Naruto - Harem en la Academia 7.2

Luego de pensarlo unos segundo Kushina tomo aire y comenzó su explicación, "¿Naruto, hijo sabes donde es mi pueblo natal?", la respuesta tomo por sorpresa al rubio, pero contesto, "No, la verdad nunca he sabido donde naciste mama, incluso cuando te pregunte, nunca quisiste decirme", dijo el chico expectante, "pues porque ese lugar es el infierno, el lugar donde nací, es el clan Uzumaki de Uzugakure, puede que a ustedes no signifique nada ese nombre, pero para muchas empresas y familias influyentes, es el clan más poderoso de todo el país, a tal grado que tienen influencia hasta en el gobierno, según los rumores", la respuesta de Kushina dejo a todos los presentes impactados, entre ellos a Naruto.

"Nos dices que entonces nuestra familia tiene tal poder, si es así ¿por qué dices que es el infierno?", pregunto Naruto, "soy la menor de la familia, mi hermana mayor es la actual cabeza de la familia, pero solo en apariencia, pues es mi abuela la que controla todo desde las sombras, pero en la familia Uzumaki, es decidido por la matriarca, pues es una familia mayormente matriarcal.

Y ellas son las que decidieron que las hijas menores o las que no son elegibles al cargo, sean usadas como simples incubadoras humanas, pues solo las usan para mantener el linaje de sangre puro, y ese iba a ser mi destino el en clan, si tu padre no me hubiera sacado de ahí", la confesión de Kushina casi hace que Naruto explote en ira, pero logro controlarse, para seguir escuchando más de la historia, así como las demás las cuales solo escuchaban atentas.

"Si te preguntas como lo hizo, pues resulta que la familia de tu padre, los Kamikaze, han servido a los Uzumaki por generaciones, pero la realidad es que son más bien como la rama secundaria o sea primos o algo así, fue por eso que lo conocí, él había sido asignado a cuidarme, a pesar de ser solo 2 años mayor que yo, pero a pesar de eso me agrado y conforme pasaba el tiempo me enamore de Minato y el de mí, era como un sueño, y mientras íbamos creciendo él estaba a mi lado siempre, hasta ese día cuando, mi madre Kanade Uzumaki, llego con la noticia, ese día mi abuela había elegido a mi hermana como la sucesora, por lo que mi destino ya había sido decidido", decía la mujer pelirroja recordando un tanto angustiada.

Sin embargo, cuando Minato se enteró, me ofreció liberarme de mi destino, pero para eso debíamos irnos de Uzu, y si eso pasaba me tratarían como una criminal e incluso podrían haberme ejecutado, así que, durante toda la siguiente semana, planeamos como fugarnos, hasta que el día llego, pero cuando parecía que lograríamos escapar mi madre nos descubrió, pero antes de delatarnos con mi abuela, le ofreció a Minato, una enorme cantidad de dinero así como propiedades y acciones de varias compañías las cuales eran propiedad de la familia".

"sobra decir que las rechazo, pero mi madre le dijo que no era para que me dejara en paz, sino para nuestra familia, pues mi madre también estaba en contra de la forma en cómo era la familia, sin embargo, aun así, Minato rechazo la propuesta, a pesar de eso, mi madre decidió dejar la oferta abierta y la llamo el legado del relámpago amarillo, para de esta forma evitar sospechas por parte del clan", decía la pelirroja con un nudo en la garganta.

"Perdón que la interrumpa Kushina, pero a todo esto, ¿qué tiene que ver mi madre en todo esto?", fue la pregunta de Satsuki a la pelirroja, "porque tu madre iba a padecer el mismo destino que yo", fue la respuesta de la pelirroja, que dejo en shock a Satsuki y a los demás, "el clan Uchiha era igual al clan Uzumaki, y tu madre y yo hemos sido amigas desde que éramos muy pequeñas, nuestros destinos habían sido decididos, y fue por eso que no pudimos aguantar más y nos fuimos ayudadas por Minato, el resto ya lo saben, y ahora que ese infeliz de Zabuza sabe sobre esto, quiere todo ese legado".

"Entonces ¿por qué no se lo entregan y ya?", pregunto Konnan a Kushina, "porque si vuelvo a entablar contacto con el clan, es posible que me ejecuten por haberlo abandonado, o peor podrían obligarme a realizar, la tarea que me fue impuesta en el pasado", decía Kushina temblando, pues solo recordarlo le daba miedo, hasta que Mikoto hablo.

"Y el mío es incluso mucho peor, si vuelvo al clan principal, seré castigada terriblemente, mis ojos serán extraídos, en penitencia por haber abandonado el clan con sus secretos, y cualquier hijo que haya concebido…. Seria asesinado para evitar la propagación de sangre sucia", decía Mikoto con mucho pesar en sus palabras, hasta que Satsuki hablo, "es horripilante, ser tratada así por tu propia familia, es algo de salvajes", decía Satsuki con brazos cruzados y desdén, "pero así son las tradiciones, y no podemos cambiarlas tan fácilmente", dijo Mikoto a su hija.

Durante toda la plática, Hinata solo podía sentirse mal por las dos mujeres, pues sabia a la perfección lo que significaban tradiciones familiares, ella pasaba por lo mismo, pero de cierto modo agradecía, que su clan no fuera tan extremista como el Uzumaki y Uchiha, fue entonces que su atención volvió a la plática cuando Kushina continuo con su explicación, "Es por eso, que no tenemos muchas opciones, solo debemos confiar en Kakashi, y esperar que todo salga bien", cuando la pelirroja termino su explicación todos los presentes solo pudieron hacerle caso a Kushina y esperar que Kakashi pueda tener éxito,

Mientras tanto...

Kakashi se encontraba en su auto, en un estacionamiento en una antigua fábrica abandonada ubicada en las afueras de la ciudad, cuando ve entrar a otro vehículo, una limosina se estacionaba frete a su auto, la cual al detenerse encendió las luces, siendo esa la señal para que Kakashi se acercara, una cerca, la ventana trasera del lado izquierdo se abrió, dejando ver a un hombre de corta estatura con cabello rubio opaco descuidado y una cara de todo un criminal adornada con unos lentes de sol, tipo Ozzy Osborn.

"¿usted es quien sabe dónde encontrar a Zabuza?", preguntaba el hombre mirando a Kakashi a travez de sus lentes, "así es, soy yo, aquí está la información que necesita", dijo el peliblanco entregando una carpeta con todo lo que sabía de la situación, "Muy bien, ahora que sabemos dónde estará, mi gente se hará cargo, y descuide el trato se mantiene, cuando nos encarguemos de Zabuza, nada de lo que pueda saber se hará público, así que no se preocupe cuando todo este resuelto lo contactare", dijo el hombre de lentes, antes de volver a subir el vidrio y dar la orden de avance a su chofer.

Ahora espero que no haya traído un mal mucho mayor por hacer esto", decía el peliblanco mirando al cielo, más, sin embargo, es interrumpido cuando un mensaje llega a su celular, una vez identifica de quien se trata, rápidamente sube a su auto y se dirige rumbo a su hogar, luego de 20 minutos de viaje, llega finalmente a su destino, entra en su casa y encuentra a una chica tirada en el suelo, pues al parecer se había caído al tratar de alcanzar su silla de ruedas, "Pero que... ¿te encuentras bien, no te lastimaste?", decía el peliblanco preocupado, ayudando a sentarse a la chica en el sillón donde estaba.

"Auch, sí, estoy bien, no me golpee, tan fuerte, fue solo el susto, y lamento haberte sacado de tus clases para que vinieras a ayudarme", se disculpaba la chica con un sonrojo en su rostro, "No tienes que disculparte por nada, ya sabes que puedes hablarme cuando lo requieras, estaré feliz de poder ayudarte, después de todo, es mi culpa que estés así", esto último lo dijo mentalmente Kakashi, para después escuchar a la chica que lo llamaba, "Kakashi, no te preocupes tanto, a pesar que llevo varios años en esta silla, no significa que sea una inútil, además fue solo un accidente, ya paso", decía la chica tratando de calmar a Kakashi, "aun así, nunca esta demás, recuerda que debes estar en tu mejor forma para cuando te operen", dijo Kakashi.

"aunque estuviera en excelente condición, la cirugía es muy costosa y no quiero que cargues con esa responsabilidad, además me dijeron que puedo buscar otras opciones, así que descuida estaré bien", dijo la chica para después moverse en su silla de ruedas, y dirigirse a la cocina a preparar la comida, pues ya era hora de comer.

Mientras tanto el peliblanco se lamentaba en su mente por el estado de ella, y esperaba poder reunir el dinero necesario para la cirugía, "Podrás aceptarlo, pero yo no, es por eso que me asegurare que vuelvas a caminar, te lo prometo por mi vida.... Rin", fue la respuesta mental del peliblanco para después dirigirse a la cocina y ayudar a la chica a preparar la comida.

Continuara....