CAPITULO 71: HASTA EL FIN DEL MUNDO

OKE Y ESU corren hacia TOIRE, se encuentra en mal estado, pero, aún respira.

ESU lo cura, WAPURO se sorprende cuando ve el rostro de TOIRE, ESU ha madurado, no solo es capaz de sanar sino, también recuperar la energía perdida.

SATORI pide a todos que abandonen el salón del trono.

TOIRE en cuanto reacciona, al no verla, pregunta por KEKI.

Los amigos no saben qué decir.

Sólo atinan a decirle que luego de que le cayera un rayo.

Un hombre desconocido salió de un portal y se llevó a KEKI.

TOIRE cae en la desesperación.

INKU Y OKE también están desesperados, impotentes.

Miran a WAPURO, ni siquiera ella tiene una respuesta.

LA PRINCESA que, está un poco apartada, con seriedad les habla: Ese hombre es CHONT-SU, nunca lo habría imaginado, en persona vino por ella y se la llevo a su dimensión.

En verdad no sabe lo que significa.

INKU pregunta a que se refiere.

Ella explica que INFRAMUNDO no sólo consta de una dimensión.

Existen 6 dimensiones en el INFRAMUNDO que se conocen, esta dimensión es llamada CHOSEN, el hombre que vino, vive en una de las otras 6: INFIERNO ALTO, INFIERNO BAJO, WASHI, CIELO, ESPERANZA Y OSCURIDAD.

La magnitud de este evento rebasa las expectativas de los guerreros, amigos de KEKI.

El mismo TOIRE se pregunta a sí mismo, ¿cómo podrá llegar hasta ella?

SATORI advierte que, CHONT-SU es muy poderoso, uno de los mas fuertes en sí.

Además, solo es uno de los 6 gobernantes de INFRAMUNDO, aparte de ella, como séptima gobernante.

SATORI, con mucha tristeza, narra que, CHONT- SU, tuvo el poder, de cegar el amor de un hombre a su conveniencia y le robo la vida a ella y AISU, no sabe de lo que será capaz ahora que tiene el fruto del cielo.

SATORI, lamenta, el no haberse dado cuenta de que, CHOSEN no sólo recuperó si vitalidad y vida por su liberación.

Sospechaba desde hace poco tiempo que, no era debido a SATORI, si no, a KEKI.

El legado de su estrella, con ello, descendiente directa de un ángel, el ángel YUEL.

Y ahora, está en manos de CHONT- SU.

TOIRE se levanta, el advierte que, no piensa que no será por mucho tiempo, TOIRE, irá a recuperar a su esposa, aunque le cueste la vida.

INKU lo mira, se pregunta el método que deben usar para ayudar a TOIRE.

TOIRE reitera que, no tiene idea de ¿cómo lo hará? solo sabe que eso pasará.

NEMU le dice que no ira solo.

NAIFU lo confirma.

ESU y OKE, lo apoyan, son una familia ahora.

Él sonríe un poco.

La PRINCESA les dice que hay un modo, WAPURO lo sabe y protesta, no lo aprueba del todo.

Pide prudencia a SATORI.

SATORI agradece a su amiga WAPURO, pero, esto es más importante que antes, además, INFRAMUNDO ya de no depende de SATORI sino de KEKI.

WAPURO con algo de impotencia, pide a SATORI que no sienta que es desechable.

SATORI suaviza su voz.

Ella, todo este tiempo se negó a morir, por la esperanza de que INFRAMUNDO sobreviviera.

Esto fue posible debido al esfuerzo que hicieron todos aquellos que lucharon contra el mal.

Hay muchas cosas que no debieron ser.

Incluyendo el amar a AISU, el haber engendrado vida y heredar el pesar a sus descendientes.

Lo único salvable fue el poder de sustentar la vida de toda una comunidad de dimensiones y regir sobre una de ellas.

Si bien es un derecho, también una obligación que no hubiese deseado dar a nadie, sin embargo, pasó.

Hay que recuperar al ángel, fruto del cielo.

Y WAPURO sabe, el único camino, es abrir un portal.

TOIRE pide a SATORI que le ayude a lograrlo.

SATORI asiente y WAPURO protesta, con la fuerza actual que SATORI posee, sólo podría lograrlo a costa de su vida.

Se hace un silencio en el salón.

A SATORI, no le importa morir si con ello ayuda a salvar a KEKI, de algún modo es su hija, además, (la mirada de SATORI se torna nostálgica) ella desea descansar junto a AISU, él hombre que fue su amigo, su guardián y consejero, su amor leal, (la voz de SATORI cambia, se le ha hecho, un nudo en su garganta) su deber como fuente de vida era velar por INFRAMUNDO, sin embargo, como saben, ellos cometieron el pecado de amarse y dar fruto a su amor, aunque AISU no lo supo hasta el final, ella sabe, ella sintió, que AISU, amó a KEKI desde lo más profundo, sólo le bastó un instante para sentir amor por su hija.

AISU, el murió para pagar su pecado, y ahora es el turno de ella.

SATORI narra, que, en aquel tiempo, la dimensión de CHOSEN estaba sellada desde el momento en que SATORI nació, sin embargo, la tristeza de la separación de SATORI Y AISU, abrió un portal y CHONT-SU pudo ingresar a esta dimensión, le hizo una oferta a AISU, esta dimensión caería bajo su poder y AISU mantendría a SATORI, solo para él.

SATORI, considera que, AISU, debió haber sentido mucho su dolor porque, acepto.

La fuerza que CHONT-SU ejerció desde el portal, fue tanta que superó el poder de SATORI, AISU, influenciado por ese tremendo poder, la encerró dentro de aquella burbuja dimensional, a pesar de ello, a pesar del tiempo, su amor no se perdió, pero, como consecuencia, su tristeza crecía cada día.

Su calvario durante estos mil años, fue que, aquél hombre al que veía, era AISU, pero, no tenía su corazón.

En algunas ocasiones, el alma de AISU escapaba del control y lograba hablar con ella, pero, sucumbía a sus malos deseos.

WAPURO sabe muy bien que, sólo un gran amor o un gran dolor pueden abrir el portal por la fuerza, y el costo es alto.

INKU confronta a SATORI, le pregunta si es su vida lo que apostará.

SATORI, algo triste, le sonríe y le dice que sí, pero, les pide que no se opongan, de esta manera, SATORI, por fin podrá amar libremente a AISU y juntos velaran por todos en CHOSEN, ella sabe, que él, la espera.

A pesar de que, TOIRE y los demás sienten cargo de consciencia, deben respetar el dese de SATORI.

LA PRINCESA, une sus manos rezando, el cuerpo de la PRINCESA comienza a iluminarse, su luz cubre poco a poco todo CHOSEN, el cielo de CHOSEN se siente como si fuese el medio día, el cuerpo de SATORI se desvanece, dando paso a la formación de un halo de luz, en el altar, es un portal dentro del salón.

Algunos de ellos, lloran la pérdida de su PRINCESA.

FIN DE CAPITULO 71