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Mision 3.8: Emperatrx Umbrosa, Clímax y Conclusión

Las puertas del Tenshukaku se abrieron, eran Yae Miko, Sara, Heizou y el resto, quienes vieron con sorpresa y desconcierto como Tenshin estaba por matar a Aether. Por suerte Ei detuvo el lado filoso de su sakabatoo con su hoja onírica.

-Ya vi suficiente, Tenshin...Me contuve todo este tiempo porque estaba confundida, pero me di cuenta de algo importante. No dejaré que lastimes a nadie, yo misma te detendré si lo haces.- Ei repelió el golpe de espada de Tenshin, y lo alejó de Aether. - Tu batalla es conmigo, con nadie más, no involucres al resto, terminemos lo que empezamos.- Ei se puso en posición para luchar, y apartó al resto de sus conocidos, al igual que sus amigos para terminar con todo esto.

-Muy bien... Prepárate para morir.- Tenshin tomó su distancia y enfundó una vez más su arma, para colocarse en posición. En su mente pensó en otra cosa: - Aún si mi existencia es un error, quiero saber que camino deberé tomar. Creo que la única forma de averiguarlo será con mi "Kiseki no Isshin". -

La posición de combate de Tenshin cambió a una más acorde, era una posición que Ei vió en sus recuerdos. Sin duda, ella quería preguntarle acerca de eso.

-Tenshin-san... No... Caim-san...Esa posición que usas es la del "Musou no Shinigami" ¿No? La he visto en tus recuerdos. Usas la técnica de Tenken y  la combinas con la "Musou no Hitotachi", no me cabe duda que es el filo del Dios de la muerte ¿Crees que podrás hacerlo con tu estado mental?-

-Por ahora lucharé para obtener mi respuesta, independientemente si gano o no.- Tenshin parecía concentrarse en acabar con ella, aún con todas las dudas en su cabeza.

Ei en su mente pensaba: - Esto se repite una y otra vez, es un ciclo que nunca termina ... Supongo que lo mejor que puedo hacer es cortar con el ciclo para siempre, mientras tengo la oportunidad.

Los dos se lanzaron a toda velocidad, el resto apenas podían ver los movimientos de ambos contrincantes. Las espadas chocaron con fuerzas, hasta el punto en el que usaron ambas manos para tratar de liberarse se la situación.

-Esto es malo, si el "Musou Shinketsu" de Ei es derrotado, ella morirá por el corte de Tenshin.- Paimon no podía evitar preocuparse por la situación, donde lo peor podía ocurrir.

Tenshin logró sacar la espada de Ei de su camino, y estaba a punto de lanzar un corte descendente para finalizar con el combate, sin embargo algo pasó. El cuerpo de Tenshin era atraído como un imán a un pedazo de metal por una onda gravitatoria, cuyo eje central era el punto creado por el golpe de ambas armas.

El híbrido intentó escapar o retroceder, era inútil, tampoco pudo usar electro, estaba completamente paralizado e indefenso. Ei aprovechó ese vacío para girar su cuerpo y crear un golpe ascendente para derrotarlo. Tenshin vio impotente como la espada lo golpeó con fuerza. Pudo sentir como su piel, huesos, y carne, habían sido machacados por la "Musou no Isshin" de Ei.

El heraldo del abismo salió varios metros por los aires, debido al poder de aquella poderosa técnica. El signo electro estaba encima de su objetivo, al caer, un pilar de luz cayó y lo dejó muy maltrecho en el suelo. Ei quedó de rodillas, sostenida por su espada.

Todos vieron con impresión como Tenshin aún podía levantarse a pesar de sus heridas, como si su fuerza de voluntad lo mantuviera con vida. Ei sintió en su pecho como algo empezaba a emanar energía, era una sensación cálida, sabía muy bien lo que era.

Tenshin caminó torpemente hacia ella, aún destrozado por el golpe que recibió, tenía una horrible marca que recorría su abdomen, y sus ropas acabaron de romperse. Ei suspiró por un momento al ver la situación, guardó su espada, y miró a Tenshin con cierta compasión.

Sara corrió hacia el híbrido, y le detuvo el paso, pero no lo atacó, ya no era necesario. La espada del heraldo estaba en el suelo, además él ya no estaba en condiciones de luchar. La arconte electro sacó la visión de Tenken y asintió en silencio, solo para colocar el objeto en el cuello.

- Tenshin ¡Basta! Es suficiente, ya no tienes que hacer esto.- Sara lo sujetó de la espalda para que no avanzara más, por otro lado, el híbrido estaba aún inconsciente, actuando en automático.

Cuando ella le colocó la visión electro en su cuello, él por fin empezó a reaccionar de forma diferente, había vuelto en si. Al principio no sabía dónde estaba parado, de a poco empezó a tener noción de dónde estaba, cosa que lo perturbó, y cayó al suelo por el peso de sus heridas.

-Mátame... Solo mátame... Por favor, fracasé, si sigo... Tendré que vivir todo eso de nuevo... No quiero.- Tenshin realmente estaba devastado.

-Escucha, no tiene que ser así, has estado atrapado demasiado tiempo, debes seguir adelante. Ahora tienes la oportunidad de luchar por tus valores, no por la voluntad de otros.- Sara lo abrazó para consolarlo.

-Caim-san, no debes morir ahora, escucha lo que tiene que decir tu padre.- La expresión del ninja cambió a una de sorpresa cuando apareció el espíritu persistente de su padre. Al parecer, Tenken llegó para darle un mensaje a su hijo después de morir, algo que sí o sí debía escuchar.

Tenken tenía su uniforme del clan Kurama, su estatura superaba a la del hijo por mucho, su cuerpo era robusto. Era su imagen de hace unos años antes de morir a manos de Ei.

-Hijo, lo siento mucho, no pude protegerte... Tampoco sabía todo lo que estabas cargando...Escucha, ahora tienes la oportunidad de cambiarlo todo ¿Qué harás? ¿Lucharás una vez más?- Tenken parecía compadecerse por su hijo.

-Padre, sabes bien que daría lo que fuera por volverte a ver a ti y a mi madre.- El híbrido estaba con la cabeza en alto, de rodillas.

Yae Miko se acercó a la escena y le dió a Tenshin la visión vacía pyro de Kyoko. Ella se alejó en silencio mientras lo veía la interacción con Tenken, quería hablar con él, pero sentía que no era lo correcto.

- Tenshin, nosotros siempre estaremos contigo mientras nos recuerdes. Te educamos para que seas fuerte y valiente, en cada acción qué hagas, estaremos ahí, porque nosotros te inculcamos eso. Honranos con una vida digna por favor, no te conviertas en un mártir o en una víctima de las circunstancias ¿Qué es lo que más ansía tu corazón, querido hijo?

-Solo quiero que nadie más tenga que sufrír algo como lo que yo viví.- Tenshin cerró los ojos, estaba al borde de las lágrimas.

-Tenshin, por favor, vive... No olvides tu ambición, no nos olvides, siempre estaremos contigo. Sigue tu propio camino, elige ser feliz.- Tenken abrazó a Tenshin hasta desvanecerse.

Tenshin empezó a derramar un par de lágrimas, no fue hasta que escuchó la voz de su madre en su visión pyro que rompió a llorar. Con ello liberó siglos de tormento, repitiendo la misma pesadilla una y otra vez, ahora ya no estaba atado a ese destino, su visión electro representaba su nuevo objetivo en esta vida.

- Sí tratas de aparentar

algo que no eres,

se esfumara la magia

Que da la ilusión...

Atrevete a enfrentar

salvaje y plenamente,

el milagro de vivir...- La voz de su madre se escuchó en toda el Tenshukaku, era su forma de decir que ella seguiría estando con él a donde quiera que fuese, aunque sea solo una parte.

Sara abrazó a Tenshin mientras siguió derramando lágrimas, hasta quedar dormido en su forma de zorro, en las piernas de la tengu. Aether se acercó a Ei, pero el peso de los golpes qué recibió lo hizo tambalearse hasta caer. Kuki, quien estaba entre la multitud, lo sostuvo entre sus brazos.

Aether fue tratado de inmediato, además de Kokomi, Gorou, Sayu, hasta Tenshin, quien aún seguía inconsciente. Ei reflexionó sobre lo ocurrido y meditó en silencio.

-¿Cómo fue que Tenshin sobrevivió a la Musou no Hitotachi? Cualquier otro habría terminado hecho polvo.- Paimon fue quien tomó la palabra.

-Al parecer fue debido a la promesa que hice con Tenken. Tenshin es inmune al electro por naturaleza, aún si no tiene que canalizar, es como si fuera parte de la energía elemental.- Ei respondió con calma, aliviada de que eso haya terminado.

-Ya veo, eso tiene sentido, entonces por tu promesa te aseguraste de no matarlo.- La Guuji se unió a la conversación.

- Es muy probable, lo que me dejó en claro todo esto es que ahora entiendo que una eternidad, sin cambios y sin un equilibrio de por medio, puede ser una gran maldición. De ahora en adelante me aseguraré de que no pase de nuevo algo así.- Ei una vez concluida con su reflexión se acercó a Aether. - Viajero, no tengo suficientes palabras de agradecimiento ante tu gran apoyo, sé que lo hiciste por intenciones personales, aún así sin ti no habríamos podido detener a Tenshin.-

-Lo que me preocupa es que harán con él de aquí en adelante, él puede que ya no sea un peligro, pero necesita a alguien quien lo guíe. En las manos correctas será un elemento valioso donde vaya.- El viajero estaba preocupado por lidiar con una situación así de intensa nuevamente.

- Yo-yo me haré cargo de él, después de todo, soy la única persona en quien él puede confiar.- Kujou Sara tenía al pequeño zorro elfo azabache en sus brazos. -Creo que será un reto hacer que sea reformado, pero merece tener una oportunidad al menos.- Todos encontraron hasta increíble que el oponente más tenaz que han enfrentado, no era más que un pequeño zorro negro de orejas largas.

-Espero que encuentre la paz a donde quiera que vaya.- Ei ve marchar a Sara con Tenshin en brazos y lo lleva escoltada con varios guardias a disposición.

Ei cayó de rodillas del alivio, el resto del grupo se preocupó al punto de Yae Miko la sostuvo con sus brazos y Kokomi le revisó para ver si tenía alguna herida oculta.

-No se preocupen, estoy bien, se los agradezco, es solo que... No sé cómo describirlo. Siento como si hubiese roto un ciclo enorme, ahora sé que podré empezar de cero. Les agradezco a todos, se muy bien que si quiero alcanzar la eternidad, no lo podré hacerlo sola, sino con el apoyo de todos ustedes...- Se levantó y se dirigió al viajero.- Aether-dono, este pueblo está en deuda con usted.- Inclinó la cabeza. -Sí conseguimos información acerca de su hermana Lumine, o cualquier cosa que necesite, no dude en pedirlo.-

-Se lo agradezco, Ei.- Aether inclinó la cabeza en señal de respeto.

***

Después de unos pocos días, Aether se encontraba con Paimon, los dos estaban dispuestos a salir de Inazuma, para dirigirse a Natlan, donde podría encontrar más pistas acerca de Lumine.

Ya al punto de zarpar se encontraron con una mujer de cabello dorado, ojos color miel, además de un vestido rojo con sombrero de bruja. No cabía duda, era Alice, una miembro del Heixenzirkel, y una prestigiosa aventurera.

-Alice ¿Realmente eres tú? No esperaba verte en la ciudad ¿Qué le trae a alguien como tú a Inazuma?- Beidou parecía ser la más interesada en la situación.

-Hola vieja amiga.- Esbozó una sonrisa con una pequeña risilla de por medio. -No es nada importante, es que vengo a cumplir la promesa que tengo con un amigo del pasado.-

-Suena interesante ¿Podrías contarme un poco más?- Aether sonrió con calma.

-Le prometí a Tenken que de encontrarlo cuidaría de su hijo. Verán, él fue mi compañero de viaje hace mucho tiempo, y un gran amigo, por eso me aseguré de venir para volver a encontrarme con Tenshin.- Ella cae en cuenta algo importante.-Ah, casi lo olvido...Recibí la carta de Yae Miko, por eso vine en cuanto pude ¿Saben donde puedo encontrarlo?-

-El aliento de perro está en la casa de Kujou Sara, en prisión domiciliaria. La situación con él ahora es delicada, por lo que es mejor no molestar.- Paimon fue sincera.

-De hecho, desde que despertó una semana después que no habla con nadie. Parece como si fuera una estatua de mármol.- Aether estaba frustrado, ya que intentó interrogarlo para que le diera información acerca de su hermana.

-Muy bien, entonces hablaré con él ¿Podrían acompañarme por favor? Me gustaría probar suerte, así tal vez él hable con ustedes.- Ella parecía optimista en el asunto.

-Honestamente también me gustaría ver lo que pasa ¿Qué dices Kazuha?- Beidou se la veía animada.

-No me parece bien del todo, aunque tampoco me parece una mala idea ver qué ocurre.- Kazuha estaba de brazos cruzados.

El grupo fue a la residencia de Kujou Sara, donde una una sirvienta llamada Suzuha los atendió. Ella parecía del tipo que solía discutir con su jefa, para que pueda hacer la limpieza en lugar de su empleadora.

-Buenos días... Viajero ¿Qué lo trae aquí de nuevo?- Le interrogó la criada.

-Me gustaría hablar con Kujou Sara, ella me conoce. Además soy una amiga de Tenken, mi nombre es Alice, un placer.- La bruja inclinó suavemente la cabeza.

La sirvienta cerró la puerta por unos minutos para venir de regreso con la dama tengu. Ella frunció el ceño al ver al viajero y a Paimon, por un inconveniente pasado; sin embargo cambió de opinión al ver a Alice.

-Ah, buenos días señorita Alice, un placer verla de nuevo ¿Viene por la carta que le enviaron?- Sara parecía bastante animada al ver a una cara conocida.

-Sí espero no importunar...- Alice parecía más serena que de costumbre.  - Espero que tampoco haya problema en que estos muchachos me acompañen.-

-Mmm... Está bien, lo permito, solo les pido que se comporten, en especial Aether y Paimon. No está bien, tratar así a mi huésped, aún si este es Tenshin ¿Entendido?- Ella puso un tono severo con ellos dos.

- Lo entiendo, no le gritare ni lo voy a sacudir para que hable.- Aether aceptó la condición.

- Aceptaré comportarme, aunque no por eso dejará de ser un tonto para mi.- Ella se cruzó de brazos y desvío la cara a un costado.

El grupo se reunió en la sala de estar de la señorita Kujou, donde las paredes eran de madera y  tenían un aroma a perfume de cerezo. En unos minutos, llegó Suzuha con un pequeño zorro negro con los ojos cerrados, sobre una almohada.

-Ha estado así desde que despertó, apenas se mueve para comer. Por favor, sean pacientes con él.- La sirvienta deja a Tenshin, el cual parece un pequeño peluche, encima del kotatsu.

El lugar se mantuvo en un silencio incómodo por un segundo, Alice no pudo evitar acariciar su pequeña cabeza con orejas largas y se dispuso a  hablar con él. Lo curioso fue que rápidamente activó su instinto materno al verlo.

- Esto me trae recuerdos, creo que ya sé como hacer para que hable.- Alice acerca a la criatura a si pecho y le empezó a cantar lo siguente:

-Atrevete a enfrentar,

salvaje y plenamente,

el milagro de vivir...

Romance te puedo dar,

Romance te puedo dar.

Sí me enseñas con valor

la verdad que hay en ti

Romance te puedo dar,

Romance te puedo dar.

Brillando en mi pecho está,

Vigorosamente el amor

Que hay en mi para ti... - Al cantar ese fragmento, el zorro desapareció de sus brazos. Todos se quedaron sorprendidos y asustados al sentir que no podían moverse.

- Maldición Yako: Posesión de sombra.- Él ex ninja del abismo estaba detrás de ellos revelando las galaxias dentro de sus ojos, y vestido con ropas blancas. No parecía hostil, pero imponía respeto y miedo. - Alice, no te he visto en un tiempo... Déjame adivinar ¿Fuiste tú quien le enseñó a hacer esos explosivos a Yoimiya?-

-Por supuesto ¿Quien más lo haría? ¿Cómo has estado pequeño Tenshin?- Alice no parecía perder la compostura, mientras que el resto sentían como si sus vidas estaban en las manos de aquel guerrero.

- Un poco mejor...- Tenshin se sentó con ellos en el kotatsu y deshizo la técnica del clan Hakushin, al mismo tiempo que cerró los ojos ante ellos. El resto quería decir algo al respecto, pero al mismo tiempo sentían que no valía la pena.

-Veo que tu padre te enseñó muy bien, realmente estoy feliz de conocerte. Me han hablado mucho de ti.- Alice se mantuvo amigable, frente a quien parecía una criatura maltratada recibiendo algo de afecto.

- Vi los cambios en el destino que  hiciste en Teyvat, así que tu también eres como él.- Señaló al viajero.

-Algo así... Vine a cumplir la promesa de tu padre y cuidar de ti.- Ella sonrió plácidamente.

-Ya veo... Entonces ¿Qué hay del resto? - Señaló al resto del grupo.

- Quiero que me cuentes acerca de mi hermana Lumine.- Aether fue directo, pero sin perder el tacto.

-No hay mucho que puedo decirte de la rubia exótica... A excepción de esto: Tu hermana esta muerta.- Aether puso una expresión de horror ante la declaración.- Muerta de aburrimiento por esperar tu despertar.- Aether frunció el ceño al oír la broma. - De hecho ella si murió, por eso se la considera una mujer de Kahenri'ah en lugar de una descendendida...Aether, no te quedaste dormido quinientos años, sino varias decenas de milenios, todo un ciclo. Lo que puedo confesarte sin que hayan repercusiones futuras es que debes ir a Natlan, una vez hecho esto y descubierto la verdad del mundo, ven a verme.- Aether quedó con una expresión de incredulidad y sorpresa ante la respuesta del híbrido.

-¿Es cierto todo lo que me dices? Es una verdadera locura.- Aether quería saber más cosas.- Por favor, cuéntame todo lo que sabes.-

-Debo tener cuidado de la información que revelo, especialmente porque no quiero que ocurra un efecto mariposa. En una de esas te mato por accidente, al decir algo que no necesitabas saber en su momento.- Tenshin era bastante cauto al respecto. - Ahora, si no les molesta, me gustaría conversar con Alice-san. Es algo muy privado.-

-Espera un poco Tenshin, creo que nos debes algo a nosotros.- Quien dijo esto no era más que la capitana Beidou.

Tenshin hace una posición de dogeza, enfrente del viajero, Beidou y Kazuha. A Paimon se podía sentir una pizca de hostilidad, solo percibida por la compañera de Aether, sin embargo ninguno de los dos se molestó con la idea de pelear.

-Mis más sinceras disculpas, desde el fondo de mi corazón. Encontraré la forma de compensar el daño ocasionado. -Tenshin dejó la frente en el suelo. -Espero que nos encontremos en una mejor situación que está, haré lo mejor para mejorar como persona, ahora que tengo la oportunidad de salir de esta retorcida maldición.- Sus disculpas eran sinceras.

-¿Piensas disculparte con Ei y Yae Miko alguna vez?- Las palabras se deslizaron de la boca de Kazuha, realmente quería saber su opinión al respecto.

-Por el momento no, hay muchas heridas por cerrar y conflictos por resolver, tomará un tiempo.- Tenshin fue directo con el asunto.

-Está bien, espero que encuentres la paz donde quiera que vayas, Tenshin.- Beidou suspiró, si algún día cumples con lo que dijiste, puedes ir con nosotros a visitar a la Crux.- La capitana se levantó del tatami y se dirigió a la entrada.

-Espero algún día encontrarnos en mejores circunstancias, de paso, también me gustaría entrenar contigo alguna vez, siento que te contuviste todo este tiempo.- Kazuha siguió a Beidou a la salida.

Después de que Aether y Paimon se fueran, la bruja y el híbrido quedaron a solas. Ella parecía muy interesada en lo que quería Tenshin, pero no sentía desconfianza, ya que parecía que genuinamente buscaba otro camino en su vida.

-Alice-san, me gustaría pedirte que me guíes en el nuevo camino qué quiero tomar. En otra vida habría matado a Ei, para luego ascender a Caim, el Dios de la muerte, en esta vida solo deseo seguír siendo un humano.- Tenshin inclinó la cabeza hacia ella.

-Está bien Tenshin, te ayudaré para que te reforme y seas mejor ¿En serio fuiste un dios en otra vida?- La bruja quería respuestas.

-Fue una tortura, nunca supe porqué puedo recordar todos los ciclos qué viví desde el principio de los tiempos ¿Hay algo que quieras decirme?- Él abrió uno de sus ojos, como si ya supiera la respuesta de antemano.

- De hecho sí, tu padre me habló sobre eso, me dijo en el pasado que no tomaría partido por ninguna pareja, debido a que la diosa de los decretos maldijo su descendencia. No conozco los detalles, aún así no lo tomé a cuenta, tal vez fue eso lo que te atormentó todo este tiempo.- Ella apagó su sonrisa por un instante y bajó la mirada.

- Bueno, nada de eso importa por ahora, lo importante será lo que haremos aquí y ahora. Alice, te pido hacer un contrato divino conmigo.- Cerró su ojo y puso su mano en el pecho. - Te daré toda la información que poseo, todo lo que aprendí en las decenas de vidas que viví.-

- ¿Qué pides a cambio, cariño? - Ella parecía interesada en hacer un contrato con alguien como él.

-Solo que me ayudes compartiendo tus conocimientos conmigo. Te daré un adelanto sobre lo que sé: Paimon es en realidad la creadora de la magia, de la alquimia, y quien creó las visiones en Teyvat.-

-De acuerdo, tenemos un trato Tenshin, te apoyaré con mis conocimientos y habilidades.- Alice se rió un poco, ya que podía intuir lo que vendría a continuación.

Después de sellar el trato, ambos empezaron a discutir sobre todos los secretos qué guardaban entre sí con recelo y aprendieron muchas cosas uno del otro.