#Y por otro lado#

—¿Tienen pezones invertidos?

Y antes que nada una mano lista para abofetear fue tanto lanzada como interceptada por otra más en un sonido muy fuerte y seco

—Cómo te atreves a decirle eso a tus hermanas — la voz de Gabriele para nada era la de siempre

—Tranquila Gabriele, debe haber una razón para esa pregunta, ¿Verdad?— preguntó Louise totalmente esperanzada en eso

—! Totalmente¡ ¡Shiraishi fue la que me lanzó esa pregunta para ustedes!

—¡La próxima vez intenta tener más tacto¡— gritó Louise enojada y sonrojada

Gabriele se calmó enseguida por qué había descubierto por qué, pero quería saber la otra razón de esa razón.

—¿Por qué ella preguntaría… no ¿por qué te mandaría a ti a decir eso?

—No tengo ni piña idea, a decir verdad la golpee en el estómago cuando me dijo eso

—Hermano

—No me hables, intentaste golpearme

—!Eso es diferente¡... Dios mío, ¿al menos está bien?

—Si, les pregunté eso como disculpa

Louise suspiró profundamente mientras está extraña situación se estaba cocinando.

—Yo ni loca les diré, me estoy guardando para mí matrimonio y solo mi esposo lo sabrá

—Yo también, es demasiado vergonzoso

—Le diré eso…

Repentinamente hubo un silencio raro.

—¿Qué pasa? ¿otra pregunta incómodamente personal?— preguntó Gabriele

—N-no, solo estaba pensando cosas, nos vemos

Salió de ahí dejando a sus hermanas hablar de la situación, avanzó por el pasillo pasando por las ventanas del segundo piso, suspiró algo nervioso, igual había soportado la vergüenza además que estaba dispuesto a aceptar el golpe de Gabriele, pero con el malentendido solucionado, solo quedaba la parte final.

—No puedo creer que les hayas dicho eso

—Es tu condición, déjame en paz

—Mmmhmm, quería un beso tuyo, pero bueno, tendré otra oportunidad♪♪

—Pudrete

La situación era un incordio para Lucifer, pues para mantener el contrato de él con Kyle, está última tenía que tener un suministro de magia, claro que solo podía ser por contacto pero conociéndola, era bastante obvio lo que quería y como lo quería. Pero él no se rendiría muy fácil.

—Ya te dije, mi primer beso es con Shiraishi

—Lo se, pero sabes que lo mío solo es una formalidad

—¡Formalidad mi trasero! !Solo te estás divirtiendo con mi sufrimiento¡

—Por supuesto que no— dijo ella en un tono normal pero coqueto—, solo te estoy dando lecciones de cómo costaría la relación de ustedes dos si no empiezan de una vez, esperar de este modo me parece muy estúpido de su parte, digo, los dos se aman, ¿por qué no hacerlo de una vez, ¿no?

Pero repentinamente Lucifer no respondió, solo hubo silencio y después él miro a Kyle.

—Oye, vuelves a decir eso… le diré a Jezabel que te maté aunque Silver me odie de por vida y no estoy de broma

Esa mirada era de alguien que fue tocado de una manera prohibida, una mirada tan directa y fuerte que asustaría a cualquiera que lo hiciera enojar y más viniendo de alguien tan directo como él.

—L-lo sie-nto… no volv-erá a pasar

Hasta la voz de Kyle que hace momentos era la de siempre, parecía atropellar sus cuerdas vocales al hablar.

—Lárgate, ya

Desvió su camino y se tranquilizó, sabía lo que había dicho pero él y Shiraishi habían quedado en algo muy personal y muy especial para los dos, hablarlo como si nada era igual a como si no les importara, pero con lo que le pasó a ella, él realmente estaba dispuesto a esperar, no importando el tiempo, quería que ella pudiera estar tranquila de una manera donde le acepte, pero aún así… nada había un sentimiento raro dentro de él… saber que si ella también tenía en cuenta lo que él sentía.

«Déjate de idioteces, sabes que ella te ama mucho»

Decidió remojar sus pensamientos en las regaderas afuera la escuela para despejar lo que esa demonio había dicho.

—Te vez raro

—Dejame en paz, homunculo de mierda, no estoy de humor

Raven siempre aparecía cerca de Lucio por qué sentía a Kyle algunas veces.

—Sabes que solo la busco a ella

—Aun así eres molesto como una patada en los testículos, se fue al carajo, ahora no molestes

—Ok, te dejare por qué estás raro

Se fue después y Lucio volvió a quedarse solo, lo que realmente le molestó es que alguien que se supone no tiene sentimientos veía en él que algo estaba mal. Sabían sobre su mal hablar, pero al parecer estaba exagerando en ese momento.

—Necesito calmarme

—Habla con ella

Y por primera vez en su vida fue asustado por alguien que no fuera de su familia, no dió un grito por qué estaba acostumbrado pero aún así sintió el corazón en la garganta.

»Ho, así es como lo hacen

Silver estaba a un lado de él, claramente sonriendo y sintiéndose ganadora de algo guardado desde hace mucho tiempo.

»Que bien se siente~~~

—Silver por dios, sentí que mi mente se oscureció así como mi vista

—Lo siento, me metería en serios problemas si algo te pasa, pero no creí que realmente estarías en las nubes, Pui

—No hay problema, solo en serio no lo vuelvas a hacer

—Pui, entonces, ¿tienes dudas? Se cuando alguien no sabe qué hacer y menos cuando es un primerizo en el amor

—¿Lo dices por tus dragones?

—Pui

—Eso es diferente

—¿En serio? Pui

—Además que es cosa mía… pero deberías también controlar a Kyle aunque sea un poco — dijo intentando cambiar el tema

Pero con Silver nunca se sabía.

—No lo haré, ella hizo por mi algo, ahora yo ya no tengo tanto control ni nada que me ate a ella, Pui

—Pero si conmigo por hacer esto, así que me lo debes

—Ok, hablaré con ella, por otro lado tu deberías hacer lo mismo con Shiraishi, Pui , digo, se ve que hiciste algo estúpido y posiblemente sea más desastroso después, Pui

Daba miedo cuando en su caso alguien más tenía razón.

»Puede que ella lo entienda, puede que te golpee, Pui, todo vale cuando arreglas las cosas sin más preocupación a hacer peor la cosa Pui

—Todo por culpa de esa loca

—Nah, así es la gente y cualquiera que esté enamorada, son ciegos a lo que dicen y lo que hacen, Pui

—Y tu eres el vivo ejemplo de eso, pero al menos sabes controlarte

—Si… ¿te cuento algo? Así para estar a manos, Pui

Lucio decidió escucharlo, algo personal de Silver podía ser interesante.

—¿Qué?

—Yo fui la primera opción de Miki y a su vez ella fue la segunda opción de Delta

Y hubo un silencio algo raro, ella esperaba un grito de sorpresa o algo, pero solo recibió indiferencia total, algo que la dejó ahora en silencio y algo confundida.

—¿Sabes? Eso Jezabel nos lo dijo a mi y a mi familia

—¿!QUE¡? ¿¡CUANDO!?

Y la sorprendida fue otra más que él.

—La sirviente que entrena a mi hermana una vez la jodió con un traje cosplay de vaca pero de esos que apenas ocultan algo, debiste ver el desastre que Jezabel y Carmilla hicieron con la psique de ella al regañarla, mi hermana estaba en un shock que llegó a pensar que era lesbiana, pero para cuando le preguntamos eso a la sirvienta, salió el tema y no tuvo más opción que decirlo… ¿te imaginas? Esa sirviente aún sigue enamorada de Delta y se está desquitando con mi hermana… pero bueno, lo recuerda y a su vez fue la que lo rechazó, tal vez porque estaba con Jezabel, no la culpo

Pero Silver no se recuperaba de la respuesta.

—... Vaya… eso… eso no lo sabía… ¿Lo de Miki y yo? ¿Cómo?

Lucio suspiró y habló.

—Delta no era el único con diarios, según Louise, en el cuarto secreto hay tantas cartas de amor entre tú y Miki que llenaron una caja fuerte… ancha… oculta en una pared… a la que solo Louise tiene acceso, solo diré que la cara de mi hermana al decidirnos, no tuvo precio, puerca

Y Silver sujeto su capucha tan fuerte que podías escuchar los hilos tensarse con fuerza descomunal cuál alambre de acero reforzado.

—¡¡!?!!?!!!??!??!!!!!?!!!

Ahora la que quería gritar fuertemente fue Silver pero solo apretó la boca con sus dientes lo más fuerte que podía, sabía que él se estaba deleitando con la expresión desesperada y avergonzada que muy pocos habían visto en ella.

Lucio se fue de ahí caminando tranquilamente dejando en gritos internos a Silver, ya estaba un poco en paz a comparación del principio, sabía que su problema solo era una migaja en comparación a otros problemas románticos, justo como el de ahora, justo como el de Kyle… justo… como el que sentía…

—Shiraishi, me gustas, quiero que lo sepas y aún está de pie lo que dije ese día, si aceptas o no, seguiré esperando a cuando tú lo hagas

Ella estaba en el pasillo principal de la entrada a la Academia, eso fue sorpresivo, estaban los dos solos y el ruido de afuera podía escucharse, un día tranquilo, una cosa entre los dos, una decisión que tomada ya no había vuelta atrás, los dos lo sabían, el nervioso pero decidido, ella como si nada, pero igual sorprendida a primera instancia, después Shiraishi sonrió complacida por ello y se acercó a él, Lucio se quedó en silencio esperando el veredicto.

Pero más que una respuesta lo que recibió fue el siguiente nivel de la "Bala espiritual" no hubo preparación alguna, solo fue un toque tan sencillo en su estómago que parecía solo ser una palmadita en el costado, pero se sintió como si una bola de boliche le hubiera impactado directamente y tan de golpe que aunque no le rompió ningún hueso, sintió todo el peso de la fuerza tal cual.

Salió disparado a una de las paredes pero no como algo fuerte, sino rodando hasta ahí y quedándose sin aire además que un dolor como nunca antes había sentido que estaba al límite de hacerse del baño y llorar de dolor frente a ella.

Más Shiraishi caminó hacia él con esa suma tranquilidad casi inquebrantable.

—Tus hermanas me preguntaron el por qué yo pregunté sobre sus pezones, les tuve que decir cosas estúpidas para seguir el juego, pero se que fue Kyle la que te obligó hacer eso, para la próxima, espero y desde ahora me digas antes de hacer algo así y cualquier cosa por más mínimamente estúpida que sea, ¿entendido?

—Entonces… eso… significa…

El contacto de labios fue demasiado suave, ella con la delicadeza que le caracterizaba, él solo se quedó casi sin habla, además que le costaba respirar por el golpe, pero apenas lo disfrutó, ella alejó su rostro un poco y tenía la cara toda avergonzada de una manera tierna y decisiva, además de una sonrisa pícara y feliz.

—Estaré a tu cuidado, Lucio

—Gracias… pero… creo… que me desmayare… por las dos cosas… lo merezco

Cayó completamente al suelo no sin antes escucharle decir de la boca de ella.

—Nos vemos, mi amor

Y las luces se apagaron por el momento para él.