Cap 101

Cada vez que despierto por las mañanas, despierto en el cielo, no puedo calificar de otra manera las tetas Hilda, son como nubes, perfectas para dormir y hacer otras cosas, solo superado por las alas de Kayle.

Hilda tiene el buen hábito de abrazar algo cuando duerme, talvez una costumbre que gano con Eris, por qué su marido ni siquiera dormía en la misma cama, comienzo a dudar sobre la verdadera sexualidad de Philip, que hombre se niega a dormir al lado de una mujer tan perfecta.

En el sentido de que sus pechos son almohadas perfectas, igual su trasero, solo puedo dar las gracias a Philip por desperdiciar tan buen producto.

No puedo quejarme, la vida me trata bien, y muy bien cuando puedo dormir abrazado a dos pelirrojas con grandes pechos. Ágata me abraza desde la espalda y presiona sus pechos contra mi nuca.

Sus pechos son más duros, aunque muy suaves, tiene que ver con su entrenamiento y genética tal vez. Si es así, espero que Eris tenga pechos como los de su madre.

Este duo de pelirrojas, me han entretenido tanto estas últimas semanas, en especial Hilda, cada vez que tengo la oportunidad la intimido.

Como esa vez que la obligue a tener sexo sobre Eris, mientras dormía, fue un gran desafío para ella, Hilda es muy bulliciosa en el sexo, me acuerdo que agarro sus propias bragas y se las puso en la boca para mantenerse callada, y no despertar a su hija.

También hubo esa vez que Hilda cortaba las verduras y le enseñaba a Eris como hacerlo, fue muy emocionante, me escondí debajo del mesón y use mis dedos magicos para masturbar a Hilda mientras su hija esta frente a ella.

Hilda gimió varias veces, incluso formo un charco en el suelo, fue un milagro que Eris no notara nada, o quizás se hacía la idiota y no quería avergonzar a su madre, tendré que averiguar, aunque por lo que tengo entendido, Eris no tiene educación sexual, pero dudo que no haya visto a su abuelo pervertido joderse a las sirvientas, quizás ese viejo pervertido le enseño algo.

Lo bueno del viejo es que no era lolicon, y adoraba a su nieta, así que nunca le puso las manos encima, los Boreas son muy leales a su familia, y muy protectores, tengo que admitir eso, incluso el lolicon de Philip nunca toco a su hija.

Bien, dejemos esos pensamientos pervertidos de lado, era hora de despertar y terminar la primera fase de mis planes.

Con lentitud y cuidado de no despertar a mis bellezas, logre levantarme, pero de nada sirvió, Ágata abrió sus ojos y me quedo mirando, luego miro la hora y comenzó a vestirse para preparar el desayuno.

-"Buenos días, León"

-"Buenos días, Ágata, volveré en una hora, tengo algo que atender, ten listo el baño y la comida."

Antes de irme le di algunas instrucciones, dándole un nuevo uniforme de sirvienta, es para la nueva adquisición.

-"¿Chica nueva?"

Solo encogí mis hombros, no me importo su ceño fruncido o su tono de voz molesto, cuantas mujeres tuviera no era su problema, pero tampoco la culpo, sé que está celosa y un poco cansada de tener que enseñar y cuidar a los demás.

Eso podría ser mi culpa, y lo es, pero que puedo hacer, Ágata es una mujer muy eficiente, y una excelente maestra, y es la que menos da problema. El resto de mis sirvientas son niñas problemáticas o no adecuadas para enseñar, creo que tendré que ser más estricto..., mejor no, mucho trabajo, mientras cuiden su cuerpo y me atiendan bien, no las castigaré, le dejaré el resto a Ágata.

Luego la recompensaré, cuando termine mis planes y conquiste a las chicas que quiero, creo que luego tendré vacaciones con toda la familia, es necesario pasar tiempo juntos, y claro, que todas se conozcan, creo que sería divertido verlo, mientras no intenten matarse, todo bien, no importan si se llevan bien o no, no es necesario.

-"Me retiro"

Le dije antes de irme, modales antes que nada, no es necesario tratar mal a las personas que te tratan bien. Ágata me miro, y sonrió dulcemente, su anterior ceño fruncido desapareció como por arte de magia, que rápido fluctúan las emociones femeninas.

-"Cuídate, no olvides que tienes más de 15 esposas y sirvientas esperándote."

Asentí con seriedad, aunque sé que nada me pasara.

No existe algo que amenace mi existencia en este mundo.

Deje la habitación y aparecí cerca de una posada, el frío viento golpeaba mis mejillas, el olor a pasto mojado inunda mi nariz, el barro ensucia mis zapatos debido a la lluvia de la noche anterior, aunque ahora el sol brilla como nunca, aumentado la humedad y la posibilidad de agarrar un resfriado.

La posada era vieja, pero tenía muchos visitantes a diario debido a su barato hospedaje, aunque su comida era terrible.

Los aventureros entraban y salían, eran tipos madrugadores, y muy trabajadores, aunque siempre están las ovejas negras, esos aventureros que no les importaba mucho su trabajo y hacen lo que quieren, son solo basura que deberían ser exterminados.

Sucias ratas asquerosas, deberías matarlos a todos..., no, no valen la pena, son muy débiles..., aunque podría soltar a mis mascotas para que se alimenten, seguro tienen hambre..., no, mejor no, luego los llevaré a comer, oh, si no sabes de qué mascota hablo, es de mis Zerling.

Aparte mi mirada de esos inútiles, ya que no son interesantes.

Camine hacia la posada, no pensaba ir y entrar, yo quería ir a la parte trasera, donde tiran la basura y las sobras de comida.

Lástima que cuando me dirigía hacia el callejón, un idiota me grito y se acercaba a mí, parecía un poco borracho, a su lado una chica medianamente linda, una mujer promedio y no estaba en mi zona, es más, era muy mediocre en todos los sentidos.

-"¡Oye mocoso!, deberías tener cuidado en esta ciudad, es muy peligrosa, que tal si me das tu dinero para que lo cuide." Dijo con sarcasmo, y clara malicia, claramente no es confiable, y su cara llena de cicatrices no ayuda en nada.

¿Cliché?, quizás, eso pasa cuando te ves muy joven, e ignorante.

No puedo culparlo, ahora no llevo espada, y mi ropa parece muy fina y de buena calidad, quizás cree que soy un joven maestro arrogante, un hijo de papi que nació con cuchara de oro.

-"Niño, deberías darle el dinero, nosotros lo cuidaremos por ti, así cuidarás tu linda carita."

La chica me coqueteaba, y parecía que estaba de mi lado, y que en verdad quería cuidarme, que buena maestría en actuación, lástima que yo soy mucho mejor actor, y claro, no nací ayer.

Todos se dieron vuelta, y comenzaron a observar la situación, pero nadie intento ayudarme, solo daban miradas de lástimas, y otros se burlaban directamente, diciendo que lo merezco por nacer rico.

Que ridiculez, nunca comprendí a la gente que se queja y odia a las personas que nacieron con todo, eso es estúpido, si no te gusta algo, intenta remediarlo, no sacaras nada si solo te quejas, suspiro, pero todo sabemos que eso no pasara.

La gente o el ser humano en general es muy mediocre, prefiere insultar y quejarse, a buscar una solución al problema, ¡qué imbéciles!, si otra persona nació con riqueza, y no te agrada, solo busca una forma de volverte rico, incluso, ¿qué importa que si la otra persona nació con riqueza?, porque quejarse y decir que la vida es injusta, ¿de qué sirve eso?..., ¡de nada!, son solo palabras vacías que no alcanzaran a nadie, y no te llevaran a ningún lado.

Nada que hacer, el ser humano no cambiara de la noche de la mañana, y eso es bueno, es mucho más divertido así.

-"Oye, ¿mocoso estás escuchado?"

¡Oh!, se me había olvidado el idiota, mi culpa, nada que hacer, me gusta quejarme de los demás, jajajaj, algo contradictorio con mi monólogo anterior, pero así soy yo, soy un tipo hipócrita, y me gusta, me gusta como soy, me gusta violar, asesinar, ser hipócrita, mentir, actuar, me gusta todo lo que hago y quien soy.

Sí, el primer paso para crecer como persona, es aceptar quien eres.

Tos, mejor dejemos las frases motivacionales para otro día, tengo que botar de la basura.

-"Aunque no lo parezca, tengo más de mil años, así que el mocoso eres tú."

-"¡thc!, ¡eres un mocoso gracioso!, escucha, solo lo repetiré una vez más, dame el dinero, o no me culpes por ser descortés." Dijo muy enojado, incluso empezó a mostrar sus músculos, quiere intimidarme tal vez, que tipo más primitivo, no somos neandertales, deberíamos resolver nuestros problemas Hablando.

Bueno, es mejor terminar el show, y grabar el terror en el corazón de todos los presentes.

El maldito idiota iba a tocar mi hombro, que descortés, acaso no sabe que estoy dialogando internamente, ¡tch!, ahora que lo pienso Basanti me dijo que siempre me veía mirando el horizonte, y parecía distraído, eso pasaba por mis monologos internos.

Volviendo al idiota, su mano parecía en cámara lenta, era aburrido.

Mientras llegaba, mire a mi alrededor, la muchedumbre ya estaba vitoreando, seguro le gusta ver peleas callejeras.

Mientras mi mirada recorría todo el lugar, lo note, un hombre con una máscara de gato, pelo rubio y un..., ¿uniforme escolar?, eso creo, el rubio parecía curioso, ya que se quedó mirar, su nombre Almanfi.

Interesante, que hace un perro de Perugius Dola en este lugar, ¿hmm?, lo más probable es que este buscando algo, o solo inspeccionando, buscando niños de pelo verde para matarlo, quien sabe, pero es interesante, cuando tenga tiempo intentaré hablar con Perugius, quizás podamos tener una conversación racional.

No, no creo que pase, Perugius Dola es un hombre que se cree un rey, y actúa como uno, lo más probable es que me pida que sea sumiso con él, o que me arrodille o quizás cosas similares, y si no es él, lo pediría uno de sus familiares, y una vez que haga eso, lo mataría, nadie me humilla y sale vivo.

Soy un ser que esta por encima de todo, soy León, ¡y no me inclino ante nadie!..., solo cuando doy sexo oral a mis mujeres.

Volviendo con el idiota, el tiempo volvió a avanzar a la normalidad, su mano estaba a punto de tocarme, pero antes de que eso pasara, penetre su estómago con mi mano derecha.

Ni siquiera tenía que mirarlo, para saber que tenía una mirada llena de terror e incredulidad.

Como dije, quería infundir temor en la gente, así que este simple acto no bastaba, agite mi brazo hacia arriba y como si fuera tofu, corte al tipo casi por la mitad, las tripas, ojos, cerebro, sangre, todo voló por los cielos, creando una escena sacada de una película de terror.

Un segundo bato para que los más experimentados comenzaran a correr, 5 segundos para que la gente normal corriera y gritar en pánico, claro que no toda, algunos quedaron paralizados del miedo.

Ahora solo queda la mujer, sus ojos llenos de miedo y horror, me gusta esa mirada, seguro tenía miedo, incluso se orinó, tengo que decir que apesta mucho.

-"¡N-no te acerques monstruo!" Grito con horror.

Esa palabra, monstruo, creo que me define a la perfección, y es porque lo soy, no es necesario negarlo.

Mis pasos eran lentos, quería disfrutar de este pequeño momento, después de todo, de eso se trata la vida, de vivir esos momentos. De saborearlos y disfrutarlos al máximo, para no arrepentirse en el futuro.

Con cada paso que daba, ella retrocedía mientras gimoteaba y pedía que me alejara.

-"Detente"

Lástima que me interrumpieran, no recordaba que Arumafi fuera esa clase de persona, ¿le gusta salvar a las personas?, ¿o quizás tiene complejo de héroe?, en realidad no tengo mucha información de este idiota, solo sé que es muy leal a Perugius.

-"Arumafi, ¿cierto?, aléjate y no mataré a Perugius tan pronto, dejaré que viva algunos unos años más"

Le ofrecí una oferta muy tentadora, espero que la acepte, no tengo ganas de luchar, yo solo quería intimidar a los débiles, suspiro, si peleo ahora llegaré tarde al desayuno, y tengo mucha hambre.

Arumafi no respondió, uso su habilidad para aparecer detrás de mí, su espada desvainada apuntaba directamente a mi cuello, ¡él muy desgraciado ni siquiera dio una advertencia!, se supone que deba decir, no hables así de mi amo y esas cosas..., ¡pero no!, ¡el imbécil quería asesinarme!, y yo que le ofrecí un trato tan bueno, que maldito desgraciado malagradecido.

Por lo que recuerdo solo puedo moverse donde haya luz, no es que importe esa información, Arumafi es un espíritu de luz supuestamente, y yo soy un nigromante, y un druida, las almas y espíritus son mi especialidad, soy su enemigo natural.

Espíritu de hueso y lobo espíritu, una era habilidad que perseguía la objetivo y lo dañaba, y la otra era una habilidad que invoca lobos, con eso bastara.

Arumafi tuvo que retirarse debido al peligro, su instinto era bueno, si mi espíritu de hueso lo toca, morirá, no es rival para mí, y si no muere por eso, mis lobos terminaran el trabajo.

Pero si su usa su habilidad de parpadeo nunca lo alcanzaran, aunque puedo aumentar la velocidad de mis lobos y el espíritu de hueso..., no, eso sería muy aburrido, así que hice un bloqueo espacial, y Arumafi no pudo usar su habilidad.

El muy infeliz entro en pánico por un segundo, pero sigue siendo un guerrero, se recuperó y comenzó a correr, lo dejaré así por ahora, si muero o no, todo dependerá de que Peragius aparezca y lo salve, o eso creo.

No sé que tan fuerte es pelagus, pero si muere por unos simples lobos, no merece vivir, y no merece ser llamado rey dragón blindado.

Volví mi mirada hacia la chica, ya me aburrió, levante mi mano y la incinere, solo quedaron sus huesos, será un recuerdo para los que vuelvan, y ahora con todo terminado, iré por mi objetivo, y mi tercera pelirroja de este mundo, Lilia, ¡hm!, ya tengo 3 pelirrojas, cuatro si contamos a su hija, es buena colección.

Me dirigí hacia el callejón, y caminé hacia la parte trasera de la posada, la basura estaba amontonada, y el olor era horrible debido a la comida en descomposición, por este motivo la gente se enfermaba en la época medieval, lanzaban la basura donde sea.

Claro que en este mundo usan magos de fuego para incinerarla, pero no son fáciles de encontrar, así que deben esperar y por mientras la basura se acumula, y las ratas empiezan a llegar.

Bueno, no vine a este lugar por la basura, si no por quien viene a continuación.

Su pelo rojo estaba desaliñado, sus pómulos huecos y mirada desgastada demostraban desnutrición, ella debería tener una pequeña barriga que demuestre su embarazo, pero debido a la mala alimentación, no se nota.

Ella era Lilia, antes era todo una belleza, miles de hombres matarían por ella, ahora no es nada más que una vagabunda sin hogar.

Todo este tiempo mis sombras vigilaron su paradero y su patrón de comportamiento.

Al principio resistió con el poco dinero que le quedaba, no duro mucho, luego intento buscar trabajo, nunca logro encontrar, así que no le quedo de otra que pedir dinero en las calles, tampoco funciono, todas las personas la ignoraban, era como si no existiera.

Ese hecho fue por mí, lance una maldición sobre ella, el efecto de dicha maldición era alejar a las personas, además de hacerla irreconocible a sus conocidos, y también ocultaba su belleza, todo lo necesario para que llegara a este estado.

Siendo sincero no me agrada mucho, pero quiero tener una colección de chicas pelirrojas, además un juguete nuevo no esta de más, y no quiero que se lo quede Paúl, o Rudeus, Lilia no tiene mucho valor para mí, pero ellos no se la merecen.

Para explicarlo de mejor manera, que hacen los niños cuando le das un juguete que no quieren, lo rechazan, ahora, que pasa si le das ese mismo juguete a un niño que esta al lado, lo más probable es que ese niño se vuelva celoso y se lo arrebate, sin importar si era aburrido, o si no le gustaba, esto es el mismo fenómeno.

Bueno, Lilia también es muy leal, eso lo demuestra cuando jura su lealtad a Rudeus por salvarla, me refiero al momento en que quedo embarazada y Rudeus logra que se quede, suerte para ella, eso no paso ahora, digo suerte porque está mejor a mi lado.

Volviendo con la escena frente a mí, Lilia tenía su ropa desgastada, y no usaba zapatos, su pecho era más pequeño, que pena, me gustaría probarlo, pero ahora no, se ve muy mal, además no tengo fetiche de embarazada.

Lilia se acercó a la basura, y busco comida, siempre venía este lugar a buscar las sobras.

La pelirroja parecía desesperada buscando comida, intentando no comer nada muy descompuesto, una lección que gano luego de pasar mucho tiempo en el baño, obviamente la comida rancia provoca problemas intestinales.

Eso provoco su crisis, sin medicamentos y sin nadie que la apoyara, su salud se deterioró con rapidez, tiene suerte de que la cuidara desde las sombras, si no, su hija ya estaría muerta por toda esa basura que consumió, y que afecto su sistema inmune.

Camine hacia Lilia, ni siquiera noto mi presencia, está tan concentrada en encontrar algo decente para comer, que se olvidó de proteger su espalda, tampoco pensaba hacerle daño, así que no importa.

Pero si apareciera otro vagabundo y le robara la comida, eso sería malo, no crees.

Eso me recuerda mis días en Passionis, cuando non tenía nada que comer, pensar que estuve a punto de comer Serling, suspiro, pobre de mí, cuando tenga tiempo exterminaré a todos los Xel´ Naga restante, si es que queda alguno.

Mejor volvamos a lo nuestro, tengo ese mal hábito de irme por las ramas y pensar en otras asuntos mientras hago otras cosas.

-"Hola." Le dije con un tono amistoso, no funciono.

Lilia dio un brinco del susto, se dio media vuelta con rapidez, mientras escondía un pedazo de papa en su espalda, como si tuviera miedo de que se lo arrebatara, su mirada era cautelosa y..., con un poco de esperanza, eso tiene que ver con que nadie la mira, y todos se alejan de ella.

Ahora Lilia sabe como se siente Orsted, ya que tiene una maldición similar.

Volviendo al tema, Lilia agarro la papa y empezó a tragarla con avidez, su mirada no se apartaba de mí.

-"Vamos mujer, que pasa con esa cautela, no es que quiera comer basura, tengo muchas mujeres que no dudarían en cocinar para mí."

Creo que mis palabras no llegaron, ya que parecía extasiada mientras comía esa papa, eso pasa cuando no comes durante mucho tiempo, y cuando solo comes basura insípida.

Espere un minuto a que se calmara, y lo hizo, ahora parecía más relajada y aliviada.

-"¿Quieres..., burlarte de mí?"Dijo con una voz ronca, debido a que no bebe mucha agua, si aprendiera magia de agua no le pasaría eso.

-"¿Por qué piensas eso?, pero antes de responderme, toma bebe agua."

Lance una botella con agua para que venciera la ronquera, la chica no dudo y la bebió como si fuera la última vez, casi se traga la botella, tiene una boca grande, perfecto para dar un buen sexo oral.

-"¿Ahora te burlarás de mí?"

Lilia arrojo la botella a la basura, y me dio una sonrisa amarga.

-"Otra vez la misma pregunta, ¿por qué piensa eso?"

-"¿por qué un niño rico desearia hablar con alguien como yo?"

-"Es porque quiero golpearte, no será muy duro, pero si aguantas te daré unas monedas de cobre, ¿aceptas?" Dije medio en broma, algunos ricos tienen la afición de golpear vagabundos, sucede mucho en la época moderna.

Los ojos de Lilia brillaron con determinación, y no dudo en responder:

-"Lo haré por 1 moneda de oro."

No me sorprendió su respuesta, estaba desesperada por comida, un hogar, y claro, por lo que lleva dentro, es una de las razones por la que sigue viva.

A pesar de que su hija arruino su vida, entre comillas, Liria todavía la quiere, y desea que nazca, tiene un fuerte instinto materno, no como la mía, que me abandono a la primera adversidad que tuvo.

Sniff, que mal me sentí por eso..., broma, jejeje, no tengo rencor por eso, ni siquiera me importo, eso si, tengo que admitir que mi madre está muy cachonda, independiente de si me abandona o no, me hubiera follado igual, es demasiado hermosa como para dejarla ir.

Mejor volvamos a lo nuestro.

-"Era broma, mírate, no durarás ni un golpe."

-"Pruébame, si me desmayo no pagaras nada, adelante hazlo."

-"Incluso si te golpeo en el vientre."

Sus cejas se arrugaron y sus manos instintivamente se acercaron a su abdomen, protegiéndolo.

-"¿Como sabes?" Dijo con seriedad, estaba lista para atacar o correr si era necesario.

-"Tranquila, no pienso hacerte daño, y como sé lo de tu embarazo, pues mis ojos son especiales, además me especializo en almas, y puedo ver dos almas en ti."

Lilia asintió y bajo la guardia, ella pensó que no tenía motivos para mentirle, y ella sabía que existen varios tipos de magos y personas extrañas en el mundo, y claro que muchas razas distintas, así que no dudaba de mis capacidades.

-"Si no quieres nada de mí, seguire buscando comida, pronto el sol llegara a este lugar y la comida se estropeará."

-"No estás aburrida de esto, no quieres una mejor vida, comida deliciosa, ropa fina y una habitación propia, no quieres disfrutar de los placeres de la vida."

Lilia encogió los hombros, y dio un suspiro cansado antes de responder.

-"Sí."

-"Lo deseas, pero no puedes tenerlo, ¿no es cierto?, no tienes a nadie que te ayude, estas solas y abandonada con un niño dentro de ti, que poco hombre quien lo hizo, y que poco filial es tu familia como para abandonarte."

-"Como sabes todo eso, ¿me estás vigilando?"

-"Di en el clavo con todo, eh, y quien soy..., no importa por ahora."

Lilia levanto una ceja y se cruzó de brazos, y pregunto con desconfianza:

-"¿Solo adivinaste?"

-"Soy genial analizando situaciones o personas, para mí eres como un libro abierto."

-"Haz lo que quieras, necesito buscar comida."

Lilia agito su mano mientras se daba media vuelta, decidió ignorar mi presencia, suspiro, acaso la basura es más importante que yo.

-"Cuál es tu nombre."

-"Lilia." Respondió sin dudar, mientras seguía hurgando en la basura.

-"Bien Lilia, tengo una propuesta para ti, dame tu vida, tu alma, todo lo que te queda, que no es mucho, y conviértete en mi sirvienta por la eternidad, y juro por mi nombre, darte comida, un lugar donde vivir y protección."

Las manos de Lilia se detuvieron, se dio vuelta y volvió a mirarme.

-"Porque me ofreces todo eso, no tengo nada que ofrecerte."

-"Ya lo dije, tienes que pagar con todo lo que tienes, incluso con lo que llevas dentro."

Nada es gratis en la vida.

-"¿Quieres a mi hijo?, es especial, es valiosos." Me dijo mientras entrecerraba los ojos.

-"Mira mujer, deja de darle vuelta al asunto, y acepta, yo solo ofrezco un trato contigo, porque estoy aburrido, nada más, no eres especial, tu hija tampoco es especial, Lilia, ¡no eres nadie!, y no vales nada, para mí solo eres un juguete que puedo recoger."

No dude en decir la verdad, no era necesario mentir, ya que tengo todas las cartas en mi mano.

-"¿Un juguete?" Dijo ella, no parecía enojada por mis palabras anteriores, incluso estaba aliviada de que fuera sinsero.

-"Exacto"

Lilia comprendía a lo que me refería, y lo estaba procesando, pensado en las ventajas y desventajas de ser mi leal perro, y luego de un minuto, levanto su cabeza y me miro directamente a los ojos. Después de todo, los ojos son la ventana del alma.

-"Quiero que mi hijo sea libre."

Negue con mi cabeza.

-"Niña tonta, acaso crees que estas en posición de exigir algo, eres idiota..., bien, quiero que lo pienses, si no tomas mi mano ahora, si no aceptas en este momento, lo que llevas dentro de ti, morirá incluso antes de nacer, no tienes posibilidades, además, ¿quién dice que no esta muerta?, ¡mírate!, eres un desastre."

-"¡N-no esta muerta!"

Grito en voz alta, más que para convencerme, era para convencerse a sí misma.

-"Tienes razón, puedo ver que todavía vive...," Lilia suspiro de alivio, su cuerpo se relajó notablemente, y continúe hablando:

-"¿Pero por cuánto tiempo?, cuanto más durara..., Lilia, dicen que es mejor vivir un día como León, a mil años como cordero, pero yo te digo, que en mil años harás muchas más cosas que en un día."

Lilia apretó el dobladillo de su ropa desgastada, agacho la cabeza y apretó los dientes, se debe estar devanando los sesos para llegar a una buena decisión.

Paso el tiempo, y seguí esperando, aunque estaba apurado, el desayuno ya debe estar listo.

-"Acepto, pero..., quiero venganza contra alguien."

-"Es un hombre."

-"Si" Su voz tenía clara malicia, oh, chico, nada peor que una mujer resentida, mi pésame a Paul.

-"Desde ahora eres mi lindo perrito, nadie te intimidará, y claro, te protege como es debido, tu venganza, es mi venganza."

Bueno, ya me estoy jodiendo a la esposa de Paúl, asi que la venganza ya empezó.

-"Ahora ven y besas mis pies, mi lindo perrito"

-"¿Soy un perro o un juguete?"

-"¡Serás lo que yo quiero que seas!, ahora si besas mis pies, y el trato estará cerrado." Le dije con autoridad, tiene que saber quien esta al mando, no es necesario ser amable.

Lilia no dudo, sus rodillas se doblaron, su falda era larga así que no se lastimó la piel, lentamente se fue doblando hasta que su cabeza casi toco el suelo, miro mis zapatos unos segundos, y los beso, un beso largo, o eso parecía, Lilia había perdido la conciencia.

La pelirroja vivió bajo un estrés inmenso, donde no tenía comida y techo donde dormir, donde no sabía si su hijo sobreviviría, con el constante temor de ser abusada, con el pensamiento de que su familia la odiaba, con el rencor y el odio que cargaba gracias a Paul.

Todo eso la tenía con los nervios a tope, y difícilmente podía dormir, siempre cansada y preocupada por lo que puede pasar, y todo eso desapareció cuando hizo un trato conmigo, por eso se desmayó, ahora la chica no estaba sola, y tenía alguien que la cuidaría, aunque claro.

Saque una poción de curación mayor, y la esparcí sobre Lilia, su pelo recuperaba su color, su cara brillaba y sus pechos crecían, Lilia había recuperado su antiguo cuerpo y su belleza.

La tome de la cintura, y volví a casa.