CAITULO 40

SARA

Me sorprendió bastante el hecho de que Carlos me trajera al consultorio médico particular para hacerme una prueba de embarazo, entonces recordé que en este mes no me ha llegado el periodo, la prueba sale negativa, eso era lo esperado, luego el doctor me hace algunas preguntas, me da pena responder algunas, por lo que Carlos responde por mí, el medico se da cuenta que somos pareja, en su mirada veo desaprobación, en realidad poco o nada me importa su opinión, nos recomienda varios métodos de planificación, optamos por la inyección trimestral, las pastillas corro el riesgo de olvidarlas y de que mi mamá las encuentre, el dispositivo intrauterino me da miedo, la inyección de mes es lo mismo, solo que me toca hacerme chuzar la nalga más seguido, entonces es mejor la de tres meses, me colocan la inyección y nos dicen que para la siguiente simplemente puedo ir a una farmacia y comprarla, salimos del consultorio y vamos al auto, son las cuatro de la tarde, en la mañana me sorprendió con desayuno en la cama, el también preparó el almuerzo, pasta con pollo, algo rapido y sencillo pero también delicioso, dentro del auto pongo música y empezamos a cantar yo no sé mañana de Luis Enrique

Yo no sé si tú, no sé si yo

Seguiremos siendo como hoy

No sé si después de amanecer

Vamos a sentir la misma sed

Para que pensar y suponer

No preguntes cosas que no sé

Yo no sé

No sé dónde vamos a parar

Eso ya la piel nos lo dirá

Para que jurar y prometer

Algo que no está en nuestro poder

Yo no sé lo que es eterno

No me pidas algo que es del tiempo

Yo no sé mañana

Yo no sé mañana

Si estaremos juntos

Si se acaba el mundo

Yo no sé si soy para ti, si serás para mí

Si lleguemos a amarnos, odiarnos

Yo no sé mañana, yo no sé mañana

Quien va a estar aquí

De un café pasamos al sofá

De un botón a todo lo demás

No pusimos reglas ni reloj

Aquí estamos solos tú y yo

Todo lo que ves es lo que soy

No me pidas más de lo que doy, no, oh-uh

Yo no sé mañana

Yo no sé mañana

Si estaremos juntos

Si se acaba el mundo

Yo no sé si soy para ti, si serás para mí

Si lleguemos a amarnos, odiarnos

Yo no sé mañana, yo no sé mañana

Quien va a estar aquí

Esta vida es igual a un libro

Cada página es, un día vivido

No tratemos de correr antes de andar

Esta noche estamos vivos

Solo este momento es realidad

Oh, no, no sé, oh

Mañana

Yo no sé (no sé mañana)

Yo no sé mañana

Yo no sé mañana

Si estaremos juntos

Si se acaba el mundo

Yo no sé si soy para ti, si serás para mí

Si lleguemos a amarnos, odiarnos

Yo no sé mañana, yo no sé mañana

Si estaremos juntos

Si se acaba el mundo

Yo no sé si soy para ti, si serás para mí.

Cuando finaliza la canción que cantamos alegremente a dúo me dice, amor, si algún día no estoy contigo, quiero que seas feliz, que vivas una buena vida, nadie tiene la vida compra y no sabemos que podría pasar en el camino, lo único de lo que puedo estar seguro es que te amare por el resto de mi vida, sus palabras me conmueven y a la vez me asustan, sin saber que un día muchos años más adelante, esas palabras serían las que me permitirían seguir con vida, amor no digas eso, tú y yo vamos a estar juntos hasta que seamos viejitos, yo nunca te voy a dejar a no ser que tú me dejes y siempre te voy a amar, sin importar los años que pasen, no puedo imaginarme una vida sin ti, pero también debes tener en cuenta que aunque te amo, nunca, pero nunca te perdonaría una traición, yo confió en ti y quiero que tu confíes al cien por ciento en mí, ahora y para siempre, siempre confiaré en ti me dice, sonrió y seguimos hablando de cosas sin sentido, llegamos a casa y tengo un poco de sueño, así que me acuesto en el sofá y me quedo dormida, a las seis de la tarde siento besos en mi cuello, en mi clavícula, en el valle de mis senos, amor despierta me dice, vamos a salir, tendremos una cita antes de que regresen tus padres, después ya no tendremos espacio para vernos, quiero que esta noche sea especial, está bien digo, y paso mis manos por su cuello, llévame ala baño, no quiero caminar le digo, sonríe y pasa sus manos por mis nalgas y sube las escaleras, entramos a la habitación y lo beso, vamos a ducharnos juntos digo, está bien me responde y sonríe, me encanta verlo sonreír, después de una hora y hacer el amor en la ducha salimos juntos, busco algo cómodo para ponerme, una blusa blanca de silueta amplia, un short de jean corto ajustado, unos converse blancos y ropa interior negra a juego, me visto rápidamente, me pongo maquillaje ligero, solo un poco de polvo compacto, labial nude y rímel, me arreglo el cabello en una cola de caballo, eso resalta los rasgos de mi rostro, me aplico perfume y salgo, mi príncipe me está esperando en la sala. Salimos de la casa y vamos directo a una pizzería, al llegar se baja y compra una pizza tamaño familiar de varios sabores, hawaiana, pollo con champiñones, queso y pepperoni, una gaseosa manzana tamaño familiar, luego vamos al supermercado y compra masmelos y algunos otros paquetes de dulces, arranca el auto y hablamos de cosas para nuestro futuro, conduce alrededor de una hora hasta llegar a nuestro destino, es una planicie en la cima de una montaña, se puede ver todo el pueblo desde aquí, es hermoso, está bastante oscuro, me detengo a observar la vista, lo escucho moviendo algunas cosas, lo volteo a ver y me doy cuenta que está sacando leña, al parecer va a hacer una fogata y veo que tenía todo listo y yo ni cuenta me había dado, que impresionante, creo que todo lo hizo mientras dormí en la tarde, media hora después hay una fogata, una tela puesta en el piso para sentarnos, yo todo lo demás listo, como no amar a alguien que hace todas estas cosas para hacerte sentir amada y especial, vamos a comer amor, la pizza se enfriará me dice, está bien digo, nos sentamos a comer y a reírnos, me cuenta de su infancia, sobre su padre, muy pocas veces habla de él, a su madre por lo que he escuchado, no la quiere y sus hermanos tampoco, al parecer no es una buena mujer, me gusta verlo así como en este momento, tranquilo, sonriendo y olvidándose de todos los problemas a los que tiene que enfrentarse, después de comer, también le cuento sobre mi infancia antes de los once años, como vivimos en una finca hasta que tuve siete años, los juegos con mi hermana mayor, mi recuerdo más triste es de cuando tenía dos años y el papá de mi prima mato a mi tía materna por celos, luego un acontecimiento importante en mi infancia fue cuando conocí a mis abuelos paternos en el dos mil uno y luego cuando nos fuimos a vivir al pueblo en el año dos mil dos, así hablando de nuestras infancias, conociéndonos un poco más, nos dan las once de la noche, empieza a hacer frio, va al auto y trae una manta y almohadas y una manta para cubrirnos del frio, me acuesto a su lado y disfruto la vista del cielo, es hermoso, recuerdo una frase que leí una vez, cuando quieres decirle a alguien que lo amas de una manera diferente, puedes decirle la luna esta hermosa, amor, la luna esta hermosa, yo también te amo me dice, pensé que no me entenderías me dice y me besa, es un beso tierno, un beso con amor que poco a poco se va convirtiendo en un beso apasionado, me sostiene la nuca con su mano para profundizar el beso, poco a poco mi excitación va aumentando, se da la vuelta y se pone encima de mí, siento su mi***ro contra mi pierna, meto mis manos por debajo de su camiseta y empiezo a subirla, amor, te necesito, quiero que me hagas el amor aquí con la luna y las estrellas como testigo.