Prologo

En el vacío, un espacio oscuro sin ningún rastro de luz.

"¿Dónde estoy?" dijo una voz mirando a su alrededor para no hallar nada más que oscuridad.

"¿Morí?"

"Eso es imposible, estoy seguro que estaba durmiendo y despues… ¿Qué paso despues?" dijo esa voz confundido.

"Bienvenido al vacío, es triste, pero no pudiste reencarnar de forma normal, fuiste elegido por sorteo para reencarnar" dijo una mujer apareciendo.

La mujer tenía un hermoso cabello rubio claro con algunos mechones rosas, sus ojos eran de color ámbar.

"Ya veo, pero ¿Cómo morí?" dijo la voz mirando a la mujer a pesar de que no tenía un cuerpo.

"Espera, déjame arreglar tu alma… listo, mejor" dijo la mujer y la voz ahora tenía cuerpo físico según mi percepción.

"Bueno, volviendo, moriste o mejor dicho te asesinaron mientras dormías, un ladrón entro a tu casa y estaba robando, al principio te apunto con el cuchillo, pero seguías dormido, decidió dejarte ir, pero se resbalo y te apuñalo en el corazón por accidente y llegaste aquí, normalmente cada 10 mil años se invoca un alma y justo fue la tuya, reencarnaras y te daré algunos deseos, pero la cantidad se decide por ruleta" dijo la mujer haciendo aparecer una ruleta que tenía escrito del uno al 10.

La mujer le señalo una manilla y le pidió al chico que tirara de esta.

"Bien… 8 un buen numero, dime los deseos" dijo la mujer mirando al chico.

"está bien"

"Mi primer deseo es tener todos mis recuerdos cuando reencarne" dijo el chico y vio como la mujer sonrió.

"Excelente deseo, la mayoría no gastaría su deseo en eso"

"Para mi segundo deseo, quiero el linaje, raza, habilidades y capacidades de Gilgamesh de Fate" dijo el chico mirando a la mujer.

"Bien, sigamos"

"Deseo mi propio Asora como el de Makoto de Tsuki ga Michibiku, deseo una fuente de mana ilimitada, tengo una pregunta, el mundo se escoge al azar, ¿verdad?" dijo el chico mirando a la mujer.

"Si, igual que los deseos es por ruleta, pero te puedo asegurar que es un mundo de anime y no, no hay seres que protejan ese Omniverso, el lugar al que te mande está bajo mi control y solo yo puedo reencarnar ahí, hay otros como tú en Omniversos cercanos, pero no los conocerás, bueno eso no es seguro, pero es probable" dijo la mujer y el chico simplemente asintió.

"Deseo, que mi Gate of Babylon posea objetos de todo el Omniverso, mi sexto deseo es el poder de crear mis propias habilidades, mi séptimo es la capacidad de ocupar cualquier tipo de energía, magia, Chackra y cualquier existente, y para mi ultimo deseo, quiero un sistema que me permita viajar entre mundos, una tienda, gacha, estado, inventario y que pueda decidir como viajar a otros mundos, por ejemplo reencarnar temporalmente o viajar con mi edad" dijo el chico mirando a la mujer asentir.

"Bien, ahora decidiré tu mundo por la ruleta, tus recuerdos aparecerán entre los 6 y 7 años, además no muestres tus poderes descuidadamente, te daré un paquete de regalo cada año desde que nazcas hasta los dieciocho, Bye" dijo la mujer reencarnando al chico.

"Mi pequeño héroe, quiero ver hasta donde llegas, Gilgamesh" dijo la mujer mientras cambiaba de forma, ahora parecía otra persona y empezaba a desaparecer.

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En un consultorio común de un pueblo.

*Llanto* *Llanto* *Llanto*

Una mujer está en trabajo de parto en este consultorio.

*Llanto*

"Señora, su hijo nació, es un niño, bonito, sus ojos son rojos" dijo una enfermera que ayudaba en el parto.

"Espera, hay otro más, ayúdenla rápido" dijo otra enfermera.

"Como los llamara" dijo la enfermera pasándole los dos niños a la madre.

"Aonuma Shun y Aonuma Gilgamesh" dijo la mujer mirando cariñosamente los niños.

Un hombre entro en la sala medica y miro a la mujer.

"Querida, estos son nuestros hijos" dijo el hombre tomando un niño de su esposa.

"Son Aonuma Shun y Aonuma Gilgamesh, el que tienes en tus brazos en Shun" dijo la mujer mientras veían a los niños sonreír.