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EL INICIO 3

La serpiente gigante observaba detenidamente, con sus ojo penetrantes fijos sobre Naruto, el cual estaba recostado en un árbol tratado de recuperar fuerza tras el golpe que la serpiente la había dado, y a pesar del dolor que sentía, el rubio podía sentir su determinación de no rendirse floreciendo sobre él, y a pesar de la mirada penetrante de aquella serpiente gigante no quería vacilar ni por un segundo.

"¿y ahora qué piensas hacer?", preguntó aquella voz que seguía sonando en su cabeza.

"No lo sé, pero no quiero ni pienso dejar que esa estúpida serpiente me coma", dijo Naruto con clara determinación en sus ojos.

"jajajajaja", aquella voz comenzó a reírse sin parar.

Naruto ante la risa de la voz en su cabeza frunció el ceño. "de que te ríes", preguntó indignado al sentir que la voz de su cabeza lo estaba tomando de broma.

"solo que me parece gracioso que digas cosas como esas, sabiendo que en tu estado actual no podrías ganarle", mencionó la voz al terminar de reír. "pero te voy a ayudar por respeto a esa determinación".

Naruto quedó confundido por la ayuda que le ofrecía la voz, sabía que gracias a ella había podido esquivar algunos ataques de la serpiente, pero eso fue anteriormente, y a pesar de su determinación, no podía dejar de lado el dolor persistente de su cuerpo. Pero esos pensamientos fueron cortados cuando de repente Naruto sintió que su cuerpo le comenzaba a arder, y a su vez también sentía que un extraño poder recorría todo su cuerpo en un instante.

"Que es esto", se preguntó el rubio ante la oleada de poder que se le había dado.

"Eso es una porción de mi chakra. Aprovecha su poder y salgamos de aquí", le dijo la voz al rubio.

Con un movimiento rápido, la serpiente gigante se abalanzó hacia naruto, pero este reaccionó rápidamente, usando el nuevo poder y la guía de aquella voz en su cabeza para esquivar los movimientos de la serpiente y contraatacando con sus propios movimientos que iban cargado de la suficiente fuerza como para estremecer a la serpiente, luego para enzarzarse en una feroz batalla, donde a pesar de la probabilidades naruto quería salir victorioso.

Mientras la pelea continuaba, Naruto podía sentir que la mirada de la serpiente nunca lo abandonaba. Era como si la serpiente gigante estuviera estudiando cada uno de sus movimientos, tratando de anticipar su próximo ataque. Pero Naruto estaba haciendo gran uso del poder que le habían prestado, moviéndose ágilmente por los árboles y la tierra evitaba los ataques, mientras que en sus contra ataques dejaba pequeños cortes por todo el cuerpo de la serpiente.

"Mocoso, tu cuerpo está llegando a su límite. Así que tienes que terminar con la serpiente ya mismo", le dijo la voz a Naruto.

"entendido", dijo Naruto mientras se seguía moviendo para evitar los ataques.

Naruto trató de enfocarse más en sus ataques, ya con el contador en contra quería terminar la pelea con la serpiente lo más rápido posible ya que no quería saber qué le pasaría a su cuerpo después de que se le fuera el poder que le prestaron. Teniendo en cuenta eso Naruto se arrojó con todo lo que tenía, dando golpes, patadas y en ocasiones haciendo pequeños cortes con el kunai al cuerpo de la serpiente. Pero a pesar de sus intentos la serpiente aun no caía derrotada, y en un descuido, Naruto fue golpeado fuertemente por la cola de la serpiente, enviándolo a rodar por el piso perdiendo el kunai que tenía en el proceso.

Después de unos momentos cortos Naruto se levantó mientras fruncía el ceño, sintiendo las consecuencias del poder prestado.

"Estúpida serpiente, parece que no muere con nada", mencionó Naruto irritado.

Y dándose cuenta que ya no tenía el kunai, Naruto comenzó a buscar rápidamente otra arma que le ayudará a seguir haciéndole daño a la serpiente. Pero la búsqueda se le estaba complicando debido a que la serpiente no dejaba de atacar en ningún momento, pero después de un rato Naruto logró visualizar una lanza que sobresalía de un arbusto, y escuchando el plan de aquella voz, corrió velozmente para tomar la lanza. Seguido por la serpiente de muy cerca Naruto hizo una maniobra, tomando impulso de un árbol salto y al caer clavo con todas sus fuerza la lanza en el ojo derecho de la serpiente. 

 Naruto luchó por empujar la lanza más profundo en el ojo de la serpiente, hasta que finalmente, después de una larga y agotadora batalla, Naruto salió victorioso. La serpiente gigante yacía derrotada a sus pies, con su enorme cuerpo retorciéndose de dolor.

Pero después de haberse calmado de la adrenalina de la batalla, Naruto no pudo sentirse triunfante, en cambio lo que sentía era tristeza por la gran criatura que tenía frente a él. Y Mientras miraba a los ojos de la serpiente, Naruto vio un destello de comprensión y respeto. Fue como si La Serpiente Gigante reconociera la fuerza y el coraje del pequeño rubio e inclinó la cabeza en señal de derrota.

Al observar que la serpiente había muerto, Naruto se propuso a salir del bosque de la muerte, pero apenas dio unos cuantos pasos cayó de rodilla, completamente agotados por el uso del poder que le habían prestado, pero a pesar de la protesta de su cuerpo al moverse, Naruto se levantó con gran esfuerzo y comenzó a caminar lentamente en busca de la salida.

Durante su caminata por el bosque, naruto comenzó a sentirse cada vez más cansado, la protesta de su cuerpo por el dolor ya se había vuelto insoportable, y para cuando por fin logró visualizar la salida, su cuerpo y mente llegaron a su límite, haciendo que naruto cayera desmayado.

Al abrir los ojos naruto se encontró en una gran habitación algo parecido a un alcantarillado, podía sentir como el agua de aquel lugar lo envolvía mientras estaba acostado en lo que sería el piso de esa habitación. Pero a pesar de la apariencia de aquel lugar Naruto no pudo dejar de pensar que era igual a la que había visto en sus pesadillas.

"Veo que mi carcelero vino a visitarme", mencionó aquella voz que había estado ayudando a Naruto.

El pequeño rubio salto de la sorpresa de que aquella voz que antes escuchaba como una entidad muy profunda en su mente, ahora se escuchaba más fuerte y clara, así como si estuviera a pocos pasos de él. Pero cuando trato de buscar con la vista de dónde provenía la voz, no pudo encontrar nada más que una gigantesca reja.

"¿Quién eres?", Naruto preguntó temerosamente.

"Digamos que soy tu inquilino no deseado", contestó aquella voz con un tono casi espeluznante, el cual hizo que Naruto sintiera un escalofrío subir por su espalda.

A pesar del miedo evidente que Naruto estaba sintiendo, tragó fuertemente y se armó de valor para seguir averiguando el por qué esa voz lo estaba ayudando, o porque aparentemente lo había llevado hasta ese lugar.

"¿dónde estoy?. Y a qué te refieres, cuando dices que eres mi inquilino", Naruto preguntó valientemente.

"eso es muy sencillo de explicar. Yo habito dentro de ti, o para ser más específico, estoy sellado dentro de ti", respondió aquella voz.

Naruto quedó sorprendido al escuchar la respuesta que había dado aquella voz que antes estaba sonando en su cabeza. "¿cómo sería posible que sellaran a alguien en él?", se preguntaba Naruto, entonces fue cuando recordó que en la gran reja que dividía aquel lugar había un papel que decía sello, y sin pensarlo comenzó a caminar en dirección a la reja.

"¿Por qué encerraron a una persona dentro de mí?", preguntó naruto, ya seguro que la voz provenía del otro lado de la reja.

"hace unos años atrás, un sujeto me controló gracias a sus ojos especiales, y contra mi voluntad me hizo causar algunos destrozos. Pero cuando por fin salí del control de ese sujeto había causado mucho daño y sin darme cuenta ya me encontraba en este lugar", respondió con desdén.

Ahora más intrigado que nunca, naruto no sabía cómo sentirse por la noticia que le dieron, por un lado sentía rabia por la persona que sello a esa persona dentro de él, pero por otro lado no podía dejar de sentirse mal por lo que le había pasado a la persona que estaba sellada dentro de él. 

"¿no deberías estar enojado?", preguntó temeroso el rubio

"en un principio si estaba furioso, pero después fue algo que acepte", respondió con pesar aquella voz.

Con cada respuesta que le daban a Naruto, este se sentía mal por aquella voz. Que tan mal deberías estar para aceptar que estarías encerrado en contra de tu voluntad, en un lugar donde ni siquiera tienes el control.

"Por qué me ayudaste, si soy tu carcelero. No serías libre si me pasara algo".

La voz no dijo nada, por unos cuantos segundos, era como si estuviera meditando la pregunta de Naruto.

 "Hay tres razones por las cuales te ayudo. La primera es porque logró empatizar contigo y odio como esa estúpida gente te trata. La segunda es porque si tú mueres yo también moriría. Y la tercera te la diré a su debido tiempo".

Naruto quedo sin palabra por las declaraciones que le había dado aquella voz, él sabía que por el odio que le tenía los ciudadanos eran contadas las personas que lo apreciaban o simpatizaban con él, y saber que aquella voz, la que a su pensar debería odiarlo más que nada, solo podía verlo con simpatía, y eso fue algo que hizo que el rubio sintiera alegría.

"y ahora porque tienes esa estúpida sonrisa", mencionó aquella voz al ver la sonrisa que se había formado en el rostro de Naruto.

"Nada, solo me imaginaba que me odiarías por ser la prisión que te mantiene encerrado", dijo Naruto sin perder la sonrisa que se le había formado en su cara.

"no me compares con esos estúpidos ciudadanos de esa aldea tuya". dijo con tono indignado aquella voz.

"lo siento, no fue mi intención", Naruto se disculpó rápidamente, ya que no era su intención comparar a la gente de konoha con el dueño de aquélla voz.

El silencio cayó en aquella habitación, y así había durado por un largo rato, hasta que el rubio lo rompió. "¿entonces este lugar es mi interior?", preguntó curioso Naruto mientras miraba a su alrededor. 

"eso es correcto", afirmó aquella voz.

"pero no debería haber huesos, órganos o algo por el estilo en alguna parte" 

Aquella voz no pudo evitar soltar un suspiro ante la persistencia de las preguntas del rubio. Había pensado que el pequeño niño era lo suficientemente inteligente para entender cuando dijo que estaban dentro de él. "no podrás ver nada de eso aquí debido a que estamos en tu subconsciente ".

Naruto solo asintió ante la explicación que le había dado la voz, para luego quedarse callado por otro rato. Pero otra vez quiso hacer otra pregunta, esa la que había estado rondando por su mente cuando se despertaba de las pesadillas de aquella noche de su cumpleaños.

"te puedo hacer una última pregunta", preguntó el pequeño rubio temeroso.

"¿no te cansas de hacer preguntas?", pregunto de vuelta aquella voz con un tono irritado.

"Lo siento, pero de verdad necesito saber que pasó aquella noche", mencionó Naruto con un toque de desesperación en su tono.

"¿Quieres saber si todo lo que ves en tus sueños es verdad?, ¿cierto?" 

Naruto solo se quedó callado mientras asentía, era como si supiera que el dueño de aquella voz de alguna manera lo estuviera viendo.

"si, todas las imágenes que ves cuando duermes son reales", respondió la voz.

"Entonces yo maté a ese hombre", preguntó Naruto, el pánico se estaba apoderando de su cuerpo.

"cálmate mocoso", exclamó la voz. "A pesar de que en tus sueños ves que lo mataste tú, en realidad las cosas fueron algo distintas".

Naruto quedó confundido por la explicación que le estaba dando aquella voz, no sabía a qué se refería. 

"¿como que distinta?, no entiendo", mencionó el rubio.

Sin saber cómo explicar los acontecimientos de aquella noche, la voz se quedó en silencio por unos cuantos segundos. Pero al no encontrar la mejor forma de explicarle al rubio lo que pasó esa noche, decidió contarle todo lo que pasó durante los momentos que había tomado el control del cuerpo de él.

Tiempo después Naruto había escuchado todo el relato de los acontecimientos de aquella noche, sobra decir que el rubio estaba asombrado, nunca creería que pudieran tomar el control de su cuerpo para ayudarlo. Naruto entendió que a pesar de que en sus sueños se veía a él pelear y matar, solo era el dueño de aquella voz ayudándolo a defenderse, dándole su merecido aquellos que le estaban haciendo daño. Le desagradaba la idea de que acabaran con la vida de alguien, pero entendió que en la situación, era de él o ellos.

"gracias por haberme ayudado", mencionó el rubio agradecido.

Pero a pesar de lo agradecido que estaba, Naruto no pudo evitar estar un poco temeroso por las reacciones que tendrían los ciudadanos de la aldea al enterarse de la noticia de que prácticamente había matado a un ninja. También tenía el presentimiento de que buscarían tomar represalias contra él.

"Mocoso será mejor que dejes de estar teniéndole miedo a esos miserables ciudadanos", mencionó aquella voz, dejando ver que podía ver a través de las emociones de Naruto.

"es que no sé qué debería hacer para defenderme contra los que quieran hacerme daño", respondió un poco avergonzado.

"mocoso, tú tienes que ser idiota, ¿verdad?", pregunto con un tono irritado aquella voz.

"claro que no lo soy", Naruto respondió indignado por el insulto.

"¿entonces a qué viniste a este bosque.? ¿No fue para volverte más fuerte? ".

Tras las palabras de aquella voz, Naruto recordó la razón por la que había entrado al bosque de la muerte. El quería a hacerse fuerte para que pudiera defenderse de todos los que alguna vez quisieran hacerle daño.

"tienes razón, yo vine para ser el más fuerte de todos", mencionó el rubio con una convicción implacable.

"Espero que sea así mocoso, y estaré dispuesto a ayudarte", mencionó aquella voz 

"de verdad muchas gracias por lo que estás haciendo por mí", mencionó Naruto con gran alegría.

"Todo sea para no salvarte nuevamente el trasero", dijo aquella voz, pero a pesar de las palabras no se sentía ni una pizca de desdén en su tono.

Naruto a pesar de las palabras dichas por aquella voz no se dejó desanimar, ya había mucha gente despreciándolo, dándole discursos de odio y otras cosas más, y en su mente se había grabado las diferentes emociones de rechazo, odio o emociones similares, pero el tono de aquella voz de alguna manera no se sentía como esas emociones, si no como de burla y aprecio. 

"A pesar que me has ayudado no sé cómo te llamas", mencionó apenado el rubio, aquella voz lo había ayudado en dos ocasiones, y quería saber el nombre del dueño de aquella voz. Después de todo él ya estaba considerándolo un amigo.

Aquella voz no mencionó nada durante unos segundos, era como si estuviera meditando las palabras que había dicho Naruto. "me llamo Kurama", habló la voz después de un rato.

"un gusto kurama, yo soy Naruto uzumaki, y es un gusto poder ser tu amigo", exclamó el pequeño rubio, la alegría era palpable en su rostro.

"aún no soy tu amigo", mencionó kurama un poco irritado

"pero lo podemos llegar a ser, después de todo me has ayudado dos veces, y me gustaría ayudarte a ser libre ", le menciono Naruto a kurama.

Kurama se había quedado callado por las palabras de Naruto, era la primera vez en los muchos siglos de vida que tenía, que alguien le ofrecía ayudarlo para ser libre, y solo por ese hecho aquel niño se había ganado algo de respecto de su parte.

"será mejor que te prepares porque afuera ya está amaneciendo", mencionó kurama haciendo como si no le hubiera prestado atención a las palabra dichas por Naruto.

"¿Cómo está amaneciendo?. Si aquí ni siquiera se puede ver el sol", mencionó un poco dudoso Naruto.

"estamos en tu espacio mental, por lo tanto el tiempo corre más lento", respondió casualmente kurama.

"Ya entiendo", respondió afirmativamente Naruto al entender la explicación que le había dado Kurama.

Un mes después:

Ya había pasado un tiempo, Naruto se encontraba caminando tranquilamente por las calles de konoha, hasta hace unos minutos se encontraba en ichiraku ramen hablando con teuchi ojisan y su hija ayame. Desde los acontecimientos del bosque de la muerte, Naruto había ido seguidamente a entrenar bajo la guía de kurama. el rubio había tenido los días más agotadores de su corta vida, pero a pesar de lo duro que entrenaba, se sentía satisfecho por lo fuerte que se sentía.

Tenía que agradecerle a kurama por la ayuda que le había estado dando, aunque naruto no sabía cómo darle las gracias, debido a que a pesar del tiempo que había estado hablando con él, este solo se limitaba a cuando entrenaban, del resto parecía que kurama dormía todo el tiempo y cuando lo levantaba fuera del horario de entrenamiento se ponía gruñón. Naruto pensaba que kurama era algo así como un ermitaño cascarrabias.

"oye, kurama cuando me vas a enseñar ninjutsu", Naruto le preguntó mentalmente a su inquilino mientras llegaba al bosque de la muerte. 

Esa era la zona de entrenamiento preferida de naruto, el tamaño que tenía era grande para hacer cualquier tipo de entrenamiento físico, desde ejercicios básicos, hasta correr por alrededor del campo de entrenamiento, sin contar que desde que había vencido aquella serpiente, muchos animales pequeño se enfrentaban a él, aunque decir pequeño sería una falacia, ya que naruto le decía pequeño por que los comparaba con la serpiente gigante, pero en realidad eran de un tamaño considerablemente grande. Pero gracias a que a kurama se le ocurrió la idea de que aprovechara los ataques de esos animales como parte del entrenamiento, Naruto había mejorado en su agilidad y experiencia en el combate.

"apenas sabes escapar de las bestias que se encuentran aquí. Recuerda que primero tienes que aprender a caminar antes de correr", Kurama respondió a la pregunta que le había hecho el pequeño rubio.

"si me enseñaras algunos jutsus, podría vencerlos con mucha facilidad", Naruto respondió mientras hacía un puchero ante la negativa de kurama.

"lo dudo mocoso", la burla era evidente en el tono de kurama.

"muy gracioso. No sabía que fueras comediante, viejo estúpido", Con una cara de disgusto naruto alzo un puño al aire tratando de amenazar a la voz en su cabeza.

"cállate, estúpido mocoso irrespetuoso. Acaso no sabes a quien le hablas así, soy un ser súper poderoso", la voz de kurama sonó con furia en la cabeza de Naruto.

Ante la afirmación de kurama, Naruto solo puso una cara de póker, "si, como tú digas", dijo Naruto disgustado ante la diatriba de kurama.

Sin decir más nada kurama solo soltó un gruñido, y dejó que el rubio continuará con su camino en completo silencio.

Con un rostro en blanco naruto continuó caminando para llegar al claro donde siempre entrenaba, sabía que a pesar del gruñido de kurama, en realidad no se había molestado, después de todo así se habían comenzado a tratar desde aquel día que se conocieron, para naruto era una relación como un gran amigo que siempre discutían, pero al final del día eran los mejores amigos, o por lo menos así lo veía naruto. Kurama había sido su primer amigo y a pesar de que aún no lo había visto, sentía que era una persona muy agradable, bueno eso si no contaban lo perezoso y gruñón que podía llegar a ser.

Al llegar al claro, naruto dejó junto a un árbol cercano el bolso que tenía, para luego dirigirse al centro del espacio despejado, luego de hacer algunos ejercicios naruto comenzó a prepararse para correr alrededor del bosque de la muerte.

"Oye, mocoso", hablo kurama llamando la atención de Naruto. "A partir de hoy aumentaremos las vueltas al bosque de cinco a siete, también aumentáremos las flexiones abdominales a ciento cincuenta repeticiones", mencionó casualmente mientras trataba de ocultar el tono de burla en su voz.

"! Que ¡", grito con furia naruto. "acaso me quieres matar, viejo estúpido".

"que mocoso tan quejumbroso", mencionó kurama con fastidio ante el berrinche del rubio. "pensaste que pasarías toda una vida haciendo lo mismo, tenemos que aumentar la intensidad para que puedas seguir fortaleciéndote"

"pero si apenas puedo dar lo mejor con los ejercicios actuales. Si aumento a lo que me estas pidiendo seguro moriré, sin contar que pasaría todo el día aquí", mencionó Naruto tratando de que Kurama cambiara de opinión.

"entonces será mejor que comiences desde ya", habló Kurama dejando claro que no había lugar para la discusión. "O es que ya no quieres hacerte fuerte para protegerte".

Naruto no dijo nada ante la provocación de kurama, el rubio solo se dignó a terminar de calentar. Luego de un rato salió a correr, asi comenzando la tortura que le había puesto el viejo estúpido de kurama, y mientras naruto corría, comenzó a murmurar diatribas sobre viejos estúpidos que por sanguinarios y vengativos estaban encerrados.

"Por cierto mocoso, ya cambiaron de turno los anbus que te vigilan", kurama mencionó cortando los murmuró de Naruto.

Naruto ya sabía que los dos anbus que habían acompañado al tercer hokage cuando este lo había visitado, eran los mismos que lo estaban vigilando desde hace un buen tiempo, gracias a kurama quien fue el que se había dado cuenta desde el primer momento en que comenzaron a vigilarlo, pero como no tenían ninguna intención maligna hacia el rubio, kurama solo se limitó a recomendarle que cuando se comunicara con él, tratara de ser un poco más discreto.

Al principio naruto le preguntaba a kurama, porque tenían que ser discreto cuando hablaba con él, kurama le había explicado que no sabía cómo tomarían la noticia de que naruto había comenzado a tener comunicación con él, y que lo más seguro era que lo llevarían a algún lugar donde lo obligarían a hacer muchas cosas que tal vez al rubio no le gustaría, o lo obligarían a ser un soldado sin sentido. Pero a pesar de que la respuesta de kurama había dejado más dudas en lugar de aclaraciones, en cambio Naruto solo decidió dejar el tema hasta ahí y a hacerle caso a las recomendaciones de kurama.

Lugar desconocido:

En una amplia oficina tenuemente iluminada, se encontraba Danzo sentado en una silla detrás de un escritorio, y mientras revisaba el pergamino que le había dado orochimaru, no pudo evitar esbozar una sonrisa de satisfacción. A pesar de que no confiara en aquella serpiente rastrera, en estos momentos le agradece por el favor de elaborar el pergamino de control mental. Al principio penso que orochimaru lo había engañado, pero al probar lo sellos que había en el pergamino, danzo se consiguió con el resultado perfecto, y aun que los sellos tenían que ser colocado cuando la víctima estuviera débil, danzo no podía quejarse por los buenos resultado que daban, sin contar que aquel que le aplicaran el sello estaría bajo una constante tortura mental para asegurar la obediencia.

"Estos sellos son la clave para controlar al jinchuriki del kyubi, y para obtener lo que siempre me he merecido", dijo con alegría ante la perspectiva de que su sueño más codiciado estaba a la vuelta de la esquina.

Dejando sus diatribas para otro momento, Danzo comenzó a terminar el papeleo que tenía sobre su escritorio. El viejo halcón de konoha tenía que cubrir las huellas de orochimaru como pago por los sellos, pero su trabajo fue interrumpido cuando tocaron a su puerta.

"lord danzo,¿ puedo pasar?", preguntó una voz con tono uniforme detrás de la puerta.

"adelante", danzo respondió de forma inmediata.

Al escuchar el permiso dado por danzo, un par de anbus leales a este entraron a la oficina, y luego se arrodillaron en señal de respeto hacia el viejo halcón de konoha.

"lord danzo, ya tenemos los preparativos listos para la operación de la captura del niño kyubi", dijo el anbu a la cabeza de la pareja.

Danzo no dijo nada por unos pequeños instantes, era como si estuviera buscando alguna pizca de falsedad en las palabras del anbu frente a él. "¿estás seguro que todos los preparativos están listos?", preguntó Danzo para aclarar su duda, él quería que todo saliera bien, ya que no tendría otra oportunidad.

"Si, lord danzo, todo fue hecho de acuerdo con sus planes. Ya nos hemos ganado la confianza del tercer hokage, ya fuimos incluidos como respaldo de seguridad personal y también ya manejamos los horarios en los que cuidan al mocoso kyubi", respondió con seguridad el anbu leal a danzo.

Al escuchar el reporte de los planes que le había dado marcha hace un mes, danzo esbozo una sonrisa. "Me parece perfecto, solo espero que los planes sigan marchando de esa misma forma", mencionó Danzo, la sonrisa que antes había aparecido en su rostro había cambiado a una expresión de más seriedad y que prometía una severa consecuencia si el plan fracasa por algún motivo.

"Así será lord danzo", el anbu afirmó con serenidad, a pesar de que estaba nervioso por la advertencia clara en la mirada de danzo, no dejó que sus nervios se demostraran en ningún momento.

Ante la confianza del anbus danzo solo pudo asentir. "ahora solo necesito que te comuniques con orochimaru, dile sobre los planes, también que se prepare, porque dentro de 2 días pondremos en marcha el plan y utilizaremos unas de sus bases ocultas como distracción".

"entendido lord danzo", el anbu asintió ante las órdenes de danzo.

y con un movimiento de la mano danzo despidió a los anbus. "eso es todo, ya te puedes retirar".

Sin decir ni una palabra más, el anbu se levantó y se retiró de la oficina, dejando nuevamente al viejo halcón solo, el cual solo podía sentirse ansioso por la futura efectividad de sus planes, y mientras se llevaba la mano izquierda al lado vendado de su rostro, específicamente en donde debería estar su ojo derecho. "ya tu fin está llegando viejo amigo, tu época como hokage está llegando a su fin, y cuando por fin el puesto sea mío, pondré nuevamente a konoha como la aldea más fuerte de las cinco grandes naciones elementales".

Calles de konoha:

Por las calles de konoha, se encontraba caminando un hombre, el cual se encontraba vestido con las vestimentas típicas de los anbus, un cabello plateado en punta que desafiaba la gravedad, la parte inferior de su rostro estaba cubierta, tenía colocada la diadema de konoha de medio lado , cubriendo su ojo izquierdo, dejando solo el ojo derecho visible. 

Mientras el anbu caminaba por las calles, también estaba leyendo un libro de portada naranja, con gran maestría se desplazaba aparentemente sin despegar la mirada de su lectura, hasta que en un momento dado se detuvo cuando escuchó que alguien había gritado su nombre.

"oye kakashi, espera un momento".

Al voltear kakashi visualizo a un hombre que se dirigía hacia donde estaba el. aquel hombre se encontraba vestido con un expande verde, también tenía un chaleco de chunin, pero la característica más resaltante de aquella persona, era su cabello negro en forma de cuenco y las gruesa cejas que le daban un aspecto distintivo.

Alzando la mano de forma perezosa kakashi saludo a aquel sujeto. "¿Qué tal guy?, ¿cómo va todo?".

"Bien, acabo de llegar de una misión", respondió Guy con una sonrisa casi exagerada.

Kakashi solo asintió ante las palabras de Guy. "me alegra que hayas vuelto en una pieza y a salvo", mencionó con una pizca de alegría reflejada en su único ojo visible.

Alzando su mano con el pulgar hacia arriba, en una señal de aprobación guy esbozo una gran sonrisa, la cual hacía que sus dientes brillarán con una luz casi segadora, haciendo que Kakashi solo se mostrará impasible ante la peculiaridad de su amigo.

"oye kakashi", mencionó guy llamando la atención de su amigo y eterno rival, o así lo creía él según sus propias palabras. "pensé que estarías en la misión que el hokage te había dado", preguntó con curiosidad.

"Aún sigo con esa misión, pero hasta hace poco entregue el informe al hokage de cómo va, así que el hokage me dio el resto del día libre", mencionó Kakashi sin querer dar mucha información sobre la misión de cuidar a Naruto. 

"perfecto", mencionó con alegría guy 

Pero Kakashi lo interrumpió. "lo siento guy, hoy estoy muy cansado para algún reto", mencionó kakashi rápidamente, sabiendo que seguramente guy lo retaría a algún desafío, pero a pesar que esa era la mayor forma de guy de demostrar su amistad, hoy no tenía las ganas ni las energías de aceptar los desafíos de su amigo.

El rostro de Guy cayó abatido ante las palabras de Kakashi, pero casi de inmediato se recompuso. "que lastima, pero no me refería a eso".

La confusión se hizo presente en el rostro de Kakashi, "entonces a qué te refieres", pregunto confundido, prácticamente retarlo era algo que hacía todo el tiempo.

Guy al ver la confusión de su eterno rival puso una cara de decepción fingida, "lo olvidaste verdad", preguntó guy, mas como de cortesía, porque ya había visto que si lo había olvidado.

"lo siento guy, con tantas cosas lo he olvidado", alcanzo a mencionar kakashi con una disculpa reflejada en su ojo.

Dando un suspiro de resignación Guy comprendió la excusa, "entiendo", mencionó volviendo a su estado de ánimo alegre. "Te recuerdo que habíamos acordado que aceptarías una cena con el grupo".

"cierto", asintió Kakashi recordando su promesa. "¿entonces dónde nos vamos a ver?", le pregunto a Guy.

Guy se quedó pensando por unos instantes, analizando a cuáles de los puestos de comida pudieran ir a reunirse y pasar un agradable rato. "te parece al restaurante de parrilla de los akimichi", preguntó guy, viendo si a kakashi le parecía buena la idea.

"me parece buena idea", mencionó Kakashi aprobando la idea.

"bueno, entonces nos vemos en el restaurante de los akimichi a las siete de la noche", mencionó con alegría guay. "Entonces me voy a avisarle a los demás", terminó de hablar guy mientras se despedía de su eterno rival y salía corriendo para cumplir con sus planes.

"y allá se va mi noche tranquila de lectura", mencionó Kakashi mientras veía como se alejaba guy.

Bosque de la muerte:

Ya el sol se estaba ocultando, dando el fin de la tarde y dando paso para la llegada de la noche. En el medio del bosque se encontraba Naruto tirado en el suelo, el rubio se veía totalmente cansado, su ropa estaba sucia y llena de lodo. A su lado, a unos cuantos pasos se encontraba un jabalí de pelaje marrón inconsciente. 

"lo hiciste bien mocoso", le dijo kurama a Naruto. "Bueno para ser solo un jabalí de pequeño tamaño", el tono de burla era más que evidente. 

"cállate estúpido", dijo naruto frunciendo el ceño ante las burlas de kurama, pero a pesar de las burlas, también pudo sentirse orgulloso al poder vencer aquel jabalí sin ayuda de kurama.

Levantándose del suelo ya un poco más recuperado de aquel entrenamiento intensivo, Naruto aún se encontraba cansado pero satisfecho con el progreso que había logrado. Comenzando a sacudirse toda la ropa, Naruto no pudo evitar sonreír al sentir que estaba cada vez más cerca de alcanzar sus metas y obtener la suficiente fuerza para no dejarse doblegar por nadie. Con determinación en sus ojos naruto se dispuso a caminar hacia la salida del bosque y llegar a su casa a descansar, para que mañana pudiera seguir con el entrenamiento.

Al día siguiente: 

Oficina del hokage:

Ya era temprano, aproximadamente como las seis de la mañana, el viejo hokage hiruzen sarutobi había llegado temprano a su oficina para terminar su papeleo pendiente de la noche anterior. "que fastidio con estos papeles del infierno. "Provoca quemarlos todos", pensó el tercer hokage, y mientras más veía las montañas de papeles, más se estaba convenciendo de hacer aquella maravillosa idea.

Pero a pesar de la tentación de acabar con aquella tortura llamada papeleo, se contuvo para luego tomar asiento detrás de su escritorio y con un gran suspiro de resignación comenzó a hacer el trabajo interminable de todo los días.

"puedo pasar", preguntó una voz femenina al tocar la puerta de la oficina del hokage.

"adelante", fue la respuesta de Hiruzen.

Al entrar la anbu de cabello morado dio a conocer su presencia, y al estar frente al hokage se arrodilló. "buenos días hokage sama", habló la anbu mientras agachaba su cabeza en señal de respeto.

Con una señal de la mano Hiruzen le indico a la anbu que se pusiera de pie. "Buenos días yugao, que te trae a mi oficina tan temprano", preguntó extrañado.

"Quería darle mi informe lo más rápido posible, ya que ayer observé algo asombroso". Respondió Yugao en un tono burbujeante. 

La curiosidad de Hiruzen se hizo presente ante las palabras. Sabía que a juzgar por el tono de yugao no podría haberle pasado nada malo a Naruto. "cuéntame, ¿qué fue lo que te asombró?"

"Ayer mientras observaba a Naruto, el cual se encontraba culminando su entrenamiento diario, se enfrentó con un jabalí de gran tamaño, venciéndolo en el proceso", Yugao mencionó lo que había observado cuando estaba vigilando a Naruto.

Decir que Hiruzen no estaba asombrado era mentir. el viejo hokage sabía desde hace mucho tiempo que las criaturas que habitaban aquel campo de entrenamiento eran de todo menos normales, y que le digieran que naruto venció a una de ellas a su corta edad era algo más que sorprendente, también habla bien de lo mucho que se a esforzado para hacerse fuerte.

"si, tienes razón, es impresionante lo fuerte que se está haciendo", le mencionó Hiruzen a Yugao, "solo espero que sus motivaciones no sea por rencor o venganza", la preocupación era clara en la cara del hokage.

"no creo que Naruto esté motivado por algunas de esas razones", mencionó Yugao tratando de apaciguar las dudas del tercer hokage.

Después de todo ella había visto los entrenamientos del pequeño rubio, conocía la alegría que salía de naruto cuando lograba completar los ejercicios autoimpuestos por el mismo, y mientras más lo observaba no podía evitar ver que casi se parecía un loco del trabajo duro, como un conocido peculiar de cejas pobladas, pero dejando de lado eso, yugao no podía evitar ver reflejado en ese niño los grandes ninja que fueron sus padres.

El tercer hokage se quedó meditando por unos segundos las palabras de su anbu, hasta que sus dudas se disiparon. "tienes razón yugao", dijo Hiruzen con una sonrisa. "Más bien deberíamos guiarlo para que cuando se haga fuerte no pierda el camino del bien", fueron los pensamientos que estaban en la mente del viejo hokage.

Apartamento de naruto:

Naruto se encontraba sentado en su cama comiendo un cuenco de ramen instantáneo, alrededor de él estaban algunos libros, entre estos se encontraban algunos de ejercicios físicos, de control de chakra y otros de sellado.

"kurama, ahora que voy hacer con todos estos libros y pergaminos", Naruto le preguntó a su compañero.

"vas a comenzar a leerlos", mencionó kurama como si fuera la cosa más obvia del mundo.

Naruto puso una cara de asombro ante lo que Kurama le estaba pidiendo. "estás loco, voy a tardar toda una vida", el ceño fruncido era más que evidente en el rostro del rubio, sin contar que hasta hace unos meses había aprendido a leer, y que jamás se había interesado en leer más que unas pocas hojas de algún libro.

"Entonces no pierdas el tiempo", exasperado por las quejas del rubio kurama había respondido. "Además eso te ayudará para que aprendas algunos jutsus en el futuro". 

Casi de forma inmediata Naruto cambió su estado de ánimo al escuchar que al leerse alguno de esos aburridos libros podría aprender a hacer jutsus." Eso quiere decir que por fin me vas a enseñar algunos jutsus increíbles", Naruto le preguntó a kurama con una alegría que casi lo haría comenzar a brincar en un pie.

"Nunca dije que te enseñaría algún jutsu", mencionó kurama para calmar a Naruto. "además yo no sé nada sobre jutsu".

"¿! que ¡?", Naruto quedó asombrado por la respuesta de Kurama. "pensé que tu sabrías algunos jutsus poderosos", la confusión era clara en el rostro del rubio, y a pesar de ser un niño, él sabía que para que Kurama fuera encerrado tendría que tener algunos jutsus muy peligrosos.

"Nunca necesite hacer ningún jutsu, eso es para ustedes los humanos débiles", respondió Kurama, con orgullo claro en su tono.

"¿Entonces para qué voy a aprender control de chakra?", preguntó con más duda el rubio, si Kurama no le iba a enseñar jutsu, entonces no le veía el sentido.

"el control de chakra no solo es para hacer jutsu, también sirve para otras cosa, tales como fortalecer tu cuerpo y agudizar tus sentidos", así kurama pasó varios minutos explicándole a naruto la variedad de usos que tiene el chakra, también apoyándose del libro de control de chakra, que hizo que naruto comenzara a leer.

"woo, no sabía que tenía tantos usos aparte del ninjutsu", mencionó Naruto al ver las explicaciones que daba el libro junto a los datos que Kurama le decía en ocasiones.

"Ves a lo que me refiero", preguntó kurama aliviado de que Naruto pudiera entender lo básico sobre el control de chakra. "Además también me gustaría que aprendieras los jutsus que tus padres dominaban", mencionó kurama sabiendo el hecho de que Naruto no sabía quiénes eran sus padres. 

Naruto había quedado estupefacto al escuchar que Kurama había mencionado a sus padres. "conociste a mis padres", preguntó Naruto, casi al borde de las lágrimas. Tenía toda su vida preguntándose quiénes eran sus padres, si fueron personas importantes o si de verdad lo querían, todas esas preguntas siempre rondaban por su cabeza, pero por más que había tratado de convencer al tercer hokage este siempre respondía, que el saber quiénes eran no los traería de vuelta.

Eran palabras crueles para él, ya que sentía que por algún motivo sus padres nunca lo quisieron, pero siempre se imaginaba que sus padres habían sido los mejores del mundo, sabiendo que tal vez no fuera así, pero a Naruto le gustaba pensar que sus padres lo amaban más que nada.

"sí conocí a tus padres, más que todo a tu madre", mencionó kurama llamando completamente la atención de Naruto.

Naruto aún no podía creer lo que kurama le estaba diciendo, a cada segundo los sentimientos que había guardado sobre el tema de sus padres comenzaron a desbordarse, pero tragando esos sentimientos, se dispuso a preguntar sobre ellos, "¿cómo eran ellos?", la ansiedad ya era notable en el tono de naruto, "¿quiénes fueron?. ¿Me quisieron?", eran las preguntas que el pequeño rubio ansiaba por saber, después de todo, era un niño que no había sabido nada sobre aquellas personas que lo amaron y lo amarían hasta el fin de los tiempos.

Kurama había quedado conmovido por la reacción que había tenido Naruto, "primero tienes que calmarte mocoso", mencionó kurama tranquilizando a Naruto, él sabía lo importante que era la información para Naruto, así que decidió darle respuestas a algunas de sus preguntas.

Después de unos cuantos segundos de espera para que naruto se calmara, kurama comenzó a darles las respuestas que tanto quería el rubio, "tus padres fueron unos de los humanos más tercos y hábiles que he podido conocer en mis muchos años de existencia", mencionó kurama, dándole una descripción un poco vaga de sus padres, "eso es todo lo que puedo contarte sobre ellos, tampoco es que sepa mucho sobre ellos. Pero puedo ver que heredaste algunas cosas de ellos".

Naruto sintió alegría y orgullo por las descripciones que kurama le había dado sobres sus padres, pero a pesar de eso naruto aún tenía la duda que todo niño huérfano que no ha conocido a sus padres se haría, "¿ellos me amaron?", pregunto temeroso por la respuesta que recibiría.

"si, ellos te amaron, sobre todo tu madre, no paraba de molestarme al contarme lo mucho que te amaba y la grandiosa persona que estaba segura que te convertirías", mencionó kurama con un tono de alegría imperceptible para Naruto.

Lágrimas de alegría comenzaron a caer por el rostro de naruto, el sentimiento de que fue amado por sus padres comenzó a llenar ese vacío que había sentido toda su corta vida, "si me amaron", menciono naruto más como una afirmación a la creencia que siempre había tenido 

"Eso es todo lo que te puedo contar", mencionó kurama deteniendo la avalancha de preguntas que estaba seguro que naruto haría. "si quieres saber más, ve y pregúntale al viejo que llaman hokage. Y si después de eso me quieres escuchar, estaré dispuesto a contarte todo lo que se sobre tus padres", kurama sabía que el rubio necesitaba saber las dos partes de la historia, pero más allá de eso, él quería probar si naruto sería capaz de ver más que solo los hechos básicos de esa noche, también quería estar seguro que el pequeño rubio sería capaz de ganarse su completo apoyo y amistad, al igual como lo había hecho su madre.

Naruto frunció el ceño ante la negativa de kurama de contarle más sobre sus padres, pero casi de forma inmediata se calmó, "¿y como voy a convencer al viejo de que me diga lo que sabe?", pregunto naruto cambiando el tema, ya que confiaba en kurama y si no quería contar más, sería por alguna razón.

"Solo dile que ya sabes que eres un jinchuriki".

"¿Qué es un jinchuriki?", preguntó Naruto por la confusión del uso de esa palabra.

"eso ya te lo explicara el viejo hokage ". Mencionó kurama tratando de que la conversación no se alargará más. "Por el momento necesitas ir con ese viejo para que te cuente todo y te de los pergaminos de tus padres".

Sin perder el tiempo, Naruto se paró de su cama, comenzó a vestirse para ir a la oficina del tercer hokage, sus ansias por saber más de sus padres estaban más fervientes que nunca antes. "es hora de que por fin sepa quiénes fueron mis padres", se dijo Naruto mientras salía de la habitación después de haber estado varios minutos cambiándose. Pero al abrir la puerta para salir y ponerse en camino a la oficina del hokage, Naruto se encontró con aquel al que iba a buscar.

"hola, naruto", saludo el hokage al ver que naruto abrió la puerta justo cuando él iba a tocarla.

"hola viejo", correspondió naruto al saludo asombrado de ver al hokage en su puerta, parecía que lo había invocado, o supiera que naruto saldría a buscarlo.

"¿porque no me dijiste que Hiruzen ojisan estaba por llegar?", le preguntó mentalmente Naruto a Kurama.

"no te dije porque sentí que ya estaba muy cerca, además quería seguir durmiendo", mencionó kurama tras haber dado un bostezo audible para Naruto.

Naruto solo pudo poner una cara en blanco ante la respuesta tan vaga que le había dado kurama. "holgazán estúpido", murmuro para sus adentro, olvidándose por un momento que tenía al tercer hokage parado en su puerta.

"¿vas para algún lado?", mencionó el viejo hokage llamando la atención de Naruto.

Al escuchar hablar al hokage naruto cortó la conexión con kurama para prestar atención y responder la pregunta que le habían hecho, "si, pero creo que ya no lo haré".

"¿y eso porque?", preguntó Hiruzen confundido por la respuesta que le había dado Naruto.

"es que iba a la torre hokage a hablar contigo, pero ya que estás aquí, no haría falta ir hasta allá". Mencionó Naruto mientras que se hacía a un lado para que el hokage pasara.

Una vez que Naruto y Hiruzen estuvieron dentro del departamento, se sentaron uno frente al otro, esperando que alguno de los dos comenzara la conversación que querían tener.

"supe que has estado entrenando", habló el hokage comenzando la conversación y rompiendo el silencio.

"si, ya llevo un mes entrenando", Naruto respondió afirmando las palabras del hokage. "pero supongo que eso ya lo sabes, debido a que ellos siempre me andan vigilando", mencionó mientras señalaba a los anbus que siempre vigilaban al hokage.

La sorpresa de Hiruzen se había vuelto clara en su rostro. "¿Cómo supiste que eran ellos?", preguntó Hiruzen queriendo saber si de alguna manera Naruto había desarrollado la misma habilidad de sensor que tenía su padre.

"como te dije antes, yo puedo sentir algo en las personas,", naruto menciono diciendo una verdad a media, "pero es algo que no puedo controlar, más sin embargo si puedo identificar a ellos dos".

Naruto si podía sentir el chakra de las personas cerca de él, pero era algo que no podía controlar aún, y ahí era cuando entraba kurama, que según lo que le había contado, kurama tenía la misma habilidad de detección de chakra pero con muchas más ventaja, y debido a eso le podía decir quiénes eran los que se acercaba a él, y si tenían buenas o malas intenciones.

"eso que sientes se llama chakra", mencionó Hiruzen al confirmar que efectivamente Naruto era un sensor igual que su padre. "Esa habilidad la desarrollan los ninjas cuando van entrenando en las artes ninja, pero hay veces que algunas personas nacen con una gran afinidad para detectar el chakra, a esas personas se le llaman sensores", le explico el hokage a naruto para que tuviera una idea de la habilidad que tenía.

"eso es genial", Naruto había quedado asombrado por lo que el hokage le había dicho, él sabía debido a kurama que esa habilidad se le conoce como detección de chakra y que todos los ninja la tenían, pero nunca había imaginado que él podría ser un sensor.

Permitiendo que Naruto se calmara ante la noticia que tenía una habilidad especial, Hiruzen continuó con la conversación, ya que quería saciar la duda que había estado rondando por su cabeza. "Naruto, ¿porque estás entrenando?". 

"quiero hacerme el ninja más fuerte de todos los tiempos", mencionó Naruto de forma muy alegre y determinada, "quiero ser fuerte para que me reconozcan como el más fuerte de todos y me respeten. También no quiero hacer que mis seres querido, como teuchi ojisan, ayame neesan y tú no se preocupen por mi seguridad".

Hiruzen sarutobi quedó sorprendido por la determinación que podía ver en los ojos azules de naruto, le había quedado claro que a pesar de las situaciones que había vivido, el rubio no se estaba dejando llevar por el odio, más bien le gusto la forma en que estaba usando eso como combustible para su meta.

"Me parece una buena meta", mencionó Hiruzen con una sonrisa que estaba adornando sus facciones. "si quieres seguir haciéndote fuerte, puedo inscribirte en la academia, de seguro ahí podrás seguir haciéndote fuerte y te enseñaran muchas técnicas".

El hokage le volvió a plantear el ingreso a la academia naruto, esperanzado de que este por fin se decidiera a ir, ya que anteriormente se lo había propuesto, pero por alguna razón el rubio se había estado negando, y hiruzen relacionaba la negativa a el miedo o quizás odio que naruto había obtenido por lo que lo ciudadanos le hacían.

Naruto se quedó analizando la propuesta por varios segundos. "está bien viejo, aceptare ir a la academia", mencionó Naruto animado por aprender nuevas técnicas, pero también estaba algo inseguro, debido a que estaba seguro de que muchos de los niños y ninjas que lo menospreciaban estarían ahí.

"perfecto", mencionó Hiruzen con una leve sonrisa. "haré el papeleo para que puedas ingresar, llegarás un poco tarde, pero estoy seguro que te adaptarás rápido", ya con la aceptación de naruto a su propuesta hiruzen se sintió más aliviado, porque necesitaba que el rubio se volviera fuerte para que pudiera con la carga de ser un jinchuriki y el hijo de dos poderosos ninjas.

Naruto solo asintió a las palabras del hokage, su mente estaba pensando en la mejor forma de sacar el tema sobre sus padres, y como decirle a hiruzen, que quiere saber la verdad sobre ellos y que sabe que él es un jinchuriki, sea lo que sea eso.

"Si deseas ayuda en algo más, solo dímelo, que haré lo posible para hacerlo", mencionó Hiruzen sabiendo que tal vez en la academia le pondrían muchos peros al rubio.

"la verdad si necesito ayuda, pero con otro tema", mencionó Naruto, aprovechando el momento para poder hacer la pregunta que desde un principio había querido hacer.

"Por supuesto, ¿en qué te puedo ayudar?".

"quiero que me digas la verdad sobre mis padres. Y quiero la verdad, ya sé que soy un jinchuriki".

Decir que hiruzen sarutobi se había quedado sorprendido era quedarse corto, el hokage estaba casi que helado ante las palabras de naruto, "¿cómo lo supo?, ¿Quién se lo diría?", eran las preguntas que estaban rondando por la cabeza del tercer hokage de konoha.