¡porque soy una mujer!

Mi nombre es Izuna Ryuya soy un joven adolescente que recientemente ha estado envuelto en una cadena de problemas, que van desde mi familia hasta mi vida escolar, se preguntarán porque repaso todo mi sufrimiento en forma de lista y eso es porque estoy viendo mi turbulenta vida pasar frente a mis ojos, ¿Cuál es el motivo de esto? obvio, porque apenas unos segundos atrás me llene de valor para acabar con mi trágica existencia, mientras las estrellas brillan en el firmamento nocturno, el viento me acaricia la piel y mis pensamientos se vuelven confusos puedo ver el suelo de las calles de una Tokio en un silencio que pondría nervioso a cualquier persona que tuviera la magnífica idea de caminar por las silenciosas calles a la una de la madrugada, todo esto sucede mientras mi cuerpo acelera y avanza para que cada vez más pueda llegar a abrasar mi salvación y anhelada muerte; Durante mi caída al vacío pude observar cómo el tiempo se ralentiza a mi alrededor.

Sorprendido miro a mis costados para observar a un yo momentos antes de saltar desde un quinceavo piso al vacío.

 

- Persona desconocida: Izuna por favor, piensa en las reacciones que tendrán tus padres cuando se enteren de lo que vas a hacer, piensa en Tomo-san tu hermana, piensa en tu mejor amiga Sakura-san y piensa en mí tu mejor amigo Himura, sé que realmente tienes la capacidad de parar esto y lo sé, porque te conozco lo suficientemente bien

 

- Izuna: Himura, sabes lo doloroso que es para mí no saber y comprender cuál es el motivo de mi existencia cada día, desde que hui de mi casa hace tres meses eso es lo que se mantiene constante en mi conciencia; quieres que evite el dolor que mi muerte provocara en mi "supuesta familia y amigos", aquellas personas que me arrinconaron hasta provocar esta misma situación

 

- Himura: Izuna, por favor no termines la llamada, tú eres consciente que no te encuentras bien, dime donde estás para ir a buscarte, para que puedas confrontar esta situación y empezar desde cero, es como hacer un borrón y cuenta nueva a tu vida ¿no crees?

 

Mis pensamientos se nublaron, y de un momento a otro de forma inconsciente empecé a llorar, creo que esto alerto a Himura, porque este me pregunto si todo se encontraba bien, mis últimas palabras fueron " dile a mis padres que los perdono, que vivan con orgullo de ellos mismos, que por muy doloroso que pueda llegar a ser el presente tarde o temprano tendrán que enfrentarlo, dile a mi hermana que sea feliz y que me perdone por no acompañarla y dejarla sola", en ese momento termine la llamada con mi mejor amigo de toda la vida.

 

Regresamos al presente y podemos observar cómo me desintegro cual fantasma después de ser liberado o algo así, de la nada observe como una ambulancia aparecía de la nada, llenando el pacífico, pero ensordecedor silencio que había en ese momento con el aterrador sonido de las sirenas, demostrando que alguien había sido herido o se había lastimado, en ese momento observe al paramédico gritar a su compañero

 

- Paramédico 1: trae el desfibrilador de inmediato.

 

 después de tan duras palabras para su compañero el dirigió su mano hacia su hombro izquierdo para utilizar el pequeño intercomunicador que llevaba consigo para después 

 

- paramédico 1: central tenemos a un joven de aproximadamente quince años, cabello negro, ojos de color azul claro, una estatura aproximadamente de un metro ochenta centímetros de altura, tez pálida que posiblemente salto desde uno de los pisos superiores de un edifico en una de las zonas de departamentos, procederemos a utilizar el desfibrilador para después transportarlo a el hospital más cercano, cambio.

 

- Central: está bien, has el procedimiento que te parezca acertado, pero con la información que nos has dado no podremos identificar al joven, verifica su nombre por favor para alertar a sus familiares del incidente.

 

- Paramédico 1: está bien, el nombre que hay en su identificación es Izuna Ryuya, contacta a sus padres mientras nos dirigimos a el hospital después de realizar el proceso de reanimación, cambio y fuera.

 

Después de esa breve conversación pude observar el proceso que habían mencionado anteriormente, de la nada empecé a desintegrarme otra vez, me di cuenta de esto porque la sensación que produce es familiar a la de varias espadas cortando y separando trozos de mi cuerpo, aunque no se bien realmente que se siente ser cortado vivo puesto que eso fue lo primero que se me vino a la cabeza, vi una luz cegadora y después vi cómo me transportaban en una camilla de hospital hacia un quirófano, bueno eso supongo no lo sabía con certeza ya que me encontraba cegado y encima boca abajo sin poder mover un musculo, de la nada y sin previo aviso me quede en negro y escuche un ruido extraño, no pude identificar realmente lo que era.

 

- Voz desconocida: Izumi, abre la puerta no tienes a donde ir, ya hemos dejado a alguien en cada lugar al que asistes recurrentemente, tu trabajo a medio tiempo, el centro comercial, los arcades e incluso acá en tu casa, sal por favor ya has jugado demasiado hacer libre e independiente y lo peor, maltratar a tu familia con palabras hirientes y amenazas de suicidio entiende que ya perdiste y no puedes seguir huyendo de nosotros, así que sal ya y ven con nosotros porque sabemos que estas acá.

 

En ese momento simplemente me sorprendí y las sensaciones desagradables desaparecieron por la sorpresa, que es lo que está pasando, no estaba ¿muerto?, ¿Dónde estoy y quien es esa tal Izumi?, solo fueron algunas de las preguntas que pasaron por mi desordena cabeza, de la nada mi cuerpo se sintió más pesado, mi pecho se sentía extraño y me dolía la espalda, también alcance a reconocer el roce del cabello con mi cuerpo semi desnudo, lo que más me sorprendió fue mi voz y no el hecho de que estaba vestido con una simple camisa larga que me llegaba sorpresivamente hasta las rodillas, regresando a mi voz era suave, melódica, cálida era realmente completamente distinta a mis voz grave, profunda y triste, es más puedo afirmar con seguridad que la voz femenina es alegre, ¿Dónde estoy? Esa fue la siguiente duda que me lleno la mente en ese momento porque lo que recuerdo es una habitación blanca y muy ruidosa, así que me la levanté de la cama en la que estaba y me moví hacia un misterioso espejo que yo no tenía en mi habitación en el conjunto de apartamentos en el que había estado viviendo durante los últimos tres meses después de la fuga de mi hogar, lo que vi me dejo sin palabras es más diría que me aturdió porque enfrente de mí, reflejado en el espejo se podía apreciar la vista de una hermosa chica de una estatura aproximada de un metro setenta y cinco centímetros de altura, cabellera rubia y larga que le llegaba hasta la parte baja de la espalda, ojos de color azul claro que misteriosamente estaban oscurecidos y piel blanca, tiene pechos bastante grandes para la edad que suponía que tenía, sus dientes eran afilados pero sin exagerar tenía una compleción la cual no era ni muy atlética pero tampoco poco atlética era como un punto medio bastante promedio, regresando en mí solo pude hacer una cosa y fue… gritar y caer de espaldas contra el suelo porque mágicamente había un sostén tirado en el piso el ruido que provoco mi tropiezo alerto a la persona que se encontraba fuera de lo que suponía era mi apartamento, lentamente me levante del suelo mientras guardaba silencio y empezaba a divagar y a sacar conclusiones precipitadas de mi extraña situación, lo primero que hice después de estar de pie fue buscar mi teléfono porque pensé estaba en el escritorio de la sala, al llegar me di cuenta de que efectivamente estaba en ese lugar, cuando lo tome me sorprendió lo que halle en él.

 

Tenía una galería vacía lo que era completamente diferente a mis chats de line los cuales estaban a reventar de llamadas perdidas de ¿mama, papa, hermana menor, Sakura, Awa-chan espera quien es Awa-chan? La puerta sonó de repente otra vez 

 

- Voz desconocida: Izumi soy yo, tomo-san tu hermana menor, he venido a por ti con la ayuda de sakura-san y awa-chan, por favor sal y hablemos antes de que papa y mama se den cuenta de tu ubicación y vengan por ti dispuestos a usar la fuerza

 

Eso fue bastante sorprendente, porque realmente me estaban hablando ya que no había nadie más en el departamento, entonces lo que hice fue llenarme de coraje para hablar y decir que esa tal Izumi no se encontraba en estos momentos, esa fue la única idea que se me ocurrió en ese momento, regrese a la habitación donde estaba inicialmente y me enfoque en encontrar algo realmente útil como por ejemplo unos pantalones, eso no fue tarea difícil también me puse buso de color blanco que se encontraba tirado en el suelo con las iniciales I y la R, supuse que eran las iniciales de mi nombre claro Izuna Ryuya no podía ser nada más, así que me dirigí hacia la puerta trate de ocultar mis nervios y la empuje hacia dentro lentamente al mirar hacia fuera me sorprendí bastante porque delante de mí estaba mi hermana menor por un mes, su nombre era Tomo Ryuya y media un metro sesenta y nueve, cabello negro como mis padres atado en una coleta doble, ojos azules claro como los míos y tono de voz autoritario, ella era la descripción de una belleza tradicional japonesa.

 

- Tomo: ¡hermana...u ¿estas bien? Pareces estar mal, te ¿lastimaste? 

 

Cuando su voz resonó en mi cabeza me puse nervioso o ahora es ¿nerviosa?No lo sé realmente esta situación me confunde demasiado 

 

- Izumi: ha, hola, lo siento no sé quién eres, pero si estas buscando a Izumi no está, salió esta mañana y no ha regresado

 

 

 Pensé que si decía eso podría despistar a mi hermana, pero creo que solo la hice enfadar más de lo que ya aparentaba 

 

- Tomo: ¡que mierda dices de la nada! ¿Te golpeaste la cabeza? O es una broma, porque si la es para, deja de actuar y ven conmigo

 

Esa afirmación es bastante acertada de hecho, pero creo que no está funcionando mi mediocre actuación, rayos esto es malo si las cosas continúan de esta manera lo más probable es que terminemos peleando y todo podría tornarse más complicado a la hora de obtener información sobre mi estado o mi situación actual en este lugar, así que lo mejor que puedo hacer es … ¿Qué hago? es la primera vez en mi vida en la que me despierto después de morir como una mujer, ha, esa fue la reacción a mi situación actual, reírme internamente y suspirar, entonces procedí inventar una historia barata que cuadre con la situación actual y con un poco de suerte ¡bingo! Podre zafarme de lo que está ocurriendo

 

- Izumi: comprendo que no quieras creerme, pero sinceramente me gustaría que me entendieras o como mínimo me dejaras explicarte que es lo que sucede, me llamo… he…mi nombre es ¡Rika! Si ese es mi nombre y tu hermana me dejo quedarme en su casa ya que tuve problemas con mi madre

 

El silencio entre las dos fue intenso, mientras que por un lado yo estaba nervioso y hecho un manojo de nervios mi hermana simplemente suspiro y me dio una mirada que cortaría el viento, para después simplemente apretar el puño varias veces

 

- Tomo: pensé que mi hermana había cambiado después del incidente sobre la escuela, pero realmente solo se dio a la locura y ahora finge no saber nada sobre mi o sobre sí misma, ¡CON UN CARAJO ¡Eres una hipócrita que cree que los demás tienen la culpa, si no sales le diré a nuestros padres donde te encuentras para que puedan sacarte de este lugar y puedas regresar a ser tu misma otra vez lo entiendes

 

 

Su tono de voz se tornó agresivo y su respiración se aceleró, por otro lado, yo me enoje y empecé a maldecir mentalmente mi suerte de mierda y la estúpida situación en la que me encontraba, era frustrante y desesperante, lo peor era que mi hermana realmente pensaba que era mujer… creo que lo mejor es cerrar la puerta y esperar a que desista en arrastrarme de nuevo a la casa de mis padres o ir con ella ¿Cuál es la mejor opción? Al final creo que terminare en el mimo lugar por ende mejor le digo que entre y me espere en la sala de mi departamento mientras lleno una de las maletas que vi en el armario principal de mi habitación, lo cual es diferente del armario que recuerdo porque el mío tenía una guitarra eléctrica y una acústica en lugar de las dos maletas que hay ahora; Suspiro por lo que estoy pensado y sacudo mi cabeza en negativa para cambiar mis pensamientos

 

- Izumi: si, tienes razón cuando dices que he actuado de manera inmadura, así que iré contigo de regreso a casa de nuestros padres, pero antes tengo que empacar lo que necesito antes de irnos, ¿vale? 

 

- Tomo: fuu, creo al final si entiendes lo hipócrita que eras tan solo un par de segundos atrás ¿no crees? Hermana 

 

- Izumi: claro, primero avisa a todos los que me están buscando y después espérame, por cierto, tendrás que esperar un poco más de dos horas ¿está bien eso?

 

- Tomo: si, está bien

 

Yo la mire silenciosamente y después de uno o dos segundos le permití entrar a lo que era mi casa actualmente y la que pronto ya no sería más; Después de que ella cruzara la puerta voltee a ver los alrededores para comprobar que si había venido sola, un fuerte ruido me saco de mis pensamientos, tal sorpresa me hizo chillar una palabra femenina "kyaaa" era algo que nunca imagine que pronunciaría, sentí una mirada de reojo que venía detrás de mí, al voltear a ver me percate de que mi hermana se estaba burlando de mí, ya que el objeto que hizo ese fuerte sonido fue uno de los paraguas que se encontraban al lado izquierdo de la puerta, lentamente sentí como mi rostro se calentaba cada vez más que el silencio perduraba en la atmosfera de la habitación 

 

- Tomo: vaya, nunca pensé que vería a mi hermana, "la supuesta chica mala" convertida en una colegiala con miedo a los ruidos fuertes

 

Maldita sea, nunca dejara de rememorar este dichoso momento, eso era lo que mis nervios me decían al verla reír tan burlonamente 

 

- Izumi: sabes, los médicos también enferman y eso es inevitable, así que siéntate y no toques nada que te llame la atención sin antes preguntar ¿bueno? 

 

- Tomo: claro, claro como digas 

 

 Cuando la vi alejarse al sofá de verdad me sentí aliviada, porque la actitud que supuse que mi yo femenino tendría no ha sido criticada, también me alivie porque ya no se estaban riendo de mí, todo se calmo y regreso a la normalidad, procedí a buscar ropa cómoda a mi habitación para después bañarme, la ropa que me llamo la atención fue un buso de color negro con el kanji para fuego escrito en la espalda que no tenía capucha además de que el cuello lo cubría completamente y el cierre resaltaba ya que era de color azul y combinaba con mis ojos y cabello, para la parte inferior elegí un blue jean de color negro ajustado que marcaba bastante bien mis muslos sin llegar a ser erótico o pervertido, ¡espera! ¿En qué momento me empecé a esforzar para que todo combinara y se viera bien? Seguramente todo es por el cambio repentino de género, ya que todo lo que hice y pensé fue en automático pero que mas da, al final creo que tendré que vivir mi vida como mujer y para eso debería empezar a acostúmbrame es esta clase de cosas.

 

La camisa que escogí para la parte interna fue de color negra y de mangas largas y para finalizar escogí un sostén de color azul claro al igual que mis bragas, en ese momento me acorde que debo empacar todo lo que importe en mi maleta mas grande y en mi mochila, así que eso fue lo que hice, seleccione la ropa que me gusto y la guarde, me pregunto porque cada vez que miraba al estante donde tenia el maquillaje me sentía alegre o medaba el impulso de querer usarlo y llevarlo conmigo, así que me decante a llevarlo también, en mi mochila guarde mi computadora portátil, mis cargadores, mis audiófonos y mi extendo portátil y nada más.

 

Después de terminar en la habitación me dirigí al baño y puse la ropa que había seleccionado encima de la tapa del escusado, para proceder a quitarme la ropa y mirarme en el espejo, extrañamente no me ruboricé o me puse nerviosa, estoy segura que fue el hecho de que era mi propio cuerpo y no el de alguien más, entre en la tina y me relaje por unos quince minutos, después de eso me seque utilizando la toalla que ya había en el baño para que al finalizar me pudiera vestir sin ningún problema, tenia maquillaje en el baño, eso me llamo la atención, ¿entonces porque no usarlo? Y al final también me maquille.

 

Use el secador de cabello y Sali finalmente del baño, fui por las maletas a mi habitación, las tome y camine hacia donde mi hermana se encontraba, cuando finalmente la vi pude observar cómo se había quedado dormida en el mueble que tenía mi departamento, me parecía linda en el buen sentido, suavemente la balancee de izquierda a derecha y lentamente ella abrió los ojos para después mirarme con incertidumbre y estirase en el sofá.

 

- Tomo: ¿Por qué tardaste tanto?

 

- Izumi: porque tenía que organizar mis cosas en la maleta que tengo para poder irme de mi apartamento cómodamente

 

- Tomo: esta bien, ven te abro la puerta

 

Yo la mire y después de unos segundos asentí para que ella se moviera rápidamente hacia la puerta para abrirla, yo la seguí hacia la misma mientras caminaba mas despacio que ella ya que yo tenia una maleta y mi mochila, al parecer ella estaba de buen humor a diferencia de cuando llego, cuando ella abrió la puerta y la luz me cegó los ojos ya que el sol me dio directo en el rostro, mire un día con un sol irradiante de energía, los sonidos me llegaron momentos después de que empecé a caminar con mi hermana por el largo pasillo hacia el ascensor que estaba al final del pasillo, mientras lo hacía, pude ver a las personas caminando, a los oficinistas, a las madres cabeza de familia llevando sus bolsas mientras caminaban apresuradamente a sus casas, eso me sorprendió bastante ya que aparentemente el día era más hermoso y cálido de lo usual en Tokio, al llegar al ascensor, tuvimos que esperar a que este subiera hacia el piso en el que nos encontrábamos, alguien me movió el hombro izquierdo y me saco de mis pensamientos

 

- Tomo: oye, estas muy extraña desde que llegue, debe ser la tensión que sientes en estos momentos ¿no?

 

- Izumi: que…yo estoy bien, solamente pensé que hoy era un bonito día a pesar de todo

 

- Tomo: ¿a pesar de todo?, bueno, creo eso se debe ha que la debes haber pasado bastante mal sola durante estos meses

 

- Izumi: bueno, yo solo digo, pero de igual manera vámonos que ya llego el ascensor y yo quiero llegar rápido y sin complicaciones

 

Ella asintió con la cabeza y simplemente siguió caminando al lado mío, hubo un incómodo silencio entre nosotras ya o sabíamos de que hablar con la otra en ese momento; al llegar al primer piso las puertas del ascensor se abrieron y dejaron a la vista varias personas caminando hacia la puerta del conjunto de apartamentos, lo cual tuvo un gran peso en mi ya que al final si salía por esa puerta su ser cambiaria para nunca ser el mismo, aprete con fuerza la maleta que estaba llevando en mi mano derecha y camine hacia la luz que marcaria el cambio.