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La APB

la grabación ya había terminado y el holograma había desaparecido, el chico se encontraba confundido pero especialmente intrigado.

Shiro: pero... - este quería hablar pero sus palabras no salían por la revelación, el mayor lo nota y habla.

Michiko: Afrodita, la diosa del amor y la belleza fue la mente maestra en varios conflictos dentro de la organización, sé que parecerá malicioso pero esta organización no se basa en destruir, sino de proteger a los individuos afectados por la "bendición" de estos dioses - al momento de decir "bendición" hizo las comillas con sus dedos.

Shiro: entonces... ¿soy uno de esos individuos?

Michiko: si y no, te explico, hay personas las cuales viven pacíficamente dentro de las instalaciones, también hay malhechores detras de rejas y por último, hay equipos con individuos que se centra en poner todo en orden... tomalo algo como... civiles, criminales y milicia - decía el mayor tratando de explicar de una forma clara.

Shiro: ¿entonces yo soy un civil?...

Michiko: al principio ibas a ser un civil, pero según varios contactos y una solicitud de alguien importante terminaste dentro del equipo que yo manejo, el equipo de rescate.

Shiro: espera... ¿no tengo derecho a negarme?

Michiko: a lo que eres bendecido pierdes voz y voto, por no decir que pierdes los derechos, por eso existe esta organización.

Shiro: no me jodas... - este retrocedía con pasos lentos sin creérselo ¿estaría condenado a vivir así? ¿que hizo para merecerse tal trato?

Michiko: sé que sonó mal, pero es así... aunque como viste... no es un lugar sombrío, tratamos a los bendecidos como personas normales - dijo el mayor tratando de calmar al chico.

Shiro: ... hay... ¿hay un modo de volver a como era antes?

Michiko: que se te retire la bendición, cosa que solo hace un dios en casos muy raros, morir para renacer a otra vida a ver si suerte...

esto depremiria mucho al chico, pero esto no duró mucho por un pequeño rayo de esperanza.

Michiko: o ascender en el equipo... - menciona haciendo volver a Shiro en si.

Shiro: entiendo... entonces solo debo de ascender - mencionó el chico ahora calmado - pero... ¿que es eso de las bendiciones?

Michiko: las bendiciones es un regalo de los dioses, nos proporciona grandes capacidades físicas y también lo que hace lo importante en diferentes personas.

Shiro: ¿y eso es?

Michiko: llamalo poder, habilidad o como quieras, aparte de las características físicas, también nos dan un poder, sea volar, tirar fuego entre otros, esto varía mucho, tanto que es difícil encontrar a 2 personas con la misma habilidad o similar.

Shiro: ¿algo así como... las cadenas que tiró ese tal Asukamaru?

Michiko: si, sacaba cadenas de donde sea y los controlaba... al menos eso entiendo del caso... otra cosa, es cierto que estás bendecido pero nadie sabe que habilidad tienes, debes de activarlo... pero los métodos te lo explicaran otras personas - dijo mientras se acomodaba en su asiento.

Shiro: y si... hubiera alguien que no acepte este trato... y se suicide... ¿que harían para prevenirlo? es mera curiosidad.

Michiko: absolutamente nada, además, dudo mucho que haya alguien que se quiera quitar la vida - dijo mientras sonreía por lo bajo - aquí todos son muy alegres... creo que ya es todo.

Shiro: si... - el chico estaría analizando lo último que estaría pasando - es muy raro como cambió todo de repente...

Michiko: les pasa a todos, toma - le lanza una tarjeta el cuál es atrapado - tu identificación, así nadie creerá que eres un infiltrado o algo parecido.

Shiro: ¿hubo casos?

Michiko: no responderé a eso... ¿otra pregunta?

Shiro: si, ¿no había una mejor foto? - preguntó mientras enseñaba su tarjeta en el cuál solo se veía sus ojos hasta arriba de su cara y al lado un chico rubio que se veía borroso - y aún peor, ¿de donde sacaron la foto?

Michiko: documentos escolares.

Shiro: maldito seas Maeda - maldecia internamente - bueno... eh... ¿donde me dirijo ahora?

Michiko: te dirigiras a la residencia, se te harán llamados para que hagas tareas, no los saltes si no quieres regaños o quieres ascender, ah y por último - este se para y estira la mano - bienvenido a la armada protectora bendita... la APB.

el chico le hizo gracia el nombre pero se aguantaría las ganas de reírse, estrecha la mano con el comandante para luego despedirse cortésmente y salir de esa oficina.

caminó por el pasillo mientras a sus espaldas de cerraba las grandes puertas, entra al elevador y elige el primer piso.

y ya ahí Shiro se le agotó la concentración y empezó a reírse mientras se sostenía y golpeaba la pared.

Shiro: la APB, que nombre... ¡jajajaja! soy un soldado de la APB... oh espera... así si suena bién... - habló sólo dándose cuenta - meh, es honorable al menos.

ya al abrirse las puertas del ascensor este simplemente sale caminando tranquilamente, se pasa de largo el gimnasio y sale de ahí para ver a su alrededor.

ciertamente es un lugar bonito como para ser parte de una fuerza especial, el chico pensó que lo hermoso del lugar puede ser una supuesta prevención al suicidio, aunque ciertamente le interesa poco y sigue caminando mientras veía el "cielo".

ciertamente todo esta cerrado por una gran zona de concreto a excepción del techo el cuál es una enorme cristalera en forma de domo que rodea la zona por completo.

Shiro: creo que por el tema de tener luz solar para las plantas... me parece bién - dijo pensando en voz alta - aunque siento los rayos del sol algo fuertes... me pregunto si esto está en Japón.

- hay gente que dice que probablemente estemos en una base acuática donde solamente se vea el techo cara al cielo... aunque son rumores solamente - dijo una voz joven cerca de Shiro.

el chico solo baja la cabeza y ve a su lado para encontrarse con un chico de baja estatura, cabello y ojos azules y su cuerpo era cubierta por una capa que le llegaba por debajo de las rodillas.

Shiro: oh, disculpa, soy nuevo, jaja - reía nervioso mientras trataba de saludar - me es raro hablar con alguien más chaparro que yo... sin ofender, claro.

- no hay problema... eh... escuché tu notícia y... lamento mucho lo de tu amiga - mencionó en señal de condolencias.

Shiro solo tuvo unas pequeñas imágenes de esa noche creando un lío en su cabeza, pero este agitaria la cabeza para despejarse de los recuerdos de esa noche.

- perdón.

Shiro: no es tu culpa... fue mía... - aunque era cierto que el chico había aceptado ese hecho aún los recuerdos de esa noche lo atormentaban - esto es solo un pase en mi vida... tengo que buscarle rumbo.

el peliazul solo lo miraba, ciertamente el chico parecía estar despejado y tranquilo, pero solo decía cosas con poco sentido dando a entender que no quiere pensar y menos hablar del tema de lo que pasó.

Shiro: ignorando eso - este estira su mano hacía el peliazul - Gensai Akubi, aunque prefiero que me llamen Shiro.

- diría que eres raro por el tema del apodo... pero extrañamente soy igual - este sonríe un poco nervioso mientras se rascaba la mejilla, estira su mano y la estrecha firmemente con la de Shiro - Kojiro Kimizuki, llámame Koji.

Shiro: salió de Kojiro... ¿te lo acabas de inventar?

Koji: no, ese apodo me lo dio una amiga de la infancia - explicó.

Shiro: entiendo.

Koji: bueno, me tomaste desocupado así que me molestaré en darle una pequeña guía a un recluta.

Shiro: con que ese es mi rango... ¿que rango eres tu koji?

Koji: rango teniente VI... para resumirlo, tenemos una diferencia de 4 rangos sin contar el nivel - explicó el peliazul.

Shiro: por poco y me arrodillo por tal honor... que cosa que recién hablé con el comandante.

Koji: es muy amable el comandante Michiko... dejando eso de lado ¿a donde te diriges?

Shiro: a la residencia - dijo mientras señalaba.

Koji: ese es el hospital... - baja la mano del chico y ahora señala él a otra dirección - esa es la residencia, bueno, vamos.

Shiro: te sigo.

empezaron a caminar tranquilamente, nadie le dirigió la palabra a otro, Shiro era muy curioso con las cosas de aquí pero no quería preguntar, Koji por otro lado observaba sutilmente a Shiro, le parecía extraño que él estuviera como un niño después de que su amiga muriera hace poco... aunque como dedujo hace rato, capaz no quería pensarlo y menos hablarlo, por lo cuál esperaría pacientemente que las cosas pasen para revelarle que posiblemente por culpa de su falta de profesionalidad... su amiga esté muerta.

Shiro: Koji - llamó el chico.

Koji: ah, dime - estuvo algo perdido en sus pensamientos pero volvió en si con el llamado de Shiro.

Shiro: tú... ¿tienes alguna libertad con el rango que tienes?

Koji: eh... ¿porque la pregunta?

Shiro: el comandante me mencionó algo parecido, pero no le seguí el tema... esperaba que me lo respondieras.

Koji: bueno, es cierto que tengo ciertas libertades, algo como por ejemplo... salir a comprar ropa y eso, no lo hice ninguna vez pero tengo entendido que algo como visitar a algún familiar necesitas un permiso especial.

Shiro: ¿que tan especial es?

Koji: necesitas rango, algo como el mío... y más que permiso es un interrogatorio, ya que supongo que no quieren que filtremos información al exterior.

Shiro: entiendo... tengo que trabajar duro.

Koji: si, aunque te seré sincero, este lugar no es malo, nos dan lujos como comida, comodidad y-...

Shiro: tengo família Koji...

Koji en ese momento se dio cuenta de lo que estaba diciendo, sin más se calló y se disculpó con un simple "disculpa"

ya habían llegado a la residencia, a lo lejos se veía normal pero ahora que estaban frente a la puerta y miraba arriba, el chico tenía que admitir que era colosal.

Shiro: siendo sinceros... la perspectiva falla un poco aquí, sé que soy bajo pero no alcanzo la perilla - dijo mientras saltaba para alcanzar la perilla.

Koji: ah, es un método de seguridad.

Shiro: ¿de que habla-... - este voltea a ver a Koji y resulta que este era 4 veces más grande que él - ¿que mierda?

Koji: el jefe mayordomo de esta residencia tiene la habilidad de cambiar el tamaño de lo que sea... nunca supe si tiene límite esto.

Shiro: ok, entiendo ¿pero porque a mi?

Koji: eres un desconocido ahora mismo, es normal que crean que eres un infiltrado - dijo mientras tocaba la puerta.

Shiro: ¿como me quito esto?

Koji: ah, espera - este mira una cámara, alza el pulgar en señal de estar bien y luego apunta a Shiro.

al rato Shiro creció lentamente hasta su estatura normal.

Shiro: dicen que los padres cuando ven a sus hijos dicen algo sobre "crecen tan rápido"

Koji: jaja, bueno, ¿estás listo para ver a todo el equipo?

Shiro: no.

Koji: pues que pena.

la puerta fue abierta por un hombre mayor, vestía de un uniforme de mayordomo, tenía una edad avanzada ya que se le notaba notablemente las arrugas y su cabello era todo canoso, tenía en su ojo derecho un parche, tenía una compostura firme y cortés y una mirada afilada pero calmada con su único ojo.

- buen día teniente Kojiro - saludó cortésmente mientras se inclinaba un poco.

Koji: no hagas eso, es malo para tu espalda, y buenos días igualmente.

- supongo que usted es nuevo ¿no? disculpe mi acción pero es un método de seguridad que tengo - se disculpó con Shiro.

Shiro: no es nada señor...

- Utanari... - dijo solo su apellido.

Shiro: señor Utanari, yo soy Gensai.

el mayordomo iba a hablar pero se escucha un alboroto dentro de la residencia con lo cuál puso nervioso a Shiro.

Utanari: es normal joven, pasen.

Koji solo entró normalmente mientras era seguido por Shiro, ambos caminaron hasta llegar a un lugar muy espacioso lleno de varias mesas largas y totalmente lleno de gente que hablaban y reían, era un lugar muy hiperactivo a la vista de Shiro.

Shiro: ehh...

Koji: ¿apenado?

Shiro: me siento muy fuera de lugar.

Koji: tranquilo, hay un método.

Shiro: ¿y ese es?...

Koji: señor Utanari... - mencionó al mayor a lo que este entendió.

este tomo una copa y una botella y golpeó levemente la copa creando un leve zumbido del cristal pero que por alguna razón hizo que resonase en los oídos de todos.

Shiro: ¿como hizo?

Utanari: experiencia.

Koji: ¡bueno equipo!... - no gritó pero si alzó su voz para que se escuchase, al captar la atención de todos siguió hablando - ¡tenemos a un nuevo recluta, denle la bienvenida que acostumbramos!

sin más todos observaron a Shiro cosa que puso nervioso a este.

Shiro: eh... ¿algo tuvo que pasar?

Koji: 3... 2... 1...

una gran cantidad de personas se avalanzaron contra Shiro dandole la bienvenidas y lo arrastraban con ellos para que se conociesen.

Koji: siempre me gusta ver esto - dijo mientras observaba como rápidamente Shiro se reincorporaba en el grupo, estaba hablando con un tipo alto con cabello rojo, este parecía ser el más alegre del grupo y socializaba con el chico - vaya que nunca fallas...

el chico se iba a retirar de no ser porque su vista fue tapada y una suave voz seductora habló.

- ¿quién soy? - dijo aquella voz.

Koji: no tiene chiste si lo haces siempre Akane.

Ishida: pero me gusta hacerlo - dijo la chica mientras le destapaba los ojos y se ponía a su lado a ver a todos con una pequeña sonrisa pasmada en su rostro.

Koji: ¿que tal en el trabajo?

Ishida: algo agotador, pero puedo manejarlo.

Koji: bueno... eres respetable Akane y ellos te hacen caso...

Ishida: menos tú.

Koji: no tengo que ser un genio para saber porque me citas a tu habitación.

Ishida: jaja, culpable... me retiro, tengo trabajo que hacer.

Koji: ¿y yo?

Ishida: Kazu ya le encargó a otro el trabajo y el comandante Michiko dijo que estás libre por un rato... una pena que yo no... - dijo mientras trataba de abrazar a Koji para consolarse a sí misma pero este lo evita - eres muy malo conmigo.

Koji: me voy con los demás, cuídate Akane - se despidió mientras iba con el resto.

Ishida: adiós amor - lo dijo en voz alta para que todos escuchasen e hicieron el "uhh" para molestar a Koji, cosa que consigue.

este fastidiado solo se sienta al lado de Shiro mientras este lloraba comicamente.

Koji: ¿que pasa?

Shiro: me dijeron que me iban a dar cerveza... y era agua - dijo mientras se tomaba el vaso de agua.

- eres demasiado pequeño como para beber ¿no crees? - habló un tipo que estaba sentado al otro lado de Shiro.

Shiro: no me cuestiones.

Koji: ¿que tal Zagros?

le hablaría al tipo, este era alto y vestía de un pantalón particular, un suéter negro de cuello largo que cubría todo sus brazos hasta las muñecas, tenía un cabello algo largo de color rojo, unos ojos azules claro y tenía bajo el ojo izquierdo una pequeña cicatriz de forma horizontal en su cara, este tenía una actitud alegre y activa, parecía ser la razón por el cuál el ambiente es muy activo ahí.

Zagros: todo bién, Shinatsukawa anda entrenando y libre, y si él está libre yo también.

Shiro: estoy perdido en la conversación...

Zagros: ah, mil disculpas Shiro, se me olvidó presentarme yo.

este tose para acomodar su voz y dice firmemente.

Zagros: soy el vicecapitan de la cuarta división... Dellaluna Zagros.

fin.