Eso me volvería un mal hermano...

Pero entre Feng Yang y Ye Zui, ninguno de los dos poseía tal fuerza.

Por lo que se podía decir que era completamente seguro que nadie supiera lo que hicieron en el interior.

Poco después, llegaron dos mujeres a la habitación y las dos eran bastante hermosas.

Luego de hablar y beber por un rato mientras ambas mujeres bailaban frente a ellos, Feng Yang se llevó una mujer a una de las camas, luego de ver que Feng Yang entró al interior de la tela roja que parecía un telon que separaba la habitación, Ye Zui también hizo lo mismo con la mujer que le servía vino.

...

En el interior del lado de Feng Yang.

"Joven maestro... no sea muy duro conmigo... ¿Está bien...?" Susurro la mujer que había acompañado a Feng Yang.

"No lo seré..."

"Sólo relájate y cierra los ojos..." Le susurro Feng Yang a la mujer mientras le mordía el labio inferior.

Sus pálidas y frías manos comenzaron a deslizarse por el cuello de la hermosa mujer y esta estaba realmente sonrojada al sentir las frías manos de Feng Yang que se deslizaban por las curvas de su cuerpo.

Mientras la hermosa mujer tenía los ojos cerrados, estaba llenas de expectativas y su corazón comenzo a latir rápidamente mientras su respiración se aceleraba.

Feng Yang deslizó sus manos por el cuerpo de la hermosa mujer y luego las acercó de nuevo al cuello de la mujer mientras sus pulgares se apoyaban en los parpados de esta, masajeandolos suavemente mientras le susurraba al oído; "Shh... sólo relájate..."

"En nombre de aquél a quien llamas dios, en este día te liberare..."

La mujer estaba confundida por las palabras de Feng Yang y quiso hablar para seguirle el juego, pero al instante siguiente, sintió un extremo dolor en su cuello y ojos...

Crac...

crash...

* Salpicar...*

En un instante, su cabeza había sido arrancada por las pálidas manos de Feng Yang y la sangre que salía de su cuello sin cabeza salpicó para todas partes como si de una fuente se tratara.

Mientras las manos de Feng Yang sostenían la cabeza de la hermosa mujer, sus pulgares estaban profundamente enterrados en las cuencas de la mujer mientras la sangre manchaba sus pálidas manos.

Rápidamente sin siquiera tiempo a reaccionar la hermosa mujer había sido asesinada...

La sangre salpicó para todos lados y seguía derramándose y brotando del cuello sin cabeza como si fuera una fuente, toda la túnica negra de Feng Yang se tiñó del color escarlata de la sangre así como su rostro y cabello.

Al asesinar a la mujer, Feng Yang no cambió en lo más mínimo su fría mirada inexpresiva, como si el que acabara de cometer un asesinato no fuera él.

Sin hacer mucho ruido Feng Yang se levantó y salió del interior de las cortinas de tela roja, se acercó a la mesa y agarro la última jarra de vino que quedaba y luego como si nada hubiera pasado, regreso a su cama con una jarra de vino en mano.

Tras rescostarse en la cama llena de sangre, mirando a su lado, donde yacía el cadáver decapitado de la mujer. Encima del cuello de la mujer la cabeza estaba casualmente colocada como si se tratara de un rompe cabezas el cual no encajaba.

De las cuencas sangrientas y undidas de la mujer, la sangre fluía por sus mejillas como si estuviera derramando lágrimas de sangre por tener a su lado al ser traicionero que le había arrebatado la vida por sorpresa.

"¿Hmm? ¿Quieres...?" Pregunto Feng Yang mientras miraba al cadáver de la mujer.

"Suspiro, no me desagradan las personas que están en silencio como tú... una vez un viejo amigo, me dijo; no hay persona que guarde un secreto mejor que aquella que esta muerta..."

"Lo mas gracioso fue que se refería a mí... según él, yo debía de morir... pero mírame, aunque fui asesinado, aquí estoy... De nuevo con vida... él por otro lado..."

"Ah, pero supongo que tenía razón, tú debes de guardar mi secreto, ¿está bien, dulce señorita...?" Pregunto Feng Yang mientras tomaba la cabeza de la mujer con una de sus manos y la miraba directo a sus cuencas vacías.

Mientras sostenía la cabeza de la mujer como si fuera un juguete, siguió bebiendo y luego de beber, suspiro; "Creo que no debí matarte tan rápido... ¿Ahora con quién se supone que hablaré mientras el Hermano Ye disfruta de su primera vez? No sería bueno que interrumpa y lo mate mientras esta disfrutando de su pimera vez, ¿cierto...? Eso me volveria un mal hermano..."

"Lo sé, lo sé... no te ofendas, hablaré contigo en otro momento..."

Susurro Feng Yang mientras volvía a beber.

Todo había ido de acuerdo con su plan y anteriormente ya había puesto el líquido de la Cerradura Yin-Yang en el vino de Ye Zui.

Pero naturalmente no estaría tan confiado, la mujer que le estaba enseñando los misterios del cuerpo humano a Ye Zui parecía beber mucho y se estaba por llevar dos jarras de vino al interior de su lado. Por lo que, Feng Yang había vertido casi todo el líquido de la Cerradura Yin-Yang que tenía en ambas jarras, naturalmente dejo una gota de este líquido para una futura situación inesperada y por tal razón no podía simplemente ir a intentar matarlos ahora...

Debía de esperar al menos unas horas, luego de que terminaran de jugar, habría una alta probabilidad de que volvieran a beber, en ese momento la Cerradura Yin-Yang volvería a 'activarse' y en ese momento antes de que lo volvieran a hacer, Feng Yang iría a saludarlos.

Incluso si no funcionaba, Feng Yang podría esperar a que se quedarán dormidos, en ese momento usaría algunas de sus gotas de Yin Qi para matar de un solo golpe a Ye Zui mientras no estaba en guardia e incluso si esto tampoco funcionaba, tenía dos planes más por precaución...

No le preocupaba la mujer, ella al igual que su estimada y difunta compañera no tenían cultivo por lo que luego de que los enviara a mejor vida, Feng Yang tendría que comenzar la nueva parte implementada a su plan y usaría uno de sus viejos trucos de la tierra en este mundo para fingir ser otra persona.

Aunque no sabía si sería muy útil, creía que no sería descubierto fácilmente a menos que la otra parte fuera muy fuerte o tuviera algún método extraño que lo hiciera sentir los cambios en él.

...

Luego de beber por unas pocas horas junto a su difunta compañera Feng Yang salió del interior y se acercó en silencio hacia el lado de Ye Zui.

Al acercarse y ver el interior se quedó sin palabras...

Ye Zui dormía acurrucado mientras estaba desnudo y la mujer alcohólica a su lado, yacía dormída mientras sostenía una jarra en sus manos.

Al ver con atención Feng Yang se regocijo, Ye Zui había bebido de vuelta del vino luego de haber terminado sus nobles asuntos, esto pudo deducirlo Feng Yang al observar que el cuerpo de Ye Zui no liberaba el más mínimo rastro de aura que demostrará que fuera un cultivador.

Como un cultivador por debajo del Reino Señor del Cielo, no podía ocultar su aura completamente a gusto, aunque algunos podían ocultar su etapa exacta, sería imposible el ocultar su reino o Qi completamente, por lo tanto estaba claro que este era el efecto tras beber el líquido de la Cerradura Yin-Yang.

Ye Zui sería como un mortal a menos que lo volviera a hacer... ¿Pero cómo podría Feng Yang permitir tal cosa...? Ya le estaba demostrando su apreció al permitirle disfrutar de su primera vez antes de enviarlo a mejor vida...

Y eso no era lo mas importante...

Su bella compañera no podía estar más muerta y estaba comenzando a apestar, naturalmente no quería seguir a su lado por lo que sólo podía enviar a Ye Zui y a la mujer a mejor vida y marcharse rápidamente de este lugar.

Feng Yang se acercó en silencio a Ye Zui y por precaución uso una gota de Yin Qi en cada una de sus manos para fortalecerlas, luego tomo la cabeza de Ye Zui con ambas manos y la arranco de un tirón.

* Salpicar...*

Tan pronto como le arranco la cabeza con un fuerte crujido, la sangre salpicó para todos lados y la mujer que yacía dormida abrió los ojos al ser bañada en la cálida sangre de Ye Zui.

Al ver la sangrienta escena frente a ella grito: "¡Ahh!! ¡Que estas haciendo!!! Tú... tú.. eres..."

Sin dejar que terminara de hablar Feng Yang se abalanzó sobre ella y mientras usaba otra gota de Yin Qi para fortalecer su mano derecha, ataco y atravesó la espalda de la mujer que estaba intentando escapar. La mano de Feng Yang que atravesó la espalda de la mujer y salió por adelante del pecho de la mujer sosteniendo su corazón.

"Tsk... maldita sea... gaste tres de mis primeras, preciosas y hermosas gotas de Yin Qi, en ustedes..." Suspiro Feng Yang mientras sacudía su mano con algo de indignación.

Sus preciosas gotas de Yin Qi...

"Suspiro, no importa... luego formare más..." Suspiro Feng Yang mientras tomaba la bolsa universal de Ye Zui y salía de entre los cadáveres.

Luego abrió lentamente la puerta y una vez que vio que no había nadie, salio y cerro de nuevo la puerta y luego camino por el pasillo mientras se concentraba en sentir el Qi a su alrededor...

Luego de unos momentos eligió una habitación y entró casualmente.

En esta habitación no había el más mínimo Qi, ¡lo que significaba que no había cultivadores presentes!

Al entrar vio a una mujer y a un hombre delgado y de aspecto promedio completamente desnudos.

"Tú... tú... ¿Quién eres?" Preguntaron con miedo ambos mortales.

Tanto la mujer como el hombre estaban horrorizados al ver a Feng Yang que estaba completamente bañado en sangre.

Ninguno de los dos sabía porque Feng Yang entro o siquiera quién era él...

"Soy él de servicio a la habitación ~~" Feng Yang sonrió de forma extraña mientras los miraba a ambos.

Ambas personas no entendían lo que Feng Yang quiso decir...

Pero sin darles tiempo a reaccionar, Feng Yang se lanzó hacia la mujer y con un solo apretón de su mano la cabeza de la mujer exploto como una sandía.

Otra gota de Yin Qi desperdiciada...

El corazón de Feng Yang dolía y sangraba pero sabía que no podía conservarlas para siempre, las gotas de Yin Qi se habían creado para ser utilizadas...

Pensando en esto, se sintió un poco mejor.

"¡Ahhh!!!! ¡Ayúdame! ¡Alguien ayúdeme!!" Grito el mortal mientras caía sentado en el suelo, incluso comenzo a orinarse.

Al ver como su pequeño amigo largaba orina para todas partes, sin control alguno, Feng Yang salto hacia atrás como si fuera un gato al que le habían pisado la cola, no le importaba el ser bañado en sangre, pero en la orina de un hombre... eso era otra cosa completamente diferente...

"¡Hmph! Ser insignificante... ¿Quieres ensuciarme con tu orina?" Resoplo disgustado Feng Yang.

Luego de unos momentos, el hombre dejó de orinar la habitación descontroladamente y al ver que se detuvo Feng Yang se acercó y agarro de la cabeza al mortal arrastrándolo hacia cierto lugar.

Luego de dar unos pasos, Feng Yang tiro al hombre sobre la cama.

En este momento el mortal yacía inconsciente porque se había orinado y desmayado del miedo al ver a Feng Yang, este último una vez lo tiro a la cama, saco una afilada daga de su bolsa universal y apuñaló el corazón del hombre inconsciente, asesinandolo rápidamente, luego comenzó a cortar la piel del hombre muerto con extremo cuidado.

Una hora y media después termino, y en este momento el cadáver sangriento del mortal yacía en la cama, tal cadáver no tenía el más mínimo rastro de piel y solo se veia su carne y sangre... realmente se veía aterrador.

"Parece que me estoy oxidando..." Susurro Feng Yang mientras miraba el traje de piel con forma humana en sus manos.

En la tierra, en su vida anterior había usado la piel de otra persona como traje bastantes veces para engañar a otros y secuestrarlos para sus experimentos, por lo que en su vida anterior le tomo bastante tiempo y práctica el perfeccionar sus habilidades con la daga o cuchillo para cortar con cuidado la piel de una persona para usarla como un disfraz.

Luego de suspirar Feng Yang se quitó toda la ropa y comenzó a ponerse la piel del mortal como si fuera un traje de vestir completo.

Unos momentos después saco un hilo y una aguja de su bolsa universal y también un pequeño espejo luego mientras se miraba en este comenzó a coser y a ajustar su traje de piel a la medida.

Después de varios minutos casi todo en él había cambiado, en este momento Feng Yang se veía casi idéntico al mortal que acababa de matar, sólo que su cabello y ojos seguían siendo iguales, y otro detalle era que tenía varias marcas de costura en 'su' piel.

Inmediatamente Feng Yang limpio la sangre de su cabello negro y lo puso tal cual como lo tenía el mortal que asesino, luego saco una prenda de ropa nueva y se la puso.

"Supongo que esta vestimenta de piel mía servirá por el momento..." Suspiro interiormente Feng Yang mientras se miraba en el pequeño espejo.

Su cabello y ojos seguían iguales pero su apariencia parecía la de un hombre de unos veintidós años y aunque no podría considerarse guapo tampoco era completamente feo, entre los mortales se podía decir que era uno más del montón.

Luego de guardar sus cosas en su bolsa universal, Feng Yang estuvo un rato intentando abrir la bolsa universal de Ye Zui, pero fue inútil, esta estaba completamente cerrada y a menos que el difunto Ye Zui resucitara y la abriera para él, el actual Feng Yang no podia abrirla... con decepción, Feng Yang abrió la puerta de la habitación y salió.

Luego de unos momentos dejo el palacio.

Aunque tuvo que pagar por los servicios del hombre que se veía como él, no fue mucho.

Aunque había que decirse que los mortales de ese burdel lo miraron algo desconcertados ante su cambio en el color de cabello y ojos, nadie dijo nada.

En dichos lugares, solo les importaba el dinero y no el como se vieran o que hicieran sus clientes, en todo caso cambios tan mínimos no eran extraños en los Tres Continentes en el que existían los cultivadores. Muchos cultivadores sufrían tales cambios con frecuencia por efectos secundarios de sus habilidades marciales.

Sin embargo, Feng Yang creía que los del burdel se llevarían una grata sorpresa al ver los regalos que dejo atrás...