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La primera señal

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"12:45"

Jin tomo su teléfono en medio de la calle.

Después de pensar unos minutos el llego a una conclusión, no quería perder ningún segundo en vano, protegería a sus seres queridos aun si eso significaba revelar su fuerza.

—Hola aniki, que paso, pensé que a esta hora ya estarías aquí— un poco más despierto, Kenta junto a sus amigos chateaban con los miembros de su gremio, los festejos aún no habían terminado y el ambiente del lugar era muy colorido con todos gritando en cada momento.

Forzando una sonrisa en su rostro al escuchar los gritos de sus amigos, Jin relajo su mirada y respondió —Kenta, ponme en el altavoz, todos necesitan escuchar esto— después de varios años de amistad, esta fue la segunda vez que Kenta fue llamado solo por su nombre, borrando la sonrisa en su rostro, el espero que su aniki continuara mientras acercaba su teléfono a sus amigos.

—Hola chicos, primero que todo felicitaciones por derrotar a Ceres— tomándose un profundo respiro agrego —ahora, escuchen bien, en las próximas horas el mundo entero se vendrá abajo, el mensaje que les llego hace unas horas solo es la primera advertencia— mirando su buzón de mensajes, Kenta encontró un aviso del gobierno lleno de exclamaciones de advertencia, al escuchar las palabras de Jin, el decidió leerlas por primera vez en mucho tiempo.

10:25 am

Los siguientes volcanes entraron en estado activo:

Montañas Kun Lun, Qinghai, China

Volcán Etna, Silicia, Italia

Volcán Chachani, Arequipa, Perú

Volcán Tacana, Chiapas, México

Monte Meru, Kilimanjaro, Tanzania

Monte Fuji, Prefectura de Shizuoka, Japón

Luego de ver el listado de miles de volcanes, Kenta se detuvo en uno de ellos con la mirada vacía —No puede ser— exclamo sosteniendo su cabeza con ambas manos, su mente se lleno de pensamientos negativos al pensar en el rostro de su madre que vivía cerca del monte Fuji.

Al escuchar los gritos de preocupación de sus amigos, Jin decidió continuar —Kenta, este no es momento para tener miedo, si de verdad quieres proteger a tu familia escucha bien mis palabras— siendo apoyado por sus amigos, Kenta se sentó en el sofá, mientras Aki encendía la televisión buscando el canal de noticias.

"…se estima que más de la mitad de la población en la prefectura Shizuoka está siendo evacuada, es solo cuestión de tiempo para que toda la provincia se mantenga segura lejos de los ríos de lava" dijo un reportero desde un helicóptero.

Dando un profundo suspiro, Kenta apoyo su espalda en el sofá y miro el teléfono con preocupación —Aniki, que esta sucediendo, estoy luchando en mi interior para cortar la llamada y llamar a mi madre así que dilo sin rodeos— sorprendido al escuchar la voz de su amigo, Jin entendió como se sentía, si fuera él no se quedaría sentado y tomaría el primer vuelo hacia su hogar para proteger a su familia.

—Aun hay tiempo, esto va para todos ustedes— respondió —dentro de unas horas o menos cosas más increíbles sucederán, deben reunir a todos sus seres queridos y mantenerse juntos en todo momento, el más mínimo error significara que nunca más puedan volverlos a ver— Jin recordó el momento en que llego al otro mundo, cada segundo que pasaba personas de diferentes países aparecían a su lado,

Apagando la televisión, Jiro se acercó al teléfono diciendo —Como sabes que todo ira como tu dices, puede ser solo una coincidencia que los volcanes entraran en erupción— tomando un poco de aire continuo—incluso en la calle todo sigue normal, si esto es una broma Jin, dilo y todos nos reiremos juntos, pero si no, necesito alguna prueba, no puedo ir a mi casa y decir a mi familia que regrese sin tener nada con que convencerlos— apretando los puños con furia, Jiro tenia esperanza de que la palabras de Jin fueran una broma, no imaginaba que algo tan grande ocurriría siendo el tan joven.

Dejando de correr, Jin miro al cielo sintiendo que en cualquier momento ya no podría volver a verlo —Jiro, Kenta, Aki, saben que en la escuela siempre fui bromista y me escapaba de clases cada vez que podía, incluso a mí me gustaría que todo lo que dije fuera mentira, pero escúchenme bien, hay cosas inimaginables que pasaran, incluso sabiendo eso me siento frustrado de no poder hacer nada para detenerlo, en ningún momento bromearía con esto—

Escuchando las palabras de su amigo, Kenta puso el brazo sobre el hombro de Jiro con una mirada pesada —Jiro, confió en mi aniki, él nunca jugaría con este tipo de cosas— parándose recto, Kenta recupero la fuerza, no podía caer en depresión, si tenía la posibilidad de proteger a su familia lo haría a cualquier costo.

—Gracias Kenta, yo también tengo temor, es posible que no nos podamos ver en mucho tiempo, por eso— Jin sintió el aire en su interior se volvió más denso, haciéndole difícil el respirar. Conteniendo la presión el continuo —no deben separarse de su familia, teniendo comida y agua a su lado, pase lo que pase cuando llegue el momento no suelten sus manos, si la suerte esta de nuestro lado nos volveremos a encontrar— la llamada termino antes de tiempo, en la pantalla la señal del teléfono había desaparecido.

Antes que Jin pudiera reaccionar, los cambios en el mundo empezaron a afectar su cuerpo, el mantenía parte de su fuerza y algunas habilidades como el aura que cultivo durante años en el otro mundo, quizás esa era la causa de que la Tierra intentara rechazarlo, generando que el cuerpo de Jin se sintiera más pesado.

Apretando sus puños con furia, Jin golpeo con fuerza el suelo a su alrededor levantando una gran nube de polvo y escombros, su cuerpo revelo una fina capa de luz que cubría las venas sobre su piel —parece que funciona…— liberando su fuerza, el pudo reducir un poco la presión sobre él, pero esta aun existía —No debo detenerme— retomando la carrera, Jin dio saltos capaces de dejar como principiantes al mejor de los atletas en el mundo, rompiendo los récords mundiales en solo segundos.

Sin comunicaciones era cosa de tiempo para que el caos se generara entre las personas —Lisa, Leina, solo espero que estén en casa…mama…— recordando la imagen de una mujer fuerte y luchadora, Jin se sintió impotente al no saber donde estaba ella, quizás su vuelo ya este llegando al aeropuerto o talvez aun estaría en el aire, sin forma de comunicarse todo era muy borroso para él.

Casa Kamisato

—Neee onee-chan, en la tele esta saliendo alguien que se parece a onii-chan, mira…incluso lleva su misma cazadora— llamando a su hermana, Lisa grabo la pantalla de la televisión y corrió hacia la cocina con su teléfono en mano.

—Lisa, que te dije de acercarte cuando estoy cocinando, es imposible que nii-san saliera en la televisión— "si fuera así, debo tener cuidado de las mujeres que se acerquen a mi hermano" pensó sin girarse para mirar el teléfono.

—Se parece mucho, incluso parece que el lugar donde están grabando esta cerca de aquí— al escuchar las palabras de su pequeña hermana, limpiando sus manos, Leina dejo de cocinar y se acerco a Lisa —si es así, deja que onee-chan lo vea por ti— presionando la pantalla, la figura de un hombre corriendo a velocidades inhumanas por la calle fue mostrada "es nii-san"

—Lisa, en que canal están mostrando ese video, necesito verlo— pregunto con impaciencia, desde el primer momento que vio la pantalla ella supo que era Jin, sintiendo la seriedad en el rostro de su hermano, ella se preguntó quién lo había provocado, a ella no le importaba la demostración de fuerza que el estaba revelando sin querer, para ella era mas importante que el volviera a casa para que ella pudiera cuidarlo.

BOOM!

Luego de unos minutos, un sonido estruendoso se escucho a las afueras de la casa Kamisato, quitándose las manos de sus oídos, Lisa guiada por su curiosidad corrió la cortina de la ventana y miro hacia la calle.

—Es onii-chan, mira onee-chan tiene la misma ropa que el hombre en la televisión— dijo corriendo a abrirle la puerta.

Al llegar a la entrada, las figuras de Lisa y Leina calmaron el turbulento corazón de Jin, ahora que el estaba a su lado no había fuerza en el mundo que pudiera separarlos.

—Lisa, Leina, tengo algo importante que decirles— mirando a la gente que se amontonaba en la calle agrego —es mejor que entremos— aunque a Jin no le importaba la atención que atrajo sobre él, no quería que las personas le quitaran el tiempo que podía usar para prepararse.

—Que sucede nii-san, desde esta mañana pareces diferente— cruzando las manos sobre su delantal, Leina apretó una de sus manos al pensar que algo grave le paso a su hermano, ella no quería ver enojado a su hermano.

—Necesito que busquen el bolso mas pequeño que tengan y lo llenen con ropa, algunas botellas de agua y un poco de comida— dijo revisando las cosas que tenían en su nevera.

—Porque, saldremos a pasear…guaaay— dando saltos de alegría por la sala, Lisa fue a buscar su bolso siguiendo las ordenes de su hermano.

Caminando por detrás de Jin, Leina extendió una de sus manos y toco el hombro de Jin ligeramente "está muy tenso" pensó —Nii-san, quieres hablar de lo que esta pasando?— rodeando su cuello con ambas manos, ella pudo notar que Jin no había notado su agarre, por alguna razón el cerro los ojos cuando ella lo toco.

BOOM!

BOOM!!!

BOOM!!!!!!

—Ya es tarde…— dijo Jin abriendo los ojos con dolor, a su lado Leina y Lisa abrazaban su cuerpo temblando de miedo —Pensé que tendría mas tiempo— en el cielo, tres explosiones se extendieron borrando todo rastro de las nubes, la intensidad de sus ondas destruyó los vidrios de todos los vehículos, provocando que las personas sintieran dolor en sus oídos.

Liberando un poco del aura en su cuerpo, Jin pudo mitigar el dolor que sentían sus hermanas —Nii-san que esta pasando, de donde salieron esas explosiones— pregunto Leina sin soltar el cuello de Jin, sus piernas aún se sentían débiles por el susto, si Jin la soltaba ella caería al suelo.

Cerrando la cortina que daba al exterior, Jin camino hacia la habitación de Leina, no quería que ellas vieran lo que pasaría en las calles —Leina, junta tus cosas en un bolso con cuidado, solo lleva lo necesario, artículos electrónicos o maquillaje no sirve, tenemos poco tiempo—

Lisa, que era mas pequeña había terminado de juntar sus cosas primero, con sus ojos brillosos ella extendió sus manos pidiendo que Jin la cargara, solo a su lado el malestar del aire no la acosaba.

—Estoy lista— sacando un bolso marrón, Leina se paro al lado de Jin y tomo su brazo con fuerza —dime nii-san, estaremos bien?— pregunto con miedo, desde que termino la tercera explosión, los gritos de la gente no se hicieron esperar, aullidos de lamentos y sonidos de explosiones mas pequeñas se desataron provocando que ellas cerraran los ojos.

—Mama estará bien?— pregunto en voz baja Lisa, acurrucando su cuerpo más cerca de Jin.

—No se preocupen, no dejare que nada les pase— dijo con tranquilidad "no permitiré que nada ni nadie les haga daño, tendrán que quitarme la vida si quisieran tener alguna oportunidad" agrego en sus pensamientos.

Espacio exterior, sobre la Antártida

Al terminar la ultima explosión, un pequeño vórtice del tamaño de una semilla de mostaza apareció sobre la cordillera mas alta de la región blanca, de él una brisa furiosa de partículas descendió cubriendo las montañas en solo segundos.

Un pingüino curioso que se encontraba alejado de su grupo, al ver el color extraño sobre la nieve camino en su forma peculiar buscando llevarse un poco de esa extraña nieve, luego de caminar unos kilómetros con dificultad llego a su destino, con cuidado extendió sus dos aletas y trato de tocar la extraña nieve en el suelo.

Tr-Tr!

Con un movimiento asesino, la nieve gris tomo la forma de dos mandíbulas gigantes llenas de un líquido brumoso recorriendo sus dientes y en solo un instante estas se extendieron triturando el cuerpo de la pobre ave eliminando cualquier rastro de su existencia.

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