Al ver esta figura tan familiar, Royce se quedó atónito. Miró a Nora con incredulidad, sus ojos se abrieron de par en par.
«¿Srta. Nora? ¿Es la Sra. Nora?»
Comparada con la de hace medio año, cuando estaba en Nueva York, parecía haber perdido algo de peso y haberse puesto más guapa. Si no fuera por esos familiares ojos almendrados y perezosos cuando Nora caminaba por las calles, Royce no la habría reconocido.
Pero, ¿qué hacía aquí la Sra. Nora?
Royce estaba un poco aturdido.
Mientras estaba allí, la gente que estaba detrás de él pensó que Nora había bloqueado el camino. Alguien preguntó de inmediato: —¿Tu eres?
Nora miró a Liam y bostezó. Dijo perezosamente: —Lisa.
«¿Lisa?» Royce frunció el ceño.
Pero esta era claramente la Sra. Nora. ¿Por qué se llamaba a sí misma Lisa?
Miró a Nora confundido, pero vio que la mujer le dirigía una fría mirada de advertencia.
Royce: —...
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