CAPITULO 19: EL COMPROMISO DE KEKI

Dentro de la cueva, KEKI, está con la muchacha aun temblando casi inconsciente, la desató y la ayuda a cubrirse, han entrado de prisa TOIRE, INKU Y OKE, ven que la chica está severamente golpeada.

Hay muchas manchas de sangre por las paredes de la caverna, incluso en el techo de la misma.

La apariencia de la chica, indica que no es sangre de ella, al menos la del techo no.

Ellos sienten un poco de temor.

Esta faceta de KEKI, tal vez no sea la última que vean.

OKE algo sorprendida le pregunta a KEKI ¿Qué le hizo al tipo?

KEKI con algo de odio le dice que nada que no mereciera, tal vez viva en su miseria.

TOIRE, se acerca, mira preocupado a la joven, el irá por sus cosas para curarla, pero, KEKI le dice que espere.

Ella necesita algo mas rápido, su estado es malo.

KEKI utiliza una vez más su poder de sanación, la joven, tiene varias heridas muy profundas así que, tarda un poco más.

El líquido azul cubre a la chica por completo llenando un poco la cueva de luz.

TOIRE le pregunta si ella va a estar bien.

KEKI le dice que puede curar sus heridas mas no restaurar su energía y cree que a todos les hace falta, además, no sabe cómo todo esto le afectar mentalmente.

TOIRE dentro de si, en verdad le preocupaba mas, si KEKI estará bien después de esto.

(durante un tiempo después del castillo de KIRO, la chica aun tendrá pesadillas que irán disminuyendo su intensidad de acuerdo a la confianza en sus compañeros y desaparecerán cuando pasa el examen de TESUTO).

Al terminar la curación, la chica no está consciente, pero, ya no está temblando.

INKU la carga, mira con tristeza el lugar de donde estaba la joven, rastros de sangre, su sangre, le da rabia.

Se la llevan a la cueva donde estaban.

TOIRE amarra los caballos de la carreta en una cueva más apartada, pero a la vista de ellos.

KEKI se pone de pie junto a la entrada de la cueva cubierta por agua (por dentro se ve, por afuera no se distingue), ve como sus compañeros se preparan para dormir, mira que TOIRE arropa a la chica.

KEKI voltea hacia afuera, es su turno de vigilar, KEKI, por una pequeña abertura de agua alcanza a ver el cielo.

TOIRE la ve a distancia, el despierta más tarde y va hacia ella (ve su silueta).

Él le dice que la luna esta bonita ¿no?, ella lo afirma.

Un poco mas confiado, TOIRE se sienta a su lado, ella no lo volteó a mirar, TOIRE un poco inspirado por la tragedia de la chica, le comienza a contar a KEKI su historia.

Durante uno de los ataques a las aldeas, TOIRE perdió a sus padres desde muy chico, justo en un incendio de su aldea, sus padres trataron de sacar a sus hermanos, el, había ido lejos de su casa, a traer algunos panes para la comida.

Muchos murieron, de los niños que lograron salir con vida, muchos quedaron al cuidado de una mujer de nombre HELENA, todos los niños tenían de diferentes edades, a todos les enseñó de acuerdo a nuestras habilidades y a nuestra edad, todos tenían tareas en casa, así que se sentían importantes, el sonríe un poco, era una mujer de carácter fuerte y amable, cuidó de ellos en todo momento, por muchos años, siempre huyendo del peligro, siempre pensando en sus niños, todos la quisieron como una madre, pero, como era una mujer mayor, murió hace algunos años.

Al menos murió contenta, rodeada de todos sus hijos, ya todos crecidos a una edad suficiente como para poder vivir solos.

Con nostalgia le dice que su viejita adorada le enseño una cosa: que para todos hay un destino y una hora, solo debemos escribirlo nosotros mismos.

KEKI lo mira con empatía, ella se atreve a hablar: la responsabilidad que llevo...

TOIRE: ¿los libros?

Ella afirma, le dice que su responsabilidad es llevarlos a su destino, de otra manera, la extinción de su pueblo habrá sido en vano, ella aun no es (se pone algo molesta) más que una aprendiz.

Él le dice que una aprendiz muy buena, por cierto.

La hace sonreír un poco, el agradece la sonrisa.

Ella explica que controla lo básico, pero, estaba aprendiendo hechizos de alto nivel y ahora se siente estancada.

Conoce las teorías porque las estudiaba mucho pero no las ha practicado nunca.

El comenta que ella tiene futuro, además, hay un gran campo de entrenamiento desde ese punto hasta NANEKI.

KEKI se siente agradecida con TOIRE, tiene razón, tiene tiempo de practicar en el camino.

TOIRE le recuerda que ya le toca la guardia a INKU, así que la manda a dormir.

Ella se levanta más tranquila, le habla a INKU, que agradece que le haya avisado, INKU se estira en su lugar y se levanta, se sienta junto a TOIRE, quien mira que ella, se va a acostar cerca de la chica.

KEKI mira a la chica, ella respira mas tranquila.

Se recuesta y se dispone a dormir.

FIN DE CAPITULO 19