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El Coleccionista.

El protagonista es muy OP desde el comienzo. Viaje por distintos mundos de películas, series, manga, libros, novelas ligeras, juegos, etc. Es reencarnación con cumplimiento de deseos y un gran inmenso harem. Escribo por placer y cuando tengo tiempo. Los capítulos antiguos, los voy a ir editando poco a poco, pero como me cuesta mucho hacerlo, le doy más prioridad a escribir nuevos capítulos. Se que a mucha gente no le gustará esta obra, no obligo a nadie a leerla y no pido piedras ni hago demandas de donación. Gracias por leer y espero que disfrutéis de lo que escribo.

PA_B_C · Andere
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257 Chs

Capítulo 119.

En el autocar, con las 28 mujeres y los otros dos vehículos con los cuatro hombres, vamos de camino hacia Washington.

Donde nos esta esperando wesker, creo que a mí, exactamente no quiere volver a verme, ya que puedo alterar sus planes de forma definitiva.

Viene un transporte aéreo para buscarnos, pero como no cabemos todos en él, solamente van los hombres de los dos vehículos.

Cuando me preguntan cómo vamos a llegar hasta Washington, les señalo el autocar.

"Vais a tardar demasiado, no tenemos tanto tiempo." (León)

"¿Quieres apostar a ver quién llega antes?" (yo)

"Déjalo, no merece la pena perder el tiempo." (Barry)

Vuelvo con las chicas al autocar y ante su mirada atónita, empieza a volar con rumbo a Washington.

Tenemos un par de horas hasta que lleguemos y se me ocurren algunas formas interesantes de pasar ese tiempo con las chicas.

Hago desaparecer todos los sillones y las mesas del autocar y es su lugar hago que aparezca una gran cama, que ocupa casi la totalidad del interior.

Para hacerle sitio, uso un poco de magia y hago flotar a todas las chicas hasta que esta puesta la cama.

Las más antiguas saben lo que va a suceder.

Sin la niña Becky en el autocar, todas son mujeres adultas.

Aunque alguna aún tiene reticencias, no las voy a forzar a hacer nada, pero si tienen algo de estimulación visual y deciden unirse, no voy a rechazarlas.

Sin decir nada las veteranas comienzan a desnudarse.

Traigo 28 de mis cuerpos de mi mundo y rodeo a las que ya han pasado por la primera vez conmigo.

No empiezo salvaje, sino que tenemos una buena sesión de besos, cariño y caricias varias.

Con mi cuerpo principal, me acerco a Dahlia y le susurro al oído.

"Te amo, quiero ser uno contigo, ¿tu me amas?" (yo)

"Yo también te quiero." (Dahlia)

Hago desaparecer su ropa y la mía.

La abrazo y nos besamos.

Todas las nuevas incorporaciones, no pueden creer lo que están viendo.

Hay demasiadas emociones en un solo día.

Cuando pensaban que tendrían un poco de tranquilidad, el autocar en el que viajan, se pone a volar y da comienzo una orgía.

Mientras me beso con Dahlia, mi mano termina entre sus muslos y mis dedos juegan con su apretada concha.

Tiene algo de pelusa y bello púbico sin depilar, pero no voy a ser exigente con las mujeres de este mundo apocalíptico.

Mi pene empieza a levantarse y a ganar tamaño, hasta que llega a las 12 pulgadas.

Claire y Betty que están viendo esto con gran atención, piensan que voy a partir a Dahlia por la mitad y que no voy a poder entrar.

Apoyo a Dahlia sobre la cama y me recuesto sobre ella.

Abro sus piernas y las levanto para estar en una posición más cómoda para los dos.

Me coloco con mi polla presionando y abriendo ligeramente sus pliegues y su firme chochito.

La doy un beso en los labios y me deslizó en su interior.

Un grito ahogado y un ligero temblor hace que su cuerpo se retuerza cuando mi polla arrasa su himen y llega hasta lo más profundo de su útero sin piedad.

La curo y la masajeo para que no tenga dolor.

Me quedo metido en su interior ante la mirada atontada de todas las mujeres que aún no han tenido sexo conmigo.

No saben a dónde mirar, ya que con mis otros cuerpos también estoy disfrutando de 17 mujeres, que son bastante salvajes en la cama aunque aveces digan lo contrario.

Ver a la pequeña Jane ser empalada por dos de mis cuerpos al mismo tiempo, con alegría, gran entusiasmo y placer evidente por sus gestos y los sonidos que produce.

También ven a Dahlia abrazarme fuerte y ven que mi enorme polla ha entrado totalmente en su estrecho coño virgen.

Les llama la atención un bulto que está marcado en su abdomen.

Me empiezo a mover y el bulto aparece y desaparece coincidiendo con mis entradas y salidas de su interior.

Claire y Crystal, no queriendo quedarse fuera y sintiéndose bastante calientes también se desnudan.

Viendo que vamos a llegar a Washington antes de que estemos todos satisfechos, decido parar el tiempo y dedicarme íntegramente a las chicas.

Con dos de mis cuerpos agarro a Claire y a Crystal y las tumbó sobre la cama.

No las follo, ya que quiero hacerlo la primera vez con mi cuerpo principal.

Las abro las piernas y mi cabeza entra entre sus muslos y saboreo sus ligeramente húmedos coños con gran placer para los tres.

De perdidos al río, todas las demás una a una empiezan a desnudarse, quedando únicamente Betty al final, que también se da por vencida y se desnuda.

Igual que a Claire y a Crystal las tumbó sobre la cama y tenemos juegos previos, pero reservo sus primeras veces a mi cuerpo principal.

Las que más me sorprenden son las que se han enterado hace poco, que eran simples clones, y ahora que son realmente personas, dan por falso todo sus recuerdos anteriores para centrarse en sus nuevas vidas, a las que acaban de nacer.

Termino dentro de Dahlia y cambio con otro de mis cuerpos para ir con Claire.

Ve el cambio y me acerco a su oído.

"¿Te acuerdas de lo que te dije antes del proceso de limpieza? (yo)

Se pone pálida de repente.

"Creo que vas a necesitar una silla de ruedas para la próxima semana, voy a hacer que tus piernas se hagan de gelatina." (yo)

Me cuelo entre sus piernas y se la meto hasta el fondo de un solo empujón.

"Ten piedaaaaaaaaadddd....."(Claire)

Como si fuera una máquina taladradora entro y salgo de su interior, mientras la curo y la acaricio su cuerpo, masajeando sus puntos de placer.

Sus tetas rebotan sueltas, que parecen que quieren soltarse de su cuerpo.

Su mente se queda en blanco a los pocos minutos, pero me encargo de despertarla y que disfrute de toda la sesión.

No está sintiendo dolor, ya que la estoy curando constantemente, pero es una sensación de plenitud y una sensación extraña que siente como si todo su interior se moviera.

Está entre el placer y una sensación de vértigo que hace que se agarre a mi con todas sus fuerzas, con brazos y piernas.

Como soy un poco más rudo con Claire apenas aguanto 25 minutos y mi leche blanca tiñe su interior.

Me libero de su agarre y cambio con mi cuerpo de Crystal.

La segunda sesión de Claire es más tranquila y relajada, lo que la permite disfrutar de otra forma.

Con Crystal soy todo lo contrario que con Claire, soy gentil y cariñoso.

Incluso dejo que sea ella la que monte encima de mí y lleve el ritmo.

La siguiente en caer en mis garras es Alice la protagonista de este mundo y después su clon.

Aunque no lo sepa todavía ella también es un clon de la verdadera Alice Abernathy, que es la co-propietaria de Umbrella, que sufre progeria, que teniendo aproximadamente veinte años, parece tener 90.

Las Rain que eran clones aún teniendo personalidad distinta, actúan igual y tienen las mismas reacciones.

Ada es muy flexible y aunque tiene mucha vergüenza y mira a ver si las demás la están prestando atención, también tiene una mente muy abierta nos decimos a probar alguna posición más estimulante.

Empezando por una carretilla de pie y después poniendo sus piernas abiertas en 180 grados en vertical.

Su elasticidad es impresionante.

Tampoco me olvido de la Jill rubia que después recibir una carga de mi leche en su coño, la pongo con las piernas y el trasero mirando hacia el cielo y se la clavo por el culto.

"Oh dios, joder, te has equivocado de agujero." (Jill)

Su grito aunque más alto que e l resto de gemidos alrededor, no hace que nadie se mire a ver que ha sucedido, ya que tienen sus propios asuntos.

Aunque cree que ha sido un error, sigo empujando y la sostengo en la cama con solo la paste superior de su espalda, su cuello y su cabeza apoya.

Sus piernas se están mirando hacia el cielo y termino de meter mi pene en el interior de su culo.

Ve mi cara que la estoy sonriendo y sabe que no ha sido un error.

Me insulta con lo que le viene a la mente, entre las que se repite con bastante frecuencia la palabras, cabrón, joder y oh dios intercaladas de gritos y gemidos.

Su culto me aprieta y me exprime, no tardo ni siquiera 20 minutos en llegar a mi límite y llenar su trasero con mi crema blanca.

La incorporo y la doy un besito a modo de disculpa por no haberla avisado o preparado.

Da un gruñido.

Salgo de su ano y escucho el sonido como de una ventosa y caen mis fluidos de sus agujeros abiertos.

"No podemos dejar que tos eso se salga, con todo lo que me ha costado meterlo dentro." (yo)

Traigo dos cuerpos más y la atrapo con ellos.

Siente que pasa algo raro y al ver que ahora está cambiando de brazos que la sostienen y pensar en mis palabras se asusta ligeramente.

Pero llega a la conclusión demasiado tarde, cuando la relleno con la polla de mis dos cuerpos, una se la meto por el culo y la otra por el coño.

Ada ve que me acerco a ella de nuevo justo después de ver lo que le ha pasado a Jill y me dice.

"No creo que sea necesario probar lugares inesplorados, si quieres podemos intentar alguna postura en su lugar." (Ada)

Le sonrió y la digo.

"Siempre estoy dispuesto a nuevas posibilidades, pero soy un gran aficionado a explorar y conquistar lugares sin explorar." (yo)

Sin que dejar de follar con ella con el otro cuerpo, me sitúo en su entrada trasera y le doy un besito.

Justo después coloco la punta de mi pene y se la meto lentamente.

Una a una les rompo el cuño a todas y traigo suficientes cuerpos para que las 28 tengan todos sus agujeros llenos con las pollas de mis cuerpos.

Con mi cuerpo principal voy haciendo rotaciones entre todas ellas.

Durante una de las rotaciones, con Claire, le digo mientras la relleno el coño por 4 vez de semen.

"Para que veas que soy bueno contigo y con todas mis mujeres por igual, voy a hacer que todas tengan que usar una silla de ruedas y no serás la única." (yo)

"Eres una bestia, me vas a romper." (Claire)

"No te preocupes, soy experto en reparacioned, si te rompo te puedo volver a dejar como nueva." (yo)

"No quiero decir eso." (Claire)

"Ya tengo un poco de práctica, cuando estaba empezando a ser un dios y tener mis poderes, en más de una ocasión restauré accidentalmente a mis mujeres su virginidad en múltiples ocasiones." (yo)

"Oh dios...." (Claire)

"También puedo modificar mi cuerpo, si quieres sentirlo con más intensidad." (yo)

Hago que mi polla en su interior se dilate un centímetro de ancho, lo que hace que su coño ya dilatado sea aún más apretado.

Sigo entrando y saliendo, pero su mente se ha desvanecido, aunque sigue abrazándome.

Vuelvo a un tamaño adecuado y después de limpiarla la dejo descansar.

La doy un beso de buenas noches en los labios, no me responde pero sus labios se curvan en una sonrisa de forma inconsciente.

Sigo con la orgía y una a una empiezan a acabar como Claire.

Las últimas, como siempre son Alice Cullen y Jane, que son vampiresas y tienen una resistencia física muy superior a las demás.

Dejo a todas dormir al menos 8 horas, las limpio y las curo para que no tengan dolores o molestias.

A Claire incluida, ya que aunque le dige que no podría andar, soy un blando con mis mujeres y no me gusta que sufran innecesariamente.

Cuando todas se despiertan, elimino la cama y hago aparecer una mesa en su lugar, con alimentos y bebidas, para un almuerzo.

Parecen leones comiendo y aunque están desnudas, no les importa en absoluto.

A las dos vampiras les dejo beber un poco de mi sangre y esto llama la atención de las que no sabían que son vampiresas.

No cambia la relación entre ellas, salvo la curiosidad y más preguntas sobre otras razas de mi mundo.

Vuelvo a restablecer el tiempo a su curso normal y un poco después, llegamos a Washington, o lo que queda.

Somos el centro de atención de todos los soldados, que ven volar un autocar.

Cuando bajamos aún no han llegado los del equipo de León.

Somos escoltados hasta la casa blanca, solo quieren que pase Alice, pero ignoro al soldado que trata de detenerme y entro con ella a ver a wesker.

"Hola Wesker, cuanto tiempo sin verte." (yo)

Da un salto hacia atrás asustado.

"¿Qué demonios haces tu aquí?" (Wesker)

"Alice ahora es mi mujer y no quiero que hagas nada gracioso, como ponerle una trampa o algo parecido." (yo)

Veo como empieza a sudar.

"¿Qué es lo que quieres Wesker y porqué no debo matarte ahora mismo?" (Alice)

"Te necesitamos, necesito que luches o la humanidad terminará." (Wesker)

Me río un poco.

"Voy a contarte un secreto Wesker, soy un dios y lo sé todo sobre tu mundo, tu plan está destinado al fracaso desde que yo aparecí en este mundo." (yo)

Hace una mueca pensando que es un farol.

"Voy a dejar que vuelvas a Raccoon City y vayas a La Colmena donde están los verdaderos dueños de Umbrella durmiendo en sus cápsulas criogénicas y les digas que su plan ha fallado y que si quieren sobrevivir, más les vale no enfadarme." (yo)

Su cara pierde la sonrisa y la confianza y se pone pálido.

"¿Cómo sabes todo eso?, ¿quién te lo ha dicho?" (Wesker)

"Sombra si cuento hasta 0 y sigue cerca, te lo puedes comer." (yo)

"10." (yo)

"¿Qué?" (Wesker)

"9." (yo)

"Te recomiendo correr Wesker." (Alice)

"8." (yo)

"Esto no ha terminado, jamás saldréis de aquí, con vida." (Wesker)

Sale a toda velocidad, atraviesa la puerta y sale hasta que encuentra un vehículo aéreo y sale a toda velocidad hacia Raccoon City.

Fuera hay zombies hasta donde cubre la vista.

Hay zombies de todo tipo, incluso unas bestias voladoras bastante feas.

"¿Sombra quieres encargarte tu o lo hago yo?" (yo)

"Será un placer para mí encargarme de toda esta escoria." (Sombra)

Antes de que se aleje mientras se relame, le digo.

"Intenta no alimentarte de los soldados, aunque es probable que te disparen." (yo)

Salgo con sombra y con Alice, seguido del resto de las chicas y un montón de soldados que están curiosos por Sombra y la repentina huida de Wesker.

Cuando salimos, Sombra crece más de 40 metros y de su cuerpo empiezan a salir cientos de brazos.

Avanza hasta la barrera y sale.

Va limpiando el terreno a su paso, no deja ni rastro de muertos, pero tampoco de escombros o cualquier otra cosa que encuentre.

Deja todo totalmente vacío.

Los soldados al principio asustados de un posible nuevo enemigo, ahora se alegran y animan a su recién descubierto aliado.

La batalla por llamarlo de algún modo no dura ni siquiera una hora.

Sonbra deja todo como un solar en 3 kilómetros a la redonda.

Solamente algunos zombies ocasionales que se acercan a la zona, una vez que vuelve a mi lado.

Eructa satisfecho.

Cómo si fuera un desencadenante, todos los soldados y la gente que hay en lo que queda en el Capitolio se nos están acercando mientras nos aplauden.

"Jajajaja, mira Sombra, no te tienen miedo, incluso te aplauden como a un héroe. (yo)

Sombra resopla y se mete en mi cuerpo a dormir la siesta.

Nos despedimos de los soldados y todos los hombres que hay allí y vemos como llegan León y sus hombres en su transporte aéreo.

Cuando nos los cruzamos, en el camino de vuelta al autocar, las chicas se ríen un poco de sus caras de asombro.

León va a decirle algo a Ada, pero ella me coje por la cintura y León se da cuenta que no tiene nada que hacer.

Subimos al autocar y salimos de la ciudad en dirección a Raccoon City.

Aunque por el camino vamos a hacer una pequeña parada.

Hay uno de los clones del doctor Issacs con un grupo de guardias y supervivientes capturados, en dos vehículos blindados, mientras son seguidos por un ejército de Zombies.

Dejo que las chicas hablen entre ellas y se conozcan durante el camino.

Les cuentan a las nuevas, los detalles del anillo, los niveles que pueden ganar matando enemigos o entrenando, el torneo mensual y otros muchos pequeños detalles de ser mi mujer y vivir en mi mundo.

Vemos los dos vehículos blindados y los vamos a interceptar con el autocar, pero decido un cambio de planes y acelero en dirección a Raccoon City.

Ellos también nos han visto y tratan de dispararnos pero únicamente hacen ruido.

Los dejamos atrás rápidamente y seguimos rumbo a Raccoon city.

Dentro de los vehículos blindados esta un clon de Alexander Isaacs, fanático religioso, que piensa que es el original.

Se pone en contacto con wesker y le dice que hay un autocar sospechoso que se dirige hacia Raccoon City y que aumente las medidas de seguridad al máximo.

Es graciosa ver la cara de Wesker, ya que se imagina quién va en ese autocar.

Aún así, aumenta las defensas de La Colmena e informa al activo en el asentamiento de la ciudad.

Tardamos varias horas conduciendo hasta que llegamos a la ciudad en ruinas.

Vamos directamente hacia el asentamiento en el edificio rascacielos destrozado.

Se activan varias trampas, pero el autocar no es afectado.

Llegamos a la puerta y nos bajamos del autocar.

Nos han visto llegar y nos están observando.

Esperamos cinco minutos y me canso de esperar.

"Si no abrís la puerta en los próximos 10 segundos, nos marcharemos y no os ayudaremos con lo que está por llegar." (yo)

Sigo sin recibir respuesta.

"10, 9, 8, 7, 6, 5, 4, 3, 2, 1 y 0" (yo)

Indico a las chicas que suban otra vez al autocar.

Justo después de que entran todas y voy a entrar yo, escucho una voz que me grita.

"Espera, ¿a que te refieres con lo que está por llegar?. (mujer)

"No demasiado, un par de vehículos de Umbrella con lanzacohetes y artillería, seguidos de aproximadamente 30 mil zombies, espero que tengáis suerte." (yo)

Se asusta y sale corriendo a informar de lo que la acabo de decir.

Subo al autocar y conduzco fuera de su vista, en la dirección opuesta de la que acabo de llegar.

Mientras en el asentamiento, están hablando de la posibilidad de que mis palabras sean ciertas.

En el caso de que sean ciertas que es lo que deben hacer.

Están pensando que ha sido un error no dejarnos entrar.

Poco después, mientras aún están debatiendo qué hacer, llega corriendo un chico que les informa sobre algo que se acerca a lo lejos.

Entran un poco en pánico y tratan de pensar en lo que pueden hacer.

"Podemos hacer alguna señal por si acaso aún esta cerca y viene a ayudarnos." (mujer)

"¿Tu lo harias?" (hombre negro)

"Aún así, es nuestra mejor opción." (Hombre)

Aunque sin estar todos de acuerdo, deciden hacer señales con fuego y lanzar bengalas para intentar llamarme.

Alice y las chicas de este mundo me dicen que los ayude, aunque no hayan querido abrirnos las puertas.

Después de una hora, los vehículos de Umbrella y el ejército de muertos vivientes esta llegando.

Los supervivientes del asentamiento están muy asustados.

Arranco el autocar y voy hacia la entrada, poniéndome en el medio, entre los vehículos que llegan con los zombies y el refugio de los supervivientes.

Bajamos del autocar y las chicas totalmente equipadas y armadas hacen una formación de combate.

Salgo del autocar con un lanzamisiles FGM-148 Javelin sobre mis hombros y después de apuntar a uno de los vehículos, el que no tiene civiles a bordo y solamente tiene soldados de Umbrella y después de fijar el blanco, disparo.

El vehículo desaparece en una explosión.

El otro vehículo, en el que va el clon de Alexander Isaacs, se detiene y empieza a retroceder.

Pero primero suelta a una mujer, como cebo humano.

Las chicas comienzan el fuego para evitar que los zombies lleguen hasta la mujer que han soltado como cebo.

Yo saco mi espada Masamune y avanzó hacia el otro vehículo.

La mujer pasa por mi lado y decapitado a cualquier zombie que entra en mi rango.

La mujer llega hasta las chicas, que la ayudan a tranquilizarse.

Desde el edificio, todos los supervivientes nos están mirando.

Aunque algunos quieren ayudarnos, no les dejan abrir las puertas para salir.

Tampoco tienen armas lo suficiente precisas para disparar sin riesgo a daños colaterales.

Solamente pueden rezar para que tengamos éxito.

Voy dejando un mar de cuerpos decapitados en mi camino al vehículo que retrocede.

Ha empezado a dispararme con las ametralladoras, pero ninguno de sus proyectiles consigue darme.

Todos son desviados por mi energía interna hacia los zombies que no han entrado en mi rango de espada.

Después de unos minutos, llegó hasta el vehículo y con un movimiento ligero de espada, lo divido limpiamente por la mitad.

No mato a nadie del interior, pero el vehículo se detiene ya que ha sido cortado y ahora es completamente inútil.

La puerta de atrás se cae y entro para dejar salir a los supervivientes capturados.

Les corto las cadenas y me siguen.

Dentro del vehículo están el clon de Isaacs, un agente de Umbrella asiático y otros tres agentes.

Los mato a todos y después salgo con los supervivientes hacia mi autocar.

Al verse libres, todos ellos corren en dirección a las chicas que están disparando a cualquier muerto que se acerca.

Tardan bastante tiempo en acabar con todos los zombies que se acercan y hay otros dos ejércitos de muertos vivientes que se acercan hacia aquí, aunque aún están lejos.

Cuando más o menos está controlada la situación, abren las puertas y salen a recibirnos, aunque algunos nos apuntan con sus armas.

Los supervivientes que rescate del vehículo corren en dirección al refugio y los dejan entrar sin problemas.

"Es una buena manera de saludar a vuestros salvadores." (yo)

Me giro a mirar a las chicas y les digo que me esperen en el autocar.

Me acerco a la chica de piel morena con la que hablé antes y tiene un arma de color azul, pero no me está apuntado.

"¿Como te llamas?" (yo)

"Me llamo Cobalt, señor, gracias por salvarnos." (Cobalt)

"No hay problema." (yo)

Me acerco a otra chica que está más atrás, con el pelo corto, una camiseta gris sin mangas y gafas extrañas, que tampoco me está apuntando con un arma.

"Aléjate de ella o te dispararé." (Hombre)

Ignoro completamente al hombre con una espada con una calavera de metal como pomo y sigo acercándome a la chica.

"¿Cuál es tu nombre?" (yo)

"Si no te alejas te dispararé." (Hombre)

"Soy Abigail." (Abigail)

Me doy la vuelta y me dirijo hacia la salida.

"Hay dos ejércitos de zombies más grandes que el que acabó de eliminar acercándose y llegarán en un par de horas, no son solamente zombies lo que viene en esos grupos, también hay mutaciones de gran tamaño y bestias voladoras que arrasarán este lugar sin problemas." (yo)

Antes de que digan nada, vuelvo a hablar.

"Mi grupo y yo hemos ya hemos sido recibidos con desconfianza y amenazas dos veces, si queréis nuestra ayuda, será con mis condiciones." (yo)

Nadie dice nada y esperan.

"Si no estáis de acuerdo me marcharé en este momento y no volveré a ayudaros por mucho que hagáis señales." (yo)

"¿Y cuáles son tus condiciones?" (Hombre negro)

"La señorita Abigail y la señorita Cobalt vendrán conmigo y se unirán a mi grupo, donde estarán protegidas." (yo)

Abigail y Cobalt se sorprenden, no han pensado que mi petición pudiesen ser ellas.

"Ni lo sueñes, no vamos a permitir que se vayan contigo." (hombre)

Veo al hombre de la espada que continúa apuntándome con su pistola mientras me grita.

Se llama Christian.

"La decisión va a ser suya y solamente suya, si vuelves a molestar y continuas apuntado con tu arma hacia mi, no seré cortés." (yo)

Le doy la espalda y miro a las dos chicas implicadas para conocer su decisión.

Abigail me mira y me pregunta.

"¿Si vamos contigo salvarás al resto de la gente de este refugio?" (Abigail)

"A todos menos a uno, que es un informante de Umbrella, pero no seré yo ni mi gente quien se encargará de él." (yo)

"Acepto irme contigo." (Abigail)

Miro a Cobalt a ver qué dice.

"Yo también voy contigo." (Cobalt)

"Bien, podéis entrar a mi autocar después de despediros, allí conoceréis a las demás, después me encargaré de los muertos." (yo)

Salgo del asentamiento y voy al autocar donde me están esperando las chicas.

Nada más entrar, me preguntan por mis planes.

"Vamos a esperar a dos nuevas compañeras, vamos a eliminar a los dos grupos de zombies que se acercan y vamos a entrar en La Colmena para finalizar los asuntos de este mundo, antes de regresar a mi mundo." (yo)

Las dos tardan bastante en despedirse de sus amigos y recoger sus pertenencias.

Pongo el cambiador cerca del asiento del conductor y espero junto a las chicas mientras esperamos a las dos.

La primera en subir es Abigail y al entrar en el autocar se sorprende por la diferencia de espacio.

"Adelante Abigail, no te quedes en la puerta." (yo)

"¿Como es posible?" (Abigail)

"Se que tienes preguntas que hacer, pero seguramente Cobalt también tendrá algunas que coincidan con las tuyas, te agradecería que esperaras a que llegue para no tener que repetir otra vez lo mismo." (yo)

Se acerca a un sillón vacío y lo mira con ganas de sentarse, ya que parecen muy cómodos, pero tiene miedo de ensuciarlo al sentarse con su ropa sucia.

Ve que todas las demás en el autocar son mujeres hermosas menos yo, que soy el único hombre.

"Si quieres limpiarte y cambiarte de ropa, puedes hacerlo en este cambiador de aquí, pero no debes tener miedo, no voy a enfadarme si ensucias algo o lo rompes, ahora eres parte de mi grupo." (yo)

Me acerco a ella y le tomo la mano.

Aunque las tiene muy sucias y llenas de durezas, no me importa, me agachó y le doy un beso en la mano antes de ponerle mi anillo en su dedo anular.

Se ha puesto totalmente roja, avergonzada y al mismo tiempo encantada de ser tratada como una princesa.

Le doy la poción y le digo que use el cambiador para que se cambie.

El cambiador está equipado con un inodoro para que sea menos incómodo el proceso de purificación.

Ella entra y se bebe la poción.

El efecto es inmediato y da gracias a los cielos que haya ese inodoro en este lugar, ya que cree que la poción la ha sentado mal y sería demasiado vergonzoso hacérselo encima justo después de conocerme.

Mientras esta usando el retrete intentando no hacer ruido, se da cuenta que su cuerpo entero, está produciendo una sustancia negra, viscosa y maloliente.

"No tengas miedo, la suciedad que sale de tu cuerpo es un efecto secundario de la poción que has tomado, pronto terminará." (yo)

Mis palabras la tranquilizan y al mismo tiempo la avergüenzan, ya que no ha dicho nada sobre su situación y la estoy respondiendo a sus dudas.

Por lo que cree que la estoy viendo o algo similar.

"No te estoy espiando si es lo que crees, no tengo la necesidad de hacer eso, soy un dios y lo veo todo, incluso los pensamientos si lo deseo, pero no necesito hacerlo, se lo que hace la poción que te acabo de dar y como debes estar ahora mismo si la has bebido." (yo)

"Deberías haberme avisado de esto, es muy desagradable." (Abigail)

"Podría haberlo hecho, pero eso no haría que fuese menos desagradable y sin embargo te haría pensar en no tomarla." (yo)

Área de limpieza.

Toda la suciedad de su cuerpo y alrededores desaparece, su ropa también y está totalmente desnuda.

Restauro su cuerpo, aunque aún es virgen nunca viene mal quitar antiguas cicatrices y dolencias.

"¿Qué estilo de ropa te gusta usar?, aunque tienes un cuerpo bonito, supongo que no querrás estar desnuda." (yo)

"Cualquier cosa que sea cómoda me servirá, no tengo ninguna preferencia en especial." (Abigail)

Le paso por la puerta ropa interior, un vestido blanco y unas sandalias, la misma ropa que las amazonas de mi mundo.

Cuando sale del cambiador unos momentos después parece una chica distinta de la que ha entrado.

Aunque está un poco desnutrida y tiene los atributos femeninos delanteros (las tetas) poco desarrollados, es muy atractiva.

En el momento que Abigail sale del cambiador, está entrando en el autocar Cobalt y se sorprende tanto por el espacio dentro del autocar, como de ver el cambio que ha sufrido su amiga en unos minutos que no la ha visto.

"¿Eres tu, Abigail?, estás preciosa casi no te reconozco." (Cobalt)

"¿Qué es este lugar, parece obra de magia?" (Cobalt)

"Soy yo Cobalt, me acabo de tomar una poción que ha hecho que mi cuerpo desprenda toda la porquería que tenía acumulada." (Abigail)

Esta un poco sorprendida mirando todo a su alrededor y mientras esta confundida, le pongo mi anillo en su dedo.

Se lo mira y ve que es como una alianza de bodas.

Mira la mano de Abigail y ve que también tiene uno puesto.

Después mira mi mano y las manos de las demás chicas en el autocar.

Todas llevan un anillo puesto, igual que el suyo.

Le doy la poción y la invito a entrar en el cambiador.

Se bebe la poción y tras unos minutos todo termina.

Área de limpieza.

Restauro su cuerpo totalmente.

En este caso no era virgen, así que eso también se restaura.

Le entrego ropa igual que la de Abigail y sale unos momentos después de ponérsela.

Les explico un poco quién soy y un resumen general de la situación.

"Tienes que estar bromeando, ¿eres un dios y has venido aquí solamente por entretenimiento y recoger mujeres para tu gran harém?" (Abigail)

"Se podría decir que esa es la idea fundamental, aunque hay algunos matices." (yo)

"Por el momento vamos a cumplir con mi parte del acuerdo y después entraremos en La Colmena para terminar de una vez con todo este asunto." (yo)

Salgo del autocar y hago magia del tipo sagrado.

Cargo en mi mano lo que se podría considerar como una genkidama enorme y con el elemento sagrado.

Cuando ha alcanzado los 30 metros de diámetro hago que se comprima y explote.

Haciendo que todos los muertos y todo lo infectado se desintegre en una esfera de 3 kilómetros de radio.

Los heridos se curan milagrosamente y la naturaleza que estaba enferma cobra vida y se revitaliza.

Las plantas empiezan a crecer y florecer.

"Asunto solucionado, ya podemos bajar al foso." (yo)

No pienso bajar haciendo rapel o nadando en el lago que se ha formado.

Entro otra vez en el autocar y vamos volando hasta la puerta.

Entramos en La Colmena que está sellada completamente.

Con un poco de energía interna de mi cultivo, las puertas de 10 metros de grosor de acero salen volando disparadas, como si fueran de papel.

Avanzamos sin nada que nos impida el paso.

Una proyección de la Reina Roja nos da la bienvenida.

Las cuchillas de la turbina de ventilación son reducidas a polvo.

Las trampas que hay por el camino y los mecanismos de seguridad inutilizados.

En menos de 10 minutos llegamos hasta las celdas criogénicas que contienen a los líderes de Umbrella y las personas ricas y poderosas del planeta.

Wesker, al no poder detenernos ha decidido despertar al verdadero Alexander Isaacs y a la Alicia Abernathy verdadera.

Llegamos hasta donde están reunidos los tres y los saludamos educadamente.

"Es un placer conocer a los verdaderos dueños de la Corporación Umbrella, mi nombre es Pedro, soy un dios y estas son algunas de mis mujeres." (yo)

Me dirijo a Alicia en su silla de ruedas y le digo.

"No tengas miedo, ya has sufrido bastante, ahora déjame ayudarte un poco." (yo)

Restauro su cuerpo totalmente y la hago retroceder en el tiempo hasta que vuelve a ser una niña de apenas 12 años.

Se mira las manos y las piernas, se pone de pie y ve que vuelve a ser joven.

La ropa que lleva se le cae, ya que le está grande.

Le hago aparecer ropa adecuada a su cuerpo y le digo mientras señalo a mi grupo.

"Ve con ellas, pronto todo terminará." (yo)

Miró primero a Wesker y le digo.

"Te voy a dar dos opciones, la muerte o ser una persona normal." (yo)

"Ser una persona normal, gracias." (Wesker)

Activo mi habilidad de depredador y le quito todas las mejoras de su cuerpo y le dejo como un humano normal y corriente.

Después miro a Alexander Isaacs y le pregunto.

"¿La muerte o ir al mundo Okama siendo un humano normal?" (yo)

"Púdrete." (Isaacs)

Me dispara con un arma que tiene.

Le quito todas sus mejoras corporales y sus capacidades con la habilidad depredador.

Hago un portal al mundo Okama por el que se cae mientras grita.

"Espera, tiene con el el antídoto aéreo, sin él, la humanidad está condenada." (Alicia)

Hago aparecer el vial en mis manos.

"¿Te refieres a esto? " (yo)

Salimos de allí, Wesker nos sigue y cuando estamos en la superficie rompo el vial.

Además de ese hago aparecer muchos más y también los rompo todos.

Hago que la magia de viento disperse a grandes velocidades el antivirus por todas partes.

Miró a todas las chicas y les indico que suban al autocar.

"Es hora de irnos, ahora este mundo depende de sus propias manos para salir adelante, ya no está la amenaza de los muertos." (yo)

Alicia piensa que me estoy despidiendo de ella y me da las gracias por curarla y hacer que todo se termine.

"A qué estás esperando, sube al autocar, vas a venir con nosotros, el único que se va a quedar aquí, es Wesker." (yo)

"Pero." (Alicia)

"Ahora tienes doce años y vas a ser una niña obediente, así que sube a ese autocar, antes de que te de un azote en el culo por ser desobediente." (yo)

Se da la vuelta y corre hacia el autocar con las demás mujeres.

"Tengo curiosidad por saber qué es ese mundo Okama al que has mandado a Isaacs." (Wesker)

Hago que aparezca una imagen de ese mundo y de Isaacs siendo perseguido por alguien parecido a Emporio Ivankov.

Le atrapa le desnuda y comienza algo parecido a dos conejos copulando con fuertes gritos.

"Parece un sitio muy interesante, pero prefiero quedarme en este mundo." (Wesker)

Me despido con la mano y me subo a mi autocar.

Después dejamos este mundo.

Y aparecemos frente al monumento de piedra de mi mundo.

Cada vez es más grande y la energía del aire es más fuerte y pura.

Es por la tarde y la mayoría de las mujeres de mi mundo están con sus hobbies y aficiones.

El resto está o bien en la escuela, el estanque o el coliseo.

Salimos del autocar y lo guardo.

También guardo todo el equipo de protección y las armas de las chicas.

Dejo al cuidado de las mujeres veteranas, las presentaciones de mi mundo a las recién llegadas.

La más perdida es Alicia, que no sabe nada.

Me la llevo en un portal y la hago el proceso de bienvenida, es una niña y después del proceso de bienvenida y ponerle el anillo, la llevo con las otras niñas que están jugando en el estanque.

"Eres libre de disfrutar de una infancia feliz, aunque ya no sea en tu mundo y tu padre ya no esté." (yo)

"Gracias." (Alicia)

La dejo que vaya a conocer a las otras niñas y yo me voy a visitar a mis hijas con sus madres.

Las mujeres rescatadas de La Colmena, aunque sorprendidas, se han integrado muy bien y están muy agradecidas, al contrario que las del mundo de Jumanji, que aún están enfadadas conmigo, salvo excepciones.

Paso la tarde relajado y disfrutando de la tranquilidad.

Durante la cena, Abigail y Cobalt se sientan a mi lado y se puede apreciar lo contentas que están con el cambio de mundo.

"Esto es fantástico, parece el paraíso." (Abigail)

"Gracias, me alegra que te guste." (yo)

Cenamos mientras hablamos y después de cenar como es tradición, casi soy arrastrado a la habitación de los abrazos.

Abigail también me sigue, pero Cobalt ha decidido dormir en una habitación diferente.

Dejo que duerma a mi lado para disgusto de las que habían ganado la posición.

Al ver el ambiente, sabe que no va a pasar nada, ya que hay una gran cantidad de niñas pequeñas.

Se queda abrazada a mi brazo y durante más de media hora me cuenta cosas de su pasado hasta que se duerme.

En el mundo de Residen Evil, han pasado años, pero con los saltos temporales solamente han sido un par de días y aquí en mi mundo apenas unas horas.

Nos fuimos por la mañana y volvimos a media tarde del mismo día.

Por la mañana, después del amanecer, vamos a desayunar y todas van llegando poco a poco.

El desayuno es bastante animado, pero sin nada digno de mención.

Después de desayunar llevo a las niñas a la escuela, Alicia viene conmigo de la mano, esta muy contenta y me dice que ayer hizo muchas amigas.

Dejo a las niñas en la escuela y voy a los campos de formación.

Me quedo observando y viendo como entrenan todas las mujeres.

Es una buena vista, miles de mujeres hermosas entrenando.

El régimen de ejercicios es muy completo y las que ya han cumplido con las características mínimas para entrar en las mazmorras, lo hacen en grupos bien organizados.

Cuando las Alice's y el resto de las chicas de Resident Evil, se enteran qué los enemigos del primer nivel de la mazmorra, son Zombies, se echan las manos a la cabeza.

Parece que están ya un poco cansadas de los muertos vivientes.

Las chicas nuevas, se unen al entrenamiento, y una vez que todas ellas están entrenando, decido dar una vuelta por mi mundo, que ha seguido creciendo y expandiendo sus terrenos a gran velocidad.

No creo que alguna vez tenga problemas de espacio, ya que al aumentar el número de los residentes, todo lo demás, también se amplia.

Eso también incluye los campos de cultivo, el terreno de formación, el estanque, y otras áreas.

Aunque no suelo prestar atención, ya que se encargan de la tarea organizativa las diosas, con Becky a la cabeza.

También han aparecido más árboles misteriosos y otras criaturas que vienen escritas en el monumento de piedra.

El mismo monumento, también ha crecido y es bastante grande.

Más de 5 metros de altura.

Me paso toda la mañana dando un paseo por mi mundo y jugando con las diferentes especies.

Dulce, no se separa de mí y viene a mi lado todo el tiempo.

Mi paseo dura, hasta la hora de la comida.

Después de comer, me tumbo en una pradera con hierva a reposar y disfrutar de algo de tiempo con mis hijas y con todas las que deciden unirse a nosotros.

Es una escena muy acogedora y feliz, que ayuda a aliviar el estrés.

Muchas de las mujeres que han sido sacadas de sus mundos, necesitan este tipo de momentos para relajarse.

También lo necesitan las que no se han adaptado aún a la formación.

El día pasa muy relajado y feliz, la noche, al igual que ayer la paso rodeado de mujeres y niñas en la habitación de los abrazos, pero con la adición de Cobalt, Bethany y Martha de Jumanji.

Aunque han tenido que jugar a suertes cuales serían sus respectivas posiciones.

A mi alrededor han acabado todas las Alice's Cullen, aunque hoy se lo permito, no me gusta que utilicen sus poderes de adivinación para ganar apuestas a sus hermanas.

Me prometen con una sonrisa traviesa que intentarán no volver a hacerlo.

Me rio un poco y dormimos abrazados.

Es muy agradable dormir entre ellas, son suaves pero firmes en todos los lugares correctos.

Por la mañana después del desayuno, acompaño a la multitud de niñas a la escuela y al resto a sus respectivas actividades.

Después de dejar a todas, me voy de viaje yo solo.

Mi destino es <Four Rooms> de 1995.

Con un chasquido salgo de mi mundo y aparezco en Los Ángeles.

En la puerta del hotel donde se desarrolla la trama, el Hotel Monsignor.

Es el último día del año y aún no ha comenzado la primera parte de la trama de la película.

Hago que mi ropa sea el uniforme de botones del hotel, pero no voy a ponerme esa gorra.

Dejo mi pelo largo y plateado que llegue al final de mi espalda, pero bien peinado.

Entro en el hotel y me encuentro a Ted, el protagonista jugando con una máquina de Pinball, totalmente distraído.

Capturar.

Lo dejo capturado hasta que decida abandonar este mundo

La primera bruja en llegar es una mujer llamada Athena.

La llevo a la suite nupcial después de confirmar la reserva y parece muy satisfecha con lo que ve.

No me ha quitado los ojos de encima durante todo el trayecto, pero no me ha dicho nada.

Me quedo esperando en la recepción ya que detectó a las siguientes integrantes del grupo de brujas, que están llegando al hotel.

Cuando entran las dos y me ven, les muestro una ligera sonrisa y las recibo educadamente.

"Buenas noches señoritas, hay algo en lo que pueda ayudarlas." (yo)

Después de unos momentos, la mujer rubia me dice.

"Tengo una reserva para la suite nupcial, mi nombre es Elspeth." (Elspeth)

Cojo todo su equipaje, lo pongo en el carrito y las acompaño a la habitación, que ha sido redecorada por Athena para el ritual.

Durante el camino la chica pelirroja también se presenta.

Se llama Kiva, ella y Elspeth me dicen abiertamente que son brujas y que van a hacer un ritual para resucitar a su diosa, que se llama Diana.

Las dos están bastante atraídas físicamente por mí, gracias al atributo de encanto.

"Qué coincidencias, yo también soy un dios y tengo bastantes habilidades mágicas." (yo)

Las dos me miran sorprendidas y después de mirarse entre ellas se ríen.

No me han creído en absoluto, pero eso no hace que me dejen de hablar, ahora son incluso más simpáticas.

Cuando las dejo en la Suite y las dejo las maletas donde me dicen.

Para darme una propina, Elspeth se la pone en el escote, al igual que en la película, pero esta vez Kiva también participa de la broma.

"Si quieres una propina de mi parte tendrás que mostrarme algo de tu magia, gran dios Botones." (Kiva)

"No soy de los que va por ahí presumiendo, señorita Kiva, si lo desea, puedo hacerle un pequeño truco, pero llámeme Pedro cuando sea para referirse a mi cómo un dios y botones si es por trabajo." (yo)

Chasqueo mis dedos y en mi mano aparecen colgando sus bragas.

Se las devuelvo y le digo.

"Creo que esto la pertenece señorita Kiva, no es bueno ir dejando las pertenencias tan privadas, por ahí perdidas." (yo)

Veo su cara de incredulidad y la dejo ahí mientras comprueba que realmente son sus bragas.

Me acerco a Elspeth que esta en una pose seductora con su vestido negro y un billete en el escote esperando.

Me acerco a ella y sin ningún tipo de vergüenza, la rodeo la cintura con mi mano y le agarro el culo, al mismo tiempo que con la otra mano le introduzco la mano en su escote y en lugar de agarrar el billete, masajeo sus pechos con suavidad y apreciando su firmeza.

Los aprieto ligeramente.

Un gemido débil sale de su boca.

Estaba burlándose de mí y no esperaba que fuera tan atrevido.

Aprecio durante unos momentos sus dos tetas, con deleite y después tomo el billete.

"Gracias por la generosa propina, si necesitáis cualquier otra cosa, estaré encantado de venir a ayudar." (yo)

Salgo de la suite, dejando a las dos brujas paralizadas.

Bajo a la recepción y espero a que sigan llegando las participantes del ritual.

Durante una hora van llegando el resto de brujas.

Sus nombres son, Jezebel, Raven y Eva.

Llegan en ese orden.

Jezebel llega con su gato negro.

Raven con los pies descalzos, una escoba y una especie de tambor pequeño.

La última en llegar es Eva, con ropa que parece sacada de un mantel y tres cerezas en el pelo.

Las acompaño a todas hasta la suite nupcial, donde van preparando el ritual.

Me piden cosas como especias.

Agua natural embotellada, carne cruda, sal marina y unas patatas fritas.

Más que un ritual parece que van a hacer una sopa.

Me voy de la suite, supuestamente a buscar lo que necesitan.

Empiezan con su ritual mágico, moviendo los brazos y la cabeza delante de una fuente con agua, qué parece que están de broma.

Van añadiendo ingredientes que ya tienen y cuando llega el momento de añadir el último ingrediente fundamental, resulta que no lo tienen.

Lo que les hace falta es semen.

La bruja encargada de traerlo era Eva, que para hacer que el hombre escogido liberara su carga, uso la boca y accidentalmente, en el calor del momento, se lo tragó todo.

Mientras que están debatiendo para encontrar una solución, llamo a su puerta.

Me abren para que entre y a todas se les ocurre la misma idea.

Entro con todos los ingredientes que me han pedido.

Tengo un bonito paisaje frente a mí.

Jezebel y Eva han aligerado bastante sus cuerpos de ropa y están bastante desnudas de cintura para arriba.

Veo que el resto mantiene sus ropas puestas y chasqueo la lengua con aparente decepción, lo hago intencionadamente para que se den cuenta.

Athena, me ofrece 50 dólares de propina, pero tengo que hacer que Eva "sonría".

"Puedo hacer eso y mucho más, pero no me insultes por un miserable billete." (yo)

Me mira con asombro ante mis palabras.

"Se lo que estáis haciendo aquí, vuestro aquelarre está tratando de romper una pequeña maldición, pero os falta uno de los integrantes principales." (yo)

"Tu, ¿Cómo lo sabes?" (Athena)

"Esa no es la parte más importante." (yo)

"¿No lo es?, ¿y cual es si puede saberse?" (Athena)

"¿Qué estáis dispuestas a ofrecer para que os ayude y podáis seguir adelante con el ritual?" (yo)

"¿Que quieres a cambio de tu colaboración?" (Elspeth)

Chasqueo mis dedos y todas quedan inmediatamente desnudas, también Kiva, que había salido y acaba de venir queda desnuda sin saber porqué.

Yo también estoy desnudo y todas se han quedado mirando lo que sale de entre mis piernas con diferentes expresiones.

"¿Eres realmente un dios cómo me dijiste hace un rato?" (Elspeth)

Hago aparecer seis pociones de bienvenida y le entrego una a cada una de ellas.

No se la beben, pero si que la observan con interés

Para que dejen de estar preocupadas, hago que la maldición que tiene a su supuesta diosa Diana se rompa y salga de la fuente.

Según saca la cabeza del agua.

Esclavizar.

No se si puede considerarse diosa, es la diosa con menos divinidad de las que haya visto, si no lo estuviera comprobando con mis ojos, su divinidad pasaría totalmente oculta.

Sale del agua completamente desnuda y se arrodilla ante mí, poniendo la frente en el suelo en total sumisión.

Las brujas ven a su diosa arrodillarse y no saben qué hacer.

Además también están desnudas y algo asustadas.

"Levántate, no tienes porqué arrodillarte." (yo)

Se pone de pie apoyándose en mi brazo, que le tengo ofrecido.

Restauro el cuerpo de las ahora siete mujeres que están en la habitación.

También hago aparecer la misma poción para Diana y se la bebe de un solo trago, sin preguntar por sus efectos.

Las demás también se la beben al ver esto.

Da comienzo una escena muy vergonzosa para todas.

Todas tratan de salir corriendo a llegar al cuarto de baño, pero ninguna lo consigue.

Antes de que se me olvide.

Esclavizar.

Esclavizar.

Esclavizar.

Esclavizar.

Esclavizar.

Esclavizar.

Todas las brujas de la habitación y su diosa son ahora mis esclavas.

Área de limpieza.

Toda la habitación queda limpia y el agua de la fuente cristalina.

Agarro a Elspeth que es la que está más cerca y antes de que se dé cuenta de lo que está pasando, le levanto una pierna ligeramente y le introduzco mi polla dura en su apretado coño, de un solo empujón.

Su cuerpo está muy tonificado y tiene bastantes músculos.

Se adapta enseguida y comienzo a moverme.

Se agarra a mi cuello, ya que la pierna que aún está apoyada en el suelo, ha perdido la fuerza para sostenerla.

Las demás miran asombradas como mi polla entra y sale de su dilatado coño.

Se están tocando y acariciando inconsciente sus propias partes sensibles.

Golpeo su interior rítmicamente y después de un rato, empujo fuerte y me quedo apretando dentro.

Dejo salir mi semen en lo más profundo de su útero directamente y después de permanecer así unos instantes, salgo deslizándome de su raja.

La ayudo a estabilizarse y la llevó levitando hasta la cama de la habitación contigua, con telekinesis.

Las otras que aún estaban tocándose y jugando ellas mismas, ven como Elspeth va levitando a la cama.

No pueden ver qué allí estoy con otro cuerpo esperando para continuar con fiesta.

Rápidamente tomo a Diana en mis brazos, la cargo por sus piernas, con su cuerpo pegado contra el mío y sin ninguna piedad, se la meto.

Como estoy pasando demasiado tiempo en esta misma habitación y van a comenzar las siguientes, si no me doy prisa, detengo el tiempo.

Ahora puedo dedicarme a ellas por completo sin tener que apurar las cosas.

Follo con las 7, una detrás de otra.

Después de follar a Diana, también la llevo a la habitación, junto a Elspeth, para continuar con mis otros cuerpos.

Eva, Jezebel, Athena, Raven y por último Kiva también son folladas y luego folladas otra vez en la cama, todas al mismo tiempo.

Sus culos no se escapan de mí ataque, pero desde que han asumido que soy un dios, son bastante sumisas y lo aceptan con resignación.

Cuando están cansadas, hago un área de limpieza, les pongo a cada una mi anillo y me las llevo a mi mundo junto con mis otros cuerpos.

Allí ya las explico todo, y lo aceptan encantadas.

Dejo la habitación en su estado original y salgo después de arreglarme la ropa y el pelo.

Vuelvo a poner el tiempo en marcha y voy a recibir la llamada a recepción.

Un borracho en una fiesta de noche vieja me dice la habitación equivocada.

Me manda a la habitación 404, pero esa no es su habitación.

Como castigo, voy con uno de mis cuerpos a su habitación, esclavizo y capturo a todas las chicas de su habitación.

A los demás, los dejo inconscientes en el suelo.

Preparo hielo para llevarlo a la habitación 404 y cuando llego allí, la puerta está abierta.

Aún así llamo antes de entrar.

Toda la habitación está en silencio y oscuro, con las luces apagadas.

Veo perfectamente, hay un hombre cerca de la ventana con una pistola y una mujer atada y amordazada en una silla.

"Buenas noches, soy el botones, les traigo el hielo." (yo)

"Hola Teodor, te estaba esperando." (Hombre)

El hombre me apunta con la pistola a la cabeza y enciende la luz tirando de la correa de la lámpara del techo.

"¿Es esta la 404? (yo)

"¿Que esperabas, un jodido cabaret?" (Hombre)

"Veo que llego en un mal momento, si lo desean puedo venir más tarde." (yo)

"No insistamos en que no tienes sentido de la oportunidad, lo importante es que has venido y no se me ocurre un momento mejor para que me presentes a tu amante, que nochevieja." (hombre)

"Creo que ha habido un malentendido, no me llamo Teodor, mi nombre es Pedro y soy el botones." (yo)

Intenta golpearme con el arma pero le esquivo.

"Señor, si trata de golpearme otra vez, me veré obligado a usar la fuerza, además no me gusta que me apunten con un arma, aunque sea solo para tratar de asustarme." (yo)

Veo que de su oreja está saliendo sangre, pero me da un poco igual, al menos no lo voy a matar.

Miro a la chica atada a la silla y le pregunto.

"¿Quieres que te desate y te ayude a salir de aquí?, en caso afirmativo asiente con la cabeza." (yo)

El hombre se enfada por qué le estoy ignorando y ahora hablo con su mujer.

Ella asiente y le quito la mordaza para que pueda hablar.

La desato empiezo a desatar mientras él trata de golpearme otra vez.

Quito la cuerda que la está atando a la silla y la empleo para atar e inmovilizar al hombre.

El le pide a su mujer que se llama Ángela que le ayude pero simplemente se queda mirando como lo estoy atando.

Ella para enfadar a su marido me dice.

"Veo que tus cojones están a la altura de tu enorme polla." (Ángela)

Me quedo mirándola y ella continúa.

"Veo que al final has decidido cumplir la promesa que me hacías todas las veces que entrabas dentro de mi con tu gran polla, de llevarme contigo a una vida mejor." (Ángela)

"¿Tiene la polla enorme?" (Hombre)

"Dios compensó con él lo que hizo contigo Sigfried, es la más grande que haya visto nunca." (Ángela)

"Enséñamela, necesito verlo, no puede haber algo tan grande ahí escondido." (Sigfried)

Chasqueo mi lengua en disgusto.

"No me gusta que traten de utilizarme en conflictos entre parejas, pero no puedo dejar a la señorita por mentirosa, así que no tengo más remedio que hacerla mi mujer y cumplir con las promesas que ha dicho que tengo que cumplir con ella." (yo)

Ahora es ella la que me mira sorprendida.

"También ha hablado del tamaño de mi polla y no puedo tampoco dejarla por mentirosa, aunque no sea tan grande como ella dice, me siento muy orgulloso de mi tercera pierna y debo mostrarla." (yo)

Me quito los pantalones y la ropa interior y dejo al descubierto 8 pulgadas de polla colgado sin fuerza.

"Guau." (Ángela)

"Realmente es jodidamente enorme, maldición." (Sigfried)

"Ahora que sabes lo que va a entrar dentro de tu mujer desde ahora que va a ser mi mujer, ya puedes lamentarte y llorar." (yo)

Angela que aún está mirando mi polla con la boca abierta, reacciona a mis palabras, sobresaltándose.

"Voy a contarte un secreto, soy un dios de otro mundo y vengo aquí para llevarte a mi mundo y hacerte eternamente joven y hermosa, como mi mujer." (yo)

Como no me cree, la hago volar hasta mi y se asusta.

"Debiste tener más cuidado con lo dices, ahora que has dicho que te prometí una vida mejor mientras que teníamos sexo en muchas ocasiones, no tengo más opción que hacerlo realidad." (yo)

La cargo en mis brazos y la pregunto.

"¿Quieres hacerlo aquí mismo, delante de tu ex o prefieres hacerlo una vez que lleguemos a mi mundo? "(yo)

La veo mirar a Sigfried con los ojos llorosos y de su boca solamente sale un tímido lamento.

"Adiós Sigfried, espero que seas muy feliz." (yo)

La llevo hasta el cuarto de baño, que está hecho un desastre, con toallas con sangre, condones y todo sucio.

Área de limpieza.

Cierro la puerta después de entrar con Ángela aún en mis brazos, que ha visto cómo todo queda limpio en un instante.

"¿Vas a violarme aquí mismo, en el cuarto de al lado de mi marido?" (Ángela)

"En primer lugar, no tengo intención de violarte, no tengo la costumbre de hacerlo, aunque no te voy a negar que alguna vez haya sido un poco violento en ese sentido." (yo)

"¿Entonces para que me has traído aquí?" (Ángela)

"Vas a venir a mi mundo cómo mi mujer, y ahora mismo como estás, estarás en clara desventaja con tus otras hermanas, además debo corregir tu condición a inmortal." (yo)

"¿Y para eso necesitas el cuarto de baño?, vaya dios de pacotilla." (Angela)

Lo está diciendo solamente para cabrearme, pero tiene un resultado contrario a sus expectativas.

Me divierte escuchar sus comentarios sarcásticos.

Sigue diciéndome cosas para que me enfade y decida no llevarla, o ganar tiempo para que Sigfried consiga escapar o pedir ayuda.

Hago aparecer un frasco de la poción unificada de bienvenida y como aún está en mis brazos, le digo que se la beba.

Ella toma la poción en sus manos y la arroja inmediatamente contra el suelo.

Antes de que llegue al suelo, la hago flotar otra vez hasta ella.

Hago aparecer un sillón y me siento en el con ella sobre mi regazo.

"Si no te bebes la poción, te la daré yo de beber, como a las niñas pequeñas." (yo)

La pongo la botella en sus labios y se niega a beber.

"No voy a beber ese líquido en mi vida, seguro que tiene drogas o algo peor." (Ángela)

"Se me olvidaba decirlo, pero la poción también se puede administrar mediante vía rectal y vas a terminar tomándola de una forma u otra." (yo)

"¿A que te refieres con vía rectal?" (Ángela)

"¿Tu que crees?, mediante un supositorio, obviamente." (yo)

Hago desaparecer la poción de mis manos transformando su contenido en un supositorio del tamaño y forma de una lima (limón pequeño).

"Ahora me está entrando un poco de sed, y me apetece beber esa poción que tenias hace un momento.

La miro a los ojos y la digo.

"Es tu última oportunidad o meteré esto en tu trasero." (yo)

Hago aparecer una nueva poción pero sin guardar el supositorio de bienvenida.

La mira con resignación y también mira el supositorio.

Decide arriesgarse y se bebe la poción, que sabe a frutos del bosque y está buena.

Enseguida comienza notar los efectos.

Se siente más fuerte y rejuvenecida, llena de energía.

También le entra la necesidad de usar el retrete y se ha dado cuenta de la suciedad que está saliendo de su piel.

Dejo que se levante de mí, yo también me levanto y la hago sitio guardando el sillón, para qué pueda usar el retrete cómodamente.

"¿Vas a quedarte mirando como lo hago?, no me imaginaba que un dios tuviera ese tipo de gustos." (Ángela)

"No es algo que me agrade especialmente, pero de esta manera será más rápido y fácil para ti, ya que como has visto antes puedo limpiarte en un instante, y sin mi ayuda tardarás al menos una hora en limpiarte de esa suciedad." (yo)

Se queda mirándome, sin decir nada, lo que es sorprendente, ya que no para de hablar en ningún momento.

Área de limpieza.

El camisón, su ropa interior y la suciedad desaparecen, dejándola totalmente desnuda.

Me acerco a ella antes de que reaccione, le quito su anillo de bodas y le pongo el mío en el dedo.

Después le doy un beso en la frente y hago aparecer un conjunto completo de la ropa blanca, típica de las mujeres de mi mundo.

Lo dejo a su lado para que pueda vestirse.

"Te puedo dar un rato para que te despidas de Sigfried, pero si haces algo más que hablar con él, se acabará el tiempo de despedida y el pagará las consecuencias de enfadarme." (yo)

Salgo fuera del cuarte de baño y veo a Sigfried retorciéndose para intentar soltarse de la cuerda.

Le libero y le curo.

Se levanta y trata de golpearme otra vez.

"Voy a llevarme a tu mujer, te guste o no, pero de ti depende la forma en la que viene conmigo." (yo)

"Eres un demonio." (Sigfried)

"Va a salir dentro de unos momentos del cuarto de baño para despedirse, si no haces que me arrepienta de dejaros esos momentos, cuando me vaya te dejaré más dinero del que puedas gastar y una poción que te hará más joven y más fuerte." (yo)

"No quiero tu sucio dinero ni tus mierdas de pociones, tampoco voy a dejar que te lleves a mi mujer." (Sigfried)

Se agacha, coge su arma y no me apunta a mí, apunta a Angela que está saliendo del cuarto de baño.

"Lo siento mi amor, pero prefiero verte muerta, que en brazos de este demonio." (Sigfried)

Dejo que dispare directamente a la cabeza de Angela, pero antes de que la bala la golpeé, la agarro con dos dedos a escasos centímetros de su cabeza.

"¿Me has disparado?, ¿realmente me hubieras matado si no sigo contigo?, por un momento odiaba la idea de irme con este dios que ha aparecido, pero viendo realmente cómo eres prefiero marcharme con él" (Angela)

Miro a Sigfried y le digo.

"Has perdido la oportunidad de despedirte adecuadamente y ser un hombre rico, además has intentado matar a mi mujer, por lo que voy a darte un castigo en su lugar." (yo)

Abro un portal bajo sus pies, directamente al mundo Okama.

Le cuento que acabo de mandar a su ex a otro mundo, le explico el tipo de mundo que es y se ríe.

Le pido a Angela que me acompañe y abandonamos la habitación.

Vamos directamente a la habitación 309 donde está el mafioso con su mujer y los niños.

Entramos cuando nos abre la puerta, pero ignoro cualquier cosa que nos dicen. Voy hasta la cama donde está la mujer muerta.

Quito el colchón y todos miran horrorizados el cadáver.

Restauro el cuerpo totalmente, hago un área de limpieza y la resucito.

Se levanta y parece perdida y desorientada.

El resto están asombrados y asustados, tanto que no dicen nada y están mirando desde el fondo de la habitación.

"Habías muerto y te acabo de resucitar, te doy la opción de venir conmigo o de volver a tu antigua vida, pero si no me equivoco la persona que te mató seguramente volverá a hacerlo." (yo)

"No se quien o que eres, pero llévame contigo por favor." (mujer resucitada)

"Esta bien, como quieres que te llame, como has estado muerta es posible que quieras cambiar de nombre." (yo)

"Puedes llamarme Patricia." (Patricia)

"No te asustes, pero vas a ir a un mundo diferente, allí me volveré a reunir contigo." (yo)

Esclavizar.

Hago un portal a mi mundo, en el suelo bajo sus pies, que se la traga y desaparece.

Agarro la mano de Angela, me despido del matrimonio y sus hijos y abandonamos la habitación.

Vamos a la recepción, me cambio de ropa, libero a Ted y le doy mil dólares de propina.

Alegremente la recibe, sin saber porqué y después Angela y yo salimos del hotel y este mundo.

De vuelta a mi mundo.