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El cultivador más poderoso renace en un apocalipsis zombi

Yu Ning es un cultivador solitario que alcanzó el pico de las artes marciales, alquimia y herrería. Cuando estaba apunto de alcanzar el reino de un santo marcial se dio cuenta que su cuerpo no sería capaz de soportar el poder. Aun así continuo rompiendo a través del siguiente reino provocando una reacción adversa y muriendo. Antes de su muerte el colgante entregado por su amante fallecida brilló. Despertándolo en un nuevo mundo con una belleza desnuda a su lado. En esta vida encontrará a la rencarnación de su amada mientras destruye zombis en el proceso y fortalece su físico.

EXCALIBUR_st · Acción
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9 Chs

Capítulo 2 – Renacimiento

¡Xue'er!

Miré desesperadamente a mi alrededor. No podía reconocer donde estaba. La última vez recuerdo que estaba en el pico más alto de la montaña sagrada enfrentando mi tribulación celestial para ascender y convertirme en un Dios. Sin embargo, fallé y morí miserablemente.

El paisaje frente a mí era diferente y no podía reconocer nada de lo que había a mi alrededor. La habitación consistía en un dormitorio grande con una cama y varios aparatos o artefacto de los que nunca había visto o escuchado. Buscando una cura para Xue'er me convertí en un alquimista y herrero famoso por lo que conocía de medicina y artefactos.

La curiosidad me obligó a levantarme de la cama y buscar una superficie para ver mi reflejo. Afortunadamente existía un espejo de cuerpo completo. Frente a mí un joven extremadamente apuesto con un cuerpo ligeramente cincelado estaba frente a mí. Mi cabello era largo de color negro. Mi mirada afilada, ojos negros y cejas gruesas se mantuvieron. Esta imagen era exactamente la que tenía en mi vida anterior.

¿?: Umm… Yu Ning regresa a la cama ~

Junto con esas palabras una serie de recuerdos inundaron mi cabeza. Este cuerpo pertenecía al joven maestro de la familia Yu. Al parecer un poderoso virus azotó a la humanidad convirtiendo al noventa por ciento de la población en zombis. Esto generó que las pocas personas en el mundo se aislaran creando refugios. Al pasar de los años surgieron los despertados. Seres que consumían la llamada energía evolutiva y despertaban diversas habilidades. La familia Yu era conocida por su fundador quien fue el despertado más poderoso de la historia. Quien creo con sus propias manos el primer refugio de la humanidad llamado ciudad fénix. Desde entonces todos los miembros de la familia Yu fueron considerados genios quienes impulsaron y ampliaron los límites de la ciudad. Sin embargo, este Yu Ning era considerado una decepción y una basura inútil en la familia. Queriendo corregir esto el patriarca y padre de Yu Ning lo envió a la academia Miller de evolucionares con la esperanza de que se reformara.

Al llegar a la academia los comportamientos tiránicos de Yu Ning se volvieron desenfrenados y cada vez más déspotas. Sin embargo, esto no pudo importarme menos. Frente a mi había una mujer extremadamente hermosa. Su figura era excepcional y sus curvas eran simplemente perfectas. La mujer estaba levantándose cubriéndose ese voluptuoso cuerpo con una sábana blanca. Su cabello era rojo que hacía juego con sus ojos que recordaban a las llamas mismas. Su rostro era fino y delicado. Su piel lucia como la porcelana más fina e impecable. Esta mujer era definitivamente una diosa en todo el sentido de la palabra.

Aterrorizado dije.

¿Quién eres y que haces aquí?

La joven aturdida me miró y parte de su voluptuoso pecho que podría compararse con melones dijo.

¿Ya te olvidaste de mí? ¡Tienes que tomar responsabilidad por lo que hiciste!

No pude evitar maldecir a este desagradable y estúpido joven maestro. Haciendo memoria recordé los detalles de esta chica que continuaba soñolienta frente a mi completamente desnuda.

La joven señorita del clan Mu y la hija menor del comandante Mu En. Mu Mei era conocida por ser libertina y hacer todo lo que quisiera. Sin oportunidad a replicar nada vi la mancha de sangre sobre la cama. Al parecer no podía evitar involúcrame con esta mujer. Acabó de decepcionar a Xue'er incluso antes de haber empezado a buscarla.

Me prometiste que sería tuya y que junto alcanzaríamos la cima.

Mu Mei empezó a hablar haciéndome recordar todo lo que hizo este estúpido joven maestro anteriormente.

*TOC *TOC

Mu Mei sabemos que estas aquí, abre la puerta. El patriarca quiere hablar contigo y con ese joven de la familia Yu. Si no sales destruiré esta puerta y los arrastrare a los dos ante el patriarca.

La voz de una mujer sonó muy enojada. Escuchando esto Mu Mei se sobresaltó y empezó a vestirse apresuradamente.

¡Rápido! ¡Tienes que huir! ¡Si mi padre te ve vas a morir!

Al escucharla también me empecé a vestir apresuradamente. No conocía la fuerza de los despertados y al parecer este cuerpo no tenía ningún cultivo. Sería imprudente realizar un movimiento antes de fortalecer este cuerpo.

*SLAP

La puerta cayó al piso y una mujer vestida como secretaria entró. Su pantalón negro de tela y sus tacones acentuaban las curvas de sus muslos y estilizaban su apariencia. La blusa blanca completamente impecable dejaba a la vista el basto pecho que tenía. Su rostro era serio junto con sus lentes le daban la apariencia de una belleza fría e intelectual. Su cabello era negro recogido en una esfera que era sujetado por lo que parecían ser lurroses.

Afortunadamente había terminado de vestirme a tiempo. La mujer observó con detenimiento la situación. Cuando su mirada se fijó en las sábanas de la cama su rostro se volvió frío. La mujer se abalanzó contra mí. Su mano estaba completamente extendida y sus uñas apuntaban a mi pecho. Podía sentir la intención asesina de la mujer la cual era increíblemente densa.

Esta cantidad de intensión asesina no era suficiente para bloquearme por lo que simplemente obligué a mi cuerpo a tirarse hacia un lado. Aun en el aire coloqué mi mano sobre el piso y extendí mi pie impactando una patada contra la mujer quien la recibió de lleno o eso creía. Con la otra mano la mujer agarró mi talón y me envió contra la pared.

Tienes agallas muchacho.

La mujer camino lentamente hacia mí mientras sus uñas crecían como si fueran garras. Miré a la mujer mientras estaba tumbado en el piso y la pérdida de sangre nublaba mi vista. Frente a mí la figura de una mujer se interpuso entre la secretaria asesina y yo.

¡No lo toques!