—Ustedes dos están juntos en esto, ¿verdad? —preguntó Amletus y la expresión de Amaya cambió.
Riona se echó atrás un poco, estaba a solo un momento de sacar su arma. Por supuesto, sabía que no podría hacer nada contra Amletus, sin embargo, al menos podría intentar atacar a Amletus hasta que Amaya tuviera tiempo de escapar.
—Heh, ¿realmente pensaste que era alguien como Eardwolf? —preguntó Amletus con una risa. Sin embargo, su expresión estaba lejos de ser divertida.
Riona estaba ahora aún más tensa.
—Haahh... —Amaya, por otro lado, suspiró.
Parecía como si una gran responsabilidad hubiera sido quitada de sus hombros.
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