Derrotada en la guerra, la princesa Swan, que ha sido acosada sin piedad toda su vida y dejada lisiada por su madrastra y su hermana, es enviada para ser la novia del Rey de las Bestias —Gale Stormfront— como premio por su victoria. Swan pensó que la fiera salvaje la devoraría. Sería masticada hasta que no quedase más que huesos. Pero, ¿y si Gale quiere que ella sea el remedio para su constante celo en su lugar? Esta es la historia de una princesa coja y tímida y un rey bestia destinado a convertirse en un animal sin mente, buscando desesperadamente a su pareja destinada para curar su maldición.
—Hacía tiempo que Gale había visto a este conejo blanco, y aún mantenía la misma actitud condescendiente —respondió con una sonrisa burlona—. Hubiera sido más fácil si pudieras aparecer siempre que te necesito. Tengo muchas preguntas para ti, Diosa.
—Hizo énfasis en la última palabra porque sabía que este conejo blanco era el avatar de la Diosa Selene, y no le guardaba ni un ápice de respeto.
—Después de todo, ¿por qué debería respetar o temer a la Diosa que lo maldijo?
—Soy una Diosa, no tu invocación. Además, lobito, sé que eres tú quien necesita mi ayuda ahora mismo —dijo el conejo blanco—. Así que, dime, ¿para qué me necesitas esta vez? Si me pides que levante tu maldición, entonces eso no puedo hacerlo. El único que puede levantarla es tu compañero verdadero.