Narra Lu
Hoy era el día, 8 de Agosto y aun sin saber cómo, me despierto junto a Castiel.
Supuestamente, tras la noche de Despedida de Soltera, no debería estar durmiendo con mi prometido, o eso creo. Aun así, me levanto como puedo , ya que Castiel me apretaba entre sus brazos y no me deja ir, y entro al baño a hacer mis necesidades y poder asearme antes de comenzar con el día.
Según mi planning diario, redactado en mi planner mensual, mi día era:
- Despertarme
- Desayunar
- Asearme
- Ir a la peluquería con Mamá, Riley y mi futura suegra.
- Volver a casa
- Comer
- Prepararme en la habitación de Invitados
- Casarme (2h)
- Convite
- Dar sorpresa a Castiel.
La sorpresa, era una caja con una prueba de embarazo, un documento del hospital en el que me he hecho las pruebas que afirman el embarazo, un body con la frase " Yo soy tu hijo" y la mascara de Darth Vader y unos patucos negros.
El regalo se encontraba junto con mis cosas en la habitación de invitados.
Tras cambiarme después de la ducha, me puse un vestido largo y veraniego, de estilo holgado, con un estampado de rosas rojas sobre un fondo negro y unas sandalias planas de color negro con tachuelas y brillantes.
Me deje el pelo en un peinado natural, es decir, solo me desenrede el cabello y lo dejé en el estado habitual, salvaje.
Tras este hecho, baje y desayune dos tostadas de pan integral con queso de untar y unas lonchas de jamón york por encima, junto a un zumo de manzana y un cappuccino de chocolate y vainilla y, prepare unos huevos revueltos con beicon y queso para Castiel y unas tostadas como acompañamiento, aparte de su café amargo y un zumo recién exprimido, de dos naranjas .
Al terminar, le deje una nota a Castiel, avisando de que saldría a la peluquería junto con mi madre, su madre y mi hermana, y que nos veríamos en la boda.
Luego, salí al jardín y crucé el camino de piedras que atraviesa desde la puerta de la entrada del chalet hasta el porche de la casa. Sali a la calle, donde mi madre me recogió en su Chevrolet Orlando de color negro.
Cuando entre al coche, me encontré a mi madre en el asiento del conductor y a su lado a mi suegra, en los asientos centrales iba mi hermana y Hinami, y en los asientos traseros iban Assiess y Sara. Cabe recalcar que un Chevrolet Orlando es un coche de siete plazas, por lo que íbamos correctamente.
Una vez en la peluquería, pedí un peinado de boda que consta de una trenza vikinga junto con pequeños adornos de plata donde están grabadas las runas y unos adornos de plata con forma de líneas ondulantes.
Mi madre eligió un recogido con flequillo compuesto por un moño bajo, recogiendo su media melena y la parte superior del moño, que se une mediante un broche plateado con florecitas blancas a juego con su vestido plateado con mangas tres cuartos, estilo sirena. Y los tacones que eligió son altos, de color plateados con pequeños diamantes.
Mi suegra eligió un recogido de pelo ondulado, por lo que la ondularon el cabello y posteriormente se lo recogieron utilizando una pinza ancha negra con piedrecitas plateadas a juego con su vestido palabra de honor negro, largo, con adornos plateados. También, eligió unos zapatos de tacón, estilo de aguja, de color plateado.
Mis damas de honor escogieron un peinado para todas igual. Era un peinado con un semi recogido, es decir, llevaban una corona trenzada con sus propios cabellos y el resto del cabello es suelto y ondulado. Ellas, llevarían vestidos estilo griego de color granate, largos, holgados en la zona de la falda y con una raja en el lateral izquierdo, junto a unas sandalias romanas altas de color plateadas.
Riley se decidió por una coleta de caballo a la que se le unían varias trenzas pequeñas, con las puntas onduladas. Ella escogió un vestido juvenil, corto, con la parte de arriba ajustada al cuerpo y una falda con volantes, de color rojo fuego y unos zapatos de tacón no muy alto de terciopelo negro.
Aparte de peinarnos, nos hicimos la manicura y la pedicura, tratamientos faciales y depilación láser.
A las chicas y a mi nos pintaron las uñas de color granate, mientras que a Riley se las pintaron de rojo; a Mamá, le hicieron la manicura y la pedicura francesa, y mi suegra, le pintaron las uñas de color negro.
Al salir, le mande un mensaje a Castiel, que ya regresábamos a casa a comer y a arreglarnos para nuestra boda, que se llevaría a cabo en un bosque y luego el combate se realizaría en un restaurante que se encuentra dentro del mismo bosque.
Todo el trayecto a casa fue muy amena, cantando todas a pleno pulmón hasta llegar a casa. Cuando llegamos, Castiel no estaba en casa, por lo que supuse que se encontraba en casa de Lyss.
Mientras preparábamos una comida ligera, me puse a responder mensajes y vi que Castiel me había mandado exactamente lo que yo había pensado:
~ Mensaje Entrante ~
- Hola nena, me alegro que ya hayas acabado de arreglarte el peinado y esas cosas para la boda.
Si llegas a casa y ves que no estoy, es que estoy en casa de Lyss.-
~Acaba el mensaje~
Nuestra comida se basó en ensalada de pasta con huevo, atún, aceitunas, piña, tomate frito, maíz, mayonesa y jamón York.
Después de comer, nos comenzamos a arreglar para la boda, nos duchamos en este orden: mamá, mi suegra, Assiess, Sara, Hinami, Riley y yo, que era a la que tenían que ayudar a ponerse el vestido. Un enorme vestido de princesa, estilo palabra de honor, de color negro y unas sandalias de plataforma de color plateado.
~Por otro lado~
Narra Castiel
Cuando me levante, Lu ya no estaba en casa. Se había ido a la peluquería con mi madre, su madre y sus damas de honor.
Durante lo que quedaba de mañana me dedique a las tareas rutinarias: ir al baño, ducharme, desayunar, sacar a los perros y planificar el trabajo de la discográfica .
A las 14:00, Lyss me llamo para arreglarme en su casa, para dejar a las chicas cambiarse en casa. Allí ya se encontraban mi padre, mi suegro, mi cuñado, el dueño de la casa, Alex, Armin y Alexy.
A las 18:00 nos casábamos Lu y yo, por lo que teníamos que comer, arreglarnos y dirigirnos al lugar donde se celebraba la boda.
Narra Lu
Tras arreglarnos, el reloj marcaba las 17:00, y debíamos dirigirnos al lugar.
En la hora que teníamos hasta las 18:00 me dedique a preparar la sorpresa que le daría a Castiel tras casarnos, por lo que abrí una caja , donde metí el test de embarazo, un body negro que ponía "Yo ...Soy...Tu...Hijo", unos zapatitos estilos convers y un chupete de color negro con el símbolo de rock.
Tras acabar dicha sorpresa, recogí la sorpresa y nos fuimos al lugar donde se celebraba la boda. El lugar era un bosque precioso, lleno de plantas hermosas, en el fondo, se encontraba un arco lleno de rosas sangre de toro, unas de un color burdeos con pétalos aterciopelados.
Antes de comenzar la boda, escondí la caja sorpresa en el maletero del coche que nos llevaría al hotel. Regrese rápido a la zona donde vamos a celebrar la boda.
Al llegar a la puerta, respire hondo y comenzó a sonar la marcha nupcial, caminaron por el pasillo, entre los bancos decorados con lazos blancos y pequeños ramos de mis flores favoritas, mis damas de honor.
Luego me tocaba a mi. Mi padre me ofreció su brazo izquierdo para caminar hasta donde se encontraba Castiel. Me agarre con el brazo derecho y avanzamos hacia él.
- Estoy muy nerviosa, siento que me voy a caer.- le susurre a mi padre.
- Tranquila, no te voy a dejar caer- me contesto mi padre.
Mire al frente y me encontré con la mirada de Castiel, observándome desde su posición frente al arco nupcial.
Iba hermoso, muy elegante, con un traje de vestir negro con una camisa granate y acompañado de unos zapatos también negros. Y él, llevaba su cabello rojo fuego , recogido en una coleta baja.
Castiel me miraba con los ojos brillantes, llenos de emoción y, con una gran sonrisa en la cara.
Nos fuimos acercando hasta el arco donde se encontraba el encargado de oficiar la boda, Castiel, y junto a él, se encontraba su madre, a su lado derecho, mientras mi hermana me sujetaba el velo, hasta llegar al arco de rosas. Castiel estiro la mano izquierda para darme la mano y mi padre se la cedió.
- Te entrego uno de mis mayores tesoros, cuídamela. - le dijo mi padre.
- La protegeré con mi vida, sí es necesario - le contesto mi prometido.
Y mi padre se retiro a su asiento, a mi izquierda , para dar comienzo a la boda.
Mientras transcurría el tiempo, estuve sujeta a Castiel de la mano.
Y llego la hora de intercambiar los votos, comenzando por mis votos.
- Bueno ... No se me da bien hablar en publico, como bien sabéis.... Voy a intentar hacerlo bien, lo prometo- comenté antes de nada -
Nuestra historia juntos empezó de manera imprevista, con una caída muy penosa y un batido .- dije, logrando hacer reír a los presentes que nos encontrábamos en ese preciso momento. - desde ahí, fue todo una montaña rusa, con altibajos y subidas, más subidas que otra cosa.- le sonreí - y míranos ahora, crecimos, llegamos a la universidad y tenemos nuestra propia discográfica - y todos lo celebraron con gritos - Te prometo estar junto a ti en todo lo que venga. Te prometo que viviremos muchas más aventuras . Y no se que más decir. Nada más que te amo con mi vida, por y para siempre- y finalice los votos con una caricia en la mano que todavía sujetaba la mía.
No me había soltado la mano durante todo el discurso, y, cuando terminé, Castiel me abrazo y me dio un beso muy tierno, lo que hizo que todos los invitados dijeron los típicos aww.
La persona que oficiaba la boda le cedió la palabra a Castiel.
- Vale ... Me toca ... Nos conocimos de la forma más ridícula y graciosa que he visto en mi vida, y tras de esto, nuestra vida ha sido una montaña rusa, tienes razón - me sonrío - tanto para bien como para mal. Eres la mujer más maravillosa del mundo: inteligente, con un corazón enorme, ardiente, amorosa, etc. Y estoy muy feliz de pasar mi vida contigo y estoy preparado para aprender a vivir contigo ahora y siempre - al acabar, el público dijo el típico aww, otra vez.
El oficial del ayuntamiento comenzó a hablar antes de intercambiar las alianzas.
- ¿Castiel Black, aceptas a Lu como tu esposa para amarla, respetarla y acompañarla en lo bueno y en lo malo, hasta que la muerte os separe? - le preguntó mirándole fijamente.
- Acepto, aunque ni la muerte me la va a quitar - y todos nos reímos . Ya sabemos como es Castiel. Y me puso el anillo en el dedo anular de la mano izquierda.
- Vale ... ¿Lu gh, aceptas a Castiel como tu esposo para amarlo, respetarlo y acompañarlo, en lo bueno y en lo malo, hasta que la muerte os separe?- me miro fijamente mientras me lo preguntaba.
-Acepto, por y para siempre- le conteste y le puse la alianza en el dedo anular de la mano derecha a Castiel.
Tras esto, el oficial del ayuntamiento, pregunto a los asistentes si alguien se oponía al enlace y, como nadie comento nada, le dijo a Castiel que podía besar a la novia, y esto hizo que tirara de mi, me aplasto contra su cuerpo y me beso de forma apasionada, logrando que todos los asistentes se volvieran locos de euforia.
Después de hacernos las fotos con nuestras familias y amigos, nos tiraron el típico arroz mientras que nosotros nos dirigimos al vehículo que nos iba a llevar al restaurante donde se celebraba la fiesta y el banquete de la boda, donde le daría la sorpresa a mi ahora marido.
Entramos al restaurante tiempo después y comimos y bebimos hasta llenarnos y luego lo quemamos bailando.
A eso de las 23h, quise darle la sorpresa a Castiel.
- Antes de cortar la tarta, me gustaría darle un regalo a mi, ya marido- comenté, mi madre, me acercó la caja que yo había guardado con antelación en el maletero del coche, que nos había llevado hasta el restaurante a Castiel y a mi. Cogí la caja y se la acerqué a mi amado.
Cuando lo abrió, se sorprendió mucho, tanto, que creí que se le desencajaría la mandíbula y se le saldrían los ojos de las cuencas.
-¿ Qué te parece el regalo? - le pregunte
- ¿ Es enserio?- me preguntó con una sonrisa.
- Sí - dije riéndome junto a él. Todos nos miraban un tanto extrañados.
- ¡¡ VOY A SER PADRE!! - grito Castiel, revolucionando a todos los asistentes.
Se levantó y me levantó un poco por encima del suelo para después besarme.
Nos pasamos el resto de la boda bailando y a las 2:00 am nos despedimos de nuestras familias y amigos y nos fuimos al hotel. Un hotel de 5 estrellas, donde, al llegar, nos dieron la suite presidencial.
Al llegar a la habitación, alucine. Nada más abrir la puerta te encontrabas un recibidor con paredes de color crema con un estampado victoriano de color beige, con 2 grandes sofás de un color similar con partes de madera oscura, enfrente de estos, una mesita de café del mismo color madera y, delante de esta, un mueble de televisión, del mismo color madera, con una televisión de 50 ' '. En la mesa de café, tenia una bandeja de frutas y una fuente de chocolate derretido.
Fuimos a dejar las maletas en la habitación y al entrar nos encontramos c0n una habitación con las paredes del mismo color que el recibidor. En la pared de la izquierda había un armario grande de madera oscura y en la pared de la derecha, había una enorme cristalera con una puerta de cristal con marcos blancos, que llevaban a un enorme balcón con una barandilla de mármol blanco, con unas espectaculares vistas a un bosque muy frondoso y verde.
En el centro de la habitación, una cama King Size con sábanas claras y un edredón con estampado victoriano de color beige claro, con la parte de abajo de madera oscura y, sobre esta, un conjunto de cojines de colores marrones.
La habitación contenía 2 puertas: un baño en suite y la otra, un armario para las maletas.
La cama estaba rodeada de velas blancas y pétalos de rosas rojas, por todas partes.
Pasamos la noche disfrutando hasta horas después del amanecer . Dormimos hasta las 10:00 am, que nos preparamos para bajar a desayunar un desayuno inglés con zumo de naranja y un café para Castiel y lo mismo, pero con un zumo de manzana y un Cola-Cao para mi.
Tras acabar, nos fuimos a preparar para dar un paseo por el bosque a las 12:00 am, ya que a las 20:00 teníamos un viaje programado para la Luna de Miel, donde iríamos a Noruega, a un pueblito vikingo.
Después del paseo, comimos en el bufet del hotel y descansamos para ir al aeropuerto a las 16:00.
Allí, tuvimos que esperar para pesar las maletas y fracturar otra para los regalos y esas cosas. Pasamos la seguridad y fuimos a la sala de espera, donde fui a refrescarme al baño. Un baño súper moderno a dos colores: negro y gris.
A las 20:00 cogimos el avión, el vuelo duro 3h 35min y luego nos llevaron al pueblito en coche.
Pasamos unos 15 días maravillosos, aprendimos mucho y vivimos muchas experiencias nuevas: recorrimos los fiordos que hay en la zona, visitamos museos y distintas ciudades.
Luego, nos fuimos 2 meses de viaje a la casa del norte, una propiedad con una casa de madera y piedra, con tejado a 2 aguas de pizarra, en medio de la naturaleza, rodeada de bosques verdes.
Y en septiembre, regresamos a casa.