CAPITULO 114: HE VENIDO A MATARTE
WASHI se levanta de su asiento en completa calma, embozando una sonrisa irónica, dice: ya veo… Igual decidiste tus propios males…
WASHI comienza a bajar la escalinata de lo alto del estrado, despacio, y casi al ir a media escalinata, lanza un ataque hacia ellos, NEMU reacciona primero y lo frena con el uso de su báculo, girándolo en su muñeca, éste al pararlo, refleja el ataque hacia WASHI, quien se tele transportó al final de la escalinata para evadirlo.
Ahora WASHI ha tomado consciencia de que ella posee mucho poder, tanto como para ser portador de una estrella, duda de momento si ella es, la luz de CHOSEN.
WASHI necesita sentir su esencia y para ello debe acercarse, WASHI comienza a atacar hacia NEMU usando su tele transportación, todos, rodean a NEMU, con excepción de OCEANÍA quien ha apartado a KEKI y la mantiene protegida junto a ella.
Mientras WASHI ataca, declara: Los humanos, seres que tienden a pecar y pedir perdón para volver a pecar con un crimen mayor.
¿Qué tienen de valor si prefieren dejar morir a un niño, que estropear su libertad?
¿o matar el hambre, comiéndose a sus propios hijos es mejor visto?
Los demás compañeros han estado repeliendo los ataques de WASHI, en algunos casos, logrando herirlo.
Es muy rápido.
Deciden atacarlo simultáneamente, OCEANÍA observa el potencial del equipo.
KEKI desde su lugar, prepara al máximo su poder y con el uso del arco, prepara una flecha que se enciende de luz.
Al ver que WASHI la mira, OCEANÍA lanza un poder directo hacia WASHI, de tal rapidez que lo alcanza y lo lanza a golpearse en un muro, en el omento en el que WASHI se está levantando enfurecido, KEKI suelta la flecha que posee el poder de CHONT-SU, esto es reconocido por WASHI justo antes de que se le incruste en la frente, la flecha se disuelve causando una sensación espantosa de dolor hasta fallecer, WASHI, sorprendido, ha podido ver en KEKI una doble aura…
Una amarga sonrisa se dibuja en su rostro, mientras piensa en que siente lástima por la creatura que viene en camino, finalmente, WASHI ha perecido maldiciendo a CHONT-SU.
Sin perder segundos, OCEANÍA reacciona corriendo hacia la escalinata detrás del estrado, todos la siguen.
Van subiendo las escaleras y pueden ver que hay un portal detrás del estrado, es más bien como una entrada entre mundos.
OCEANÍA se ha detenido un momento, ella les advierte que esa es la morada de YOKOHAMA.
OCEANÍA se estremece un poco al recordar a su hermano.
La imagen de su hermano YOKOHAMA que recuerda, es de un hombre de cabello negro, lacio, cabello largo, recogido a media cola con un listón.
El gusta de traer barba un poco larga.
Es ciego, pero, tiene sentido de la percepción tan afinado que aterra, al sentir hasta la respiración de alguien que entre a su dimensión.
Viste de negro con toga roja y distintivos tatuajes en sus brazos, su aura es demasiado distorsionada.
El aura de YOKOHAMA es siniestra, radica en la más honda tranquilidad de la muerte, como si se sumergiera en sueños pasivos, llenos de luz que te acercan a la muerte sin sentirlo si quiera.
YOKOHAMA, no es cualquier dirigente, es el más fuerte de todos los hermanos después de AMELIA, con un poder similar al de su propio padre.
Muy seria, OCEANÍA, pide a KEKI ser más cuidadosa.
Si bien, WASHI era fuerte, tuvieron suerte de que no dejara salir su locura, de haberse alargado sólo un poco más el juicio al que estaban siendo sometidos… no hubiesen salido vivos, lo mataron a tiempo.
Todos, observan a OCEANÍA, su rostro refleja que todo lo que ha dicho es verdad.
Es tarde para arrepentirse, sólo queda pensar en usar sus habilidades lo mejor posible.
No hay a dónde escapar.
OCEANÍA, en tono tajante dice: YOKOHAMA no conoce la piedad.
Todos, tensos, entran al portal.
Al atravesar el portal, el ambiente turbio de la entrada, hace el panorama sombrío, de inmediato, se sintió el cambio de presión en el aire, por un momento, sintieron que sus pulmones colapsaban.
Esto les dañó físicamente, OCEANÍA, se disculpa, olvidó decirles que, retuvieran la respiración al menos un minuto.
OCEANÍA pensativa, sabe que su hermano ya ha de haber intuído la presencia de todos.
La bruma se dispersa, se puede ver que en la dimensión perdura un enorme jardín de flores y frutos, no hay una construcción visible.
OCEANÍA, preocupada, advierte a todos, este es el dominio de YOKOHAMA, esta dimensión se llama: ALTO INFIERNO.
No será fácil vencerlo ni sobrevivir a la dimensión misma, además… si llegaran a matar a YOKOHAMA, YUEL vendrá.
FALCOR Y OGLAE no saben bien de lo que trata todo el asunto, pero, sin duda, ayudarán a sus amigos y protegerán a sus preciadas mujeres.
Han avanzado un largo rato por las colinas en las que hay cerezos floreciendo por todas partes, mariposas surcan los cielos rosados y azul pastel con pocas nubes.
La leve brisa y ambiente cálido y fresco a la vez, es muy reconfortante.
Al ver al equipo tan relajado, OCEANÍA los regaña, no deben olvidar que todo este reino es el enemigo, sabe que, esto es un engaño en el que los humanos se van envolviendo hasta caer en la muerte, deben resistir a la tentación.
YOKOHAMA es muy listo y hábil de todos, posee más poder del que todos ellos imaginan… ojalá el amor de CHONT-SU los proteja lo suficiente (mirando a KEKI) y ojalá que tu bebé también lo haga.
Deja a todos con la duda, el bebé ¿por qué?
TOIRE se pone a la defensiva, se coloca entre OCEANÍA Y KEKI, en actitud de proteger a KEKI, molesto dice a OCEANÍA que, él no permitirá que ponga a KEKI en peligro.
OCEANÍA lo observa retadora y preocupada.
fin de capitulo 114