—Está bien, está bien. El cuchillo se ha caído. —mientras Nian Xiaomu coincidía con la mirada de él, ella dobló su espalda rápidamente y levantó el cuchillo del piso.
Lo lavó y continuó cortando los vegetales.
Luego de que Yu Yuehan estuvo seguro de que ella estaba bien, retiró su mirada y volvió a ordenar sus documentos.
Menos de tres segundos después.
*Pin*
Otro golpe seco y ruidoso.
La tapa de la olla se había caído esta vez.
Durante los siguientes tres minutos, Nian Xiaomu dejó caer el cuchillo, la tapa de la olla y el cucharón sucesivamente… ella tumbó un tarro de agua, luego derribó una botella de aceite de soya...
Toda la cocina se había convertido en una escena de desastre.
Yu Yuehan cerró su computadora portátil y la colocó convenientemente sobre la mesa. Acto seguido, se fue a la cocina preocupado.
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