Oogway: Pueden quedarse en estos dos cuartos de aquí -Señaló la tortuga-
Riuz: Muchas gracias, maestro oogway -hizo una reverencia-
Oogway: jaja, mañana puede ser un dia duro -dijo antes de salir del lugar-
Riuz y su hermana empezaron a desempacar, las habitaciones que les dieron eran contiguas, por lo que fácilmente podían moverse de una a la otra.
Riuz: Por poco estuve a punto de llorar... tuvimos suerte, no sabría qué hacer si nos rechazaban.
Moony: Creo que debíamos haberlo pensado antes de venir, a excepción de esa tortuga todos parecían reacios a aceptarnos.
Riuz: Sí, quisas estuve muy confiado, pero habíamos pasado tanto tiempo apartados en ese pueblo que me emocioné y no lo pensé mucho.
Ambos hermanos discutían, felices de poder haber sido aceptados en el palacio de Jade. Por otro lado, cinco chicas estaban teniendo su propia charla.
...
Viper: ¿Estás bien Tigresa?
Mantis: Sí, te ves... humm... estresada.
Tigress: No pasa nada *golpe* *golpe* *golpe* -La maestra tigresa estaba dando puñetazos a un tronco de entrenamiento con una mirada seria.
Monkey: Pues, no lo parece.
Viper: ¿Por qué no nos dices que te pasa? ¿Es por ese chico? ¿Tu amigo?
*Crack* el tronco se partió de un golpe.
Tigress: Él no es mi amigo -Dijo seriamente- Fuimos amigos...
Crane: Y... ¿Quieres que vuelvan a serlo?
Tigress: No importa lo que quiero, la maestra Shifu duda de ellos. Puede que haya algún problema con esos dos, no podemos bajar la guardia.
...
Como ya era tarde en la noche, ambos hermanos decidieron irse a dormir, pero debido a la emoción de Riuz, Moony tuvo que ir a dormir con él. Fue algo difícil al principio, aunque estaban acostumbrados a las pobres camas de la plebe en este mundo, aún no estaban preparados para la alfombra tirada en el suelo que tenían las barracas.
Los cinco furiosos volvieron a descansar también, notaron las habitaciones ocupadas por los hermanos, pero decidieron ignorarlas e irse a dormir, aunque tigresa dio una segundo mirada antes de entrar a su habitación.
Así pasó la primera noche en el Palacio de Jade y al amanecer del dia siguiente la Maestra Shifu vino a despertar a los aprendices. Su llamado había logrado despertar a todos en las barracas, pero los hermanos no estaban tan acostumbrados y no pudieron alistarse al instante como las demás, dejando una impresión no tan buena.
Fueron al patio y vieron como las cinco furiosas entraban al salón de entrenamiento, mientras que ellos caminaban hasta ser detenidos por la maestra Shifu. Quedaron en el patio donde les indicó que se colocaran uno al lado del otro.
Shifu: Como lo ordenó el maestro Oogway, de ahora en adelante serán estudiantes en el Palacio de Jade. Aquí aprenderán Kung Fu -Dijo mientras se paraba en la punta de un bastón de bambú.
Riuz: Si maestra.
Shifu: No sé de donde son... o que son, ni que entrenamiento tienen...
Riuz: Nuestra especie se llama Humano -Dije notando que la puerta del salón de entrenamiento se entreabría para observar el exterior- Y no tenemos el mas mínimo entrenamiento de Kung Fu.
Shifu: Bien... brazos a los lados, codos flexionados, puños cerrados, piernas separadas, cadera abajo, espalada recta, mirada en alto... -Shifu los fue dirigiendo mientras daba una vuelta a su alrededor y los golpeaba con su vara de bambú corrigiendo cada error en la postura.
Luego de ver que estaban en la posición correcta, se volteó y se fue, entrando al salón de entrenamiento. Ambos se quedaron como estaban, mirando la partida de Shifu.
Moony: ¿Hicimos algo mal?
Riuz: No, creo que quiere que nos quedemos en esta posición.
Moony y Riuz quedaron en esa posición lo mas que pudieron, pero con el tiempo las cosas se ponían mas difíciles. Los primeros minutos estuvieron bien pero luego sus piernas empezaban a temblar cada vez mas.
Fue mucho mejor para Moony que para Riuz, aunque ahora era algo similar a un humano normal, aún era diferente, todavía tenía algunas características de las crías. Llegó el momento donde ya no podían mantener esa posición, se habían caído algunas veces antes pero se volvió mas frecuente y al final no pudieron sostenerse.
Al mediodía Shifu volvió y pudo encontrarlos, en el suelo del patio, tratando de levantarse una y otra vez. Ella resopló y junto con los cinco furiosos siguieron avanzando, no mucho después de que se alejaran un poco, los dos hermanos escucharon su llamado para seguirlas.
-Riuz Pov-
Había llegado el mediodía y era la hora de ir a comer, por lo que nos dirigimos a la cocina. Como éramos los nuevos no dijimos ni una palabra, ni en el camino, ni cuando llegamos. Nos quedamos parados a un lado hasta que recibimos la invitación de parte de los cinco para sentarnos en la mesa.
El menú de hoy era algo simple, un tazón de arroz con un plato de vegetales. La mesa estaba extrañamente silenciosa, todas las chicas aquí comían mientras nos miraban disimuladamente, completamente mudez.
Durante esta comida se vio uno de mis mas grandes defectos, mi torpeza al comer con palillos. Desde que llegué a este mundo tuve un problema con eso, no sabía usarlos y luego de frustrarme algunas veces no me esforcé mucho en practicar.
Mi torpeza se ganó las risas de algunas chicas, especialmente las de Mono; tigresa, por otro lado, solo dio unas miradas serias, casi como si mis acciones la disgustaran mas que divertirla. Fue un poco humillante, en especial cuando se veía que Moony podía comer sin problemas. Creo que debería practicar mas.
Luego de terminar de comer, los cinco furiosos salieron, y aunque también queríamos seguirlas para continuar con el entrenamiento, estábamos demasiado cansados y tuvimos que tomarnos un respiro.
Cuando salimos vimos como los cinco estaban realizando un entrenamiento de combate, peleando todas entre ellas, con Shifu mirándolas a un lado. Llegamos al lado de Shifu y ella nos dio una mirada juzgadora. Lo primero que hice fue disculparme, no sabía si hice algo que estaba realmente mal, pero no quería que nada arruinase nuestra entrada al Palacio de Jade, ni siquiera un error tonto o una mala actitud.
Shifu solo asintió ante mi disculpa sin decir nada, casi como si no quisiera hablarnos. Nos indicó que nos colocáramos a un lado y desde ahí pudimos ver el verdadero entrenamiento de los maestros.
Ver la pelea fue algo impresionante, algunos movimientos eran tan rápidos que ni siquiera podía verlos, aunque de todas formas todo lo veía, que no sea un golpe directo, me parecía confuso por la velocidad.
Estuvimos mirando a las cinco furiosas siendo guiadas por la maestra Shifu hasta que terminaron su entrenamiento. Las chicas se fueron a descansar o hacer lo que sea que hagan cuando terminan de entrenar, ahora era nuestro turno.
Shifu: Supongo que habrán visto lo que se puede hacer con el entrenamiento adecuado -La maestra iba caminando con su bastón a nuestro alrededor.
Riuz/Moony: ¡Sí!
Shifu: ¡Ahora! ¡Golpea al frente!
Golpeamos como ordenó casi al instante, estábamos muy al pendiente de cada una de sus palabras. Nos siguió dando indicaciones y nos corrigió con su bastón cada error. Continuamos de esta manera hasta que llegó el momento del combate real. En realidad no era necesario en este momento, pero la maestra Shifu quería hacerlo por alguna razón, quisas para probarnos o algo.
La maestra Shifu me pidió que la atacara, cosa que me fue muy difícil desde un principio. Si estuviera usando mi cuerpo normal quisas hubiera ido mejor, pero con esta forma aumentada me era muy difícil coordinar mis golpes al ser ella mas pequeña que yo.
Intenté golpearla varias veces, queriendo usar el estilo de movimiento que nos enseñó pero era mas fácil pensarlo que hacerlo. Luego de fallar estrepitosamente, Shifu contraatacó por primera vez, golpeándome con su bastón un poco mas abajo del hombro.
Creo que nunca había sentido tanto dolor, sentí que el golpe había llegado hasta el hueso. El sufrimiento provocó que cayera de rodillas al suelo sosteniendo mi brazo. La maestra al notar mi reacción y que todavía estaba en el suelo se me quedo mirando.
Shifu: ¿Estás llorando? -Me miro con incredulidad.
Riuz: *Snif* Un poquito... es por el dolor... y ahora quisas un por la humillación... ya me levanto - dije esforzándome.
Shifu: *Resoplido*
La maestra Shifu esperó muy poco para que me pusiera de pie y siguió con el entrenamiento. No lograba acertar ningún golpe contra ella y cada uno de los suyos me hacía querer rendirme y huir, tuve que usar mis poderes para poder mantenerme en pie, hasta llegué al punto que dejé de sentir dolor momentáneamente.
Sin saberlo, no muy lejos, detrás de unos arbustos, se encontraba un grupo de chicas que nos estaban espiando. Mi humillación causó las risas contenidas de algunas de las chicas, no siempre se ve a una nueva especie fallar tanto. Incluso una joven rayada sintió cierta satisfacción.
Luego de una paliza, acabé demasiado dañado, con muchas marcas en mi cuerpo, por lo que Shifu me dejó descansar y se dirigió a mi hermana. Ella intentó lo mismo que yo, y tenía mas coordinación pero no hubo un resultado distinto.
Justo cuando Shifu estaba por dar el primer golpe a Moony, recuperé algo de la conciencia luego de tanto dolor y me acerqué con velocidad usando mi brazo para bloquear el bastón. Mi poder había formado una delgada membrana sobre mi piel para protegerme pero aun así fue demasiado para mi gusto.
Shifu: ¡¿Qué estás haciendo?! -Cuestionó.
Riuz: Ehh... ehh... ehh... ehh... ella... ella... no... es mucho para ella... -traté de decir, pero estaba completamente arruinando.
Shifu: ¡Claro que puede! ¿Crees que por ser una chica no puede soportarlo? ¿Crees que si unos rufianes quieren atacarla se detendrán solo porque es mujer y no necesita aprender como los demás? He enseñado a las cinco furiosas sin problemas, no cuestiones mis decisiones, sé que es lo mejor -Dijo empujándome con su bastón.
Riuz: No le cuestiono... ah... solo, que no creo que sea... ahh... adecuado en este momento - pronuncie tambaleándome.
Shifu: Entonces fuera de mi camino y déjame enseñar -me golpeó con su bastón para hacerme retroceder pero casi me tiró al suelo.
Riuz: Perdón por discrepar... pero sigo creyendo que no es adecuado...
Shifu: fuera de mi camino *golpe*
Riuz: P-per-perd-on... pero...
Shifu: fuera... *golpe*
Riuz:...
No pude mantenerme de pie y terminé cayendo de rodillas sin levantarme, Moony me vio y vino hacia mí para socorrerme. Empezó a palmear mi cara, y se llenó de preocupación al ver que casi no tenía rección en mi cuerpo. Shifu al ver esto y no tuvo ánimos de seguir y dio por terminado el entrenamiento de hoy, caminando fuera.
Yo ya no tenía fuerzas y ni siquiera podía mantener mis poderes. Mientras Moony intentaba despiértame, pudo notar como debajo de mí empezaba a formarse un charco de sangre y se asustó. Trató de levantarme para llevarme adentro y gritar por ayuda al ver mi estado moribundo.
Las cinco furiosas ya se estaban yendo, pero por suerte para nosotros, Monkey se había quedado un ratito mas para vernos antes de irse y pudo escuchar los gritos de Moony. Se volteó ante el llamado de ayuda y vino corriendo, sus compañeras al verla la siguieron, encontrando a una Moony desesperada sosteniéndome en sus brazos.
...
Shifu: Maestro Oogway
Oogway: ¿Qué pasa Shifu? ¿Diste clases a nuestros nuevos amigos?
Shifu: Sí, nada que destacar, son distintos a lo que estamos acostumbrados pero no vi nada especial.
Oogway: Quisas es porque no los conoces bien todavía, estoy seguro de que con el tiempo podrían llegar a darnos una sorpresa.
Shifu: Maestro, no entiendo por qué quiere aceptarlos, claramente usted dijo que traerían problemas, además de que es muy sospechoso que una especie totalmente nueva aparezca de la nada para aprender de nosotros.
Oogway:... hmmm Shifu ¿Conoces la historia de los peces gemelos?
"Una vez existieron dos hermanos, uno sombrío e insidioso, y otro alegre y sincero. Cada hermano, con un gran poder, era el opuesto del otro. Mientras uno traía el caos y la calamidad por donde pasaba, y el otro traía paz y abundancia.
Nunca se llevaban bien y un dia se separaron, tomaron caminos separados y cada uno fue a una tierra distinta donde terminarían gobernado, ya sea con bondad o con brutalidad. Ambas lugares terminaron cayendo en desgracia. En uno la guerra y muerte diezmó a la población y en el otro la paz causo una sobrepoblación insostenible; 'una tierra donde ya no quedaba a nadie a quien dominar' y 'una sensación de culpa terrible al causarle sufrimiento a su pueblo debido a su gran bondad'.
Ambos hermanos terminaron solos una vez mas, vagando arrepentidos de sus fracasos, hasta que un dia se encontraron. Aunque sus puntos de vista nunca conciliaron, sus diferencias aceptaron, y una vez mas juntos vagaron. Una vez mas la posibilidad de gobernar había aparecido y juntos lo lograron, un perfecto equilibrio que hizo que su imperio durara mil años"
Shifu: ... ¿Qué los hermanos no eran dos fénix?
Oogway: ehh... a veces peces... a veces son fénix... otros dragones... eso no importa, sino lo que quiere decirnos. Nada es completamente bueno ni completamente malo... algo que trae caos no es necesariamente malo.
Shifu: Creí que me había dicho que esa historia era de aceptar la muerte como algo necesario para mantener el orden natural.
Oogway: lo hice, pero cada historia puede tener mas de un mensaje...
Shifu: Sigo sin entender que es lo que quiere decir.
Oogway: Cada vez que veo a ese chico no puedo evitar pensar en esa historia, creo que él es una buena representación de los hermanos.
Shifu: ¿Quién? ¿El bueno o el malo?
Oogway: Ambos...
Shifu: ¿Ambos?
Oogway: Sí, ambos... Él es una fuerza del caos pero también alguien que busca el equilibrio, una lucha interminable entre aquello que crea y destruye... lo que daña y lo que protege...
Shifu: Entonces, ¿no deberíamos preocuparnos?
Oogway: O claro que sí... entre todos aquí él es quien puede causar mas daño... cuanto mas fuerte se vuelva peor será lo que podrá hacer... un mal que no podríamos remediar por completo, si es que terminaros ganando al final... en caso de no conseguirlo estaría ya todo perdido.
Shifu: ¡¿Entonces por qué aceptó entrenarlo?! ¡¿No solo estamos empeorando un problema que podríamos solucionar ahora que es fácil?!
Oogway: Recuerda la historia, nada es completamente bueno, la forma en la que intentas 'acabar con el problema' puede no mejorara la situación, sino empeorarla.
Shifu: ¡¿Entonces qué se supone que debemos hacer?!
Oogway: Piensa en ese chico como en una pequeña llama -Dijo mientras acercaba su rostro a una de las velas del lugar- Si la alimentas demasiado te quemarás, si la dejas de lado se apagará y te congelarás, pero si puedes cuidarla como debe ser, podrás mantenerla viva... y a ti también. Así como puede ser una gran fuente de caos, también puede ser la forma de restablecer el equilibrio, el caos necesario y una fuerza del orden, solo necesita la guía adecuada...
Shifu: Lo que usted quiere decir es... que aunque sea peligroso, es mas peligroso dejarlo andar por su propia cuenta. Que bajo nuestra enseñanza podemos transformar ese peligro en una beneficio. Usted lo aceptó en el Palacio de Jade, no para contenerlo ni para destruirlo...
Oogway: Sino para enseñarle y darles la oportunidad de que nos brinden un futuro mejor... aunque puede que haya que pagar un precio... ¿Puedes verlo ahora Shifu?
Shifu: Creo... creo que entiendo, no debí dudar de sus intenciones, intentaré entrenarlos como es debido.
Oogway: Tampoco te presiones mucho, a veces solo debemos dejar que las cosas fluyan...
Shifu: Si maestro.
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Tengo algunas consultas sobre como debo referirme a los personajes que cambiaron de género. Para el señor Ping es fácil cambiarlo a señora Ping, pero para otros necesito ayuda, o que me digan que los deje igual