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CAPITULO 64: EL RETORNO AL REINO DE KIRO

Por la mañana, TOIRE se levantó temprano para cortar unas piezas de árbol.

Les ha estado dando forma, es la suela de las zapatillas que ha estado haciendo para KEKI.

No hay nada que hacer por su vestimenta por ahora, llegando al castillo de KIRO, podrá cambiarse.

Con retazos de tela gruesa, TOIRE corta la forma adecuada para que, al cocerla, quede hecha la zapatilla.

KEKI ayuda con las costuras.

INKU Y OKE ayudan a juntar frutos de los árboles cercanos, ahora que el valle ha retomado su vida, hay alimento abundante que atraerá a muchos animales y personas.

Antes del medio día, están listos para partir.

Todos están en mejores condiciones luego de un merecido descanso, no obstante, en su piel, quedaron marcas de la batalla.

Si bien, el recorrido de regreso no fue tan severo como la primera vez.

Descubrieron que algunos de los animales de los alrededores comenzaron a vagar por el valle.

La vida regresa.

Para su retorno, evadieron la zona del desierto y tomaron el camino largo.

Ahora que, el mal ha sido detenido, no hay prisa para arriesgar sus vidas de nuevo por ese paraje que, les brindó experiencias aterradoras y justas para fortalecerse mas que nada, mentalmente.

En cada paso arriesgaban la vida.

En cada paso se unían sus corazones como una gran familia.

Por ahora, no han decidido lo que harán con sus vidas, solo, quieren regresar al reino de KIRO que, está mas cerca del castillo.

De ahí podrán enviar a SATORI al castillo de la PRINCESA DE INFRAMUNDO.

No saben en qué circunstancias se encuentra el castillo, habitantes o sacerdotes.

SATORI pide ayuda a WAPURO, ella ayudará en el castillo.

Al no tener hogar y poseer dones curativos, WAPURO pide a ESU como su aprendíz, SATORI, con una leve sonrisa de agradecimiento, les dice que el castillo siempre estará abierto a todos ellos.

Es su hogar también.

En dos semanas, llegaron al reino de KIRO.

El cuál todavía estaba sitiado por malignos en menor cantidad.

La constante llegada de nuevos malignos les impedía terminar con la guerra que había durado casi una década.

El grupo es divisado a lo lejos por los vigías del palacio.

En cuanto llegaron a la ciudadela, todos rodearon a la PRINCESA SATORI, a la cual están protegiendo.

En su avance, van destrozando a todos a su paso.

No se dan cuenta de que han sido observados desde su salida del valle de la antigua ciudad de NANEKI.

Es alguien cubierto de su cabeza, con una capa larga.

Desde dentro del castillo, una lluvia de flechas hiere a muchos malignos, algunos de los mas fuertes, montados en bestias, logran escapar, trepando alguno de los muros, para perderse en el bosque cercano.

Muchos de los guardias que están listos para saltar en cuanto bajan el puente a media asta, los siguen de cerca.

La zona ha sido asegurada, luego de mas de una hora de lucha constante.

Si hubieron bajas en los guardias del castillo, del lado del grupo recién llegado no hubo bajas, pero algunos golpes y heridas menores los alcanzaron.

Han bajado el puente en su totalidad luego de casi una década.

De aquellas murallas que, fueron su prisión y su refugio, van saliendo algunos de los habitantes, gustosos de ver de nuevo a su REY y a sus PRINCESAS.

Se han llevado una enorme sorpresa al ver que hay alguien que los acompaña, es una mujer demasiado bella y desconocida para todos.

KIRO, les comunica que deben entrar primero, luego les dirá la identidad de la mujer en el gran salón.

Muchos la miran con curiosidad, todos avanzan hacia dentro del palacio.

Los guardias vuelven horas después, les dieron caza a muchos de ellos, otros lograron escapar.

KIRO les pide descansar, fue un duro trabajo.

De cualquier forma, estarán alerta a los disturbios de las aldeas vecinas para prestar ayuda, se organizarán al día siguiente.

Por ahora, les pide que los dejen descansar hasta la hora de la cena, ahí es donde se reunirán todos los habitantes.

A puerta cerrada.

Levantan el puente por ahora, aún la ciudadela no es segura.

Al pasar de las horas, en el gran salón, KIRO presenta a la PRINCESA DE LOS MIL AÑOS.

La incredulidad no se hace esperar, solo que, saben que KIRO sería incapaz de mentirles.

La euforia y la paz inundan los corazones de los habitantes, ahora tienen esperanza en INFRAMUNDO.

SATORI debe regresar al castillo con prontitud.

KIRO mandará una escolta con la PRINCESA SATORI, además de la compañía de ESU Y WAPURO, se suman INKU Y OKE.

Ellos aún no han decidido un lugar a donde ir.

KEKI ha aceptado la oferta de KIRO de quedarse un tiempo en el palacio, por supuesto, con la compañía de TOIRE que, ha pedido permiso para quedarse.

KIRO lo abraza y e anuncia que será su compañero de juego de ajedrez ya que UISUKII está algo oxidado por el momento, todos ríen.

NEMU Y NAIFU están felices de poder regresar a casa, vivos.

NEMU aun tiene muchas dudas sobre sí misma y desea en algún momento tener una conversación con KEKI.

Por la mañana, la escolta de SATORI, ha emprendido su viaje.

SATORI ahora no sabe lo que debe hacer, si bien, hay un deber que cumplir.

Ella, no sabe lo que hará con su vida, debe hallar un propósito para poder vivir.

De lo contrario, el mal clima es solo una parte de lo que deberá preocupar.

Su vida está unida a todo INFRAMUNDO.

Tuvieron un camino sin contratiempos.

Al llegar al castillo, pueden darse cuenta de que hay mucha soledad, los guardias alcanzan a ver el carruaje y el sello que está decorado en la carreta, pertenece al reino de KIRO.

Uno de los guardias (un adolescente) corre hacia la puerta, por dentro hay una torre vigía a la cual sube, los interroga antes de abrirla.

Los visitantes bajan de la carreta, el guardia, al mirar a SATORI casi se cae desde lo alto de la puerta.

Es imposible no reconocerla, está en muchas de las pinturas del palacio.

Las lágrimas salen de los ojos del joven guardia.

Apresurado, abre las puertas para dejar entrar el carruaje, SATORI, seguida de los demás, entra a pie.

Es casi un sueño poder ver de nuevo el castillo, no ha cambiado mucho en 1,000 años.

fin de capitulo 64