Capítulo 8: Purificación

—¿Cómo lo sabe? —preguntó Sr. Chen.

—Lo sé todo, Sr. Chen. Ahora, cálmese, todo está bien. Dado que no recitó la voluntad voluntaria y lanzó el talismán sobre el fantasma correcto, será liberado de cualquier karma adicional —le aseguró la voz al otro lado del teléfono.

Chen Yuze había tirado la muñeca en el basurero. De hecho, la muñeca estaba maldita y Chen Yuze simplemente estaba infectado por el aura de muerte de la maldición.

Su tribulación era lanzar el talismán al fantasma de sombra negra y harapienta ya que él era uno con el poder.

De hecho, habría muerto en el momento en que dijese la voluntad voluntaria, 'Ven a mí, estoy dispuesto'.

Cada fantasma o espíritu maligno solo puede adherirse a una persona cuando tienen un medio espiritual.

El medio espiritual más común es un objeto físico y el medio espiritual más raro es la voluntad voluntaria.

En el cual la persona que emite la voluntad está invitando al fantasma o espíritu maligno a sí mismo.

Chen Yuze sintió que su miedo disminuía, por otro lado, se sentía agradecido.

—Señorita Yu, ¿volverá ese fantasma? —preguntó Chen Yuze con un hilo de voz.

Yu Holea negó con la cabeza.

—No, es solo... es solo que su suerte será mala durante unos días —respondió con sinceridad.

—Señorita Yu, ¿puede quitarlo? Yo...¡Yo le pagaré! —exclamó Chen Yuze con desesperación.

Chen Yuze comprendió por las interacciones previas que, aunque Yu Holea era joven, era una Maestra Celestial.

—Y quiero el talismán también —añadió.

—Esto... —Yu Holea parecía indecisa.

—Por favor señorita, si no acepta el dinero yo... yo la seguiré a donde sea que vaya —dijo Chen Yuze en un tono suplicante.

—¡Está bien, está bien! Entonces no lo engañaré, ya que es una buena persona solo le cobraré... 10,000 yuanes por el servicio. Y 1,000 yuanes por el talismán —finalmente cedió Yu Holea.

Chen Yuze sintió que Yu Holea era de verdad una gran persona.

Su salario era de 300,000 yuanes, y 10,000 yuanes era un precio aceptable para él.

Pensando así, dijo,

—Señorita Yu, usted es mi salvadora, no puedo engañarla le daré 20,000 yuanes por el exorcismo y 2,000 yuanes por cada talismán —ofreció Chen Yuze.

—Sr. Chen, está siendo cortés... —Yu Holea comenzó a decir.

Antes de que Yu Holea pudiera terminar, Chen Yuze transfirió el dinero.

Chen Yuze pidió 5 talismanes y transfirió 30,000 yuanes a Yu Holea.

¡30,000 yuanes!

Yu Holea sentía ganas de bailar.

Lo que más necesitaba ahora era dinero.

Ahora, al menos podría alquilar una casa y comer algo.

Su delicado rostro estaba lleno de alegría.

Al verla sonreír, Chen Yuze pensó en la información que acababa de recibir y suspiró amargamente.

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Algunas personas no valoran un tesoro y la familia Yu estaba entre ellas.

Chen Yuze sentía que su cerebro estaba lleno de barro.

Esta niña, Yu Holea, era una persona tan adorable, ¿cómo podían abandonarla?

Ya que la familia Yu no quiere ocuparse de ella, él lo hará.

—Señorita Yu, si necesita ayuda en el futuro, venga a mí —dijo Chen Yuze.

Yu Holea se convertirá en una persona importante en un futuro cercano.

Era bueno establecer una conexión.

Aparte de esta razón, Chen Yuze decía esto porque, para él, Yu Holea era una niña lamentable pero obediente.

Yu Holea sintió su corazón calentarse al escuchar su voz llena de preocupación.

—Hm —murmuró.

Después de realizar una purificación en Chen Yuze, Yu Holea se fue a alquilar la casa cerca de la Escuela Secundaria Jackson.

........

En la Villa

Yu Holea llegó afuera de la casa.

La casa era una Casa Moderna de 3 pisos. La casa estaba pintada de azul y blanco con una palmera a la izquierda y a la derecha.

Sin embargo, las oscuras nubes negras y rojas entorpecían su belleza.

Las nubes oscuras podrían significar maldad, mientras que las rojas representan resentimiento.

«¿Qué podría haber pasado, para convertir esta casa con tan buen Feng Shui en un Área de Cultivo de Yin?», pensó Yu Holea.

Aunque solo era visible para Yu Holea.

Eran las 12 del mediodía, sin embargo, el área alrededor de la casa estaba fría.

Yu Holea paseó tranquilamente dentro de la casa, después de desbloquear la puerta.

Era de tarde, sin embargo, la casa estaba sumida en la oscuridad.

—Jajaja —se oyeron varias risas.

Una persona promedio se habría asustado de muerte, pero Yu Holea se mantuvo en calma.

Toc toc.

Yu Holea sintió a alguien tocando su hombro.

Al girarse, encontró...a nadie.

Aunque estás completamente solo, pero todavía sientes que alguien te toca el hombro, ¿cuán aterrador era?

Ignorando el toque en su hombro, Yu Holea fue al tablero de interruptores y encendió las luces.

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