webnovel

Numb |MIKE SHINODA|

Las amistades verdaderas son inquebrantables. No importa cuánto tiempo pase, o cuanta distancia los separe, la amistad seguirá existiendo. Ese tipo de amistad tenían Hannah Donovan y Chester Bennington. Tras muchos años sin verse, deciden reencontrarse, y rápidamente Hannah se verá envuelta de regreso en la vida de Chester, y todos quienes lo rodean. Entre esas personas está Mike Shinoda, compañero de banda y prácticamente hermano de Chester. Hannah tiene metas definidas para su vida, pero estas se verán cada vez más inalcanzables a medida que el tiempo avanza, y ella se ve involucrada en la vida de Mike, quien no lleva una vida fácil.

xlildixonx · Adolescente
Sin suficientes valoraciones
44 Chs

35.

Una vez que terminamos de desempacar nuestras pertenencias, nos dirigimos a la sala de estar y nos derrumbamos en el sofá, exhaustos.

- ¿qué quieres hacer?- me preguntó Mike. Yo me lo pensé.

- ¿qué tal si recorremos la ciudad? estamos bastante alejados de ella, por lo cual no creo que vayamos de visita todos los días.- sugerí. Él se puso de pie y me tendió la mano, a lo que yo acepté. Él llamó a un Uber, y nos dirigimos hacia la ciudad.

|• • •|

- Esto está riquísimo.- dije, llenándome la boca de la ensalada junto a la carne asada que había pedido. Mike rió al ver mi comportamiento.

- Ya lo creo.- dijo él, para luego darle un bocado a su comida. Pasado un rato de terminar nuestras respectivas comidas, yo empecé a sentir un leve mareo.

- ¿quieres postre?- preguntó Mike, pero yo negué con una mano, mientras me llevaba la otra a la boca, tratando de contener las repentinas náuseas que me habían dado.- ¿estás bien?- preguntó él, preocupado.

- No me siento muy bien.- dije yo, a lo que él se apresuró a levantarse y me ayudó a levantarme también.

- Volvamos a la casa.- dijo él, y una vez fuera, detuvo un taxi. Cuando llegamos a la cabaña, yo me apresuré a entrar y corrí al baño, dejándome caer al piso y soltando toda la comida de hace un rato en el retrete. Mike apareció a mi lado y se puso de cuclillas, acariciando mi espalda.

- Tranquila.- habló en tono calmo. Luego de terminar de devolver todo, me levanté con su ayuda y me lavé los dientes, asqueada del sabor que había quedado en mi boca. Mike me cargó hasta la cama y me recostó suavemente en ella, para luego recostarse a mi lado.

- ¿que sucedió, lindura?- preguntó aún con cierta preocupación en su voz.

- No lo sé, yo...- me dispuse a hablar, pero me detuve cuando mi cerebro procesó una posible respuesta a mi estado. Instantáneamente me levanté y corrí a tomar mi móvil, buscando en el Google Maps la farmacia más cercana.

- ¿qué es lo que buscas?- preguntó Mike, sentándose en la cama.

- Debes llevarme a la farmacia.- pedí.

- ¿a esta hora? es un poco tarde.- cuestionó él.

- ¡ahora!- exclamé, a lo que él levantó los brazos y nuevamente pidió un Uber.

Cuando volvimos a la casa, yo me encerré en el baño.

Tomé la pequeña cajita que había escondido en mi bolso y la abrí, tomando el test. Seguí las instrucciones y esperé al resultado. Una vez que la respuesta apareció en este, yo me tomé mi tiempo para salir del baño. Cuando lo hice, vi a Mike instantáneamente levantarse de su lugar y acercarse a mi.

- ¿qué sucedió?- preguntó preocupado. Yo no respondí. No sabía qué o cómo decirlo.- Hannah.- insistió Mike. Yo lo miré y luego suspiré, levantando el test que tenía escondido detrás mío.

- Estoy embarazada.-