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Foraigner

El final está apunto de llegar y solamente uno sobrevivirá para guiar a los demás. Pero... No en este Universo.

LuckratyH · sci-fi
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Capitulo 1

Año 3853.

Sí tuviera que describir el futuro sería... Normal, a mi vista que estoy viviendo en él. Claro, el futuro que hace 1800 años, para esa época, tendríamos las clásicas cosas que uno vería en una historia de ficción. Autos voladores; Realidad aumentada por todas partes; Realidad inmersiva; Cosas automatizadas; Una vida tranquila.

Tal y como yo la estaba viviendo. Relajado, de bajo del árbol que estaba en la última planta de nuestro hogar, era un bonito día, cerré los ojos para seguir disfrutando este día.

-John, ¿Por cuanto tiempo me vas a hacer esperar? - Abrí un solo ojo para ver a mi hermana sentada en una silla, protegiéndose a su vez con una sombrilla de los rayos del sol. Mi hermana pequeña de 17 años, al igual que yo, compartía unas pequeñas características; Cabello café, ojos marrones y piel clara. Eso sí, yo era 30 centímetros más alto que ella.

- ¿No podrías dejar a tu hermano mayor descansar un poco más? Además, casi es hora del torneo de Wall Run, necesito reponer mis energías. - Dije con despreocupación. Mi hermana me vio con enojo, pero inmediatamente se calmo, ya que saco un papel en donde estaba censurado todo el texto, solo dejando ver una imagen... La imagen de los juegos del Air Ball.

Rápidamente me desperté y me levante de mí cama, por lo que comencé a subir por las escaleras hasta llegar con mi hermana quien ahora tenía una sonrisa.

- Créeme que, sí no fuera porque esta entrada de Air Ball fuera tan costosa, no te la daría en persona.

Sí que era una maravilla la combinación de la realidad inmersiva y la aumentada, dejándonos a todos los que tuviéramos instalados en nuestro cerebro el chip del BrainBurst vagar por la tierra, siempre y cuando este lugar tuviera internet. Eso sí, no se podía ver el interior de las otras casas o de una que otra habitación de la tuya debido a la prohibición que hacían las personas para que no las espiaran, de hecho, esa era la principal utilización en sus primeros años de creación, el espionaje, pero como todo, se fue comercializando con el tiempo, hasta llegar en la era actual donde todos, inclusive niños de toda nuestra planeta madre tenia uno, claro, alguien que estaba en la realidad misma podía distinguir a alguien que estaba usando la realidad inmersiva en el mundo debido a que tiene un contorno azulado por todo su cuerpo. El BrainBurst tenia más características, pero eso es otro tema.

- ¿Dónde conseguiste esa entrada? - Le pregunte a mi hermana acercándome con prisa hasta tomar el boleto entre mis manos, hace 500 años se había dejado de imprimir cosas en papel, por lo que ver uno de estos en sí era increíblemente raro. - Yo que recuerde, las entradas para a ver a los Leones de fuego y Loungrs este día era tan caro, que es más económico comprarse un planeta. - Esto último lo decía de forma literal. Las entradas a estos partidos tenían un precio de alrededor de $500 Quintillones de Bions, y esto sin considerar que los equipos que se enfrentarían en este partido eran los campeones de sus respectivas Galaxias.

Air Ball, básicamente era un juego en donde los jugadores tenían unas botas anti-gravitatorias que solamente los hacia levitar, más no sacar disparados de la tierra... Pobres sujetos que lo probaron primero. Entonces, tienen que pasarse la pelota. Sonaría eso como un juego de los años 2000, pero el hecho es que aquí es común ver explosiones, ataques de rayos o de otro tipo de elemento con tal de perjudicar al equipo contrario. Por su puesto, cada integrante tiene un escudo corpóreo que los protegen de cualquier daño letal, es por ello que era increíble poder ver uno de estos partidos en persona ya que podías sentir el calor de cada explosión, los temblores de cada ataque y el agua, prácticamente salías totalmente sucio de un partido aunque no fueras un jugador.

Era debido a eso y porque con el BrainBurst no estaba permitido poder sentir ninguna de esas sensaciones debido a problemas que tuvieron los creadores hace 800 años aproximadamente ya que dejaba secuelas en el cerebro, se podía rebajar la intensidad de las sensaciones, pero nadie quería eso en estos partidos.

Sí uno quería ver un partido mediante realidad inmersiva con el BrainBurst, el costo de la entrada era considerablemente baja debido a la falta de las sensaciones que uno podía sentir en persona. Mientras que verlo en un holograma o en cualquier tipo de pantalla era simplemente insatisfactorio y aun más escuchando los gritos de las personas eufóricas por la (prácticamente) batalla que se liberaría en el campo...

Sin duda alguna algo inolvidable.

- Nuestros padres ascendieron en la agencia espacial y como conmemoración les entregaron 4 entradas.

- Increíble, sí que fuimos afortunados en conseguir una... Gracias, Lily. - Mi hermana sonrió, realmente ella era alguien tranquila en lugar de yo, que era bastante activo.

- Ahora ve, se que ganaras tu torneo con rapidez para llegar a tiempo. Te veremos en el estadio. - Asentí a lo que dijo mi hermana y me fui directo a mi cuarto para activar el BrainBurst, sumergiéndome así a la realidad inmersiva de nuestro mundo, levantándome de nueva cuenta de mi cama, salí de mi hogar por la ventana de mi habitación que estaba en el segundo piso y salude a mi hermana que de igual manera hizo.

Corría sin cansarme, viendo como los niños y las familias caminaban por la acera, varias de esas familias estaban en realidad inmersiva.

Me faltaban unos cuantos minutos para llegar a la zona comercial de mi ciudad en donde allí estaba la torre Lonkerbar que era la patrocinadora de este año del torneo de Wall Run, esto era ya que su edificio que tenia unos 210 pisos se usaría para escalarla. Luego sentía que vivía lejos de los lugares importantes, bueno eso era porque tenia una casa grande y más considerando porque vivia en la tierra que prácticamente era el lugar más caro para viví para un humano al ser el planeta madre.

Estando a punto de llegar, comencé a escalar uno a uno edificios que iban creciendo en tamaño, el lugar en donde iba a iniciar el torneo era en una de los 8 edificios que rodeaban la torre Lonkerbar cada una contando con 20 pisos de altura.

Al torneo estar hecho por equipos de mínimo 3 personas, me iba a juntar con el mío en el lado suroeste, por lo que al llegar, pude ver a mis 2 amigos.

Marcus y Zoe. Mis amigos de la infancia.

- Ya era hora que llegaras animal, solo 2 minutos más e íbamos a estar descalificados. - A pesar de su actitud, Marcus era un buen tipo, alto, atlético, cabello corto rubio y bien parecido, un ídolo. - Tu novia ya me estaba diciendo de que te fuéramos a buscar.

- ¿¡Cuantas veces te tengo que decir de que no somos novios!? - Estaba a punto de responder lo mismo, pero Zoe actuó más rápido que yo. Zoe era hermosa en pocas palabras, al igual que Marcus era atlética, su cabello largo sedoso lila la hacia ver extravagante.

Sí uno viera de lejos, pensaría que Marcus y Zoe eran pareja, pero no era así. De hecho yo me consideraba un orco a comparación suya en cuestión de belleza debido a que al igual que ellos era atlético.

- Pero... ¿Por qué no me llamaron entonces? - Pregunte ignorando al final las palabras de Marcus. Era extraño ahora que me percataba.

- No entraba ninguna de las llamadas que te hacíamos nosotros, pero no importa, contigo aquí ya estamos completos.

Cierto, no debería de darle muchas vueltas al asunto.

- Me tendrás que dar un helado de vainilla cuando termine esto.

- Vas a engordar sí sigues comiendo mucho helado Zoe... - Esquivé por poco una patada que iba dirigida a mi rostro. - Con este sería el 12vo de la semana y eso que apenas es el 3er día. - En esta ocasión, no pude escapar del agarre que me hizo Zoe con su pierna al atraparme desde mi cuello. Dentro de la realidad inmersiva, solo las personas que tienen consentimiento nuestro pueden interactuar con nosotros, como el caso de mis amigos, esto se podía saltar en competencias como este torneo.

- John... ¿Acaso quieres morir?

- Ma-Marcus... Al menos... se que... moriré estando entre la pierna de una linda chica... - Con dificultad dije, a pesar de que no podía sentir el dolor, era divertido para mi hacer este juego de rol cada vez que Zoe se enojaba conmigo. Pero de nueva cuenta como en muchas ocasiones últimamente ella me termino soltando, por lo que caí al suelo de cara.

- Idiota. - Mire a Zoe con curiosidad para después levantarme.

- Me cuesta créer que alguien como tú vaya a entrar en esta semana a la agencia espacial. Ese lugar es prácticamente para gente prodigio. - En eso tenía razón Marcus, había metido hace poco una solicitud de trabajo en la agencia para seguir los pasos de mis padres. Aplicaba a la sección de creación, modificación y reparación de las naves espaciales, es por ello que estaba apuntando al lugar más alto.

- Eso duele Marcus, pero tienes razón, también me cuesta créer que me aceptaron. - Dije con sinceridad, a pesar de que me postulaba para uno de los trabajos más difíciles en este ámbito, no tenía muchas esperanzas en mí. Y eso que estoy entrando con el mínimo de edad que son de 21 años.

- Deberías de confiar más en tí mismo. - Voltee mi mirada para ver a Zoe, parecía querer decirme algo más, pero...

- ¿A-Ahora sí está encendido? Muy bien *ejem* ¡BIENVENIDOS DAMAS, CABALLEROS, INVITADOS DE OTROS PLANETAS Y PARTICIPANTES A ESTE TORNEO DE WALL RUN No.127! - Parece que el presentador ya estaba comenzando a hablar por lo que le dije a Zoe que después hablaríamos. - Una disculpa por la tardanza en esta ocasión, en fin, como es de costumbre, explicaré el objetivo del torneo de Wall Run y sus reglas.

El objetivo en sí era el entretenimiento como en todos los años ya que te daban medallas virtuales, algo sencillo pero que podían muchos presumir. El año anterior habíamos perdido mis amigos y yo, pero ahora estábamos seguros de ganar.

¿Las reglas? Simples, todo el armamento de fuego, armas blancas estaban permitidos, por lo que como siempre, muchos caerán del edificio ya que una vez que se permite el uso de armas, sí una bala o un corte te impacta en un lugar importante en la vida real, te dejará paralizado para caer de manera libre y una vez se toque el suelo, salir repentinamente del BrainBurst.

- Este año se han colocado alrededor de 18 chips en las cornisa de los pisos 198, 200 y 203. - Levanté mi vista para tratar de visualizar las cornisas, y en efecto, había un par de cosas brillando en esos lugares, creo que tenía que usar mis puntos de mejora para poder ver mejor. - Todos los participantes de su equipo tienen que tener uno para pasar la barrera que está en el piso 205. ¡Por lo que alrededor de 52 equipos serán eliminados sí no obtienen el suyo propio!

- Parece que será más complicado ganar en esta ocasión. - Deje salir.

- Vamos John, no hay que ser pesimistas, recuerda nuestro arduo entrenamiento de este año para ganar este torneo... Además, sí no ganas, no creo que puedas participar por tu trabajo... - Mire a Zoe, ella tenía razón, la agencia exigía mucho tiempo, por lo que no tendría tiempo para este tipo de cosas. - Es por eso que aquí, solamente tienes 2 opciones. Ganar o ganar.

Zoe tenía razón, no podía perder ésto, era mi última oportunidad de lograr ganar, por lo que me esforzaré lo máximo.

- Sí ganamos o perdemos, tendrás que invitarme a cenar. - Me puse de cuclillas, solo para sostener con ambas manos las caderas de Zoe y acercar su estómago descubierto a mi oído. - ¿Acaso acabo de escuchar una patadita?

- Y ustedes son los que me dicen que no son novios. - Dijo Marcus mirándonos a ambos, yo sé que solamente estaba fastidiando a Zoe, por lo que me dió igual lo que dijo Marcus, aún así me puse de pie.

- Bueno, aún sí, cualquiera de los 2 resultados, no puedo el día de hoy invitarte a cenar Zoe. - Me di vuelta para ver a mi amiga que solamente me veía confundida. - Tengo planes esta noche con mi familia. - Ella pareció desanimarse un poco, por lo que continúe. - ¿Te parece bien que vayamos los 2 entonces a cenar a un restaurante el día de mañana? - Le pregunté, cosa que la volvió a poner feliz y acepto mi propuesta, juré ver un tono carmín en su rostro. Pero supongo que es porque va a comer gratis, ella sí que adora comer.

*Cambio de Perspectiva*

- (Este es un gran paso para la humanidad) - Pensó Marcus al ver aquello y ya esperaba desde hace 5 años este momento. Para Marcus, era una tortura ver qué la relación que tenían John y Zoe se había estancado. La chica le mandaba indirectas muy directas a su amigo, cosa que el esquivaba inconscientemente y más por su actitud, Marcus aún recordaba con amargura ese día en dónde platico con John sobre el asunto.

*Flashback*

Se podía ver a Marcus y a John parados en el techo del hogar de John, Zoe se había ido con Lily, la hermana de John por la petición de Marcus que le platico sobre la necesidad de platicar de algo importante ellos 2 solos.

- Seré directo John... ¿Te gusta Zoe? - Marcus no quería perder el tiempo con rodeos, tenían poco tiempo para hablar de esto y alargar la plática era un desperdicio. John por su parte se quedó callado por unos segundos, pensando que iba a decir, hasta que hablo.

- No lo sé. Pero aún así, no creo que ambos podamos ser algo. Osea, solo mírame, no soy atractivo, soy brusco y no se sacar conversaciones de la nada. Practicante soy alguien indeseado para las chicas, preferiría que Zoe se fuera con alguien mejor que yo. Es más, incluso e pensado en muchas ocasiones que tú eres mejor para ella.

*Fin del Flashback*

Marcus sin duda alguna odiaba esa parte de su amigo. Su baja confianza en sí mismo, tan grande era que lo cegaba de la realidad. Zoe cantaba a todas luces amor hacia John, pero él decidía sin darse cuenta hacerse a un lado.

No solamente baja confianza en ese tipo de cosas, sí no de sus cualidades, se hacía menos en muchas cosas como sería su inteligencia. Diablos, Marcus conocía a muchas personas inteligentes, pero John los superaba con facilidad, no era menos ya que lo aceptaron en la agencia espacial, en dónde en estas fechas sacaban toda la tecnología nueva que beneficiaba a todo el mundo.

Marcus desconocía por completo que era lo que había provocado tal comportamiento en su amigo ya que desde los 4 años, ellos han estado juntos y en ningún momento pudo ver qué o quién fue el causante de que John se hiciera menos. No solo Marcus pensaba en ello, incluso Zoe, ella fue la responsable de impulsar a John en entrar en la agencia ya que era el sueño de este último mencionado entrar para seguir los pasos de sus padres.

*Cambio de Perspectiva*

El presentador dió 5 minutos para que todos los equipos hicieran su estrategia. Y al cabo de esos minutos, el presentador comenzó con la cuenta regresiva.

- Fuuuu... Ya saben, no hay que separarnos para proteger nuestras espaldas. - Dije mirando tanto a Marcus como a Zoe, a lo que ambos asintieron en confirmación.

¡¡¡COMIENCEN!!!

Esto sí que iba a ser caótico.