Capítulo 78 - Targaryen Motors y La Torre Targaryen

Después de ver a Kiza por segunda vez y dejarle en claro a la chica que él no era una buena persona y todo lo que había hecho era para que ella produjera mucho oro para él, entonces se marchó. Todos estaban enojados con Aegon por decirle tales cosas a la chica, pero Kiza en cambio solo sonreía al oírlo hablar y le había dicho que no tenía ningún problema en producirle todo el oro que él deseara. La chica estaba contenta con la nueva oportunidad que le estaba dando la vida y se lo agradecía a Aegon.

Después de oír la respuesta de Kiza, Aegon se marchó con lo que todos dirían que una risa perversa, típica de un villano.

La noche ya estaba por caer así que Aegon se dirigió a casa después de 'despedirse' de Ororo en la habitación de ella, Rogue estaba en una misión con parte de los X-Men y vendría al día siguiente. En casa lo esperaban D'narda, Felicia, Lorelei y MJ quienes se tiraron sobre él en cuanto entró al apartamento. Aegon estuvo un rato con ellas y luego de cambiarse se iría a tener una cita con Liz, era algo que ya había prometido días antes. En los próximos días seguirían Jessica y Gwen, ellas eran las que más difícil lo tenían para pasar tiempo con él comparado con el resto. Lorelei vivía en el piso de abajo, D'narda, Felicia y MJ vivían con él, Jennifer, Rogue y Ororo iban y venían de su apartamento cuando quisieran.

Después de una agradable cita con Liz y dejarla en su casa bajo la estricta mirada de su padre Aegon decidió regresar a casa de manera natural, caminando. Su apartamento estaba bastante cerca. Justo cuando estaba llegando las luces en la zona comenzaron a pestañar y a lo lejos se podían ver descargas de electricidad que se estaban aproximando. Segundos después Aegon vio la figura de Spiderman y tenía una idea de que sucedía.

En otro momento solo lo ignoraría, pero esos idiotas se estaban acercando a su apartamento y eso era malo. El apartamento estaba protegido por una poderosa barrera, pero sería un problema que explicar si esta quedaba expuesta. Aegon hizo que su disfraz lo cubriera y se dirigió en la dirección de Spiderman y Electro.

Se ubicó en la azotea de un viejo edificio y veía a Peter hacer algunos comentarios graciosos que solo enfurecían a Electro que solo hablaba de como su nombre sería conocido por todos cuando él se convirtiera en el asesino de Spiderman. Ciertamente un hombre que anhelaba la atención de otros. Aegon pensó que era algo estúpido, si era atención lo que quería porque no ser un súper héroe, ellos eran populares y la justicia no los perseguía casi nunca.

Fue en uno de esos momentos cuando Electro iba a pronunciar un discurso de villano barato que Aegon decidió que ya había tenido suficiente. Fūton: Shinkū Taigyoku (Estilo Viento: Gran Esfera del Vacío). Spiderman no entendía que ocurría, en ese momento había sentido como una fuerte corriente de aire había impactado a Electro haciendo que su cuerpo cayera al suelo algo debilitado.

Cuando Spiderman miró en la dirección de donde había sentido provenir el ataque y vio al mismo encapuchado de antes. "¡Tú!" Quería ir a donde él, pero no podía ignorar la condición de Electro. "Maldita sea ahora no puedo lidiar contigo." Justo cuando estaba por llegar a donde estaba Electro, Spiderman vio al encapuchado parado al lado de Electro que yacía en el suelo donde había recibido otro ataque y lo estaba mirando a él. "¡Detente, no lo lastimes!" El sentido arácnido comenzó a reaccionar inmediatamente haciendo que Spiderman retrocediera ante la fuerte presión que provenía de Aegon.

Desde el suelo unas manos salieron atrapando a Spiderman por los pies, no importaba cuanta fuerza ejerciera no lograba liberarse y no sabía qué hacer. Zombis comenzaban a salir del suelo y se acercaban a él. Comenzaba a desesperarse cuando notó que su sentido arácnido no estaba reaccionando a la amenaza de los zombis y algo le vino a la cabeza. ¿Qué tal si no era más que una ilusión? Cerró sus ojos y trató de enfocarse en su sentido arácnido por unos segundos, cuando abrió los ojos los zombis ya no estaban. "¿Ilusiones, ese es tu poder?" Cuando miró al encapuchado este se dispersó en una banda de cuervos. Esta vez su sentido arácnido si estaba captando peligro desde varios ángulos.

Aegon mientras tanto estaba sorprendido de que Spiderman rompiera su primer genjutsu, pero imaginó que se debía a su sentido arácnido. No esperaba que el sharingan engañara un sexto sentido. No seguro de cuanto duraría en este segundo genjutsu que había utilizado en conjunto con su técnica de clones de cuervos decidió terminar rápidamente. Ahora con su atención en Electro que preparaba una descarga para arrojársela a Aegon. Aegon ignoró a Electro y no se molestó en evadir su ataque, algo tan débil no le haría ningún daño. Electro por otro lado no podía creer que su ataque a quema ropa no le había ocasionado a su oponente ningún daño. "Hado # 31: Shakkaho (Disparo de Fuego Rojo)." Electro ahora era historia.

El motivo por el que algunos villanos se volvían famosos es porque los héroes lo permiten al dejarlos con vida para que retornen una vez más. Él no tenía problema con ello siempre y cuando no lo afectara, pero tampoco tenía ningún tipo de interés en llevar tal política. Electro solo había tenido mala suerte de estar ocasionando problemas cerca de la casa de Aegon.

Aegon se alejó lo suficiente antes de cancelar el genjutsu en Spiderman que una vez más se lamentaba haber fallado en detener al encapuchado. No es que Aegon disfrutara viendo a Peter de esa manera, pero sabía que la ingenuidad del chico era un peligro, no para él, sino para otros. Aegon aun recordaba la última película de Spiderman que había visto y como este con su estupidez había causado la muerte de la tía May, y no cualquier tía May sino la más sensual de todas las que había visto. Era una lástima que esa no fuera la tía May de este universo fue lo que pensó al final.

Los días pasaron bastante cargados de trabajo por parte de Aegon, Jennifer y Lorelei con la salida al mercado del primer vehículo producido por Targaryen Motors, el 'Conquistador'. El nombre parecía venir como anillo al dedo al ver como a pesar del elevado precio todos los coches se estaban vendiendo rápidamente. El nombre de Aegon estaba por todos lados como el empresario más joven y exitoso de todos los tiempos. Alguien que ya antes de los 18 años se había convertido en billonario poseyendo acciones en algunas de las más exitosas compañías del país y su propia compañía Targaryen Motors solo estaba cosechando éxito.

Aegon ya tenía información de los múltiples intentos de hacer ingeniería inversa a sus automóviles, una lástima que las medidas de seguridad habían sido lo más importante en la construcción de sus autos, más el empleo de sellos solo para estar seguro. Los autos poseían una celda de combustible que era fácil de sustituir y a diferencia de Stark, él no necesitaba un nuevo elemento pues el reactor ARC no estaba cerca de los pasajeros por lo que no producía ningún envenenamiento por radiación.

Las celdas de combustible también poseían un sistema de autodestrucción y varios sellos solo por si alguien intentaba robar los datos del reactor ARC. El propio Stark había trabajado en las medidas de seguridad, pero desconocía el uso de sellos por parte de Aegon.

Por otro lado, la Torre Targaryen ya estaba terminada y todos sus residentes estaban mudándose a la nueva maravilla arquitectónica que se había convertido en la más grande del mundo. La Torre Targaryen volvió a poner el rostro de Aegon en la vista pública. El maravilloso rascacielos, muy futurística para su tiempo estaba en boca de todos. Muchos arquitectos trataban de descubrir como el enorme rascacielos había sido posible de construir, lo cual no debía haber sido posible en un principio. Claro que todos ignoraban el uso de magia en su creación.

En la cima del edificio estaba la residencia de Aegon, el penúltimo piso tenía los apartamentos de las chicas. Todas querían un lugar propio donde recibir a sus amistades y no faltaba espacio así que no había problema. Liz y Gwen una vez que cumplieran los 18 se mudarían también.

Para el tercer día de la inauguración casi todo Siren se había mudado al igual que Ophelia después de haber asesinado a su antiguo jefe y proclamar su independencia de Hydra. Otros que se habían mudado eran Edward y Madeline quienes ahora se habían comprometido. Lydia Hardy también se había mudado y trataba de reparar su relación con Felicia, aunque no le sería fácil la relación entre ellas estaba bastante dañada. Los padres de Jessica también se habían mudado después de que Jessica los convenciera y pensando en el hijo que estaba por llegar. Otra que tenía un apartamento reservado para ella era Remus, aunque este por el momento permanecía cerrado.

Aegon estaba más que feliz contemplando como la base subterránea debajo del edificio estaba llena de tesoros. Aegon había mandado a crear enormes cantidades de monedas, joyas y diversos objetos a partir de todo tipo de material para luego ser transformados en oro por Kiza. El estado de ánimo de la chica había mejorado rápidamente después de llegar a la academia mutante, además Hank, Amelia y Kavita tenían grandes esperanzas en el tratamiento que estaban desarrollando para solucionar el problema de Kiza.

Por cierto, Kiza también tenía un apartamento en la Torre Targaryen que mantenía una atmosfera adecuada para ella y una de las mejores vistas de todas. Aegon había dicho que Kiza había pagado por gran parte del rascacielos con su esfuerzo por lo que era aceptable que tuviera su propio apartamento donde por ahora pasaría los fines de semanas y luego cuando estuviera curada podría vivir de manera permanente si eso deseaba.

Una noticia que no estaba vinculada con Aegon era que Thor había llegado a la Tierra, Aegon había elegido no involucrarse porque estaba muy ocupado atendiendo la enorme cantidad de mujeres que ahora se reunían a su alrededor. En este tiempo se había estado aproximando a Amelia durante sus visitas a Kiza.

Las periódicas visitas a Kiza habían hecho que notara como la situación en la academia se veía bastante tensa y los X-Men tenían cada vez más misiones. Él no acostumbraba a hacer preguntas a Ororo o Rogue sobre las misiones que ellas realizaban, pero esta vez pensó que era mejor estar al tanto. Cuando le preguntó a Ororo esta le informó que últimamente tenían más confrontaciones que nunca con la Hermandad de Mutantes Malvados, Aegon solo puedo echarse a reír cuando recordó el nombre de la organización de Magneto a la que hasta ahora no le había prestado mucha atención.

Al parecer la Hermandad ya estaba harta de permanecer en la sombra por más tiempo y sus acciones eran cada vez hozadas. Aegon pensó que ya era bastante increíble que la mayoría de las personas siguieran pensando que los mutantes no existían. Al mismo tiempo Ororo le informó sobre un grupo de mutantes que buscaban despertar a un dios mutante, pero ellos solo pensaban que eran algún grupo de fanáticos delirando.

Aegon por otro lado pensó en cierta posibilidad, pero no dijo nada por el momento. Por ahora tenía su atención en cierta figura que había estado observándolo en la última semana, pero ya que no mostraba intenciones de darse a conocer él pensó que ya era hora de confrontarlo.

De la misteriosa figura podía sentir poder divino sobre el fuego, pero a diferencia de los dioses que había conocido este se sentía diferente. Tal vez un semidios, pensó. Pronto tendría su respuesta.