo— Dijo Rebbeca, ella parecía dirigirse a Aragor — ¿cómo convenciste a tus padres de que dejaran irte, así como así? Y sobre todo, a un reino al cual prácticamente no serias bienvenido.

—Es que porque no saben a dónde me dirijo— Dijo Aragor.

—¡¿Qué?!— Dijo Rebbeca con una clara preocupación en el rostro.

—Profesora— Dijo Aragor —, mis padres son algo sobreprotectores, principalmente mi madre. Así que les dije que iría todo el día a la propiedad de la casa Mandred.

—Y yo les dije a mis padres que iría al Palacio— Dije.

—¡Cabezas de alcornoque!— Dijo Rebbeca molesta —, ¿que no piensan que eso provocará un escándalo en todo el Reino? ¡Mas con el Príncipe Heredero desaparecido!

—Tranquila— Dijo Aragor —, ya arreglé las cosas, para el anochecer una carta llegara a mis padres, donde explico la situación.

—¿En serio?— Dije algo sorprendida, todos lo miramos sorprendidos.

—Sí— Dijo Aragor —, también pedí en la carta que se le notificará a la casa Mandred, que tú estarás conmigo.

—Ya— Dije con mucha más duda —, y ¿qué escribiste?

No creo que Aragor haya escrito sobre el verdadero motivo de nuestra salida. Él simplemente sonrió.

—Me fugue junto a ti— Dijo Aragor conteniendo la risa —, para pasar un par de días de amor juvenil.

—¡¡¿QUÉ?!!— Dije.

Deliz parecía contener la risa. Y me dio la impresión de que Marco también.

—Sencillamente aproveché el rumor sobre nosotros— Dijo Aragor con tono inocente —. Mi padre hizo algo parecido con mi madre cuando estaban comprometidos. Aunque claro, aquella ocasión fue de verdad una fuga de amor juvenil, ahora vamos en busca de Oliver.

—¡Sólo espero esto funcione!— Dijo Rebbeca cruzada de brazos y desesperada incluso parece que le duele la cabeza —, ¿qué hay de los demás?

—Yo le dije a mi padre sobre un negocio— Dijo Héctor —, mientras sea sobre dinero, Padre siempre aceptara mi salidas. Incluso fue así como conseguí este carruaje.

—Yo— Dijo Rina —, bueno... Gracias a Aragor ahora vivo en la capital, y mis padres sólo me visitan el último día de la semana, así que estaré bien.

—Nosotros servimos a la casa Mandred— Dijo Deliz —, así que salir con nuestra ama no sería raro.

—Cierto— Dijo Marco desde el exterior.

—¡Dios!— Dijo Rebbeca —, ¡que todo salga bien! Sólo espero de verdad Oliver siga en esa ciudad.

—¿Que le hace pensar que no estará ahí?— Dije.

—Oliver— Dijo Rebbeca —, no es mentira que fue un chico problema. Siempre iba de un lado al otro, buscando algo emocionante, estoy seguro de que en el momento que se aburra de ese lugar, se marchara para buscar algo nuevo.

—Profesora— Dijo Marco desde fuera —, ¿por qué siempre se ha llevado tan bien con Oliver? Muchos otros profesores incluso agradecían cuando él faltaba a clases. Pero usted, bueno, usted incluso a veces parecía retarlo.

—Oliver— Dijo Rebbeca mirando por la ventana —, era un delincuente, o bueno, un busca pleito que un delincuente, eso le ganó una mala fama en la escuela y en los alrededores. Pero les digo, ese último año, volvió cambiado, ya no era ese chico que se peleaba por lo más mínimo… Un día, otro chico bravucón de segundo año, estaba intimidando a uno de primero. Yo estaba a punto de interferir cuando Oliver apareció y golpeó al bravucón. Ese mismo día surgió el rumor de que Oliver había intimidado a uno de primer año y goleado a uno de segundo. Lo que más me molesto es que los profesores y alumnos creyeron ese rumor por igual. Incluso los otros profesores ni siquiera creyeron cuando les dije lo que verdaderamente había pasado, sólo dijeron que posiblemente "vi mal las cosas". Yo le dije a Oliver que hablara y se defendiera, que hiciera saber que sólo había ayudado, y que sólo estaba intentando defender a otro compañero, pero él... Él sencillamente dijo "Que importa, no es como que alguien me fuera a creerme"… Desde ese día me he esforzado para que Oliver se integrara al salón, para que esa visión de Delincuente desapareciera, pero... Ustedes nunca dieron esa oportunidad. En la mayoría de los casos sencillamente lo excluían, y el claro ejemplo fue ese día en el huerto.

Todos sencillamente guardaron silencio. Rebbeca no había cambiado nada, parecía ser la misma Profesora de siempre.

—Pero— Dijo Rina —, ¿qué fue lo que hizo cambiar a Oliver? Usted dice que después de las vacaciones volvió cambiado. Y bueno… ¿Qué cosa hizo cambiar a alguien que parecía gustar de las peleas? En segundo lo vi pelear una vez contra dos tipos en la calle y bueno… Oliver parecía disfrutar de pelear, ¿Qué le hizo cambiar eso?

—¿Qué más?— Dijo Rebbeca con una sonrisa—. Amor, eso fue lo que le hizo cambiar. Los ojos de Oliver eran los ojos de un chico enamorado.

¿Eh? ¿Enamorado?

—De… — Dije extrañamente sentí un nudo en la garganta —, ¿de quién?

Creo que había comenzado a sudar de la frente. Rebbeca me miró, y ligeramente sonrió. Acaso...

—No lo sé— Dijo Rebbeca nuevamente mirando por la ventana —, intenté hablar con él, pero nunca decía nada de su vida privada... Duro como una piedra. Lo único que sé de él es que su madre fue... Su madre falleció cuando él tenía seis años, y su padre... Ese tipo está prófugo... Creo que se imaginarán que fue lo que pasó. Después de eso... creo que fue su madrina quién se hizo cargo de él, hasta que cumplió los 16, consiguió un empleo de medio tiempo y rentó un pequeño apartamento. Por ese tiempo creo que su fama paso de un simple chico problema a la de un maleante completo.

Nuevamente, todo fue silencio. El único ruido era producido por las ruedas del carruaje y las pezuñas de los dos caballos. Pensé que Oliver habría tenido problemas en su familia, pero nunca algo como eso.

Todos parecíamos pensar lo mismo, sobre lo ocurrido en su familia. Incluso me pareció ver que Marco se limpia los ojos, ¿Lágrimas? ¿estaba llorando?

—¿Como— Dijo Aragor —, ¿cómo llegaremos a Rantel?

—Conozco a un amigo— Dijo Rebbeca —, usará Magia Espacial en nosotros, estaremos en Rantel en un parpadeo.

—Teletransportación— Dijo Deliz ligeramente excitada.

—Sí.

Cerca del mediodía habíamos llegado a una de las ciudades vecina de la Capital. Rebbeca se dirigió a lo que parecía ser una propiedad. Rara vez había salido de la capital, pero no veo mucha diferencia de esta ciudad con la nuestra.

Claro esta ciudad era más pequeña, y se sentía un poco extraño no ver el colosal Palacio de la familia real. Este es otro mundo, un mundo nuevo para explorar, debo admitir sentir un deseo de solo irme a donde el viento me llevase, pero primero estaba Oliver.

—Esperen— Dijo Rebbeca.

Ella subió las escaleras y dio dos toques a la puerta de aquella propiedad. Se abrió para dejar ver a un hombre de unos veintitantos años

—Rebbeca— Dijo hombre —, que bueno volver a verte, la última vez fue algo "excitante".

Eso nos sorprendió, me pareció ver que aquel hombre sujetaba la cintura de Rebbeca de una forma en la que no eran simples amigos.

—En otro momento— Dijo Rebbeca en un susurro, ahí el hombre notó nuestra presencia —, recuerdas el favor que me debes.

—¡Ujum!— Dijo —, sí ¿qué pasa?

—Necesito de tu Magia Espacial— Dijo Rebbeca —, necesito ir a Rantel. La ciudad que está cerca de la Mazmorra Ardiente.

—Wow— Dijo el hombre —, ¿tan lejos? Que te traes entre manos, pequeña.

—Nada que te incumba— Dijo Rebbeca con tono juguetón—, entonces, ¿nos ayudas?

—Uhm...— Dijo el hombre —, bien pasen. Pero recuerda, no te dejaré directamente en la Ciudad, es ilegal entrar a un Reino usando Magia Espacial.

—Sí— Dijo Rebbeca.

Ahora todos estábamos en sótano de la casa aquel hombre. El hombre miró un mapa y luego usó una regla, me pareció que estaba calculando la distancia.

Después usó Magia Espacial. Una luz surgió de la nada, está se expandió formando un rectángulo que brillaba de su perímetro.

El interior era completamente negro.

—Esto los llevará cerca de la ciudad— Dijo —, después sigan el camino de frente y en diez minutos verán la ciudad.

—Okey— Dijo Rebbeca —, gracias, Marcus.

Rebbeca le dio un beso y luego entró en esa cosa, y se perdió en la oscuridad. El hombre nos hizo señales para entrar, así que lo hicimos.

Me dio un poco de miedo, pero lo atravesé, sentí como si me sumergiera en agua, pero esa sensación solo duro unos instantes.

Al abrir los ojos, me encontraba en un lugar a completamente oscuro. Bajo nuestros pies había una plataforma que parecía ser cuarzo.

—Vamos— Dijo Rebbeca —, y tengan mucho cuidado de no caer.

Mire desde el filo de la plataforma, debajo de nosotros, debajo de esa plataforma no había nada, sencillamente un vacío de oscuridad.

—¿Qué pasa si nos caemos?— Dijo Héctor.

—Posiblemente caerás infinitamente hasta que se mueras de hombre o sed— Dijo Rebbeca con ligero tono serio y algo aterrador, ¿acaso intenta asustarnos?—, ¡vamos! Y tengan cuidado.

Ella comenzó a caminar. Todos miramos ese vacío, luego todos fuimos tras Rebbeca.

—Y— Dijo Héctor —, profesora, ese tal Marcus y tú...

—Héctor— Dijo Rebbeca con una voz gélida —, sigue hablando y te golpeó.

—Lo siento— Dijo Héctor.

Eso provocó las risas entre nosotros. Después de una hora caminando nos topamos otra cosa rectangular que brillaba en su perímetro. Parecía el marco brillante de una puerta.

Rebbeca lo atravesó sin dudar. Así que también nosotros, al salir nos topamos con un desierto. No había ni una sola nube a lo lejos, y hacía mucho calor. El último el salir fue Marco, y esa cosa se cerró.

—¡Fue INCREÍBLE!— Dijo Deliz.

—No lo puedo creer— Dijo Aragor —, este lugar se encuentra a semanas de nuestros Reino, y sólo debimos caminar una hora... Debo aprender Magia Espacial.

—Sí— Dijo Rebbeca —, ¡vamos! La ciudad está por allá.

—Cielos— Dijo Rina cubriendo su rostro con su mano, la entendí, el Sol era tan caliente en este lugar — ¿a quién se le ocurre hacer una ciudad en este desierto?

—Oh vamos— Dijo Rebbeca con tono de burla —, este es solo el comienzo del desierto, más al sur esta lo que llaman las Arenas Ardientes, kilómetros y kilómetros de puro desierto, ese lugar, es verdaderamente caliente, esto no es nada, pero si les molesta, bueno, dense prisa.

Luego de diez minutos notamos las murallas de la ciudad. Mientras nos acercábamos, todos pudimos sentir una enorme liberación de magia. Seguidamente se un gran estruendo. A lo lejos podíamos ver que algo había pasado entre aquellas montañas.

—¿Que fue eso?— Dijo Rina algo preocupada.

—Algo malo— Dijo Rebbeca —, tengo entendido que entre esas montañas se encuentra la entrada a la Mazmorra. Será mejor ir a la ciudad, ¡ahora!

Prácticamente corrimos para llegar a la puerta de la ciudad. Las personas habían salido de la ciudad para ver lo que ocurría a lejos. Algunos guardias y civiles estaban sobre la muralla observando.

Algunos corrían entre las calles, principalmente las madres con sus hijos.

—El Gremio— Dijo Rebbeca —, ahí deben saber que está pasando.

Nuevamente corrimos entre las calles hasta llegar al Gremio de Aventureros, algunos empleados se veían muy nerviosos.

Una chica que estaba corriendo, Rebbeca la tomó del brazo para detenerla, la chica nos miró, llevaba puesto el uniforme del Gremio así que es una empleada.

—¿Que está ocurriendo?— Dijo Rebbeca.

La empleada no parecía querer decir nada, pero al notar la placa dorada de Rebbeca, parece haber cambiado de opinión.

—Un grupo de Aventureros fueron a la mazmorra para encargarse de un Vampiro— dijo la empleada con un ligero tono asustado —, entre ellos iba Lord Gager…

Fue cuando la puerta del Gremio se abrió de golpe. Un hombre entró con mucha prisa, de unos 60 años tal vez, con una gran barba y ropa que demostraba ser un Mago y noble al ser de sedas.

Estaba golpeado y sangrante de la cara y del cuerpo. Se me hizo conocido, sentía que ya lo había visto antes, todos en el Gremio lo veían sorprendidos.

—¡UN LICH!— Gritó el hombre —, ¡¡HAY UN LICH EN LA MAZMORRA!!

Y el caos dio comienzo.

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FIN DEL VOLUMEN I

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