Capítulo 38: El Susurro del Corazón - La Tormenta del Amor
La paz del hogar se vio interrumpida por un golpe seco en la puerta. Ryeowook, con un presentimiento de malos augurios, se acercó a la puerta con Kim Ryekook agarrado de la mano. Al abrirla, se encontró con sus tíos, su mirada fría y hostil.
"Ryeowook," dijo el tío de Ryeowook, su voz era un susurro de odio. "No creíamos que volverías a ver a esta mansión."
"No son bienvenidos aquí," dijo Ryeowook, su voz era un susurro de defensa. "Váyanse."
"No nos vamos a ir hasta que no hables con nosotros," dijo la tía de Ryeowook, su voz era un susurro de desprecio.
Ryeowook puso a Kim Ryekook detrás de él, su cuerpo temblaba de miedo.
"No quiero hablar con ustedes," dijo Ryeowook, su voz era un susurro de desesperación.
"No te creo," dijo el tío de Ryeowook, su voz era un susurro de furia. "Sé que estás escondido aquí con ese hombre."
"Ese hombre es mi esposo," dijo Ryeowook, su voz era un susurro de defensa. "Y no tengo nada que ocultar."
"Claro que sí," dijo la tía de Ryeowook, su voz era un susurro de sarcasmo. "Eres un mentiroso."
El tío de Ryeowook se acercó a él, sus ojos llenos de odio.
"Te dije que no te gustaría vivir con ese hombre," dijo el tío de Ryeowook, su voz era un susurro de amenaza.
"No me importa lo que digas," dijo Ryeowook, su voz era un susurro de desesperación. "Váyanse de mi casa."
El tío de Ryeowook se descontroló, su mirada se volvió salvaje. Empujó a Ryeowook y le dio una bofetada a Kim Ryekook.
La tía de Ryeowook se rió con crueldad.
"Eres un débil," dijo la tía de Ryeowook, su voz era un susurro de desprecio. "Siempre lo has sido."
En ese instante, Jungkook salió de la casa, su rostro furioso.
"¡No te atrevas a tocar a mi familia!" gritó Jungkook, su voz era un rugido de furia.
Jungkook se abalanzo sobre el tío de Ryeowook, golpeándolo con fuerza.
Ryeowook, sintiendo la adrenalina correr por sus venas, se lanzó sobre la tía de Ryeowook, agarrándola del pelo y abofeteándola con fuerza.
El susurro del corazón de Ryeowook se había convertido en un grito de furia, un grito que resonaba en el alma de todos, un grito que cambiaría su destino para siempre.