Capítulo 1038 — ¿Asustarla hasta la muerte?

Los pasos de la mujer se alejaban cada vez más hasta que Ning Xi ya no pudo oírlo.

Todo el lugar estaba totalmente en silencio y no había ni el más mínimo crujido. Podía oírse a sí misma moviendo sólo una pulgada de su cuerpo y el diminuto sonido que hacía se magnificaba, aterrorizándola.

Ya estaba asustada, incluso cuando había otra persona con ella; ¡dejarla sola era una tortura!

Ning Xi respiró hondo y cantó los mantras religiosos que recordaba mientras intentaba mirar a su alrededor para distraerse.

Había una vela blanca tenuemente encendida en el tocador. Pudo ver que el diseño de la habitación era bastante similar al exterior. La única diferencia era que era mucho más aterrador. También se dio cuenta de que la habitación era muy espaciosa. Por la estructura y decoración de la misma, debía ser el dormitorio principal...

¡Dormitorio principal!

Ning Xi de repente corrió a una esquina, lejos de la entrada.