El circo de Zomboso Parte 2

Esperé a que Kevin pudiera cargar sus manos con el elemento metálico de los autos, luego de esto ambos nos fuimos acercando por los autos, cada uno de un lado distinto.

Él iba a atacar a Medusa y yo directamente iría a por el sin dedos.

Cuando estábamos más cerca le hice unas señas, que básicamente decían que iría yo primero a atacar.

Y eso hice, convirtiendome en una bola rodé a gran velocidad hacia la bola de tontos que tenía por enemigos, golpeando al grandulón qué tenía unas televisiones robadas en sus brazos, este último terminó soltando las televisiones ya que el golpe lo mandó a volar contra una pared.

Sin dudarlo cambié de transformación a Diamante y atrapé a ese tipo por completo con una capa de diamante cubriendo todo su cuerpo dejando su cara libre para que respire.

Con esto hecho iba a dirigirme hacia los otros dos, pero vi a Kevin siendo golpeado por los cabellos mutantes de Medusa mandándolo a volar, sin pensarlo dos veces me transformé en XLR8 y logré alcanzar a mí amigo.

—¿Estás bien?

Este asintió así que lo dejé en el suelo.

—Tengo una idea, súbete a mí espalda.

Ibamos a ir por el que era más débil físicamente, que sí bien era un riesgo, yo era más rápido que su aliento ácido, así que íbamos a derrotar a este.. Ácido. Redundante.

Pero no es tiempo para pensar estupideces.

—¡Andando!

Dijo Kevin mientras se subía a mí espalda.

Por lo que empecé a correr directo hacia Ácido.

El criminal entonces liberó su gas tóxico, cosa que podría habernos hecho un gran daño sí tan sólo no hubiera elegido a XLR8, cosa que hice, así que sólo necesité dar una vuelta rectangular para llegar a la espalda del sujeto.

—¡Tú turno, Kevin!

Allí estaba mí socio quién respondió positivamente y lanzó un puñetazo en toda la cara de Ácido quién se volteó justo a tiempo, mandándolo a volar contra el suelo.

—Eso dolió..

Parece que no lo derrotamos, bueno, tiene más resistencia de lo que imaginé.

—¡Ben! ¡A tus 12!

Sin darme cuenta un televisor volaba hacia nosotros y inconscientemente cambié a Diamante para proteger a Kevin del impacto, dándome la vuelta para que sólo me golpeara a mí.

—¡Ben!

Exclamó Kevin, pero cuando intenté responder recibí una patada del Sin dedos que de seguro fue liberado por Medusa.

Maldecía su imprudencia por no haberse ocupado más rápido de esa mujer.

Voló por unos metros y nuevamente giró para proteger a Kevin de algún daño.

Al caer al suelo trató de levantarse y notó como su pie fue agarrado por Medusa.

Alejó a Kevin de sí mismo y fue arrastrado por esa mujer.

¿Por qué no darle lo que quería?

Cambió de transformación de Diamante a Materia Gris y la velocidad del agarre aumentó, justo cuando ella quería azotarlo contra el piso él cambió una vez más en..

—¡Gelatrix!

El impacto no significó ningún tipo de daño ya que fue absorbido por su estructura física que era como la gelatina.

—¡¿Qué cosa eres?!

Chasqueé con una lengua inexistente y respondí.

—No qué.. sí no.. ¡Quién!

La transformación fue algo que utilicé una vez más cambiando a Cuatro Brazos.

Ella intentó golpearme con su cabello pero los agarré cada uno con mis cuatro brazos.

—¿Buscabas algo, cariño?

Le hice un truco a la inversa, ya que el peso de Cuatro Brazos era mucho y con su fuerza le di la vuelta a la mujer conocida como Medusa incrustandola en el suelo, en una suerte de Hulk a Loki en Avengers 1.

Al darse la vuelta vio que Ácido se estaba levantando pero allí estaba Kevin para patearlo en la cara y dormirlo por un rato, o eso parece.

Busqué con la mirada a Pulgares pero lo había perdido.

—Oh no.

Me di cuenta de lo que iba a pasar y eso sucedió ya que pronto Kevin fue lanzado contra unos autos de una patada.

—¿Sé que no me harás daño, no amigo?

Dijo Zomboso mientras Pulgares sostenía a Kevin y Ácido se levantaba con su boca lista para ser abierta en la cara de su socio.

—Ahora.. porque no jugamos a un gran juego qué se llama.. ¡"Quién muere primero"!

No podía hacer nada su cuerpo estaba casi inmovil, tenerlo cara a cara lo aterraba.

El cuerpo de Ben incluso sus memorias lo estaban poniendo en una situación adversa y no podía hacer nada para solucionarlo.

—Oh.. ¿Me tienes miedo? ¡Pues toma esto!

Mí transformación había cambiado con una patada de Zomboso, ahora era Bestia.

Quería atacarlo, pero por más que quisiera su cuerpo no le respondía, más bien respondía al miedo innato de Ben.

Inconscientemente de lo que quería, su cuerpo se escondió en una torre de metal y Kevin fue lanzado junto a él.

Y por más que quería hablarle las palabras no salían, sólo gruñidos.

—Se terminó el Show, Firulais.

Fue lo último que escuchó antes de que todo se derrumbara ante ellos.

Lo primero que hizo al no poder ver a los payasos fue cambiar a uno de sus aliens, Ultra T, con este cubrió a Kevin y así podría salvarlo del derrumbe.

—Perro muerto.

Pudo oír como hablaban y también como Zomboso se había ido.

Gwen y el abuelo peligraban, pero también ellos.

Esperó a que se fueran, y desactivó su transformación, agarrando con una de sus manos el cuello de la ropa de Kevin.

Se arrastró entre el metal y cuando llegaron afuera quería cerrar los ojos, pero debía alcanzarlos.

—Gwen.. abuelo.

Fue un estúpido, ni siquiera pudo derrotar a unos malditos payasos.

—Kevin.

Puso el brazo del chico sobre su hombro y trató de levantarse.

Pero todos sus esfuerzos fueron inútiles, ambos cayeron al suelo y sus ojos se cerraron del cansancio.

Él enmendaría esto..

Era una promesa.

××××

—¡. . . Ben!

Estaba cansado.

Le dolía su cuerpo y sus piernas, pero aún podía oír.

Abrió los ojos que tanto le pasaban y vio a..

—Kevin..

Allí estaba, sano y salvo, parece que está siendo cargado por el Osmosiano.

—Lo siento, amigo. Soy un inútil.

Puso en peligro a su familia, a su socio, y ni siquiera pudo utilizar correctamente sus poderes para derrotar a Zomboso y compañía.

Era un fraude.

No era Ben 10, sólo era un farsante que tenía su cuerpo y su Omnitrix.

—¿Qué crees que dices? Tú me salvaste, bueno, nos dieron una paliza, pero tenemos más cosas importantes qué hacer ahora.

Es verdad, Gwen y el abuelo.

—Andando.

Caminé con la ayuda de Kevin, las calles estaban hechas un desastre, las tiendas totalmente destrozadas y al final del camino, cerca de donde estuvo el Circo se encontraba el abuelo Max sentado en unos escalones, parecía que se encontraba riendo en un estado de Shock o algo.

Estos eran los poderes de Zomboso y su maldita máquina, la Psicopayaso.

De todos modos, ambos nos apresuramos a llegar al..

—¡Abuelo! ¿Te encuentras bien?

Pregunté mientras tocaba su hombro y lo movía un poco.

—Jaja.. Oh, hola Ben, hola Kevin. Jaja.. ¿Adónde fueron?

El circo ya no estaba, sólo gente desorientada riéndose como locos.

—¿A dónde fuimos? ¿Dónde quedó el circo?

Kevin me ayudó a preguntarle al abuelo esto, quién se quedó pensativo y trató de responder.

—Huh? N-no estoy seguro. Recuerdo que nos reíamos, Jaja.. Oh..

Puse mí mano sobre su hombro y Kevin le preguntó.

—¿Te sientes bien, abuelo?

Kevin ya se había acostumbrado a decirle así por la insistencia del abuelo Max.

—Heh, sólo estoy un poco cansado, eso es todo, chicos.

El abuelo seguía riéndose de manera débil y yo hice una pregunta.

—¿Oigan, dónde está Gwen?

Diablos, me olvidé que en la serie Zomboso se la había llevado, fui demasiado estúpido de mí parte no tratar de atacar a Zomboso cuando tuve la oportunidad.

El abuelo Max por suerte entró en razón y nos fuimos en el Camper a buscar a Gwen, Kevin se encontraba compartiendo asiento conmigo ya que así podíamos hablar los tres.

—Zomboso los hipnotizó mientras les robaba su felicidad y así sus fenómenos podrían robar el dinero de las personas de sus tiendas o casas. Creo que.. secuestraron a Ben para quitarle toda su felicidad, y así hacerlo más poderoso a Zomboso.

Kevin asintió y el abuelo Max parecía cada vez más cansado.

—No te preocupes, atraparemos a ese Zomboso.

La idea de pelrar con Zomboso no me gustaba, mí cuerpo tenía miedo de él y mí mente empezaba a crear alucinaciones de lo que pasaba en realidad.

—Sí.. vamos a derrotar a ese payaso, no puede darnos miedo.

Sí así se sentía el Ben original entonces entendía su miedo, ya que ahora lo estaba viviendo en carne propia.

—Ben, ¿Qué es lo que te molesta?

Kevin se quedó callado, ya que entendía que esto era algo privado, o eso imagino.

—Me cuesta admitirlo.. pero me dan miedo los payasos, simplemente me asustan.

El abuelo Max trataba de darme un consejo para lidiar con esto.

—Todos tienen sus propios miedos, Ben

Yo le tenía miedo a las alturas, tanto miedo que decidí enfrentarlo, y escalé la torre de agua, luego de eso, el miedo murió. A veces tenemos que enfrentarnos a lo que nos aterra para poder crecer.

Asentí, entendiendo que esa era la mejor opción.

No podía huir de ese payaso, no ahora.

—Sí te asustas, yo estaré aquí para apoyarte, socio. Como dijo el abuelo, todos le tenemos miedo a algo.

Pude notar los cambios de Kevin durante estos días, parecía cada vez más confiar en nosotros, y eso me puso contento, cosa que ahora también me alegraba ya que no sólo tenía al Abuelo Max sí no a mí socio aquí para apoyarme.

—Gracias, abuelo, Kevin. No los defraudaré.

Con confianza renovada estaba apunto de hablar, pero su abuelo se desmayó dejando su cabeza sobre el volante.

—¡ABUELO!

Gritamos tanto yo como Kevin, quitándonos el cinturón.

Yo rápidamente lo saqué de ahí y lo dejé en el suelo, mientras Kevin trataba de conducir, pero el Camper ya había girado y ahora íbamos a chocar.

Al romper el metal que había en el camino nos agarramos de nuestros asientos, y en el último momento Kevin logró estabilizar el Camper junto antes de que cayeramos al vacío.

—Fiuh..

El abuelo entonces reaccionó y nos dijo algo.

—Zomboso les está arrebatando el alma a las personas para ser inmortal.. tener una juventud eterna en base a la energía positiva de los seres humanos.. por eso se llevó a Gwen. Debes rescatarla, Ben, te lo suplico---..

El abuelo entonces terminó desmayado por completo, sólo quedábamos Kevin y yo.

Ambos bajamos del Campera y empezamos a revisar en el bosque, después de un tiempo encontramos el Circo de Zomboso, y antes de que Kevin se aventurara, decidí tomar una decisión algo riesgosa.

—Kevin, voy a darte un regalo. Sólo.. ten cuidado al absorberlo, ¿Me entiendes?

Mirándome a los ojos, Kevin asintió y yo activé el Omnitrix.

Eligiendo uno de mis Aliens, opté por Ultra T.

Ya convertido en el Mecamorfo, extendí una de mis manos hacia Kevin.

—Te dejaré algo de Ultra T para que uses, normalmente te convertirías para siempre, pero concentrandote podrías regresar a tú estado normal a través de cosas como la meditación. ¿Estás dispuesto a aceptar el riesgo?

Kevin lo pensó por un momento, el ya había oído tanto por el abuelo como por mí que la energía era adictiva para los Osmosianos, casi como una droga.

—Sí no hacemos esto, gente podría morir. Y no me interesan mucho, pero.. Gwen está en peligro, y tanto ella como ustedes me aceptaron en su familia. Es mí hora de devolvérselos.

Sin dudarlo dos veces Kevin tocó mí mano y fue como sí el cuerpo de Kevin lentamente estuviera mutando en un Mecamorfo Galvánico.

—Agh.. Esto no se siente muy cómodo que digamos, Ben.

Asentí y solté una ligera risa.

—Sólo aguanta un poco más Kevin, pronto estará completa la absorción.

Cuando el proceso terminó, Kevin lucía como un mecamorfo galvánico más.

Era alto, un poco más alto que yo, su color era negro y verde, carente del blanco que yo tenía.

—Bien, hagamos esto.

Choqué puños con Kevin quién correspondía y caminaba junto a mí.

—Se siente raro no ser yo.

Asentí y le dije poniendo mí mano en hombro.

—Te acostumbrarás.

××××

Los villanos parecían seguir sus actividades con normalidad, hasta que nosotros hicimos un ruido ligero tirando una caja, escondiéndonos debajo de unas cajas.

De repente vimos como los idiotas rompieron otras cajas, y le di una señal a Kevin para que tomara el control de esa máquina lanzadora de pelotas de Béisbol.

—¿Quieren pasar un buen rato? ¡Entonces adelante, fenómenos de circo!

Di mis condolencias a Medusa, ya que siempre me había parecido una villana muy guapa, quizás podría coqueetear con ella al final, pero después.

—¡Sigue adelante, Ben! ¡Yo me encargo de estos tipos! ¡Ve y salva a Gwen!

Asentí y me fui corriendo directo a la carpa escabullendome detrás de las cajas.

—Sólo es un tipo de nariz roja y pintura en la cara..

Al acercarme a la carpa noté que habían un montón de cristales.

Y vi como todo parecía tornarse aterrador.

Apretó sus puños y trató de resistir.

—Oiga, señor Monstruo. ¿Qué tal una sonrisa?

Por más que tratara parecía que la realidad se ponía en su contra y trató de correr de las miles de manos de payasos, pero chocó varias veces contra los cristales, aún así siguió corriendo.

—¿Qué sucede, muchacho, era acaso tú perrito al que le dimos unas pataditas con mis chicos?

Traté de correr una y otra vez, por la izquierda o por la derecha.

Me dolía la cabeza de tanto golpe, cerré los ojos y utilizaba mis manos para guiarme.

—¿QUÉ PASÓ CON EL HÉROE VALIENTE? ¿O eres un simple fenómeno?

Lo único que él pudo decir era..

—¡Cállate, maldito payaso!

Ya no podía ver las cosas normalmente, lo único que veía en los reflejos eran arañas con la cara de Zomboso que no hacían más que provocarle más miedo.

—¡Vamos niño! Tú sonrisa es lo que me da vida, ¿O acaso me tienes miedo? ¡JAJAJAJAJA!

Sin darme cuenta, caí sobre un agujero y lo próximo que supe es que estaba en el suelo, y la oscuridad me rodeaba.

Ya ni siquiera estaba transformado, el Omnitrix se desactivó del miedo que tenía.

Regresando a la realidad..

Una luz se enfocó en mí y frente a mí persona se encontraba el maldito payaso.

En la esfera en el sombrero del payaso mí prima se encontraba, riéndose como loca se la veía, y sin duda alguna su ira acrecentaba.

—¿Qué es lo que quieres?

Pero, su miedo lo controlaba, no podía pelear así.

Levantó su mirada por una nueva luz y allí se en contra el Psicopayaso, en donde Zomboso tenía las almas de las personas.

—¿Qué crees que quiero? ¡Yo sólo quiero lo que todos los payasos queremos! ¡Sacarle su energía positiva a la gente a través de la risa! ¡¿Está eso mal?!

Decía el payaso mientras flotaba gracias a sus poderes.

—¿Esa máquina es la razón de todo esto?

El payaso entonces flotó hasta su creación.

—La llamo Psicopayaso, ¿Fantástico, no lo crees? Pronto llevaré mí alma a las grandes ciudades. Millones de personas riendo por mí, dándome sus almas y.. ¡Haciéndome cada vez MÁS FUERTE!

Lo único en lo que podía pensar ahora en las palabras de Kevin y que su objetivo era..

—¡Dame a mí prima de vuelta!

El payaso se inclinó y exclamó.

—¿Tú prima? ¿No lo sabías ? ¡A ELLA LE ENCANTA ESTE CIRCO!

Una risa le puso los pelos de punta, y sus ojos giraron hasta un cuerpo de Gwen en un estado decrépito, como sí le hubieran quitado toda la energía a su cuerpo, pero ella seguía riéndose, todo por culpa de Zomboso.

Él iba a hacerlo pagar.

Iba a asegurarse de eso.