Después de abandonar a Mathius a su suerte continuamos nuestra aventura, hasta este punto ya nos habíamos acostumbrado a consumir esos monstruos que se hacían bola pero encontramos algo que era mucho mejor, raíces de alguna planta extraña sabía dulce y era mucho mejor que los monstruos, hací que encontramos nueva comida.
Después de caminar un rato ya no encontrábamos monstruos y nos sentamos a descansar pues no habíamos dormido bien tome una pequeña siesta mientras Alex iba a explorar. Volvió corriendo agitado y me temía lo peor, un monstruo de por lo menos 2 metros lo perseguía tenía garras grandes y afiladas como las de los pequeños caminantes, lo único que puede hacer fue agarrar a Emilia de la mano y salir corriendo de ahí, por más que intentamos huir esa cosa no nos dejaba en paz, Alex se detuvo e intento detenerlo, lo ayude como pude y entre los 2 parecía que estábamos ganando, me resbale y caí en ese instante Alex intento levantarme y el monstruo le arrancó un ojo grito de dolor, pero consiguió agarrarle un brazo instantánea mente supe que intentaba hacer por lo que sujete el otro brazo del monstruo y le dije a Emilia que lo matará saco las garras del pequeño caminante y procedió a asesinar al monstruo, después de eso recogí las garras de este monstruo mientras Emilia vendaba el ojo de Alex, en la cara de Emilia se notaba que tenía miedo a morir allí, en ese instante me jure a mi mismo que no permitiría que ella muriera mientras esté conmigo.
Parecía que avían pasado meses y aún no conseguíamos salir de ese lugar, me preocupaba lo que pudiera hacer mi hija.