Quedarse atrás para ser un rehén

El trío de Qin Yan parecía tener algo atorado en la garganta y no pudo hablar durante un rato.

—¿R-Reino Sin Límites? No estarás bromeando, ¿verdad? —Después de un largo tiempo, Li Junjie finalmente se recuperó, pero aún estaba lleno de incredulidad.

—¿Bromear? En aquel entonces, la Secta Verdadera Gran Yan era diez veces más fuerte que tu Secta de la Espada Múltiple. Sin embargo, la Secta Verdadera Gran Yan no dudó en sacrificar la vida de seis maestros de formación a nivel soberano para desplegar la Gran Formación de Seis Sellos Extremos. ¿Crees que necesitaban tomar sus vidas a la ligera? —Ye Yuan dijo con una sonrisa fría.

La situación actual del Mundo Sin Fin era diferente. En aquel entonces, la Secta Verdadera Gran Yan reinaba suprema, eclipsando a todas las sectas.

Aunque el estatus del Maestro de la Secta de la Secta Verdadera Gran Yan no era equiparable al de Zhao Tianyin, tampoco estaba muy lejos de este último.