¿Sabes lo seductora que estás en este momento?

—¿Hmm? —preguntó Bo Jinchuan mientras levantaba una ceja. La sonrisa en sus ojos centelleaba.

Observar cómo Shen Fanxing había entrado en trance mientras lo miraba fijamente y en silencio, le hacía sentir orgulloso.

¿Estaba esta mujer hechizada por su rostro?

Era solo una palabra, pero era lo suficientemente letal para seducir y hacerla sentir incómoda.

Shen Fanxing volvió en sí al ver la sonrisa burlona de Bo Jinchuan. Sus orejas se habían puesto rojas.

Bo Jinchuan le sonrió. Justo cuando pensó que ella no respondería, Shen Fanxing replicó con un suave gruñido.

Las cejas de Bo Jinchuan se arquearon antes de que volviera a mirar a la mujer.

Su hermoso rostro parecía tener dos nubes rosas cubriéndole las mejillas. Estaba mordiéndose los labios con fuerza y sus pestañas bajaban mientras evitaba mirarle el rostro.

Bo Jinchuan estrechó la vista en sus labios durante un rato antes de que su voz ronca sonara.

—No te muerdas los labios.