webnovel

El Renacimiento de Omega

``` —¿Qué podía ser peor que la muerte misma? —Pues morir sabiendo que nadie te echaría de menos, sabiendo que tu muerte era un favor para todos los que alguna vez conociste. —Así fue exactamente como me sentí el día que morí. —Era el hijo amoroso del Rey Alfa de Eclipse, en una época donde el vínculo de pareja se consideraba sagrado, un hijo nacido fuera del matrimonio no era nada menos que sacrílego... —Fue su culpa, él amó a alguien más que a su compañera... —Fue su culpa, tuvo conocimiento carnal de una mujer humana. —Todo fue su culpa, mi único crimen fue nacer de su lujuria. —Pero, ¿por qué ese Rey Alfa que era mi padre estaba perfectamente seguro, mientras que yo era odiado, despreciado y culpado por todo en su lugar? —¿Por qué tenía que ser la ficha de cambio de mi padre, utilizada para lograr sus objetivos? —¿Por qué no pude obtener un rechazo como todos los demás, sino que en cambio fui asesinado por mi propio compañero? —¿Por qué fui asesinado antes de tener siquiera la oportunidad de vivir? —Tenía mil preguntas y sin embargo no había nadie para responder y así fue exactamente como morí... —Entonces, ¿por qué mis ojos se abrieron de repente a ese día, un mes antes de mi muerte? —¿Fue a causa de mi pequeño secreto? —Un secreto que no le contaré a nadie más que a ti... —Por el título de mi relato, debes pensar que soy un lobo Omega... —No, te equivocas... No soy un lobo Omega, soy un lobo Alfa y mi nombre es Omega. —Segundo libro en la serie Renacimiento de los Hombres Lobo. —No es una precuela o secuela de 'El Némesis del Rey Alfa', ambos libros no están relacionados salvo por el escenario del mundo y el concepto de Renacimiento de los Hombres Lobo. —El arte de la portada obtenido de internet, todos los créditos al artista original. ```

JHeart · Fantasie
Zu wenig Bewertungen
653 Chs

Otro Camino (Cap.610)

—Manténganse alerta, vigilen la batalla e informen oportunamente. Asegúrense de que la ciudad permanezca intacta y mantengan la calma en el pueblo como lo han hecho hasta ahora —ordenó el Rey Jian al resto de los señores dragón.

—Kaideon, tú te quedas —añadió el Rey Jian al regresar a su asiento en el escritorio.

Los señores dragón siguieron después a Casiano y en un momento, sólo quedaron el Rey Jian y el Señor Kaideon en el estudio.

Cuando la puerta se cerró, Kaideon rompió el silencio primero.

—Hacer que Casiano prolongue la batalla, ¿no aumentaría los riesgos de sufrir daños por parte del Gran Orco? Está expuesto y no tiene medios de apoyo. Si la batalla no sale según lo planeado, Casiano... —preguntó Kaideon con preocupación.

Gesperrtes Kapitel

Unterstützen Sie Ihre Lieblingsautoren und -übersetzer bei webnovel.com