CAPÍTULO 26- Una tranquila noche.

CAPÍTULO 26- Una tranquila noche.

Todos estábamos cenando, mientras hablábamos.

... Este sentimiento es... raro... ¿Así se siente tener...? Espera... ¿Puedo considerarlos mis amigos? Yo quiero ser amiga de todas, pero... ¿Y si ellas no quieren ser mis amigas?

—Rina, ¿no te gustó la carne?- Dijo Hori.

—S-sí, está deliciosa... Lo siento, solo estaba pensando en algo.

Tomé una botella con jugo de limón... Este mundo tiene objetos muy interesantes. El material de esta botella es muy resistente.

—Este mundo es increíble... Pero no entiendo la escritura.

Intenté entender las letras que tiene esta botella, pero no logro entender nada.

—... Puede entender lo que decimos... Pero no puedes entender la escritura... Espera... ¡¡Es cierto!! ¡¡¿Por qué hablan nuestro idioma?!!- Dijo Zei.

—N-no lo sé... Pero tienes razón... Estamos en otro mundo... Nuestra escritura es diferente, así que nuestro idioma debe ser diferente.

—... Bueno, no importa. Me acostumbré a las cosas raras. Dejé atrás el sentido común cuando descubrí que tenía magia.

Zei siguió comiendo y comencé a beber un poco del jugo de limón... Realmente es delicioso... La comida es deliciosa... Y es la primera vez en muchos años que como hasta quedar satisfecha.

—... ¿Está bien que yo coma tanto? ¿No es mejor guardar comida y comer poco?

—No te preocupes, Rina. ¡Mira esto!

Levantó su dedo pulgar y lo puso dentro de su boca.

—¡Magia de agua!

Agua comenzó a salir de su dedo.

—Tenemos agua limpia para beber gracias a la magia. Y la comida no será problema. Dentro del [Almacenamiento mágico], la comida se mantiene perfecta y no se pudre. Es como tener un refrigerador. La comida detiene su tiempo dentro del [Almacenamiento mágico]. Si meto una botella con agua fría, aunque la deje por horas ahí, cuando saque la botella, seguirá fría. Es una de las ventajas de tener magia.

—T-tiene... razón.- Dijo Kiasan.

—Kiasan y yo nos concentraremos en mejorar el [Almacenamiento mágico] para tener toda la comida que podamos tener. Nuestro [Almacenamiento mágico] es de nivel 5. Podemos guardar 200 objetos cada uno, pero vamos a mejorar más esa cantidad.

Parece muy preparado... Genial.

•

•

... No puedo dormir.

La cama es cómoda... Es el lugar más cómodo en donde he dormido, pero... No puedo dormir... Me siento una aprovechada.

Zei está vigilando solo... ¿Y si lo atacan? Al menos quiero ser de ayuda con algo.

Me levanté con cuidado de la cama, para no despertar a ninguna de las chicas.

Salí de la habitación... Bien, no desperté a nadie.

Zei debe de estar afuera.

Salí al jardín y levanté la mirada... Zei está arriba de la casa, vigilando.

—Zei.

Zei bajó la mirada.

—¿Qué pasa, Rina?

—¿Puedo ayudarte a vigilar?

—No es necesario, no te preocupes.

—... ¿Puedo acompañarte?

—Supongo que no puedes dormir... Ven.

Un tentáculo negro salió de su brazo y me atrapó... Me daría miedo, pero ya lo he visto usarlo.

Me subió a la azotea y el tentáculo desapareció.

—Fufu. Ya lo controlo mejor. Tiene muchos usos... Mmm... Entonces... ¿Qué pasado triste tienes?

—¿Pasado triste?

—Pues... Eres tímida y estabas sola cuando te conocí. Tienes el perfil de una chica con un pasado triste.

—... ¿Quieres escuchar mi historia?

—Claro.- Dijo sonriendo.

... Es tan amable.

Me senté con él y comencé a contarle mi historia.

Durante más de 4 horas, estuvimos hablando sobre diferentes temas... No es nada aburrido hablar con él... Es divertido y siempre tiene algo que decir... Es el primer chico que no me trata mal... Tengo suerte de ser su amiga.

... Creo que mi vida cambiará gracias a él.

•

•

(Pov- Zei.)

Rina se quedó dormida, así que la llevé a la habitación y la acosté con las demás... Todas están profundamente dormidas... Qué adorables se ven durmiendo juntas... Bueno, es tiempo de... ¿Eh?

Una espada... Mi pecho fue atravesado por una espada... Ah.

Caí al suelo y fingí estar muerto. Cuando guarde su espada o intente atacar a las demás, lo morderé.

—Ya sé que estás vivo. No vengo a matarte.

... Esa voz.

Me levanté furioso y miré a los ojos a la Elfa plana.

—¡¿Por qué hiciste eso?!

—Sé que no puedes sentir dolor y tampoco morirás, por eso lo hice. No todos los días tengo la oportunidad de cortar a un fenómeno idiota.

—¡Maldita Elfa plana! ¡Estás loca!

—Fufu. Al menos yo sí puedo besar y tener sexo.

—... Es cierto, tienes 140 años. Seguramente has tenido muchas parejas... Fufu. ¿Con cuántos hombres has tenido sexo? ¿20?

—¿Me estás llamando prostituta, fenómeno?

—No... Bueno, sí.

—¡Idiota!

Intentó golpearme y esquivé su ataque.

—Vamos, linda, no te enojes, fue una broma. Tú te burlaste de mí primero.

—¡Para que lo sepas, soy virgen! ¡Mi cuerpo sigue puro! ¡Ningún hombre me ha tocado! ¡Odio a los hombres! ¡Y más a los hombres como tú!

—... ¿Eh? Eres una mentirosa. Tienes 2 nietas. Si tienes nietas, significa que tuviste un hijo. Y para tener un hijo, debes tener sexo.

—... No te diré mi historia, pero soy virgen. Cállate y ven conmigo.

Me tomó del brazo y comenzó a caminar.

¿En serio es virgen? ¿Por qué siento que dice la verdad? ¿Los Elfos se embarazan sin necesidad de tener sexo? Le preguntaré a Rina mañana.

•

•

Salí de la casa y las demás chicas mágicas estaban afuera.

—Entonces... ¿P-puedo decir mis últimas palabras? Por favor, que alguien las anote.

—No te mataremos, solo queremos saber más sobre este mundo. Tenemos varias preguntas para ti.- Dijo Nashai.

—Oh, claro... ¿Y quién es la chica nueva? Se ve rara.

—... ¿Chica nueva? No hay ninguna chica nueva.

—¿Eh? ¿Y esa chica de cabello negro?

—¿De cabello negro?

—Creo que es humana. La chica que le está tocando las orejas a Diana.

—... No hay nadie tocando mis orejas.

... ¿Están ciegas o tratan de burlarse de mí?

—¡¿Eh?!

Esa chica se acercó demasiado a mí y me alejé de ella.

—¡¿Puedes verme?!

—Claro, no soy ciego.

—¡¡Increíble!! ¡¿Cómo lo haces?!

—Zei, ¿con quién hablas?

—Con la chica que está parada frente a mí... Oye, aléjate, soy algo tímido.

—... No hay nadie contigo.

—¿Eh?

—¡Eres el único que puede ver fantasmas! ¡Hola, mi nombre es Roxy! ¡¿Cómo te llamas?!

—¡¿Fantasma?!