8º. EL FIN DE LA INFANCIA

-Lo hemos conseguido, Akane- dijo Yuka – ya tenemos las entradas.

-Hemos esperados meses-dijo Akane- que estrenaran la película.

Esa salida al cine estaba planeada de hacía mucho tiempo. A las tres amigas, les hacía ilusión ir al estreno de esa película.

-Sólo hay un problema- dijo Sayuri- me han vendido cinco entradas, sólo vendían packs de cinco entradas. No sé qué hacer con las otras dos.

-Akane, ¿Por qué no se lo pides a Ranma? - dijo Yuka en plan soñadora- una película de amor, viéndola con el chico de tus sueños es romántico. - y puso una cara de soñadora.

-Ranma no tiene nada de romántico-dijo Akane no muy convencida- Pero se lo pediré.

Ranma estaba en su pupitre y escuchó toda la conversación.

-Oye Ranma…-dijo Akane- yo….

-Os he oído- dijo él, hacía tiempo que no tenía ganas de pelearse con ella, siempre perdía él. - No tengo muchas ganas de ver una película ñoña como esa, pero he oído que tiene buenas críticas.

- ¿Estás diciendo que iras con nosotras? - comentó Akane.

-Sí, pero con una condición, esta vez pago yo, por ti y por mí, la última vez me invitaste tú. Y Yuka te compro la tercera entrada.

- ¿Para una de tus amigas? -dijo Akane muy enfadada.

-Si para una buena amiga tuya y mía que le debemos un favor, bueno muchos favores, entre ellos ser la confidente de dos jóvenes descerebrados. Y ya es hora de pagarle el favor que nos hizo aquella vez que nos dio unas entradas para el cine –dijo él sonriente.

-Vale, ya se quien esa amiga-dijo Akane alegre- Llevaremos a Kasumi con nosotros, ella también quiere ver esta película, pero esa entrada la pagaremos a medias Ranma y yo.

La tarde del estreno las tres chicas y el joven de la trenza se escaparon de las dos últimas clases, para ir al cine. Y en el parque se encontraron con Kasumi.

-Os habéis saltado las últimas horas de clase-los amonestó Kasumi-No debéis hacerlo.

Ellos bajaron la cabeza y se avergonzaron, pero Kasumi enseguida recuperó su sonrisa y los invitó a tomar algo.

Al salir de cine quedaron que acompañarían a las dos chicas a sus casas. Ranma había oído rumores, sobre unos extraños personajes que atemorizaban el barrio, y no quería que las dos chicas tuvieran algún susto en su vuelta a casa.

Pero al pasar por un parque oyeron voces que salían de él voces, que él y Akane reconocieron enseguida. Hablaban tan fuerte que pronto descubrieron que tramaban, y los dos se asustaron mucho recordado el sueño que compartieron semanas antes y decidieron dar un rodeo, y eludir el combate. Ninguno de los dos quería que las tres chicas inocentes se vieran implicadas. Y Ranma tampoco quería que lo del sueño se volviese realidad.

Pero fueron atrapados por sus "amigos" y todo parecía indicar que acabaría mal.

Ranma estaba delante de las cuatro jóvenes protegiéndolas.

"Akane se puede defender de esas seis víboras, pero me da miedo la hermana de Akane y sus amigas. No quiero ponerlas en peligro. Deben ser estos los extraños personajes que hablan en las noticias."

-Dejad en paz a mi prometida, a mi hermana Kasumi y a mis compañeras. Ellas no tienen nada que ver con esto. -dijo Ranma- No podéis implicar a inocentes, o me las pagareis.

- ¿Ahora Kasumi y Akane son tus hermanas? -dijo Ryoga.

-Yo al menos así lo considero. -comentó el chico.

"Al menos a Kasumi, Akane es mucho más que eso"-pensó Ranma

-Kasumi y las otras dos se pueden ir-dijo Shampoo- pero para Akane tenemos planes.

-Ya sé que planes tenéis conmigo- dijo la chica. - y sé lo qué queréis hacerle a Ranma y no os saldrá bien, os va a salir rematadamente mal.

-Mira plebeya nos llevaremos a Ranma y le enseñaremos las que son auténticas mujeres, las que él realmente necesita, no una mujercita como tú.

-Kodachi, yo no quiero tener nada contigo, e iros quitando de la cabeza drogarnos y viólanos, por qué yo puedo ser alérgico a esa droga, soy alérgico a casi todas las drogas que me ha dado Shampoo. -dijo Ranma. - y me podéis matar.

- ¿Cómo sabéis vosotros eso? -dijo Shampoo.

Ukyo estaba con la espátula en la espalda y cogiendo el mango con una mano, y lo soltó de golpe y empezó a andar para el grupo de Ranma y al llegar a él se giró y se preparó para luchar contra los que habían sido sus aliados momentos antes.

- ¿Qué haces Ukyo? -dijo Ryoga.

-No habíamos quedado nada de drogas ni violación- contestó Ukyo a sus ex-aliados- No quiero saber nada de eso.

-Ahora la chica de la pala se raja-dijo Shampoo.

- ¿Es que no os dais cuenta? - contestó Ukyo- hacerle daño a Akane y Ranma sufrirá, se vengará y nos odiada. Hacerle daño a Ranma y Akane será la que sufrirá, y la que nos odiada será ella, y se vengará, así nunca los separaremos, todo lo contario, los uniremos aún más.

-Ya Ukyo se raja, siempre has querido a Ranma y te ha caído bien Akane, aunque erais rivales.

-Siempre he visto a Akane como mi rival y amiga, unas de las pocas que realmente tengo, quiero ganarle respecto a Ranma sin utilizar estas clases de trucos sucios.

-Ukyo tiene razón-dijo Ryoga, cambiándose de bando- Sé que he hecho cosas para que Ranma y Akane me odien y con razón, pero no quiero darles otra más.

-Nos debes muchas Ryoga-comentó Akane mirándolo con cara furiosa. Aún no había olvidado como la utilizó, con la apariencia del cerdito, para atracar a Ranma y aprovecharse de ella. -Pero hoy dejamos eso en hibernación. Pero ni yo ni Ranma te perdonamos.

-Shampoo-dijo de golpe Mousse- siempre te he querido, y te he seguido pero esta vez no, pero no lucharé en tu contra. Y recuerda, tu abuela nos prohibió atacar tanto a Ranma como a Akane.

El chico-pato se volvió y se alejó lentamente, se había dado cuenta que Cologne lo castigaría si seguía a Shampoo en esto.

Sólo quedaron los hermanos Kuno y la chica china.

-Akane, prepárate para sufrir, cuando te venzas Ranma caerá en mis brazos…

-No os dejaré que toquéis ni a mi hermana, ni a mi hermano, los defenderé a toda costa. -Kasumi había dejado de ser la chica dócil y simpática. Estaba furiosa, pocas veces se había puesto así, se puso delante de sus dos seres más queridos y abriendo los brazos en cruz, protegiéndolos.

-Kasumi Tendo, sal de en medio para que pueda ganar al maldito Ranma Saotome-dijo Tatewaki.

-Me niego por completo-dijo Kasumi con convicción- No os dejaré que los toquéis, es mi deber como hermana mayor, defender a mis hermanos pequeños.

Shampoo se asustó detectaba un gran poder en la hermana mayor de Akane, pero detrás de ella vio a Ranma y a su prometida, preparados para defenderla, si le hacían a Kasumi daño, la rabia de los dos seria infinita. Jamás se había asustado, pero ahora viendo a esos tres tuvo miedo, mucho miedo.

-Mousse tenía razón, no debía desafiarte, pero quiero saber algo, ¿Por qué mi bisabuela me prohibió pelear contra vosotros?, Pero no pienso hacerle caso-dijo Shampoo llorando y se escapó.

-No sé nada de eso-comentó Ranma, y esto le preocupó, ¿Qué escondía Cologne?, pensaba el chico.

Sólo quedaron Kuno y su hermana, y ella se fue con la excusa de entrenar. Dejando al chico solo.

-Akane Tendo, yo no te abandonare nunca y se abalanzó sobre la chica, que de una patada lo mando volando lejos.

-Bueno, chicos-dijo Ryoga con una risa falsa- Yo he quedado con Akari me voy- y salió como un tren bala. Y por causalidad encontró a la chica que buscaba.

Y Ukyo se fue a su restaurante. Tenía ganas de cocinar.

El chico y sus cuatro acompañantes se quedaron un momento perplejo.

-De verdad, ¿Qué ha pasado aquí? -preguntó Ranma sorprendido.

-No lo sé una alucinación- contestó Akane no menos sorprendida que él joven y el resto del grupo.

Después de dejar a las amigas de Akane en sus casas. Los tres volvieron al dojo. Akane se agarró del brazo de Ranma como siempre que salían. Al chico no le preocupó ir así delante de Kasumi, y esta los miraba con una mezcla de envidia y orgullo. Los dos prometidos iban bromeando y riendo. Kasumi se dio cuenta que a los dos chicos le sobraban gente que le presionase sobre sus sentimientos, como sus padres y sus rivales. Si lo dejaban en paz, como en ese momento ellos se abrían el uno al otro y se llevaban muy bien.

Los acontecimientos del día siguiente en apariencia inofensivos acabaron en una de las peores crisis que tuvieron los dos jóvenes, esa vez no fue un enemigo con ganas de jaleo, esta vez los causantes fueron los fantasmas internos del uno de ellos.

-Me da gusto ver trabajar cosiendo a unas jóvenes, como vosotras-dijo Nodoka, a las muchachas que estaban con ella-En la edad media europea las mujeres tejían mientras sus hombres se mataban como becerros.

La madre de Ranma estaba enseñando a bordar a las chicas.

-Me pregunto por cuánto podía vende esto-dijo Nabiki.

-Nabiki, tu siempre tan poco altruista-le contestó su hermana mayor- es para recaudar fondos, es para una buena causa.

-Mi buena causa, es cuando yo gano dinero- le respondió su hermana.

A Akane le salía mal, y se enfadaba.

-Esto no se me da bien-dijo nerviosa y enfadada- ¡nada se me da bien!

-Pues por suerte no es cocinar-dijo una voz con rabia, Akane se enfadó aún más y cuando iba a pegarle, continuó- ¿Por qué yo debo hacer esto?, yo soy un hombre.

Ranma chica estaba con ellas, su enfado era mayor que él de Akane.

-Es por una buena causa, cuanto más seamos más deprisa acabaremos.-contestó Kasumi.

-Hijo, yo siempre quise tener un hijo y una hija y contigo tengo a ambos-dijo Nodoka- puedo enseñar tradiciones a Ranma chica y que él se las enseñe a su hija.

-Por una parte, me amenaza si ve que mi comportamiento no es masculino, y por otra no le importa que sea chica para enseñarme tradiciones- dijo Ranma designado.

-Seguro que esta así por qué le sale mal- dijo Nabiki quisquillosa.

Ranma se la quedó mirando y le tiró su labor. Ella la miró y se quedó asombrada, estaba mejor hecha que la suya y la de Kasumi.

- ¿Cómo es posible? -comentó Kasumi- coses mejor que yo, y también eres un excelente cocinero.

-Por mi padre-dijo Ranma resignado- es un nefato cocinero, y para remendar la ropa es un inútil. Me tuve que espabilar desde muy niño, para suplir sus carencias, que no son pocas.

-Cuando acabe el traje te lo tienes que poner, con la lencería que he comprado-dijo Nodoka.

- ¿Por qué yo? -Preguntó Ranma alarmado- soy un chico.

-En tu forma femenina tienes mejor cuerpo que ninguna de las tres Tendo.

"Puede que la bocaza de Ranma no le venga de su padre"-Pensaron las tres hermanas.

Esa tarde el chico tuvo que hacer de modelo para su madre. Se le veía triste y abatido, las tres hermanas empezaron a reírse un poco de su forma de comportarse basta, pero conforme iba avanzando la tarde el chico se iba poniendo cada vez más osco, Akane fue la única que percibió el estado del chico y le afectó el comportamiento del chico y se fue preocupando.

Cuando acabó la sesión de tortura, como la llamó el chico, se quedó un momento mirando su cuerpo femenino, en ese instante entró Akane alegre, y al ver la cara que tenía el chico se preocupó, le vio tener un escalofrió.

-Ranma, ¿te encuentras bien? - dijo ella preocupada.

-Akane, déjame en paz- dijo Ranma en voz baja y decaído, miró un instante a la chica con una mueca vacía de todo sentimiento- Lo siento Akane, no quería chillarte, necesito pensar un rato. - y salió.

Ella pensó que algo le pasaba, tiempo después se dio cuenta cual fue el origen de todo, y empezó a sospechar que algo iba a ocurrir y ese algo no le iba a gustar.

Esa noche Ranma no fue a cenar. Los dos viejos no se preocuparon, más cena les tocaría, Nabiki dijo que podía ser que el chico se habría ido con algunas otras de sus novias, Kasumi se preocupó sabía que eso no era verdad y cuando miró a Akane se asustó, esta sabía que al chico no le pasaba nada bueno, casi no comía y estaba al borde del llanto. Nodoka al igual que Kasumi se dio cuenta que la hermana pequeña presentía algo muy malo.

Esa noche Ranma no apareció, Akane no durmió y se levantó varias veces, fue al tejado, allí iban los dos cuando necesitaban tranquilidad, pero allí no encontró ni rastro del chico.

"¿Qué le pasa?, esta así desde que su madre le hizo coser, me preocupa nunca lo he visto tan decaído"

Al día siguiente Ranma no había vuelto cuando ella se levantó, ni a la hora de la comida, estaban cenando cuando un decaído y destrozado Ranma llegó.

- ¿SE PUEDE SABER DONDE SE HA METIDO EL SEÑORITO? -Gritó su padre enfadado cogiéndolo por el cuello-NOS TIENE A TODOS PREOCUPADOS Y EL SEÑOR RANMA NO DA SEÑALES DE VIDA.

Ranma se lo quedó mirando sin mostrarle ningún sentimiento y la mirada vacía, y no contestó.

-Ranma has caso a tu padre y contestarle.

Pero él seguía sin hablar, como si fuese un muñeco.

Akane empezó a temer lo que diría el chico cuando al fin hablarse, no quería escucharle, sabía que diría.

-He decidido… he decidido, -dijo al fin Ranma- cortar con Akane, no quiero saber nada de la promesa.-A todos les cayó la noticia como un jarro de agua fría, el chico continuo impasible, -era lo que tenía que haber hecho desde el principio.

Akane se quedó helada, no era posible que él dijese eso, la quería abandonar. Se levantó como pudo y se acercó a trompicones a él.

- ¿Por qué?, ¿Por qué? -preguntó ella, y después grito- ¿POR QUÉEEEE?, ¿ES QUE NO ME APRECIAS?, CREIA QUE SI, ¿QUE HE HECHO MAL?, ¿NO SOY LO BASTANTE BUENA?, ¿POR QUÉ?, ¿POR QUÉEEEE? - Estaba llorando, enterró su cabeza en el pecho del chico y le empezó a golpear con los puños.

-Por qué ya no me interesas, no has cambiado estos dos años, sigues pegándome y después preguntas. Nunca me crees. Ya no me siento atado a ti. Nunca te he querido, eras una diversión.

- ¿Hay otra chica? - preguntó ella.

-Si hay otra, siempre ha habido otra entre tú y yo-dijo el triste. Si hubiese estado más tranquila o hubiese pensado un poco sabia a quien se refería, pero nadie lo entendió y menos Akane. La vio cambiar de cara, notó el mal que le había hecho, pero era necesario. Él no podía jamás hacerla feliz, ella debería darse cuenta de la verdad.

Ella se separó de él y lo abofeteó y subió a su habitación corriendo estaba desesperada, no le comprendía, el día anterior habían hecho planes para el fin de semana y ahora él cortaba con ella.

Ranma la vio alejarse y no se dio cuenta que lo observaba la familia, entonces…

-Como le has podido hacer eso a Aka…-empezó a decir Nabiki furiosa, yendo hacía él dispuesta a cruzarle la cara, pero se paró al verle la cara a él. Ranma estaba llorando, con un dolor infinito, jamás olvidaría esa cara, era de alguien torturado.

-Mama, me voy, quiero ir a casa… solo… No quiero que nadie me acompañe, ni vaya a por mí, -dijo el llorando. - No quiero volver a saber nada de vosotros…

"…por un tiempo."-pensó el chico

-Hijo, ¿Qué te pasa? - dijo Nodoka, pero Ranma no le contestó.

A los pocos minutos se despedía de los Tendo en la puerta del dojo.

-Este comportamiento tuyo es poco masculino-dijo su madre.

-No, seguir con esta farsa si es poco masculino- dijo el chico.

Su madre se quedó parada. Kasumi empezó a sospechar lo que le pasaba y se acercó.

-Ranma se lo que piensas ahora, no es…-empezó la hermana mayor.

-Si lo sabes, también sabes que no podemos continuar, es arruinar…- y ya no pudo seguir.

-Ranma ha decidido huir, con una si sus amiguitas o ¿es una nueva? - dijo Nabiki con sorna.

-Sí ella tiene razón-dijo Soun- no eres el hombre que necesita mi hijita, solo eres…

Entonces recibió un bofetón de su hija mayor.

-No sabes nada, ¡VIEJO! -dijo Kasumi, estaba furiosa y llorando-Él lo hace por…

-Kasumi calla, por favor-le pidió Ranma nervioso-Si quieren pensar mal de mí, que piensen, no me importa.

-Lo que eres un cobarde, te has reído de mis hermanas, sé que para Kasumi eres más importante que yo, y que has jugado con el corazón de Akane, y ahora te vas con una puta dejando a mi hermana….

- ¿Quieres ver a tu puta? - dijo Ranma con cinismo. - ¿La quieres ver?, Pues te la voy a enseñar. Está muy cerca. Desgraciadamente más cerca de lo que imaginas.

Se acercó a ella y Nabiki retrocedió asustada, le quitó la botella de agua que tenía la joven y se la derramó por encima convirtiéndose en chica.

-Esta es la fulana con la que me voy, como ves estamos muy unidos- dijo con una cruel ironía, estaba histérico-esta es la chica que se interpone entre yo y una relación normal con tu hermana, ¿Has oído en el Furinkan que dicen los de primero de nosotros?, A mí me tratan de travesti, a Akane de lesbiana y bisexual y de ti también comentan. Dicen cosas parecidas que de tú hermana, que eres la cuñada y la hermana de cosas raras, y que tal vez seas como nosotros.

Paró un momento.

-Que comenten de mí me da igual, pero de tu hermana y de ti, ya no me es indiferente. Como ves no puedo deshacerme de mi parte femenina, ya me he informado, no puedo utilizar el estanque del chico ahogado, y por lo tanto jamás podre tener una vida normal en pareja. No consentiré hacer un infierno de la vida de tu hermana.

Se giró y antes que pudieran detenerlo ya se había ido con sus cosas.

Kasumi se acercó al padre del chico y lo abofeteó.

- ¿POR QUÉ?, ¿POR QUÉ? - Gritó Kasumi a Genma, estaba más furiosa que nunca y lloraba como si le hubiesen arrancado el alma, que así era - ¿Por qué te lo llevaste a China?, ¿Por qué lo sometiste a unos entrenamientos tan brutales y estúpidos?, No te lo perdonaré jamás, has hecho desgraciados a mis dos hermanos pequeños. Tú y no nos conocemos, no te quiero en casa hasta que mi hermano vuelva a ella y recupere su amistad con mi hermana.

-Kasumi, hija, Genma es…- empezó Soun intentándola tranquilizándola, pero se calló cuando ella lo miró.

- ¡Una palabra más y te vas con él…! - amenazó con ira su hija. - Y no quiero que lo ayudes, o seréis los dos que dormiréis bajo las estrellas.

-Genma ni se te ocurra ir a molestar a Ranma- dijo Nodoka amenazándolo.

Esa fue la primera noche que Genma durmió solo, se tuvo que gastar todos sus ahorros, cuando se quedó sin ellos se transformó en panda, para poder estar tranquilo en el zoo y comer gratis.

Ranma se instaló en casa de su madre. Y subió a su habitación. Y allí se sentó en el suelo.

Mientras Akane tumbada boca abajo en su cama seguía llorando, estaba muy deprimida y decaída, no quería ver a nadie. No podía dejar de oír lo que le dijo el chico "Nunca te he querido, eras una diversión". No soportaba estar lejos de él, no entendía que había pasado. Con lo bien que se llevaban últimamente, ¿Por qué había cortado con ella?, No tenía a otra, no había nadie más que ella. Hacía tiempo que se había alejado de sus otras prometidas, ellas lo seguían, pero ahora sabía que Ranma no estaba interesado en ellas. Unos días antes habían disfrutado de una tarde de cine. Pasaba algo, y ella quería saberlo.

Ranma paseaba por su habitación estaba desesperado, no quería haber dado el paso que había tenido que dar, pero era la única solución, no tenía que haberle hecho caso a su padre. No tenía que haber ido a vivir al dojo de los Tendo y encarrillarse con las tres hermanas, sobre todo con la más joven. Cuando cerraba los ojos la veía a ella, le veía sonreírle, no se la podía sacar de la cabeza.

Los dos jóvenes se levantaron y fueron a poner música, se habían comprado unos aparatos idénticos con los que fueron ahorraron. Los dos tenían la misma emisora, ya que tenían gustos musicales parecidos.

Se acercaron a las paredes de sus respetivas habitaciones y apoyados se dejaron caer y se agarraron las rodillas con las manos y enterraron las cabezas en las rodillas. Los dos desesperados, llorando, con el corazón hechos añicos. Vencidos por el vacío que tenían dentro donde antes estaban sus corazones. Con una música muy triste que hablaba de gente que se encontraba en la misma situación que ellos. Parecía que no se recuperarían más, sabiendo que ya nadie ocuparía el lugar vacío que el otro había dejado.

-Ranma, ¿Por qué me has dejado?, no quiero que te vayas, por favor vuelve- lloraba Akane sin poderse contener.

-Akane, era necesario, yo jamás poder hacerte feliz, olvídame, y se feliz con alguien que te pueda ofrécete más yo. -lloriqueaba el chico.

Pasaron toda la noche con la desesperación como única compañera en ese largo y desesperante viaje, sin ver el final del túnel.

Había pasado una semana, Akane solo salía al baño cuando tenía una necesidad física. No se duchaba, ni se peinaba, ni se cambiaba de ropa. Su habitación apestaba a cerrado, sudor y ropa sucia. Comía en su habitación, no quería contacto con nadie.

Kasumi estaba desesperada, su hermana apenas comía, y se imaginaba a Ranma pasando por algo igual que ella. Había cumplido su promesa de echar a su padre de casa por ayudar a escondidas a Genma y visitarlo en el zoo.

Nodoka compartía el dolor y temor de Kasumi por los dos jóvenes.

Nabiki vendió en el Furinkan la noticia de la ruptura de los dos jóvenes. Para alegría de algunos, pero ninguno se acercó a dojo. Kasumi no los iba a recibir con los brazos abiertos. Ahora era un ser colérico con quien le fallaba.

Nabiki se vio obligada a pagarse una habitación en una pensión, Kasumi la había echado de casa, por vender el secreto de la ruptura, no la dejaría volver hasta que volviese Ranma.

Ukyo fue a ver a Ranma a su casa, pero salió de allí espantada, y avisó a las otras dos que no se acercasen al chico. Las dos no hicieron caso, ninguna volvió de una pieza a sus casas, estaban muy asustadas por lo que vieron.

Unos días después de cumplirse la semana del abandono de Ranma. Kasumi entró en la habitación de Akane, el polvo ocupaba toda habitación, en un rincón vio a una figura sentada en el suelo, estaba sucia y llena de polvo, al acercarse asustada vio con horror que era Akane.

- ¡Akane!, ¡Akane!, ¡Akane! - la llamó desesperada. Akane apestaba, a sudor, ha cerrado, a orines y a heces. Y no reaccionó… al principio.

La figura levantó los ojos y la miró con una mirada vacía y volvió a agachar la mirada.

- ¡Reacciona, por favor! -dijo Kasumi llorando- reacciona y ayúdame a traer de vuelta a Ranma.

-No volverá-dijo Akane con una voz que Kasumi no conocía, una voz derrotada, hueca y sin energía ni emoción- se fue y me dejó. No me quería, sólo se reía de mí. Para él solo fui una diversión, se reía de mí. Tiene a otra.

-No tiene a nadie, era mentira y eso lo sabes tú mejor que nadie-dijo Kasumi llorando- Él cree que la única chica que se interpone entre vosotros dos es Ranma chica, es en ella en la que ve un impedimento para estar bien contigo. Piensa en el daño que te puede provocar por estar maldito. Y no quiere que sufras por su causa.

Akane se quedó mirando a su hermana.

- ¿Por qué no me lo dijo? -contestó llorando- Yo sé que Ranma es un hombre y me da igual que aspecto tenga, no me importa lo que digan los demás, si es por eso no me hará daño.

-Ahora jovencita te darás un baño, y te adecentarás y limpiaras tu habitación- dijo Kasumi- después iremos por Ranma,

Cuando su hermana estaba en el baño, Kasumi habló con Nodoka.

-Voy a ver a Ranma, procuraré traerlo y que haga las paces con Akane. Vigilármela un rato por favor.

Fue corriendo a casa de Nodoka, buscó por toda la casa al chico y lo encontró en una habitación, el aspecto del chico no era distinto a como encontró a Akane.

-Venga Ranma, anímate, has pasado por cosas peores. Tengo que llevarte a Akane, ella te espera, no la dejes sola, has de cumplir una vieja promesa. - dijo la chica desesperada.

- ¿Qué ve en mí? -dijo Ranma muy abatido- soy una cosa rara, como me puede querer. Soy una atracción de feria.

-Ranma, a ella no le preocupa lo que tú seas, en lo que te conviertas-dijo Kasumi llorando- quiere tenerte a su lado, vuelve conmigo, ella te espera.

-No puedo ir, no pudo ofrecerle nada-comento deprimido el chico. -Siempre habrá una chica que se interponga entre ella y yo.

- ¡RANMA ERES IDIOTA! - Se oyó gritar a alguien enfadada, se giraron y vieron a Akane, - ERES IDIOTA, HACE CASI DOS AÑOS QUE NOS CONOCEMOS, NO ME HA IMPORTADO NUNCA QUE ASPETO TIENES, NUNCA, YO SE QUE TU ERES RANMA, ERES MI RANMA, ESE TONTO TESTADURO, CREIDO, MACHISTA, PRESUMIDO Y BOCAZAS. ¿Por qué te tienes que preocupar por él que dirán?, preocúpate por nosotros dos, solamente por nosotros dos, los demás no tienen nada que decir. No importa lo que digan.

-Pero yo… los demás… no estoy seguro, ¿Cómo puede decir eso que te importa poco que dirá la gente?, esto te pone en un papel que te será muy difícil soportar.

-Me da igual lo que diga la gente, yo quiero estar contigo. ¿Te acuerdas en el sueño que tuvimos?, Cuando yo te quise echar de mi lado, ¿Qué dijiste?," ¿Te acuerdas?, dijiste. "Ahora no quiero salir de tu vida, por qué tu vida forma una importante parte de mi vida. Y salir de ella es como si me tuviese que cortar una mano. Eres una parte de mí de la que no quiero separarme.", yo opino lo mismo y sé que tú también, vamos afrontar esta crisis juntos, y no veas a la chica pelirroja como un obstáculo entre nosotros dos, verla como una hermana quisquillosa.

-Te visto llorar en la escuela por lo que te han llamado, no quiero que sufras por mi causa, no quiero que te dañen. Ya te han hecho mucho daño por mi culpa.

-Eso fue al principio de que me insultasen, pero ya no. Me han hecho más fuerte-dijo ella. Y cambio de tema- Te quiero en dos minutos en la bañera, si no te metes ahora, te llevaré yo misma. Dentro de media hora como máximo quiero estar de vuelta hacía casa y quiero que me acompañes, por tu propia voluntad o arrastras. -comentó una Akane alegre.

-Formas parte de mí-dijo el chico... - comentó el Ranma del sueño del que había hablado Akane-…como yo formo parte de ti. -ella lo miró y asintió.

-No estamos juntos por la promesa de nuestros padres, lo estamos por qué tú y yo así lo queremos.

-Ayúdame a llegar al baño, del resto me preocuparé yo- dijo Ranma. ya estaba convencido que su lugar estaba al lado de su prometida.

-Si quieres te puedo ayudar a bañarte-dijo Akane riendo-no sería la primera vez que te vería desnudo.

- ¡Pervertida!, eres una pervertida-dijo Ranma un poco enfadado, pero riendo- tengo que aprender tu truco del mazo, ahora mismo te mereces un mazazo.

Media hora después los tres jóvenes volvían al dojo. Ranma se paró delante de Akane.

-Akane…- dijo el chico y tardó unos segundos en seguir- ¿de verdad que no te importa que yo me transforme?

-Eres un pesado- contestó ella- No me importa nada, por qué sigues siendo tú.

-Si a ti no te importa, yo no tengo nada que decir.-respondió el chico- Pero no será nada fácil vivir con mi maldición, lo pasaremos mal.

-Me importa poco, y creo que ya lo hemos pasado mal por tu maldición otras veces.

-Nunca no dejaran en paz esos seis que tú sabes. Harán todo lo posible para que nos peleemos… y nos separemos. -avisó Ranma.

-Nunca han triunfado, y si lo han hecho ha sido por poco tiempo, tú y yo siempre les hemos ganado, y siempre lo haremos-le contestó la chica.

-Pues así no hay nada que decir, -dijo el chico resignado. -Aunque no sé. Eres bruta, malpensada, nunca me crees, eres torpe y no sabes cocinar. -ella se estaba enfadado-Y yo soy bocazas, prepotente, creído, machista y muchas cosas más. Vaya pareja formamos. Nadie nos aguantaría ni cinco minutos. Eres tan tozuda.

-Como tú-le contestó ella riendo, estaba contenta ya tenía a su lado a Ranma, aunque le quedaban por correr algunos acontecimientos extraños

Ella se acercó al chico y aunque sabía que era peligroso lo que iba hacer, si la veían ciertas supuestas prometidas, lo miró con curiosidad y se le echó al cuello y lo besó en la mejilla.

Kasumi, los miró y se le escapó una lágrima. ¿Eran de celos, envidia, o de alegría, o de todo a la vez?

-Ranma, Akane, me hace muy feliz veros de nuevo juntos, da igual que no digas lo que sentís él uno al otro, con vuestras acciones ya os lo decís.

- ¿Qué tenemos que decirnos? -dijeron los dos, y se miraron los dos expresando descociendo.

- ¡Como sois! -contestó Kasumi. Y los abrazó- venga hermanitos que tenemos que llegar a casa.

Pasaron por donde antiguamente estaba el hospital del doctor Tofu y Kasumi entró al jardín, la puerta estaba cerrada.

-Tofu, guardaba una llave-dijo la joven- por aquí.

Tanteó una maceta y la encontró y abrió la puerta.

-Kasumi, no deberíamos entrar-dijo Akane asustada, temía encontrase un cadáver dentro.

-No pasará nada- dijo Kasumi y los tres jóvenes entraron.

Todo estaba como si el medico hubiese salido corriendo de allí. Estaban sus libros, sus instrumentos médicos, solo faltaba él…. Y su esqueleto.

- ¿Qué pudo haber pasado? -dijo Ranma.

-Me temo que nunca lo sabremos-le contestó Akane.

Oyeron un grito de Kasumi y los dos se acercaron.

- ¿Pasa algo? - dijo Akane.

-Si hay una carta y va dirigida a mí. - dijo Kasumi.

Allí mismo la abrió y la leyó. Lo que ponía en la carta nunca lo supieron ni Ranma ni Akane, pero a Kasumi se le llenaron los ojos de lágrimas. Akane se iba a acercar, pero Ranma la detuvo negando con la cabeza. Salieron a la entrada y esperaron a su hermana.

-Ahora es ella la que necesita estar sola y que la apoyemos-dijo Akane.

-Sí, para eso están los hermanos menores-comentó Ranma.

- ¿Ha vuelto el doctor Tofu? - preguntó una antigua cliente del médico que se acercó al verlos hablando en la puerta.

-No, hemos entrado por si descubrimos algo sobre él-dijo Akane.

-Es una lástima que no vuelva. Con lo bien que trabajaba ese médico, ahora necesitaríamos a uno como él.

-No se preocupe, dentro de algún tiempo, puede llegar alguien que lo sustituya. -dijo Ranma.

-Ojalá tengas razón jovencito- comentó la anciana y se fue.

- ¿Qué piensas Ranma? -dijo Akane, mirando al joven. Sospechaba que Ranma tenía algo en mente.

-En reabrir de aquí unos años este establecimiento-dijo Ranma.

-El doctor Saotome suena bien, pero tendrás competencia por qué la doctora Tendo te lo pondrá difícil.

-Eso ya se verá-dijo él sonriendo.

- ¿Y el dojo? -dijo ella preocupada.

-Akane, seamos realista, tu padre hace años que no tiene muchos alumnos, se dedica a jugar y beber con mi padre, podemos resucitar el dojo. Pero será bueno que los dos hagamos alguna carrera en la universidad… por si acaso. -dijo Ranma.

-Será difícil, esa carrera que queremos los dos. Pero siempre nos han gustado los retos difíciles, y siempre los hemos superado. ¿Pero a ti no te hubiese gustado ser ingiero?, siempre fue tu sueño.

Al poco rato salió Kasumi, cerró la puerta y se guardó la llave.

-Os he oído- dijo la hermana mayor- os guardare la llave hasta que estéis capacitados para abrir de nuevo este local.

- ¿Estás bien Kasumi? - preguntó Ranma preocupado.

-Si chicos estoy bien-contestó ella- y recordar que vosotros, uno de vosotros o los dos, sois los herederos de Tofu, me enfadaré con vosotros si no cumplís con lo que os habéis prometido. Al menos uno de vosotros.

-Y tanto que lo cumpliremos-dijo el chico orgulloso- no debes dudar de nosotros dos, somos los mejores...Somos Akane y Ranma, nunca nos echamos atrás.

"Sé que lo harán, tú también los sabios Tofu. Sabía que estos dos serían tus herederos, por eso les dejaste a ellos tu establecimiento, los cuidaré como me has pedido. Y cuando estén preparados les daré las llaves como tú querías."

Durante el resto de camino Akane se agarró del brazo de Ranma, y recostó su cabeza en su hombro. Kasumi iba detrás y sonrió. Los dos chicos no necesitaban decirse "te quiero".

Al llegar a casa Ranma pidió perdón a su madre.

-Sé que lo que he hecho no es un comportamiento… comenzó él.

-En ese momento era necesario-le cortó su madre- debías poner en orden tus ideas, y en parte tenías razón. Pero veo que las dos personas que más quieres. La que tú consideras tu hermana mayor, y tu prometida te han ayudado. Debes estar agradecido.

-Lo estoy y mucho-contestó el chico-aunque añoro pelearme con Akane, hace meses que no tenemos una buena pelea, y espero no tener ninguna con ella en meses. Aunque sea torpe, malpensada, bruta y tozuda, -miró a la chica y vio cómo se enfadaba-esas cualidades hacen la Akane que me gusta. Aunque la mayoría de esas "cualidades" también sirven para mí.

-Tenías que añadir que eres pervertido, y tonto. - dio Akane riendo.

Dos días después se dieron cuenta que no habían avisado que volviese ni a Nabiki, ni a Genma, ni a Soun. A la chica la fueron a buscar ese día, pero a los otros dos tardaron casi un mes en llamarlos, eran unas molestias.

Era una noche estrellada. Ranma y Akane volvían al dojo después de pasar todo el día fuera. Desde el día anterior estaba la familia de viaje y tenían todo el dojo para ellos. Habían ido a un concierto por la mañana, después Fueron a comer en un restaurante. Después el chico llevó a su prometida a tomar un helado y después a la discoteca. Después fueron a cenar a un restaurante. Fue un día muy bueno, parecía una repetición del que casi un año antes habían disfrutado tanto. Y ese día no disfrutaron menos, ella lo cogió por el brazo y anduvieron contentos por las solitarias calles. Él le prometió volver a tener más días como ese. Pero los dos tuvieron un mal presentimiento. Se parecía demasiado al sueño en que Ranma murió.

Cuando mejor estaban, cuando cruzaban un parque, aparecieron los seis personajes que siempre se metían por medio. Los dos chicos volvieron a recordar con terror el sueño que tuvieron semanas antes. Ya era la segunda vez que les pasaba lo mismo que en uno de sus sueños.

El ataque llegó por sorpresa. Ranma y su prometida iban cogidos por el brazo y llegaron esos… seis. Los quisieron obligar a separarse.

- ¡Suelta de inmediato a Akane Tendo! - le reclamó Kuno a Ranma. -No tienes derecho a ir cogido de ella, Akane será mi esposa.

-Lo siento Kuno, pero tenemos la costumbre de ir así y ya sabes que es difícil quitar las costumbres-dijo Ranma y se puso desafiante- y esta no la quiero perder.

Kuno se enfadó a un más, y Ryoga también. Los dos miraron a Ranma con ganas de matarlo.

- ¡Akane! -Dijo Shampoo-Suelta a Airen. Es mi prometido, no tienes ningún derecho a él.

-Opino lo mismo que la amazona. Pero Ranma es mío. -comentó Kodachi.

- ¿Queréis que lo suelte? - preguntó Akane y miró a sus rivales y ella dijeron que sí. - pues lo tenéis muy mal. Así cogida a Ranma voy muy calentita, que hace frio. Y a parte, no quiero soltarme. Ranma es mi prometido y si me suelta puede que otros me intenten coger y yo no quiero que lo hagan.

-Suéltala de una vez-dijo Ryoga- ¿Cómo puedes ir cogido del brazo de Akane y tener tres prometidas más? No te la mereces.

-Mira quien fue hablar. El señor Ryoga que se metía en la cama de mi prometida transformado en lo que realmente es… ¡UN CERDO! -dijo Ranma en un tono que no lo oyeron los hermanos Kuno-Va detrás de mí prometida y tiene él una novia. ¿Ya has olvidado otra vez a Akari? Tú si no te mereces que te quiera nadie. Y según rumores persigues a alguien más. A una de esas tres que me acosan a mí

Ryoga se enfadó. Lo había llamado mujeriego y era algo que no soportaba. Una de las chicas se puso roja.

-Hoy te mataré-dijo el chico- es tu última noche.

-Te equivocas cerdito, eso ya cambiado. Si fuese un poco parecido a lo que Akane y yo ya vivimos, ayer nos hubiésemos casado. Pero no, no lo hicimos.

- ¿Casados? No te entiendo Ranchan. -dijo Ukyo.

Akane y Ranma se quedaron mirando. Pero no les dijeron nada.

-Sabemos que dos de vosotros planeáis matar a Akane. La cosa se puede torcer mucho y el muerto puedo ser yo. No os dejaremos que lo hagáis.

Shampoo y Kodachi se quedaron mirando. ¿Cómo sabían eso? Ya era el segundo ataque en que adivinaban sus intenciones.

-Sabemos que entre Kodachi y Shampoo planeáis matarme. Si sale bien o si matáis por error a Ranma. Los seis huiréis y uno de los dos morirá. -dijo Akane- Muera quien muera el otro lo vengará. Y en dos años ninguno de los ocho estará... vivo.

-Dejarnos en paz-advirtió Ranma- en el momento que uno de los dos caiga, sea ahora o más para adelante, él otro lo vengara.

Los seis chicos se los quedaron mirando… se miraron ellos... y atacaron. Y desencadenaron el fin.

Los seis lo miraron asustados, pero no les hicieron caso. Empezó el ataque, Ranma y Akane superaron claramente a sus rivales, hacía mucho que los habían dejado muy atrás. En pocos minutos los habrían vencidos, pero dos jugaron muy sucio. Shampoo desapareció un momento y por desgracia… para ella no les prestó atención ni a Ranma y ni a su prometida. Cogió algo que tenía escondido cerca y lo intentó lanzar en contra de Akane.

Kodachi había atrapado los pies de Akane con su cinta, no podía moverse. Pero la chica logró cortar la cinta y se preparó para derrotar a Shampoo. Empezó a correr hacía la chinita y Ranma se unió a ella, se cruzaban continuamente y Shampoo no lograba apuntar bien a su rival, se estaba asustando y de golpe sus dos atacantes desaparecieron de su campo de visión.

Entonces dos manos aparecieron y sujetaron la lanza y dos puños la golpearon y el arma se desintegró en pedazos.

-Eso… es el Tenshin… Amaguri Ken de Ranma, junto con el golpe de la explosión de Ryoga. ¡Es imposible! Nadie ha logrado combinar los dos golpes en uno y vosotros lo habéis hecho. Y no puede ser que Akane sepa hacerlos. -dijo Shampoo asustada- Mi bisabuela ya nos avisó que podíais atacar con nuestras técnicas. No me lo creí. Utilizar el Tenshin Amaguri Ken para hacer el golpe de la explosión, ni mi bisabuela podía hacerlo.

-Si sólo lo hace uno no sale, e debe hacer con dos personas- dijo Akane.

-Es muy difícil de hacer, se debe atacar con la misma fuerza y en el mismo momento por los dos lados. Es la primera vez que nos sale, y no creo que podamos volver a hacerlo nunca más. - siguió Ranma.

Entonces Ranma de abalanzó sobre su prometida y la cogió, giró paralelo al suelo y aprovechó para darle una patada a Shampoo en la barriga que la lanzó lejos. A pocos centímetros de Ranma y Akane paso un obyecto largo. Era otra lanza, que se clavó en un árbol. Si el chico no hubiese visto como la lanzaba Kodachi, Akane o Shampoo, o ambas estarían muertas.

- ¡Akane!, ocúpate de Shampoo yo lo haré de Kodachi. -dijo Ranma con furia- debemos escarmentar a estos seis locos de una vez por todas, sin piedad, igual que hacen ellos con nosotros.

Ranma se lanzó contra Kodachi.

-No le pegaras a una mujer, tu futura esposa-dijo Kodachi- no es de hombres pegar a una mujer…- veía que el chico no iba tener piedad e intentaba que el chico no le pegase.

-Tienes razón un hombre no le pega a una mujer-dijo Ranma y una sonrisa siniestra salió en su rostro- pero yo no soy un hombre… normal- y fue a una fuente cercana y se mojó transformándose en chica. -Soy un chico que se convierte en chica… y ahora soy una mujer… y acabaré contigo. Sera una pelea entre dos chicas. No tendré piedad de ti… ni de nadie. El que amenaza o hace sufrir a Akane… me la acaba pagando.

Kodachi vio la ira de Ranma e intentó huir, pero no pudo escapar de Ranma y en diez segundos estaba en el suelo noqueada.

-Ahora por el estúpido de su hermano-dijo Ranma-Por todo el tiempo me has acosado, cuando me volvía chica. -Y se fue a un lavabo cercano. Cuando salió volvía a ser chico.

-No me importa que te vuelvas chico, siempre te querré-dijo Kuno-No desharemos de tu parte masculina y…

- ¡IDIOTA! ¿NO ME HAS OIDO? ¡SOY UN CHICO QUE SE VUELVE CHICA CUANDO SE MOJA CON AGUA FRIA! -gritó Ranma. -Te lo tenían que haber dicho tus aliados, ellos lo sabían. Más de uno le pasa algo parecido.

-Me dijiste que no le contarías a nadie mi secreto, Y se lo contaste a Akane-dijo Ryoga enfadado- y ahora a Kuno.

-Yo no se lo dije a Akane y no os voy a contar como lo descubrió por qué no os lo creeríais, pero fue de forma parecida a como hemos sabido que hoy intentaríais mátanos a uno de nosotros. Y tú mismo te has delatado delante de Kuno. ¡IMBENCIL!

Y atacó con violencia a Kuno.

- ¡Te mataré por engañarme, travesti! -dijo Kuno llorando por saber que se había enamorado de un chico.

-No le contaré a nadie eso. Pero tú tampoco lo deberás decir por qué ya sabes de lo que te trataran. - Y lo dejó noqueado un instante después.

Akane luchaba con Shampoo.

-No sé por qué Airen te ha salvado. No sabes cocinar, eres fea, y poco femenina-dijo Shampoo.

-Yo si se por qué te ha salvado a ti. Le caes bien a pesar de todo y no iba a dejar morir a nadie. No es la primera vez que salva a un enemigo.

-¡Te mataré!. No volverás a ver la luz del sol.

Se atacaban con saña. Pero Akane superaba a Shampoo. Y esta quiso emplear unos de sus trucos sucios. Se sacó una bolsita y la abrió y la esparció en dirección a Akane... Pero en su ceguera por ganarle no se dio cuenta que el viento le venía en contra y fue ella la que aspiró el polvo y se desmayó.

- ¡Idiota! -Dijo Akane con desprecio-por una vez podías jugar limpio. Con lo divertido que era el combate.

Y en ese momento se sintió atacada por Mousse.

-¡Aparta del medio!-le dijo Akane y de una patada lo mandó a un árbol y el chico cayó desmayado.

Akane se juntó con Ranma, y pegaron sus espaldas

-Quedan esos dos, me quedo con Ryoga-dijo Ranma. -te toca Ukyo.

-No es justo. Yo quiero cargarme al cerdito, me debe muchas.

-Nos lo partimos la mitad izquierda de Ryoga para mí…

-… Y la mitad derecha para mí-acabó Akane.

- ¡Que no soy un pastel para repartirme! -se quejó Ryoga asustado.

Los dos prometidos se lanzaron sobre él. Ryoga jamás había recibido tal paliza como esa. Y entonces supo que no le ganaría a ninguno de los dos, juntos o por separados.

No duró ni cinco segundos y cayó noqueado.

-Bueno solo queda Ukyo y no tengo ganas...- dijo Akane y miró a la chica con una sonrisa simpática. Que un instante después se volvió en una muy siniestra. La cocinera se asustó, en aquel momento conoció el terror. -… que se escape indemne.

Y atacó a la chica y momento después usó el Ryu Shoten Ha de su prometido.

Ranma estaba atando a sus rivales a los árboles y miró.

-Como se pasa. No debería excederse de esa manera. Pero creo que la habrá asustado… un poco.

Akane se acercó y le dio a Ukyo desmayada.

-No pienso volver a usar nunca más tus ataques, cansan mucho, me dejan agotada- dijo la chica y se apoyó en Ranma.

Estaba amaneciendo y los seis locos empezaron a recuperar la conciencia.

Y se vieron atados, y delante suyo a Ranma y su prometida, muy serios.

El chico estaba sentado y en sus manos tenía la lanza que había lanzado Kodachi. Akane estaba de pie detrás de él con las manos en los hombros del chico.

-Hoy no habéis querido matar a uno, en concreto a Akane, y no os lo perdono-decía Ranma con furia- elegir a uno de vosotros como culpable y yo lo mataré. Si no os ponéis de acuerdo os mataré a los seis.

-Primero elegiremos uno a alzar y lo mataremos, y os volveremos a preguntar. Si cuando queden cuatro no os ponéis de acuerdo os mataremos a los cuatro- terminó Akane con una risa siniestra.

Entonces los seis jóvenes atados empezaron a decir los nombres de sus aliados sin compasión. Y una discusión empezó allí. Si hubiesen estado sueltos se hubiesen peleado a muerte.

No se dieron cuenta que Ranma y Akane, los habían dejado solos hacía horas. Y en lo más brutal de la discusión llegó la policía.

-Son el mismo grupo de siempre. Supongo que han vuelto a intentar separar la pareja de siempre. Pero esta vez se han pasado para separarla. Mira han usado incluso una lanza. -dijo un policía.

-Creo que la pareja les ha dado una lección.

-Detenga a esa chica que dicen-Dijo Kodachi- nos ha intentado matar...

-No seas mentirosa-dijo Ryoga- habéis sido tú y Shampoo quienes utilizó las lanzas para atacar Akane, pero Ranma lo impidió y encima salvó a Shampoo.

- ¿Así que esa pareja se llama Ranma y Akane? -preguntó un policía con interés- ¿intentáis separar a Ranma Saotome y Akane Tendo? - preguntó incrédulo.

- ¿De que los conoce? -dijo Ukyo.

-Son muy famosos en Nerima. La pareja hereda de dojo Tendo. Su fama se ha extendido por Nerima. Entonces vosotros ¿soy los famosos seis locos que quieren separarlos?

-Hay mucha gente que está deseando que se hagan cargo del dojo para apuntarse y ser alumnos de esos dos chicos. Se harán de oro si todo les va bien. -dijo una mujer policía.

-Entonces ¿los detendrá? -dijo Kuno esperanzado.

-No, de ninguna forma. Luchan por su amor. Son un ejemplo- dijo otra mujer policía con aire soñadora- como me gustaría tener alguien cerca de mí que me cuidase como hace ese chico con su prometida

-Él no sabe cuidarla. Es muy bruto…-empezó Ryoga.

-Pues bien, que la protege de vosotros-dijo la policía. Y los chicos se callaron, era verdad siempre que los atacaban, Ranma defendía a su prometida con rabia-Señores nos deberán acompañar. Estarán una temporada a la sombra.

Mientras Ranma y su prometida iban para el dojo. Como siempre iban cogidos por los brazos...

-Estoy cansado. Llevamos muchas horas en pie- dijo el chico.

-Pero nos lo hemos pasado muy bien- dijo Akane- lástima que apareciesen esos seis.

-Creo que ya saben que no deben jugar con nosotros. Que no nos harán cambiar de idea. Si siguen así cada vez los odiaremos más, y no conseguirán ni ser amigos nuestros.

-Tengo hambre, te toca hacer un pequeño tentempié- dijo ella-y después a dormir.

Llegaron al dojo. Ya había amanecido. Comieron un poco y al ir a subir.

-Ranma estoy muy cansada me puedes ayudar a subir-el chico la miró y vio que ella no podía dar un paso del cansancio que tenía. Y la cogió en brazos-Suéltame, no me refería a esto-dijo ella enfadada. Pero se calmó al instante.

-Estas muy cansada, si te ayudó a subir tardaremos horas- La llevó a su habitación y la sentó en la cama. ¿Te ayudo a cambiarte o tú puedes…?

- ¡Pervertido! Como me pudiese mover te daba una paliza-dijo ella indignada-Darte la vuelta mientras me cambio… y no se te ocurra girarte.

-No veo por qué no puedo ver cómo te cambias. No sería la primera vez que te veo así. - dijo él un poco enfadado, se había girado- Sabes que no es la primera vez que veo a una chica desnuda, por desgracia he visto a una demasiada vez.

Ella lo miró. Sabía a quién se refería, a él mismo transformado en chica.

-Lo siento Ranma, no quiero que me veas desnuda. Tal vez dentro de…

-No me hagas caso Akane, sabes que, si te digo que no tengo deseos de verte desnuda, no es te considere fea… eres muy maja- ella se quedó congelada. Jamás el chico le habría dicho un cumplido así- es por qué un cuerpo femenino me recuerda que...

-Creo que quedamos que eso no te afectaría, que eso ya estaba superado-dijo ella enfadada-Ya te puedes girar- Ranma se giró y la vio con el pijama puesto y acostada.

Él se acercó la arropó y la besó en la frente.

-Que tengas felices sueños, preciosa- y se iba a su habitación.

-Ranma, ¿Por qué...? ¿Por qué… no duermes hoy conmigo? Han intentado matarme y estoy muy asustada. - ella realmente quería dormir con él.

Él la miró extrañado, sabía que era mentira. Aunque un poco asustada si estaba.

-Si a ti no te importa… a mí tampoco- dijo él.

Y se acostó con ella. No era la primera vez que dormían juntos. Pero siempre lo habían hecho en la habitación del chico. Y ella quería dormir con él por qué hacía tiempo que no dormían juntos. Unas horas después el chico se despertó y se fue a su habitación. Creía que podía ser peligroso dormir al lado de una chica tan tentadora como su prometida.

Cuando Ranma se despertó vio a Akane mirándolo.

-Perdona Ranma, me acabó de levantar, y como te has ido de mi habitación muy pronto, he entrado en tu habitación. Espero que no te moleste...-le recriminó, estaba molesta por haberla dejado sola.

-No de ninguna forma, puedes entrar cuando quieras, es tu casa-dijo él- me voy a levantar- y lo hizo delante de ella.

- ¿Cómo se te ocurre levantarte delante de mí y en calzoncillos? - dijo ella escandalizada.

- ¿Y ahora me dirás que nunca me has visto así? -dijo él. - Sí hemos dormido juntos y no es la primera vez.

-Bueno si… pero...-se mostraba muy tímida y sonrojada.

Cuando se dio cuenta el chico ya estaba cambiado y había cogido la ropa sucia.

-Bueno bajemos-dijo el chico- y hagamos algo de comer. Pongamos la ropa sucia en la lavadora. Mañana vuelve la familia. Que rabia con lo tranquilos que estamos sin ellos cerca.

-A mí también me gustaría que tardasen más en volver y estar los dos solos... -cuando se dio cuenta lo que decía se calló y se puso roja.

Él la miró también ruborizado. Con la familia lejos estaban más relajados...

Poco después de comer llegó un policía a casa. Les contó como sabía que ellos estaban implicados en el ataque de esa noche, que sabían que eran inocentes y que sólo se defendieron. Les preguntó por el ataque y si querían poner una denuncia en contra de sus rivales. Ranma miró a su prometida.

-No, sólo quedemos que nos dejen tranquilos. Anoche hicimos que se peleasen. No creo que estén en buenos términos durante un tiempo. -dijo Ranma

-Pero creemos que volverán. Tarde o tempranos volverán. Siempre lo han hecho-siguió Akane-la mitad piensa que tiene un compromiso con Ranma. Dos de ellos me persigue a mí. El tercero va detrás de una de las tres chicas y ve a Ranma como un rival. Llevamos casi así dos años.

Y le explicaron las extrañas relaciones de ellos con los chicos detenidos.

-No se preocupen a ustedes no le pasara nada. A ese grupo ya lo hemos detenido varias veces por pelease. Ustedes se defendían. A esos pensamos escarmentarlos de una forma que recordaran siempre, - dijo el policía y se fue.

El grupo de locos pasó un mes en la cárcel. Ni la influencia del director Kuno los sacó. Se quiso vengar en los causantes de encierro de sus hijos. Estuvo a punto de expulsarlos del Furinkan. Pero los dos jóvenes supieron como pararle los pies.

A los seis rivales les preocupaba una cosa, como sabían los dos prometidos lo que ellos planeaban, meses después se lo dijo Cologne.