Un casa hecha de arcilla, y suelo de tierra, las ventanas eran cubiertas por tablas de madera que podían retirase para que entra el sol en las mañanas, y en la noche no entrara el frio, dentro de la casa, una pequeña niña de pelo plateado y ojos morados, su ropa era unos harapos viejos, estaba escondida tras la puerta observando a sus padres, que estaban hablando de ella.
La madre tenia una cara asustada, había miedo en su interior, miedo a su hija, el padre estaba en una situación similar, incluso tenia una figura religiosa en su mano temblorosa.
-"Tenemos que dejarla en el bosque, si sigue a nuestro lado, la desgracia nos perseguirá." Dijo la madre de la niña, con la vos temblorosa.
El esposo de esta mujer la sujeto de los hombros y la acerco a el, para tranquilizarla.
-"Mujer escúchame, te entiendo, esa niña es un demonio, y me gustaría abandonarla en un lugar aislado y lejos de la humanidad, pero no podemos, podría lanzarnos una maldición, solo podemos quedarnos con ella, hasta encontrar un mejor solución."
-"Y que podemos hacer con el resto de nuestros hijos, ella puede maldecirlo o algo peor."
-"No te preocupes mujer, la mantendremos aislada de los demás, también reduce las porciones de su comida, debemos mantenerla débil, así no correremos peligro"
La mujer asintió todavía temblorosa y con los ojos llorosos, en cuanto a la niña, lloraba, triste por lo que decían sus padres, la hacían ver como un monstruo, algo que ella no era.
-"La gente teme lo que no puede comprender, no es así, Syndra"
Leon fue quien hablo, y pregunto a Syndra, ambos miraban la escena desde un lado, y veían a la niña llorar y sus padres con miedo.
-"bueno, que hacemos aquí" Dijo Leon, ya que Syndra no respondía, solo lo miraba con curiosidad, hasta que dijo:
-"Mejor dicho, que haces tu aquí, ademas, ¿Quién eres?."
León, puso la mano en su pecho y puso una cara triste, y dijo resentido:
-"Que cruel, casi me matas allá afuera, y ni siquiera me recuerdas"
Syndra pensó unos momentos intentando recordar, hasta que un dolor fuerte en la cabeza se apodero de ella, y la obligo a agacharse en el suelo, llenándola de los últimos recuerdos, desde que mato a su maestro hasta la batalla con León.
-"¡que dolor!, uggg, mi cabeza" Leon se acerco a Syndra, y masajeo su espalda.
-"cálmate, inhala y exhala con tranquilidad, te ayudara."
Segundos despues, ella ya estaba mejor y se levanto del suelo, mientras movía sus hombros y relajaba el cuerpo.
-"Lamento haberte atacado, pero, tu tampoco fuiste muy blando, esa patada dolió mucho ahora que lo recuerdo" Dijo Syndra con una mueca, mientras se tocaba el pelo.
León sonrió ante esto, pensó que se veía tierna, y no tenia nada que ver con la mujer loca que quería matarlo, llego a la conclusión, que quizás, tenia doble personalidad.
-"Lamento eso, pero era necesario, ahora, deja presentarme, soy León, y tu."
-"Soy Syndra..., un demonio por lo que puedes ver"
Dijo Syndra, que apuntaba con su dedo a la niña pequeña, que era ella misma, unos 10 años en el pasado.
-"Yo no elegí este poder, no se como llego a mi, pero no elegí ser..., distinta."
Syndra dijo con tristeza, y miro a la niña unos segundos mas, hasta que esta se volvió una sombra negra que se fundió en el suelo, lo mismo paso con los padres, las paredes y todo, solo quedo oscuridad rodeando a los dos.
-"¿Que sucedió? pregunto Syndra.
-"Que me preguntas a mi, esta es tu mente, tus recuerdos, solo tu tienes poder de lo sucedido en este lugar."
Syndra miro a León curiosa, y con su mano, comenzó a tocar las mejillas.
-"¿Tú, eres producto de mi imaginación?, pero si te ves tan real"
León miro incrédulo, pensando que tal vez Syndra, era un idiota, suspiro."
-"No, yo soy cien por ciento real, como dije, tu me trajiste a tu mente.
Syndra ladeo su cabeza, y puso su dedo en la boca mientras fruncía el ceño.
-"¿Por que yo haría algo como eso?
-"No lo se"
Ambos quedaron en silencio, y aunque la oscuridad los envolvía, todavía podían admirarse el uno al otro, así se quedaron un tiempo, en silencio, hasta que la oscuridad comenzó a formarse otra vez, dando forma a un árbol enorme, un niña, y varios niños lanzando alguna piedras y ramas a esta, y la imagen comenzó a tomar color, movimiento, y voz.
-"Niña estúpida, niña estúpida"
-"mírenla, habla con los arboles, jajaja"
Gritaron los mocosos a la niña, que era Syndra, pero ahora mayor, 10 años, su ropa seguía siendo unos harapos que le cubrían hasta las rodillas, ella estaba acurrucada contra el árbol y llorando.
-"Esa eres tu..., nuevamente, todos tus recuerdos son de acoso y llanto"
Syndra arrugo sus cejas, ella no pensaba que fuera tan malo, claro estaba llorando, pero en esa época, había encontrado a alguien con quien hablar.
-"No es tan triste, ese árbol era mi único amigo, siempre conversaba con el, era el único que no me juzgaba, ni me despreciaba u odiaba, como tu, tampoco me miras raro, ni te reíste cuando me viste hablar con el árbol, gracias por eso, tal vez, por eso te deje entrar a mi mente, ademas, eres un mago, como yo, ¿cierto?."
-"Lo soy"
Syndra sonrió, una muy hermosa, miro a su versión mas pequeña y se acerco a ella, con un movimiento de su mano, borro los niños que lanzaban piedras, cuando estuvo al lado de la niña, le pregunto.
León miro esto con gusto, Syndra aprendió a controlar las imágenes en su mente con gran rapidez.
-"¿Esta bien?
-"um, gracias, pero no deberías acercarte a mi, los demás te despreciaran por eso."
-"No debes preocuparte por eso, se lo que se siente ser despreciada y tratada como una plaga, no dejare que eso vuelva a suceder."
Dijo Syndra, que se sentó al lado de la niña y la abrazo, acaricio suavemente su cabeza, al mismo tiempo la ropa de la Syndra pequeña cambio, por un vestido blanco puro, que contrarrestaba con el vestido negro de la Syndra mayor, así de quedaron, los segundos pasaron, los minutos, y había pasado una hora, León esperaba paciente, no le importo esperar una hora, hasta que decidió hablar.
-"Tu vestido, uno blanco, el otro negro, representa la pureza de la niña, esa ingenuidad de creer, que algún día seria aceptada. En cuanto a tu vestido negro, representa la mujer que ya descubrió la oscuridad del mundo, y se dio cuenta, que solo es un monstruo, que siempre estará solo"
Ella lo miro un momento, y aparto la mirada, siguió acariciado a su versión mas pequeña, que tenia una sonrisa mientras dormía.
-"y ahora que, que piensas hacer, quedarte aquí por la eternidad, dándote consuelo a ti misma"
-"Eso hare, puedes irte si quieres, me quedare aquí por siempre, tú dijiste, es mi mente y puedo hacer lo que quiera, aquí nunca seré juzgada, nunca mas estaré sola."
-"vivirás en un mundo ilusorio, en una felicidad ficticia, ¿realmente deseas eso?, ¿acaso no sientes rencor?
-"¿rencor?
-"¡Sí!, rencor, esa sensación de causar el mal, ese sentimiento tan fuerte, que te impulsa a causar daños a quienes te lo hicieron, no lo sientes"
-"Por que debería sentirlo, ellos tiene razón al rechazarme, soy un monstruo"
Syndra no pensaba en realidad eso, pero pensarlo le daba consuelo, creer que su sufrimiento era justificado, y que alegraba a los demás, era su único consuelo, algo bastante retorcido.
En cuanto León, pensaba: tengo que liberar la personalidad de Syndra, pero tiene que ser las dos, para lograr un equilibrio, esa dulce e ingenua chica que acepta que solo es un monstruo, y que merece todo lo que paso, y la lunática que quiere libertad y no volver a ser controlada, y mostrar todo su poder.
-"Syndra, piénsalo, algunas ves, heriste a alguien"
Syndra negó con la cabeza.
-"¿alguna vez, lanzaste una maldición a las cosechas?"
-"No"
-"Pero aun así, todas esas cosas malas sucedieron, y no son tu culpa, pero la gente, cuando les va mal en algo, y no quieren sentirse mal consigo mismo, lo primero que hacen es culpar a los demás, eso es lo que han hecho toda su vida, y lo hacen contigo, solo eres, el chivo expiatorio.
-"¿Por que lo seria?" Dijo Syndra, que comenzaba a rezumar oscuridad de su cuerpo.
-"Es obvio, eres distinta, y nadie te defenderá, estas indefensa, sola, eres la presa mas fácil Syndra, como ves, tu no has hecho nada malo" Dijo León, que se agacho y comenzó a acariciar la cara de Syndra, a ella no le importo, y arrugo las cejas, mientras pensaba en eso.
-"Si no hice nada malo, no entiendo el porqué, de que todos me odiaran, me despreciaran, nadie quería ser mi amigo"
Mas, y mas oscuridad salía de su cuerpo, y de su corazón, la pequeña niña en sus brazos había desaparecido, al igual que todo el lugar, que comenzaba a volverse todo negro.
-"Como lo te dije, eres diferente, y solo eso es necesario."
-"¡¡ESO NO ES JUSTO!!" grito Syndra, su voz tenia un pequeño eco.
-"Nunca dije que el mundo justo, en cambio te digo, es cruel, duro, y si algo resalta, intenta aplastarlo para que no lo aplaquen, mírame, Syndra." Leon tomo la cara de Syndra y la acerco a la suya, sus respiraciones chocaban, sus narices se tocaban.
-"Preguntare nuevamente, no sientes rencor, no los odias, tu no les hiciste daño, pero aun así, querían lastimarte, no pudiste ser feliz..., por que ellos te lo arrebataron"
Los ojos morados de Syndra miraban a León, y ella veía sinceridad, sentía que el se preocupaba por ella, por eso, ella creía en todo lo que el decía.
-"Es verdad"
-"Si, por eso, ¿no deberías quitársela también?, te aseguro algo, tu corazón es oscuro, el mal..., es tú felicidad, todos dicen que eres un monstruo, entonces, ¡levántate Syndra y se uno!, te prometo algo, si lo haces, encontraras la felicidad2
-"¿Seré feliz?, ¿realmente lo seré?" Pregunto esperanzada a León.
-"Lo prometo, dame tu mano, y volvamos al mundo real, es hora, de que te liberes de tus cadenas, que tu mismo forjaste"
León pensaba que Syndra se encadeno a si misma , ella tenia el poder para hacer lo que quisiera, ella podía jugar con la voluntad y la mente de las personas, pero no lo hizo, así que era hora de sacar su lado mas cruel, su otra personalidad, que es manipuladora y vengativa, un verdadero monstruo, y que libere todo el odio juntado por años, es el primer paso, para que encuentre estabilidad, ese era el plan que tenia León.
Cuando Syndra tomo la mano de León, ambos volvieron al mundo real, estaba en un lugar que parecía un volcán, era un infierno de calor luego de que el crucero de batalla. lanzara su ataque, incluso se formaron pequeños ríos de lava.
Los dos eran rodeados por un grupo de soldados Terran, que habían descendido del crucero de batalla, estaban armados y apuntándoles.
-"entréguense, y serán salvos" Grito el soldado, qué parecía estar a cargo del pelotón.
León abrazaba a Syndra todavía y acerco su boca a la oreja de ella, comenzó a susúrrale como un pequeño demonio, que intentaba convencerla de que se uniera al lado oscuro.
-"Míralos a todos ellos, ves el terreno, ves esa nave en el cielo, lo entiendes, ¿verdad?, ya sabes lo que quieren, acabar con nosotros, muerte."
-"Lo se, ahora lo entiendo todo, parte de mi poder, es sentir los sentimientos y los usare" Syndra respiro el aire, y cerro sus ojos meditando un segundo.
-"Puedo sentirlo, todos ellos be ve como el mal, como un monstruo, como objeto a utilizar, como lo hizo mi antiguo maestro, el quería usar mis poderes, los quería para el, pero una vez que supo que no podía quedárselos, se rindió, y la envidia le siguió, y comenzó a obstaculizarme, a negarme la posibilidad de crecer, pude sentirlo, pero yo..., me negué a creer, quería pensar, que había alguien, que realmente, se preocupa por mi, pero..., solo fue un sueño" Dijo Syndra con pesar.
-"Olvídate de eso Syndra, ahora no es el momento de lamentemos, ¡no!, !es hora de liberar el poder!" León rodeo a Syndra y se puso delante de ella, le dio una mirad cariñosa y comenzó a acariciar la mejilla de esta.
-"¿Puedes sentirlo?, ese rencor, ese odio por todo ser vivo e insignificante y carente de poder, que te mira y juzga, por que eres mejor que él, por que lo eres, eres mejor que ellos, eres especial Syndra."
Syndra cerro los ojos dejándose acariciar, ella comenzaba a sentir como su poder crecía, la aura oscura la envolvía en su abrazo, y le mostraba el camino.
Puedo sentir el poder, yo, mi verdadero yo, soy monstruo, y esta bien, por que tengo poder, todos deberían estar a mis pies, tengo el poder de controlar a las personas, porque nunca lo use o que ingenua fui, pero no mas, ya nadie me utilizara, desde hoy, todo el mundo será, mi juguete.
León libero a Syndra de sus brazos, dejo que la oscuridad la tragara, y se aceptara quien era, la soberana oscura, una reina que le encanta pisotear a los demás, una mujer manipuladora.
Mientras todo esto pasaba, los soldados Terran se acercaban lentamente, su misión era capturar a ambos, y como solo se estaban abrazando y no respondían, pensaron que se habían rendido, grave error, Syndra levanto una de sus manos y apunto a un grupo de soldados, oscuridad emanaba de estos soldados que comenzaron a moverse torpemente, hasta que sus movimientos se volvieron mas naturales, pero poco a poco.
Los demás soldados Terran los llamaban por los trasmisores, pero solo se escuchaban gruñidos y voces irreconocible.
El general a cargo del escudaron vio esto, y se dio cuenta que estaban siendo controlados por poderes psíquicos, así que dio la orden de asesinar a todos los que eran controlados, como medida preventiva, y apuro al resto de los pelotones a que capturar al psíquico, al principio querían asesinarlos, pero al ver que soportaron un ataque a gran escala, le convenía mantenerlos vivos, y usarlos como sus perros, eso pensaban el capitán de la nave, solo había que poner el neuro-transmisor, y todo estaría bien.
Cuando los soldados Terran asesinaron a sus compañeros controlados por Syndra, esta se enojo, y apunto a otro pelotón, y cientos de esferas negras salieron del suelo y de todas partes, a su orden, fueron arrojadas, todos fueron masacrados, su armadura no pudo protegerlos y sus cabezas volaron, sus cuerpos explotaron, las tripas salían y los gritos de angustia resonaron por todo el lugar.
Los demás Terran al ver esto, retrocedieron asustados, habían visto psíquicos, pero Syndra, superaba a todos los anteriores, era aterradora y sanguinaria, su poder, era mucho mayor. el teniente al ver esto, les grito y los apuro, amenazándolo con matarlos si volvían sin capturar al psíquico, no les quedo de otra, que intentarlo, aunque el miedo dominara.
Syndra podía ver y sentir el miedo en el corazón de todos esos hombres que querían asesinarla, ella se rio de esto, no de los soldados, si no de si misma, tanto tiempo les tuvo miedo a la gente que la despreciaba, pero ahora se dio cuenta, que eran ellos quienes le tenían miedo a su poder, y que ya nunca mas, será presionara del miedo.
Que mujer mas loca, creo que debería alejarme de ella, parece mala influencia, pensaba León hipócritamente.
Las esferas de Syndra no paraban de brotar, y asesinar todo a su paso, ella se elevaba al cielo, y León miro esto, quería ver si usaba ropa interior, para gusto de el, Syndra no llevaba nada, podía ver su coño, y su lindo y redondo trasero, no es que Syndra no se acordara de que no llevaba nada y fuera exhibicionista, ella había cubierto esa parte con magia, humanos normales no verían nada, pero León, no era normal.
Volviendo a Syndra, ya no le importaba lo que pasaba en el suelo, miro el crucero en el cielo, juntos sus manos, y miles de esferas negras aprecian de todas partes y se juntaron a la que tenían en su mano, pero no crecía, mientras tanto, los soldados en el suelo habían rodeado a León, bueno, los que quedaban, pero este no le interesaba jugar con ellos, así que con lanzo una nova de escarcha, que es como una ola de frio que se extiende a los alrededores como un circulo, con León en su centro, y todos en el área, fueron congelados y muertos en el acto.
Syndra termino su esfera y lanzo a la nave, todos a borde de esta se reían por la pequeña esfera que lo atacaría, la esfera iba a velocidad vertiginosa, en solo 10 segundos llego a la nave, y atravesó el grueso metal de la cuberita con facilidad, llegando hasta el centro de la nave.
Todos dentro estaban sorprendido, incluso León, que miraba desde abajo, pero se sorprendió mas, cuando Syndra chasqueo sus dedos, y el mana exploto en la esfera, haciendo que se expanda dentro de la nave que comenzaba a explotar desde dentro poco a poco, y su descenso era inevitable, caía lentamente hacia el suelo, condenando toda la zona a una catástrofe enorme donde todos morirían.
Syndra veía todo su acto con un sonrisa, disfrutan su liberación, no importándole que acaba de asesinar a mas 7000 mil personas, que son las necesarias para tripular el crucero de batalla, y no olvidemos a los que fallecerían cuando esta caiga y cause una explosión, que podría ser considera en estándares de la tierra, como un bomba nuclear o más.
Esos ojos, no existe desprecio, odio, me miedo, como una persona normal, ya lo decidí, el será mío, solo mío, aunque tenga que usar la fuerza. Pensó Syndra, que miraba a León, mientras descendía.
-"¡Tu, eres mío!" grito Syndra, León levanto una ceja ante esto.
Creo que se me paso la mano, la entusiasme demasiado, ya me basta con la bomba de tiempo de Azula, tener otra, será un dolor en el culo, bueno, mas tarde lo resolveré. Pensó León dejando todo para el futuro, mientras se acercaba a Syndra, y la puso dormir, mientras la tomaba como una princesa.
Minutos antes, Riven llevaba varios minutos corriendo por las instalaciones del complejo, muchos fantasmas y soldados Terran, intentaban eliminarla, pero todos fracasaron, sus pies no se detenía, y su espada no se dejaba de balancearse, slash, otro corte y mas soldados caídos.
Girando otro pasillo a la derecha, Riven encontró el lugar donde se entrenaban a los niños con habilidades psíquicas, entro, y paso por varias celdas, pero en vez de barrera de acero, había una barrera azul, que Riven toco. pero no pudo atravesarla, iba a usar su ki, pero la barrera desapareció de la nada.
Dentro de cada celda, estaba su objetivo, kerrigan, pelo castaño y ojos verdes, estaba acostada en la cama, su piel era enfermiza, Riven se acerco a la niña, y la toco, pudo sentir sus huesos de lo desnutrida que estaba.
Riven apretaba los dientes con fuerza, y lanzo un puñetazo a la pared atravesándola con facilidad, estaba furiosa, ver a esta niña, le recordaba su pasado en Noxus, cuando no había suficiente para comer, y había que robar, gano muchos golpes por eso.
Sacudiendo su cabeza, Riven salió de sus recuerdos y el odio, tomo a kerrigan en sus brazos para llevársela, chik-chik-chik, sonó el sonido de varias armas detrás de ella quitando el seguro, pero no apuntaba a ella, si no kerrigan.
Estas escorias, prometí no volver a matar, pero ellos me quitan las ganas de mantener la promesa. Pensó Rivne, que no le intereso que las armas apuntara a ella, ya no quería perder mas tiempo, estaba preocupada por León.
-"Sombra, llévame de vuelta a León"
La sombra maestra de León apareció, asintió con su cabeza, y Riven fue teletransportada hacia León, que tenia a Syndra en sus brazos, leon no llevaba camiseta, la había perdido durante la batalla con Syndra, ademas tenia algunos moretones y cortes, cuando Riven vio esto, se enojo mucho, y su corazón le dolía.
-"riven, sabia que podía confiar"
-"Pero yo no en ti, dijiste que estarías bien, pero mírate."
-"¡Oh!, esto no es nada, plegaria." León activo una de sus habilidades, su cuerpo curo por completo en unos segundos, pero no elimino la sangre que se había secado y la suciedad.
Riven miro esto, y solo pudo suspirar, quería regañarlo, pero no era momento adecuado, ella se había dado cuenta que una nave que tapaba el sol iba directo a ellos, pero no se altero por eso.
-"No te preocupes por la nave, ya no íbamos de todas maneras."
León se camino hacia Riven y acerco su cara a la de ella, un poco incomodo por que ambos cargaban a alguien, y la beso, cuando Riven cerro los ojos, al igual que León, fueron teletransportados a una casa, bastante normal, fuera de esta se podía ver una gran plantío de girasoles.
Esta era la casa que VIP había preparado para ellos, León supo cuando le pregunto por cual era su historia en este mundo, pero eso lo vermes mas adelante, volvamos a la linda pareja que se separaba y abandona su beso.
León le hizo un gesto para que Riven lo siguiera, subió por las escaleras y entro en cuarto dentro de este, un pequeña cama, que con un chasquido se León, fue reemplazada por una cama tamaño King.
Con suavidad puso a Syndra sobre la cama, lo mismo hizo Riven con Kerrigan.
-Riven, estamos solo, los dos, y estas chicas, no despertaran en días, ¿sabes lo que significa?"
Riven inclino la cabeza aun lado, y pensó un momento, hasta que se puso roja, ella entendió lo que vendría, algo que espero por mucho tiempo, y hoy, era su turno.
León se acerco a Riven, y la tomo por la cintura, pero antes, limpio su cuerpo y el de Riven con magia, luego la beso con pasión, ella no dudo y beso los labios de su amado, uso su lengua para entrar a su boca, y saborear por completo su ser, este no era su primer beso, León siempre besaba a todas sus mujeres por la mañana.
Aun besando a León que la abrazaba con fuerza, Riven comenzó a quitarse su ropa ella misma, siempre espero este día, y no se contendría y usaría todo su encanto, para que su esposo no la olvidara, no olvidemos que aunque Riven usa traje de sirvienta o su jardinera, ella es su esposa y nos sirvienta
Su labios dulces, inundaba la mente de León, que ya tenia su pequeño León de pie, flameando con fuerza. Riven sintió como algo duro comenzaba a golpearla un poco mas arriba de sus partes intimas, Riven era mas pequeña que León.
Riven salto sobre su amado y engancho sus hermosos y carnosos muslos, que estaban al descubierto ya que su falda se había subido, e cuanto a la parte de arriba, ya no existía, sus pechos eran mostrados al mundo, que según León, eran uno de los mejores, el comenzó a masajearlos, no eran muy grandes, ni pequeños, era el termino justo que equilibraba con su cuerpo, eran redondos con una pequeña aureola rosada y un lunar mas arriba en el pecho derecho.
Sus pezones estaban erectos, mostrando que su dueña ya estaba excitada, ademas de sus bragas blancas puras que mostraban manchas de humedad.
León tenia las manos ocupadas, masajeando los pechos de Riven y sujetando por su espalda, así que destrozo sus pantalones y ropa interior con magia, quedando como llego al mundo. Este comenzó caminar y buscar otro habitación, mientras la seguía besando, pero no llego muy lejos, hasta que encontró una mesita muy limpia y con flores, se acerco a esta y mando las flores a volar con la mano que sujetaba la cintura de Riven, y puso el culo de ella en este.
-"uuummmm" un pequeño gemido reprimido salió de su boca cuando sintió el frio de la mesa en su culito, pero eso no la hizo separarse de los labios de su amado, ella no se aburría del sabor y de enredar sus lenguas.
Riven abrió los ojos y los movió hacia abajo cuando sintió algo moviéndose cerca de su coño, era la mano de León, que corría sus bragas y preparaba su polla, y con fuerza la hundió dentro de ella, lo que hizo que Riven abriera mas grandes los ojos, ella era un guerrera, y no temía al dolor, pero nunca había sentido un dolor tan fuerte y placentero al mismo tiempo.
León comenzó a mover sus cintura, "chirr-chirr", la mesa chirriaba amenazando con romperse por la fuerza de las embestidas, y Riven lentamente fue cerrando sus ojos, cuando el placer empezaba a dominarla, ella quería sentir todo la polla de León dentro de su cuerpo, que entraba y salía y abría su coño apretado, que era resbaladizo por los lubricantes naturales que ella soltaba al estar tan excitada.
-"¡Mas fuerte León, mas fuerte, puedo mas soportarlo, más duro.!" grito Riven, que había liberado los labios de su amado, el escucho, y no dudo en embestir mas duro todavía.
-"um~um~um~um~um~ahhhhhh". gimió Riven con movimiento de cadera de León, hasta que llego a su primer orgasmo, y su grito resonó en toda la casa.
-"Ha, ha, ha, eso fue increíble, dijo Riven que apoyo su cabeza en el hombro de León.
-"Es solo el inicio." León la tomo de nuevo por su cintura, y la arrastro hasta la habitación, donde otra cama pequeña esperaba, León maldecía a vip en su mente por ser tan mal anfitrión, así que tuvo que cambiarla.
Lanzo a Riven sobre la cama, pero esta se levanto, y lanzo a León sobre la cama esta vez, y moviendo con sensualidad sus caderas, ella se subió sobre este, y tomo la polla con sus pequeñas manos, se levanto un poco y se sentó sobre esta, haciendo que desapareciera poco a poco, hasta que llego al rincón mas lejano de su vientre.
-"aaahhh~, umm, Leon, déjame a mi esta vez." Riven levanto su cabeza y miro al cielo, y con un grito "aaaaaaa", el ki la inundo, llenándola de energía.
Puso su mano sobre el pecho de León y lentamente se inclino sobre el, mientras levanta su trasero, y luego bajaba, subía y bajaba con lentitud, cada vez que bajaba, metía la polla de León hasta el fondo de coño, pa~splahs~pa~splahs, sonaba el golpeteo del culo de Riven contra los muslo de León y su polla; y su coño húmedo goteaba dando un sonido lascivo con cada vaivén.
-"¡ya acabo Riven! Grito León eufórico.
-"¡Adentro León, adentro, dame un hijo, aaaaahhh!" grito Riven moviendo más rápido sus caderas, y dejando marcas de sus uñas en el pecho de León, mientras llegaba a otro orgasmo.
León echo toda su carga adentro como le rogo Riven, que estaba toda sudorosa y con la cara roja, miraba a su esposo con cariño y felicidad.
Valió la pena juntarse con esas dos pervertidas, pensó Riven, recordando a June y Effie, que siempre hablaban de lo que hacían en la cama, incluso tenían algunas grabaciones que guiaron a Riven.
-"Estas lista mi linda esposa"
Riven asintió, y volvió a mover sus caderas como la mejor la bailarina del mundo, y durante 2 días, se jodieron como conejos.