Capítulo 158: AKB

Un nuevo día había llegado y Cloud estaba despertando como siempre, solo que esta vez estaba solo gracias a que luego de hablar con la Directora, pudo conseguir una habitación en solitario.

"¿Segura que es aquí?" - se escuchó la voz de Ayane fuera de su habitación.

"Según la información que conseguimos de Okina sensei, así es" - respondió Keiko mientras se encogía de hombros.

"Yo sigo diciendo que antes de venir a ver a tu Sensei, deberíamos darnos un baño" - agregó Makoto.

"Makoto-chan... tienes que calmar tu obsesión con la higiene" - bufó Keiko mientras le giraba los ojos a su amiga.

"Tal vez deberías asearte más seguido, más cuando guardas una cantidad insana de alimentos entre tus pechos" - respondió la chica de la lanza.

"Ok, creo que es tiempo de que paren" - dijo Ayane con seriedad - "Si siguen discutiendo, despertarán a todos los chicos del edificio"

"No creo que sea mucho problema sabiendo que solo son unos 20" - respondió Makoto con normalidad.

"¿Se puede saber que están haciendo?" - preguntó Cloud mientras abría la puerta, solo para notar como las chicas lo miraban con un gran sonrojo en sus mejillas - "?"

"Etto... ¿Sensei?¿Podría por favor cubrir la parte superior de su cuerpo?" - preguntó Ayane mientras intentaba desviar la mirada, la palabra clave era intentar.

"Oh... lo siento..." - respondió el chico rubio mientras volvía a la habitación y se ponía una polera sin manas - "Lamento eso, justo estaba vistiéndome para poder tener un pequeño entrenamiento matutino y digamos que se me olvidó ponerme polera"

"No... nosotras lamentamos el interrumpirlo tan temprano" - respondió Ayane mientras hacía una pequeña reverencia y en el proceso, haciendo que sus pechos rebotaran sin control.

"No importa... en fin, ¿para qué me estaban buscando?" - preguntó Cloud mientras ignoraba el espectáculo que muchos hombres matarían por ver.

"Queríamos continuar con el entrenamiento" - respondió Ayane con seriedad.

"¿A caso son masoquistas?" - preguntó Cloud mientras miraba a las chicas.

"No!¡Somos dedicadas!" - exclamaron las apenadas chicas.

Cloud se encogió de hombros mientras asentía ante la petición de las chicas - "Ok, empezaremos corriendo alrededor de la Preparatoria... por el tamaño diría que unas 10 vueltas con una gravedad del 20%"

". . ." - las chicas miraron con terror esto pero aún así asintieron con debilidad.

"¡Vamos!" - exclamó Cloud mientras las chicas lo seguían en silencio, pensando que tal vez no fue la mejor de sus ideas.

* * * * *

"No podía haber pedido una mejor noche de descanso..." - murmuró Rintarō mientras se estiraba, pero su expresión cambió cuando notó como sus dos compañeros de cuarto, Tamao y Kousuke, estaban mirando por la ventana con celos.

"¡Malditos Bishonen!" - exclamó Tamao mientras empezaba a llorar lágrimas de sangre.

"¡¿Por qué solo los niños bonitos pueden conseguir chicas?!" - exclamó Kousuke mientras lloraba por la injusticia - "¡Además!¡Ese tipo ya tiene una prometida y una chica que lo acompaña todo el tiempo!"

"¿De qué están hablando?" - preguntó Rintarō con el ceño fruncido.

"¡Míralo por ti mismo, mi amigo!" - exclamó Tamao mientras se movía para que Rintarō pudiera observar por la ventana, solo para ver como Cloud estaba trotando junto a Ayane, Makoto y Keiko - "Calma la mente..."

"¡Solo mira esas enormes tetas!" - exclamó Kousuke con dolor - "¡Desde incluso este piso se pueden observar la maravilla de esas enormes montañas rebotando sin control mientras corren!"

Rintarō negó con la cabeza mientras más escuchaba a sus compañeros - "Aunque parece que Cloud-san no parece estar muy interesando"

"¡Pura actuación!" - exclamaron los otros dos chicos.

"Estoy seguro de que él tiene que estar viendo esas tetas de reojo" - dijo Tamao mientras Kousuke asentía - "Exacto, es imposible que un hombre no aproveche esa oportunidad"

". . ." - Rintarō no sabía que responder ante esto porque él era una excepción a esa regla. Él comprendía que si se perdía en ese escenario que otros hombres encontrarían fascinante, él moriría sin darse cuenta.

"¿Tal vez podamos pedirle algunos consejos?" - preguntó Tamao con curiosidad.

"No suena mal... o sea, ¿qué tan difícil puede ser conseguir novia cuando solo somos el 1% de la población de la Preparatoria?" - preguntó Kousuke con una gran sonrisa en su rostro.

"Consejos..." - murmuró Rintarō mientras miraba al chico rubio correr en silencio. Según lo que escuchó, él estaba pasando por una situación opuesta a la suya, aunque el proceso tiene que ser el mismo, una gran presión a su corazón, pero si él puede resistir esa presión, significa que hay una forma para poder fortalecer su débil corazón y así poder tener una vida normal.

"¿Sucede algo, Rintarō?" - preguntó Tamao mientras miraba a su amigo.

"No... solo pensaba que no sería mala idea pedirle ayuda a Cloud-san" - respondió el chico de cabello negro mientras miraba a sus sonrientes amigos.

"¡Sabíamos que eras de los nuestros!" - exclamó Tamao mientras le daba unas palmadas en el hombro.

"Y yo pensaba que eras homosexual por como esquivabas a todas esas chicas" - asintió Kousuke mientras una vena se marcaba en la frente de Rintarō. Él no era homosexual, es solo que si se excitaba aunque sea un poco, se moriría.

"Como sea, ahora que sabemos que res de los nuestros, queremos invitarte a nuestro club recién formado" - dijo - "Lo llamamos Ansoku no Chi Kenkyuu Bu (Club que busca lugares para relajarse) o AKB para abreviar"

"¿Lugares para relajarse?" - preguntó Rintarō con interés. Si encontraba un buen lugar para relajarse, entonces el nivel de peligro por el cual pasaría, sería casi nulo, más con Cloud atrayendo toda la atención.

"Exacto" - asintió Tamao - "¿Interesado?"

"¡Por supuesto!" - asintió el chico de cabello negro.

"Eso es perfecto, te mostraremos nuestro nuevo lugar de relajación durante la hora del almuerzo" - asintió Kousuke con emoción - "Es lo menos que podemos hacer por unos de los pocos hombres de Nangokuren"

"Cierto... somos pocos, es por eso que tenemos que estar unidos" - asintió Tamao mientras los 3 chocaban los puños.

"Gracias... amigos..." - sonrió Rintarō mientras sus dos compañeros de cuarto asentían con firmeza.

"Ahora hablemos de temas serios..." - dijo Tamao con una expresión neutral.

"¿A caso planeas hablar sobre 'eso'?" - preguntó Kousuke con sorpresa mientras veía como su amigo asentía.

"¿'Eso'?" - preguntó Rintarō con curiosidad.

"Exacto... 'eso'" - asintió Tamao mientras miraba alrededor y sacaba lo que parecía ser una lista - "Esto contiene los esfuerzos de todos los hombres de Nangokuren... aunque obviamente no está completa ni de chiste..."

Kousuke tragó saliva cuando escuchó esto mientras sus manos temblaban por la emoción.

"¿Qué es 'eso'?" - preguntó Rintarō.

"Lo siento, Rintarō-kun... todavía no estás listo para esta información" - dijo Tamao mientras se acomodaba los lentes - "Luego de que termine el almuerzo, te contaré todo lo que necesitas saber"

"Ok" - Rintarō decidió dejar todo esto a un lado para poder prepararse para un nuevo día de clases, sin saber todo el caos que sucederá el día de hoy.

* * * * *

"¿Qué te sucedió, Ayane?" - preguntó Okina al ver el estado tan atroz que traía su estudiante.

"Entrenamiento..." - murmuró la chica mientras su cabeza caía en cansancio contra su pupitre - "No más vueltas alrededor de Nangokuren... no quiero volver a ver ese árbol..."

". . ." - Okina decidió ignorar la situación mientras empezaba con su clase, luego hablaría con Ayane para poder comprender mejor lo que sucedía.

Rintarō, solo pudo fruncir el ceño mientras analizaba la situación. Él comprendía las habilidades físicas de Ayane, así que podía más o menos calcular el nivel del entrenamiento que había hecho con Cloud, pero mientras más lo pensaba, más extraño se ponía todo porque lo único que los vio hacer, fue correr.

"¿Curioso?" - preguntó Cloud mientras miraba a su compañero de clases.

"No te voy a mentir" - asintió el chico de cabello negro - "¿Es algo secreto o puedes contarme?"

"¿Puedes pelear conmigo?" - preguntó Cloud mientras sus ojos se afilaban.

"Lo siento... no quiero ponerme en el radar de esas mujeres " - respondió Rintarō con voz baja.

"Eres aburrido... pero voy a respetar tu decisión" - dijo Cloud mientras sacudía la cabeza - "Y hablando sobre el entrenamiento, ella está así porque está usando un dispositivo que creó una amiga mía para aumentar la gravedad alrededor del usuario, eso es todo lo que puedo decir"

". . ." - Rintarō no pudo ocultar su sorpresa cuando escuchó esto porque ese dispositivo sonaba impresionante, más para un artista marcial porque ellos necesitaban entrenar sus cuerpos sin descanso - "Ya veo... gracias por revelarme esa información"

"Ni lo menciones... avísame si quieres pelear" - respondió Cloud mientras se encogía de hombros - "Un buen enfrenamiento puede hacer mejorar a las dos partes, más cuando estos están estancados"

"!" - la mirada de Rintarō se abrió cuando escuchó esto porque él sabía que su progreso había quedado estancado. Su padre le había dicho que esto fue producto de una contradicción en su interior.

Rintarō le dio una mirada al rubio, solo para notar que este hab��a cerrado los ojos.

"Parece que mi clase es aburrida para ti, Strife-kun" - dijo Okina mientras caminaba hacia donde estaba el rubio.

"Se equivoca, Okina sensei" - respondió el rubio - "Una clase nunca es aburrida cuando hay una profesora tan hermosa como usted"

"Eres bueno con tus cumplidos, Strife, pero eso no te llevará a ningún lado conmigo, al menos no durante clases" - sonrió coquetamente la profesora, aunque ella estaba solo bromeando porque disfrutaba ver las expresiones avergonzadas de sus estudiantes, una lástima que Cloud no era como el resto así que luego de un tiempo, ella decidió dejarlo pasar - "Espero que mantengas tu concentración durante clases"

"Hai" - asintió el chico rubio mientras veía como la profesora continuaba con su trabajo.