Madeline intentó alejarse de él, pero en lugar de liberarse, pisó su vestido terminando casi en el suelo si no hubiera sido por Calhoun, quien la atrapó de nuevo —Podríamos hacer esto todo el día. Parece divertido atraparte en mis brazos —dijo con una sonrisa socarrona antes de que ella finalmente se alejara de él.
Se había sentido mal por él mientras él hilaba un cuento de mentiras sobre la muerte de sus padres con una mirada solemne en su rostro —¿Por qué bromearías sobre la muerte de tus padres? —preguntó Madeline, con sus ojos marrones bien abiertos.
—Pensé que sería divertido ver cómo reaccionarías —Calhoun metió su mano en su bolsillo para sacar dos bayas y ofrecérselas—. ¿Bayas?
—No, gracias —replicó ella, con una mirada de incredulidad que marcaba su rostro por haber creído ciegamente lo que él había dicho.
Apoya a tus autores y traductores favoritos en webnovel.com