Capítulo 26–Xi Xiaye, Creo en ti (1).

—Ya que es así, espero que usted se haga cargo de éste proyecto, Directora Xi. Le daré un mes de tiempo y espero quepueda presentar una propuesta sólida en la próxima reunión mensual. ¿Algún problema? —concluyó la voz profunda y tranquila de Mu Yuchen.

Xi Xiaye frunció un poco el ceño y miró los documentos que Liu Lingyu le había entregado. Vaciló por un momento antes de mirar a Mu Yuchen que estaba revisando algunos documentos.

—Yo…

Él levantó un poco la cabeza cuando escuchó su voz, sus tranquilos y oscuros ojos se encontraron con los suyos. Habló alto cuando vio a Xi Xiaye dudando: —Puede decirme si se enfrenta a alguna dificultad. Conseguiré dos asistentes experimentados para ayudarla. ¿No tiene confianza en sí misma, Directora Xi?

Xi Xiaye se sorprendió por su tono al darse cuenta de que él tenía mucha fe en ella. El Vicepresidente Liu Lingyu siguió señalándola con sus ojos, así que asintió sin poder hacer nada y dijo: —Gracias por tener fe en mí, Presidente Mu. Haré lo que pueda y no lo defraudaré.

Mu Yuchen asintió y luego miró a todos.

—Espero que todos puedan trabajar en sus tareas delegadas. Menos charla y más acción. Habrá recompensas si la cuota se cumple cada trimestre. Si hay un superávit[i] de resultados, tomaré el 5% de las ganancias puras de su departamento y lo daré como bono. Cuánto obtengan dependerá de lo duro que trabajen.

—¡Sí, Maestro! ¡Haremos lo que podamos!

Todos estaban entusiasmados. ¿Quién no estaría emocionado de saber que podría conseguir más dinero?

Fue inesperado que el Presidente Mu fuera tan generoso y usara esos refuerzos para alentar a los empleados. ¿No trabajarían todos duro para obtener el bono? ¡Conseguirían más si trabajaban más!

—¿Algún otro problema? —preguntó Mu Yuchen.

Todos sacudieron sus cabezas

—Reunión finalizada.

Mu Yuchen se levantó y salió de la sala de reuniones con Li Si y Ah Mo siguiéndolo rápidamente.

Los demástambiénsalieronde la sala de reuniones.

…

La oficina de Xi Xiaye estaba en el piso 51, tenía un diseño simple y elegante y tambiénera bastante espacioso. Detrás de la gran mesa de la oficina había una ventana enorme. Fuera de la ventana se podía ver el mar. En conjunto, era un ambiente de trabajo muy agradable.

*Toc-toc*

Momentos después de que Xi Xiaye se sentara,hubo un golpe en su puerta.

—¡Pase!

Xi Xiaye tenía los ojos pegados a la pantalla de su computador y reaccionó claramente.

La puerta se abrió y su asistente Xiao Mei entró, inclinándose de manera educada.

—Directora Xi, el asistente del Presidente Mu, Li Si, llamó y dijo que el Presidente Mu quiere que vaya a su oficina.

¿A la oficina del Presidente?

Xi Xiaye se detuvo antes de levantar la cabeza y mirar a Xiao Mei. Dudó un momento y luego asintió.

—Entendido.

—¡Entonces volveré al trabajo!

Xiao Mei salió de la habitación rápidamente.

Xi Xiaye sintió un repentino dolor de cabeza al recordar el nuevo proyecto de desarrollo. Era difícil para ella manejar sola un proyecto tan grande. Podría necesitar reunir un equipo para llevar a cabo un análisis exhaustivo. Sólo así podría llegar a una propuesta más completa.

Pensó que tendría que compartir sus sentimientos con su supervisor.

Estuvo a punto de contárselo a Liu Lingyu, pero recordó que era Mu Yuchen quien la había nombrado directamente y no a través de Liu Lingyu, así que probablemente le tendría que decir de todos modos.

Xi Xiaye se levantó y salió de la oficina con los documentos sobre su mesa.

La oficina del presidente estaba en el piso 58, el último piso del edificio.

Cuando Xi Xiaye llegó, vio a Ah Mo salir de la sala con una pila de documentos en sus manos. Saludó cortésmente cuando vio a Xi Xiaye: —¡Directora Xi!

Xiaye asintió ligeramente y su bello rostro se suavizó. Tenía una impresión favorable de Ah Mo, ya que él la había ayudado en varias ocasiones, como cuando se quemó la mano.

—¡Hola, Asistente Ah Mo! —contestó.

—Por favor, entre primero. ¡Sin embargo, puede que tenga que esperar un momento, porque el Maestro estáhablando con la Señora Mayor! —dijo Ah Mo,haciendo un gesto telefónico con su mano.

—Mmm, esperaré adentro. Puedes continuar con tu trabajo.

Xi Xiaye sonrió mientras miraba la pila de documentos gruesos en sus manos.

Ah Mo acarició la pila de documentos y pasó a su lado mientras sonreía.

Xi Xiaye llamó a la puerta, pero la puerta se abrió sola después de tocar. No estaba cerrada.

Empujó la puerta y vio a Mu Yuchen de pie de espaldas a ella mientras estaba en una llamada telefónica.

Mu Yuchen se dio la vuelta cuando escuchó pasos. Asintió ligeramente a Xi Xiaye cuando la vio entrar antes de apuntar hacia el escritorio próximo.

—Lo sé, no tiene que preocuparse. Espero que nada similar sucedade nuevo en el futuro.

Mu Yuchen habló con Wang Hui con un tono ligeramente impaciente. Ella estaba realmente desesperada por encontrarle una compañera. A veces sería la nieta de un viejo camarada. En otras ocasiones, podría ser la hija de algún oficial de alto rango. Realmente se estaba cansando de su regaño estos últimos días.

—Chen, estoy haciendo esto por tu propio bien. Dijiste que estabas ocupado trabajando, así que he filtrado a las chicas por ti, y puedes mirarlas y casarte con una que te guste. ¿No es genial matar dos pájaros de un tiro? Tú consigues una esposa, nosotros conseguimos una nieta política. A los empresarios les gustan las situaciones ventajosas para todos y esto es un acuerdo ventajoso. Tu abuelo y yo estamos realmente aburridos después de retirarnos. Si no nos consigues algo que hacer, por supuesto, te molestaremos—dijo con fuerza Wang Hui.

—Te dije que puedes ir a Francia para relajarte con el abuelo. Lingshi está allí ahora de vacaciones. Ella sólo volverá después de algún tiempo, así que ustedes pueden conseguir que ella los acompañe.

El tono indiferente de Mu Yuchen vino a través del teléfono.

Sin embargo, Wang Hui empezaba a impacientarse. ¿Cómo pudo dejar que éste mocoso esquivara éste asunto después de tanto tiempo?

—No me importa. Quiero a mi nieta política. Quiero un nieto genial. Sólo espera y ve si no los consigo para el próximo año.Eres igual que tuabuelo. ¡No lo hacen si no soy lo suficientemente enérgica!

El tono enojado de Wang Hui vino a través del teléfono, haciendo que Mu Yuchen frunciera el ceño.

—Abuela…

—Estaré llegando a la compañía pronto. Hablaré contigo más tarde. ¡Será mejor que tengas cuidado si te atreves a darme más excusas!

Antes de que Mu Yuchen pudiera decir algo, Wang Hui colgó.

La voz fuerte incluso alcanzó a Xi Xiaye, quien en ese momento estaba hojeando silenciosamente los documentos. Nunca esperó que el Presidente Mu de GloryWorldCorporation se enfrentara a esa situación en casa también.

Sin embargo, Mu Yuchen y ella también se habían conocido a través de ese tonto juego de citas a ciegas. Xi Xiaye no pudo evitar sonreír mientras repentinamente pensaba en lo divertido que era.

[i][N/T: En finanzas, se entiende por superávit cuando los ingresos superan a los gastos (existe exceso de dinero).]