Castillo

El castillo era negro y tenia grandes puertas de oro, de un grosor que sobrepasaba los ocho centímetros, nunca había visto tanto oro en toda mi existencia, esas puertas estaban muy bien cerradas, pensé en trepar por un muro que se encontraba a mi derecha, pero ese muro era demasiado alto, como de unos cincuenta metros de altura y dos metros de grosor. Me mataba la curiosidad pero no podía entrar a ese gran castillo, en la pared encontré una cerradura muy grande, de un metro y medio de altura ¡Diablos! ¿A quien pertenecerá este extraño Castillo? Decidí seguir mi camino, necesito encontrar agua o moriré, acelere un poco el paso. Ya a pasado un buen tiempo, estoy ya cansado de caminar y no hay una ¡puta señal! ¡De ninguna jodida! ¡Aldea! ¡ni nada! Tropecé con algo muy duro, al mirar al suelo, veo una roca muy extraña la rodeo y sigo mi camino... Siento unos pasos detrás de mi, tomo el cuchillo de mi bolsillo y me volteo rápidamente! No veo nada, debo estar escuchando cosas, sigo mi camino, a los cinco minutos, de nuevo siento los pasos, me volteo nuevamente y no veo nada , pero esta ves siento una voz muy relajada- hola, ¿acaso no me ves?. Sentí que mi sangre se congelaba y no me atrevía a mirar detrás, respondí -Quien Eres?-   - voltea y lo descubrirás. Me volteo suavemente y no veo nada, sera una especie de fantasma, me pregunte. -Eres un espíritu?- pregunté.

- jajajaja, podrías mirar un momento al suelo. Baje la mirada al suelo lentamente, lo que vi fue una Piedra muy parecida a la que encontré hace unos minutos atrás, le pregunte. -Esto es una broma, porqué no me da ninguna gracia! Me quede mirando fijamente a aquella roca negra con manchas azules, y algo muy raro sucedió, la extraña Roca comenzó a moverse, le di una patada y calló a unos 4 metros de distancia, pero esta ves callo boca arriba, pude notar que la roca tenia seis patas, como una cucaracha, se volteo rebelando un rostro muy bello, era El rostro de una mujer muy Hermosa, pero con un caparazón y seis patas de cucaracha.

- mi nombre es Bazzal- dijo el insecto.

-¿Y qué se supone que eres o qué? Y porqué me sigues.

- Solamente estaba de paso y te vi cerca del castillo dorado, me dio curiosidad y te seguí- dijo Bazzal.

Puede que esta extraña criatura me pueda guiar a la aldea mas cercana.

- ¿Hacia donde te diriges?- pregunto Bazzal. -Ni yo mismo se hacia donde voy, podrías guiarme a la aldea mas cercana, necesito alimentarme y un sitio para pasar la noche- respondí.

Bazzal- hay una aldea que se encuentra a unos siete kilómetros de aquí. El extraño insecto abrió su caparazón, revelando unas alas de colores muy llamativos, se elevo unos dos metros y comenzó a volar a mi lado. Bazzal- de donde Eres amigo? Soy de una aldea cercana y me e perdido. Bazzal- hací que perdido...

Caminamos una hora y encontramos un aldea no muy grande, donde se escuchaban muchos gritos, era como una discusión muy fuerte que acontecía en ese lugar. Bazzal- Esta aldea es famosa por sus constantes algarabías y desapariciones, se dice que desaparecen cerca de cinco habitantes por día. Pues debemos cuidarnos, no queremos ser secuestrados. Bazzal- también es famosa la aldea por la muy sabrosa carne que preparan. Que bueno, tengo Mucha hambre no e comido Nada en horas. Bazzal- entonces estas de suerte, conozco a un amigo que es dueño de uno de los mejores restaurantes de la zona. Entonces que esperamos vallamos a ver a ese amigo tuyo, me muero de hambre....